jueves, 25 de agosto de 2016

MI drama en pocos pasos: Cap. 6; Autora Marambra

Mi drama en pocos pasos

Æææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææ
Los derechos de autor de este texto pertenecen única y exclusivamente a su autor. No pudiendo ser publicada en otra página sin el permiso expreso del mismo.
Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 25 de agosto del 2016.
Æææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææææ
Capítulo seis
Señales
Autora: Marambra


¿Alguna vez han sentido que el mundo entero confabula en contra suya?, pues… que le digo, solía oír a mi padre decir: “Maldita mala suerte la mía, los planetas se han alineado para desgraciarme el día”, pues yo estaba en la mira de aquellos “Planetas” sin saber que diablos eran esos que planeaban fastidiarme el día, solo que no sabía cuan pronto y lo peor, que no iba a estar con mamá para consolar mi desazón porque la mamá no iba a venir a casa por un tiempo… esa fue la guinda del pastel de un día lleno de cosas malas que me han ido sucediendo a los largo de las horas, tanto así que bien podría calificar aquel día como el día mas peludo de mi vida, apenas superado por el día en que mamá se enfado tanto conmigo que hizo lo impensable… me dio una paliza.

Pero eso no voy a contarles ahora, sino lo que paso ese día, como le dije todo me fue mal desde un inicio, creo que definitivamente no es que me levantara con el pie izquierdo, ME ACOSTÉ con el pie izquierdo, porque la primer cosa mala que me paso, sucedió a las 5 de la mañana cuando Grigore se dio cuenta que acababa de orinarme en su cama, mojándole no solo las sábanas sino todo su pijama, me imagino que no debe ser agradable despertarte orinado por otra persona pero yo de verdad que no me doy cuenta cuando eso sucede, yo solo sueño que estoy orinando en el baño o que me estoy bañando en la ducha o estoy en la playa haciendo buceo… particularmente ese es el mejor de mis sueños y si pudiera lo repetiría una y otra vez solo que obviando el pequeño detalle de mojar la cama; es que lo malo de ese sueño es que solo sucede cuando me orino mientras estoy soñando, pero ojo, no es que yo sea un meón consumado, esto es un accidente hi dro ló gi co… si eso mismo un accidente hidrológico como me decía papá porque esto me ocurrió alguna vez ya en el pasado… no tengo idea de lo que es hidrológico, se lo he preguntado pero no entendí in cacahuate, así que le hice caso cuando papá miro mi desconcierto…

  • Bugy – Bugy… mira, no importa es difícil de entender  incluso para mí – me confesó papá con una sonrisa, eso me gustaba de él, que nunca decía que lo sabía todo, el decía que si alguien decía eso estaba mintiendo, pero les contaba, el me dijo eso y algo más – lo que tiene que importarte, es que se refiere a las aguas – bueno yo no sabía cuántos tipos de agua habían en el mundo, pero supuse que en esa gran masa líquida entraba el pis por alguna parte

Pero ahora era este asunto no era fácil de llevar, porque era un accidente inoportuno, no me lo esperaba y me tomo por sorpresa y me enfade por primera vez conmigo mismo porque acababa de sucederme paso en una casa ajena lejos de papá y mamá y realmente me sentí muy mal, porque Flash se levanto de un salto cayendo al suelo sobre su ya magullado trasero… lo que creo le enojo peor porque seguro dolió más y por eso no dudo en ser duro conmigo.

  • ¡OOOOHHHH! ¿PERO QUE HICISTE?... DUNCAN ¡COCHINO! – me grito sacudiéndome de los pies, acababa de llevarse consigo las sábanas y el edredón suavecito haciendo que yo tenga frio, tanto así que me acurruque a su lado sequito y volví a cerrar los ojos encogiéndome, yo tenía sueño y no entendía porque me dijo cochino – ¡¡MAMÁÁÁÁÁ!! – chillo pidiendo ayuda a su madre
  • ¿Qué ocurre?... ¡por Dios!,  ¿por qué gritas? – pregunto mi abuela Lenuta que entro como un rayo a donde estábamos, cogiendo a mi tío Flash de los hombros en busca de algo que le haya causado dolor imagino, mientras mi abuelo prendió la luz de toda la alcoba, hasta ese momento no me di cuenta que solo lámpara estaba encendida
  • ¡ME HA ORINADO! – se quejo Flash mostrando la enorme mancha de pis de su cama y su pijama empapado y yo me sentí un gusano y no pude evitar a mis ojos llevarse de lágrimas y mi boca formar un puchero, estaba a punto de llorar como un bebé… a veces me pasaba y papá solía abrazarme y sonreír en solidaridad a mi vergüenza, pero Flash estaba enojado, muy enojado… tan enojado que no dudo en darme un duro golpe sobre mi pierna quebrando la poca dignidad que me quedaba y no pude más, me puse a llorar, es que nunca creí que me golpearía y pero con la fuerza que lo hizo, se parecía a uno de los manotazos que me dio el abuelo en el trasero esa misma tarde, así que mis lágrimas le ganaron a mis ojos y a mi esfuerzo… estaban tan avergonzado, orinándome ahí en una casa extraña lejos de mamá y sobre todo tan irremediablemente separado de mi padre
  • PLAAF – de pronto volví a oír de pronto, y creí que sentiría otro ardor sobre mi piel como el que me ocasiono el golpe de Flash, pero nunca ocurrió, en vez de eso me vi suspendido en el aire y envuelto en los brazos de mi abuelo, mi abuela Lenuta acababa de darle un manotazo a mi tío Flash, sinceramente creí que aquel manotazo me lo habían dado a mí por arruinar cama ajena
  • ¡Mala! – acuso mi tío dándose la vuelta para ver a su traicionare madre,  con un puchero en la boca que lo hacía ver muy infantil, de veras y seguro fue porque no se lo esperaba –  si fue él quien me ha orinaaado – dijo Flash apuntándome sin ningún reparo y yo no sabía dónde meterme de la pena que sentí y que no era ajena, era todita mía – deberías darle a él una paliza no a mi – aseguro y yo solo atine a ocultar mi cara en el cuello de mi abuelo Iliucha, en realidad su nombre es Pavel, pero mi abuela Lenuta le dice Iliucha… de cariño supongo, dicen que es por su barba, es que mi abuelito es barbudo y tiene la barba roja y el cabello blanco, pero no tengo idea
  • ¡OH! Grigore – dijo mi abuela con un dejo despreocupado en la voz – Como vas a decir eso y peor golpear así a Duncan – agrego mi abuela abrazando con amor a Flash y digo con amor porque le pellizco la nariz como mi papá sabia hacerlo conmigo
  • Es un niño chiquito, hijo – hablo mi abuelo mirando a mi abuela que no dejo ni un momento de abrazar y consolar a Flash, que desde lejos se notaba estaba idiota, bueno es que era media noche y él estaba con sueño, Flash se había acostado conmigo compartiendo su cama todo dolorido de la paliza que le dio mi abuela y yo acababa a de arruinar su descanso, que fiasco
  • Todos los niños pequeños alguna vez se orinan en la cama Royal o ¿no te acuerdas tu? – comento mi abuela sacando un pijama limpio para mi tío, mientras Flash se puso rojo, supongo que a su edad nadie quiere recordar que un día measte en tu cama – además, él es el hijito de tu hermano y no creo que Borja golpeara a su bebé por orinarse en la cama

Y yo no pude más aquello era demasiado, hablaban de mi papá como si lo conocieran de toda la vida… bueno, lo conocían de toda su vida, desde que nació hasta que se fue de casa imagino, pero eso solo hizo que me pusiera a llorar, cuando yo mojaba alguna vez la cama, mi papi me bañaba si había tiempo o solo quitaba las sabanas mojadas y me ponía un pijama sequito, me llevaba al baño donde terminaba de hacer pis y luego me metía en medio de su cama grande y dormía abrazado de mi mamá y de él, pero ahora no estaba mi papá ni mamá y esta no era mi casa… era una casa ajena y yo había mojado las sábanas de Flash, seguro que ya no querría volver a dormir conmigo nunca más… quizás digan que bueno eso no tenía mucho peso pero para mí sí, porque mi tío Flash pese a que estaba dolorido fue genial conmigo, dejo que usara su cama, que me duerma en su almohada con funda de superhéroes y me conto un cuento cuando se despertó y vio que yo no podía dormir, mi único consuelo era que ya cuando amanezca estaría de nuevo durmiendo en mi camita, en la casa que teníamos, mi papá mi mamá y yo, y ahora el nuevo bebé…

  • Papá me cambiaba mi pijama y me llevaba a su cama – confesé sin querer apretando el cuello de mi abuelo quien, sin importarle que yo este oliendo a pis y este húmedo acepto mi abrazo de koala, con brazos y piernas, mojando su ropa y empezó a arrullarme como papá lo hacía, sin dejar de frotar mi espalda y susurrar palabras bonitas a mi oído… las mismas palabras bonita que me decía papá, imagino que las aprendió de su propio padre, estaba empezando a darme cuenta de porque papá era como era
  • Shuuu shuuu no pasa nada iepuras – me dijo, mucho tiempo después me entere que eso significaba conejito en rumano

Después de eso todo fue como una nebulosa, mi abuelo me llevo a su cuarto con el pijama mojado pero antes cogió uno limpio de los cajones y me limpio el trasero y de adelante para vergüenza mía con unas toallitas de bebé que no sabía que mamá había dejado en el cajón por si acaso para mí y me acostó en su enorme cama, esa noche por primera vez en mi vida dormí con mis abuelos… fue raro, les tenía miedo pero ellos no hicieron otra cosa que acariciarme y mirarme bonito, hasta me contaron un cuento gitano para que me duerma y mi abuelo como mi padre me abrazo de mi cintura metiendo su mano debajo de mi casaca de dormir acariciando mi barriga suavemente como si me doliera mientras mi abuela no dejaba de besar mis manos.

Y me quede dormido arrullado y cobijado en el amor de los padres de mi papá, lo malo es que me dormí demasiado y desperté como un rayo apurado, tenía poco tiempo para acomodar mis cosas, mamá seguro llegaba en un auto y solo pararía para dar las gracias y me apuraría en subir para volver a casa, como solía hacerlo cuando alguna vez me quedaba con la señora Flora la vecina cuando ella iba de compras y papá aun no regresaba de su empleo; pero nada de eso sucedió, mis abuelos habían salido muy temprano aquella mañana, y fue el silencio que me despertó, jajaj suena raro decir eso pero imagino que dormí lo suficiente para que mi cerebro despierte como se debe y tome consciencia de que estaba solo en casa, bueno con Flash quien seguía enojado porque le moje la ropa, pero aun de mal humor me sirvió el desayuno y luego desapareció, se fue con sus amigos al sótano, no se para que ni me interesaba… además mejor para mí, porque así no se interpondría entre mis planes y yo y lo primero era lo primero hacer mi tarjeta, hacer mi maleta y esperar a mamá sentado en la vereda.

Y eso hice… busque en mi mochila y me lleve la segunda decepción del día, no había mi cartulina, alguien había sacado mis colores y mis cosas y me sentí enfermo porque no podría hacerle a mami mi tarjeta de bienvenida, me quede pensando en qué hacer cuando de pronto vi la mochila de Flash abierta y fue ahí que tanto él como yo nos metimos en un lio de pelotas.

  • Royal – yo lo fui a buscar, él no puede decir que no, porque su amigo estaba ahí con él – Royal – lo volví a llamar tocando la puerta del sótano desde donde se oía música, risas y el choque de objetos que luego me entere era un billar que era de mi abuelo, pero Royal no quería abrirme la puerta – ROOOOYAAAAL TE ESTO HABLAAAANNNDO – chille con todo el volumen de mis dos pulmones golpeando la puerta con mis puños, yo no iba a permitir que me saboteen el día y bueno, se dio por enterado por fin
  • QUE QUIERES – contesto del otro lado, pero sin nada de amabilidad
  • ¿PUEDES PRESTARME UNA CARTULINA Y COLORES? – le pregunte
  • PARA QUE MIERDA QUIERES ERES ESO MOCOSO MEÓN – me dijo hecho el machito, supongo que el estar con sus amigos era parte de aquello y juro que eso me lleno de indignación, pero no tenía tiempo para romperle los dientes y hacer que se trague sus palabras, yo tenía que hacer muchas cosas ese día
  • QUIERO DIBUJAR UNA TARJETA PARA MI MAMÁ – conteste con el mismo tono… y se abrió la puerta, supongo que eso ablando su corazón o vio lo oportuno de aquello, como sea asomo su cabeza por el umbral, el muy carajo estaba fumando porque apenas salió no salió solo su cabeza sino una nube de humo mal oliente, él muy tonto no experimentaba, estaba fumando de nuevo
  • Pues busca en mis cosas, en el estudio – me dijo y recordé aquella habitación antigua que olía a biblioteca, supongo que era por la cantidad de libros que habían en los estantes y las mesas llenas de fotos de mis abuelos y sus hijos, incluido mi papá en diferentes etapas de su vida – ahí pillaras todo y luego no me molestes, estamos muy ocupados, ¿entiendes? – me dijo y el muy canijo no dudo en dar una calada al cigarrillo, por lo visto no tenía miedo a que regresaran sus padres o ya sabía que no volverían hasta mucho mas tarde
  • ¿En tus cosas?, ¿cuales cosas? – pregunte, una de las cosas que aprendí con los años es que hay que saber qué cosas ajenas puedes usar para no meterte en líos
  • ¿Estás buscando cartulina y colores no? – repito de mal humor
  • Si – le conteste simple y llanamente, el muy idiota estaba tratándome como la suela de su zapato, pues mal por él porque a mí me valía un nabo, por tanto no merecía que le repita lo que quería
  • Pues eso – dijo todo confiado, hecho el interesante el muy fanfarron si encuentras una cartulina tú la usas, si ves colores los usas, yo no me voy a enojar enano – dije aplastando la colilla de cigarro en el piso –  es más te voy a facilitar la tarea – me dijo el muy pendejito – en mi mochilla tengo un sobre con cartulinas que uso para hacer trabajos, puedes usar esas, hay algunas cartulinas que incluso ya tienen letras y dibujos hechos, usa las que quieras – me dijo y me cerró la puerta en la cara

Y eso hice… yo use lo que había en el sobre… en su mochila había un sobre de papel madera grande con muchas hojas de colores dentro, pero solo había una cartulina roja con letras y numeritos que me gustaron y un sobre rojo también… y pues los use, hice una hermosa tarjeta cortando un corazón y picando el resto como pequeñas flores, tal y como me enseño mi papá algunos meses atrás, claro que no me salió tan linda  como cuando él me ayudo a cortar mi tarjetita pero era mi esfuerzo, lo hice yo solito sin ayuda de nadie; para eso ya había pasado como media mañana, es que tan distraído estaba que perdí la noción del tiempo y hubiese seguido así hasta que Daniel vino a buscarme.

  • Aquí estas – me dijo con cara de enojo, supongo que fue porque tuvo que ir al cole en sábado por un lio que tenía en su curso que no me entere – vamos sal de una vez – me gruño la orden el mandón con cara de perro rabioso, estaba enojado conmigo sin razón alguna
  • No, estoy ocupado – le respondí le di la espalda y a él no le quedo otra que darse media vuelta y marchoarse, mejor para mi, alas y buen viento repetí en mi cabeza como decía mi padre cuando alguien venia a molestar y se marchaba, creí que ahí acabaría todo, pero al rato vino tío Petre
  • Hola amiguito – me dijo a manera de saludo haciendo que haga caer toda la cola sobre la mesa, menos mal en un platillo –  así que estas “ocupado” – me comento mirando lo que hacía, el muy chismoso de Daniel se fue con el cuento – ¿qué estás haciendo? – quiso saber dando un vistazo a las cartulinas
  • Una tarjeta para mi mamá – le respondí, ya había pegado las flores de colores amarillas
  • Muy bien, ¿y ya terminaste? – me pregunto
  • Aja – respondí guardando el pegamento, orgulloso de no haber causado un desastre en la mesa de Royal, sin saber que el desastre yacía en mi mochila cuando guarde mi tarjeta
  • Bien entonces, vamos a comer es tarde ya – me dijo revolviendo mi pelo con cariño – ¿sabes? Te pareces mucho a tu padre, Borja y yo fuimos muy amigos en el cole – me comento despertando mi curiosidad – si quieres a la noche veremos unas fotos de tu padre en el colegio – agrego
  • A la noche no estaré aquí – respondí – me iré con mamá a casa, pero gracias – agregué y corrí al comedor, no sé porque, quizás mi corazón adivinaba lo que iba a pasar

Ya me había sentado en la mesa para cuando tío Petre entro al comedor, y sin decir nada me jalo suavemente de la silla y llevo al baño e hizo algo que nadie había hecho hasta ahora, me hizo sentar en el mármol del mesón y fue él quien me lavo las manos tres veces hasta que el agua quedo limpia y nos fuimos a almorzar y todo sin decirme nada, nada sobre las fotos, nada sobre mi padre y mucho menos sobre la noticia de mamá quizás vio conveniente mantenerse al margen de todo y se limito a sonreírme y darme un abrazo cariñoso como el abrazo que le daba a Daniel, debí sospechar, cuando los adultos son demasiado aduladores sin ser tus padres, es porque son portadores de malas noticias, obviamente aquel entonces yo no lo sabía…



No hay comentarios:

Publicar un comentario