viernes, 14 de julio de 2017

Hermanastros: Cap. 11; Autor Pablo

Hermanastros
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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 14 de Julio del 2017.
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 Capitulo 11
Un susto de muerte

Autor: Pablo


Marco:

La semana se volvió más llevadera cuando mi tía regresó de la casa de su suegra y yo no tuve que seguir aguantando a nadie, intente arreglar las cosas pero los mellizos son unos idiotas. Después de la paliza del abuelo no dejaban a Isaac ni un momento creo que buscando que yo quede solo y parezca que estaba peleando, un boludez digna de ellos a la que mi hermano ayudó pegándose como lapa a esos dos sólo para quedar bien con los abuelos así que aproveche la vuelta de mis tíos y me fui con ellos los cuatro días que restaban antes de que acabe la luna de miel y la pase muy bien a pesar de que Tweety se quedo.

Por fin había llegado el día que todo volvía a la normalidad, solo faltaban dos semanas para el inicio de clases así que podía disfrutar el resto de mis vacaciones sin estar encerrado. Es que eso de estar en casa ajena era un tanto incomodo, mis tíos son muy buenos pero no era lo mismo que estar con mi papá y Amalia. No me sentía cómodo pidiendo permiso para salir y si me decían que no, no podía dar guerra sino que me tenía que aguantar y ya, eso llega a ser molesto. Creo que fue eso lo que más me alegro a la hora de ir al aeropuerto, al fin en casa y no es que sea antisocial como me dijo mi hermano sino que uno necesita privacidad.

  • Bienvenidos! – era una exageración porque solo se habían ido una semana pero fue idea de Isaac y no me pareció tan malo pegar ese cartel en la sala y gritar cuando entramos a casa.
  • Hooo ¡¡qué lindo!! – Amalia estaba algo sensible, ella siempre era sensible con esas cosas y creo que el hecho de que mi papá se haga el romántico y la levante para cruzar la puerta como en las películas ayudo más a su emoción.

No sé muy bien qué significa eso o porque se lo hace pero mi papá era de hacer esas cosas como regalar flores y yo había aprendido aquello como algo natural y la verdad hacía poco tiempo me había dado cuenta de esos detalles.

De repente empecé a pensar en mi novia, en mi ex novia, le había mandado unos mensajes estos días y la había llamado pero nunca respondió. Sé que se supone que estuve bien en apoyar a mi hermano y no a ella cuando fue el lío en la boda y sé que mintió con eso de que Tweety la acosaba pero la verdad la extrañaba y en algún momento empecé a pensar que no era tan grave lo que había hecho, o sea, no es que me haya sido infiel ni nada y además Isaac había empezado la guerra y se había pasado cuando ella no le hizo nada.

  • Marco! – me gritó mi hermano pegándome con uno de los almohadones del sofá – te estoy hablandoo – se quejó sacándome de mis pensamientos.
  • Heu que es eso de tirar así las cosas – lo retó mi papá con cara de pocos amigos.
  • PERO LO ESTOY HABLANDO Y NO DA BOLA!! –  gritó sacado y la verdad no entendía porque era su enojo, no lo había escuchado pero no era para tanto y que me tire con un almohadón tampoco era tan malo como para que papá lo zamarronee como lo había hecho.
  • ¡Basta Isaac! más vale que cortes el escándalo porque si no te lo corto yo – yo levanté las cejas porque me parecía que los dos estaban sacando las cosas de quicio o es que yo me había perdido algo, pero acabábamos de llegar hace veinte minutos apenas si habíamos tenido tiempo de vestirnos más cómodos.
  • Papá no fue para tanto – le dije arriesgándome a que se la agarre conmigo porque mi papá era “especialito” cuando estaba de mal humor y no era bueno meterse en su camino y por su cara no estaba enojado por el almohadón volador nada más.
  • No estoy hablando contigo – me respondió mordiendo las palabras y para mí fue suficiente, lo lamentaba por mi hermano pero no estaba con ganas de hacer de mártir.
  • Perdón – le dije fingiendo que estaba arrepentido y cuando me dio la espalda le hice señas a Isaac de que la baje con el lio así no terminaba mal y me fui a mi cuarto.
  • Conmigo tampoco es! – reclamó Isaac – ahora no hice nada y te la estas agarrando conmigo – no gritó exactamente pero si hablo de muy mala manera soltándose de papá con un movimiento brusco y sacudiendo las manos al hablar – ya me arruinarte el día, ahora por lo menos no me joda más – término y yo abrí los ojos de la impresión, se la había ganado.
  • A MI NO ME VAS A HABLAR ASÍ – rugió papá mientras levantaba a Tweety del sofá – PLAF PLAFF PLAF PLAF MOCOSO MAL EDUCADO PLAF PLAF.
  • NOOO AUUU NOOOO PAPÁ PERDÓN! – gritó mi hermano tratando de taparse con la mano que tenía libre.

Entonces me fui a mi cuarto, no quería ver más,  me daba pena mi hermano pero no era mi lío y no quería cobrar de arriba. Al rato llegó Tweety enojado y se tiró en la cama, no había escuchado “ruidos raros” ni llanto así que al menos no había pasado de unos azotes con la mano. Isaac estaba gruñendo mientras apretaba la cara en la almohada así que supuse que había un lío detrás de la brinca por el almohadazo.

  • ¿Y? – le dije porque se estaba montando el show para que le pregunte seguramente.
  • Los papás son unos idiotas! – dijo y le pegó a su cama con el puño, me dieron ganas de reírme pero no quería terminar peleando así que me aguanté.
  • Y eso porqué? – pregunté, evidentemente algo me había perdido y para él era algo importante.
  • ¡Me porte bien toda la semana mientras estaban de vacaciones! – reclamó y se dio vuelta a mirarme empezando a lloriquear – lo único que les pido es ir a ver la competencia y no me dejan – y esa era la razón del enojo de mi papá, seguro este tonto no los había dejado ni cambiarse en paz y empezó con eso sabiendo que no lo iban a dejar.

Era más que obvio que no le iban a dar permiso para ir cuando fue esa la razón por la cual se quebró la pierna el año pasado, creí que ya se había olvidado de esas competencias. El triar* era entretenido y ese era el deporte favorito de Tweety, dudaba que solo quiera ir a ver, de todas formas ese evento era el fin de así que si jugaba bien sus cartas podía conseguir permiso aunque me terminen mandando a mí de niñero. 

  • Mejor es esperar a que se les pase el enojo – le recomendé y me gane una mirada de fastidio que me molestó porque yo solo trataba de animarlo – Seguro fuiste a exigir y por eso se enojaron, te pasa por tonto – le dije molesto porque me mire así, de todas maneras dije la verdad.
  • Estúpido – me contestó y se dio vuelta a seguir con su drama.
  • Ya deja el teatro – aproveché que estaba acurrucado un el rincón del cochón y me tire usando el resto de su cama – dame unos días que “papito” – dije golpeando me el pecho – te consigue permiso – ya había  pensado todo, seguro si lo llevaba conmigo lo dejaban ir y si no siempre está el plan B.

Con eso la telenovela de llantos de Tweety se calmó y nos pusimos a jugar videos mientras nuestros papás se iban a comprar porque la heladera estaba vacía y a buscar las cosas que dejamos en casa de los abuelos, seguro mi papá volvía más tranquilo; igual habría que esperar hasta mañana para mencionar la competencia y seguro era mejor hablar con Amalia primero porque era más fácil de convencer.

Sergio:

Habíamos evitado comprar víveres antes del viaje para que no se hecho todo a perder mientras no estábamos y ahora no había nada para cocinar así que salimos a comprar y a buscar la ropa y otras cosas que habían dejado los chicos en casa de mis padres. De paso así nos calmábamos un poco, yo estaba de pocas pulgas y no quería volver a meter la pata Cómo había hecho hace unos momentos en el living. Al volver tendría que hablar con Isaac y disculparme por mi reacción y volver a explicarle porque no lo dejaba ir, pero es que se había puesto muy denso con la competencia esa y yo lo prefería de mal humor unos días y no con otro hueso quebrado. Ya llevaba tres dedos, el tobillo y el brazo lastimados a causa de ese deporte de locos y aunque dijera que solo iba a ver yo sabía que la tentación era grande y el sábado yo volvía al trabajo y Amalia tenía una reunión así que ninguno podía acompañarlo para asegurarse que solo iba a ver.

Cuando llegamos a mi hogar de la infancia nos encontramos con una amiga del bachillerato de Amalia que por esas casualidades de la vida se había casado con un vecino de mis padres y cuando vi que la charla se extendía me disculpe para ir a buscar las maletas o comeríamos a las tres de la tarde.

Apenas llegue a la puerta me di cuenta de que estaba abierta, me reí por dentro al recordar las “peleas” de mis padres porque a mamá le gustaba tener la puerta abierta de par en par y mi papá renegaba de que aquello atentaba contra su intimidad ya que cada vecina chismosa de esas que eran amigas de mamá pasaban saludando y mirando para adentro. Así que después de años el acuerdo era tener la puerta semi abierta justo como estaba ahora.

Empuje para entrar y me di cuenta que esta vez la puerta había quedado accidentalmente abierta ya que  en momentos como ese si hacía falta intimidad y era regla cerrar la puerta. El panorama en la cocina lo decía todo. Renzo estaba llorando abrazado a mamá y Gian escapando de papá que tenía el cinto en la mano. Claro que cuando yo entre todos se quedaron quietos.

  • Gian no te voy a perseguir – había advertido mi padre y fue lo primero que escuche cuando entre a la sala. Las voces venían nítidas desde la cocina – cuento hasta tres y por tu bien espero que estés aquí – dijo y cuando entré a la cocina lo vi señalando el suelo al lado suyo con un gesto conocido por mi – hola hijo – me saludo después de unos segundos de silencio.
  • Buen día papá – le respondí y me acerqué a darle un beso como siempre e hice lo mismo con mi madre – ¿renegando? – dije nada más para cortar el mal ambiente y que papá se calmara porque se notaba a leguas que estaba al borde de un subidón de presión.
  • Se portaron mal y ahora no quieren aceptar las consecuencias – resumió papá y Gian aprovechó para ponerse detrás de mí.
  • No es así – le cuestionó mi madre tapando los sollozos de Renzo
  • lo que pasa es que tu papá los quiere cascar con el cinto y no fue para tanto – fue chocante para mi ver aquello. No recordaba haber visto pelear a mis padres jamás, no de verdad al menos y sobre todo nunca discutían por como castigarnos a mi hermana, menos delante nuestro
  • ¿Cómo que no fue para tanto Quela? – mi padre levantó la voz y dio un manotazo en la mesa mostrando lo enojado que estaba haciendo saltar a los chicos en el lugar
  • Chicos ¿por qué no van al cuarto? – intervine, no quería desautorizarlos pero los chicos no tenían que estar presenciando eso y mis padres estaban tan enojados que parecía que no reparaban en su presencia – necesito hablar con los papás – les dije y no esperaron más invitación porque lo que más querían era desaparecer de ahí.
  • Okay – me respondió Gian y arrastró a Renzo hacia su cuarto –  vamos – le susurró

Mis padres se veían como si pensaran saltarse a la yugular en cualquier momento y yo pensé en irme con los mellizos también y evitar el problema, pero era adulto y no podía simplemente borrarme del mapa.

  • ¿Por qué están discutiendo? –  les pregunté. Yo no soy consejero matrimonial pero los conozco y algo grave tenía que haber detrás del desacuerdo por el castigo de los chicos
  • Es tu mamá que les apaña todo – me respondió papá sentándose en una silla. Se veía cansado, eso de que mamá los apaña es algo que había escuchado decir a mis hijos y pensé que eran celos pero tendría que haber prestado más atención
  • Él no tiene paciencia – rebatió ofuscada mi madre – son chicos –  los justificó mirándome y vi de reojo a mi padre menear la cabeza
  • Y porque son chicos no puedo permitir que porten así – agradecí que haya bajado la voz aunque su tono no era calmado – si ahora los dejo hacer eso, el día de mañana los vas tener que ir a visitar a una prisión por sus gracias
  • ¡Estas exagerando! – ella no había bajado la voz y el hecho de que no se sentara me hizo suponer que no estaba dispuesta al diálogo.
  • No lo puedo creer…  – mi padre se levantó. No se si pretendía salir o solo caminar en el lugar pero yo interrumpí sus acciones con una pregunta
  • ¿Qué fue lo que pasó? – entonces se frenó para hablar
  • Salieron esta mañana – dijo y supe que no era moco de pavo porque papá se sentó pesadamente – supuestamente a jugar a la pelota al parque con unos amigos y me los acaba de traer el guardia del club – el club estaba cerrado los domingos así que eso era extraño – estaban con la pandilla de mocosos camorreros con los que se juntan ahora y rompieron un alambrado para entrar a las canchas del club sin permiso. Les prohibí juntarse con esos malandras! Tienen amigos de su edad pero se van a juntar con esos vagos buenos para nada – no sabía quiénes eran esos amigos nuevos pero tampoco me gustaba la idea de que sean mayores, iba a preguntar quienes era npero apenas abrí la boca me interrumpió – Te advierto que No necesitan otro abogado defensor
  • No. Ya me di cuenta que no – dije mirando de reojo a mi madre. Lo que habían hecho si era grave, pudieron tener problemas legales así que pensé en que decirles para calmar las aguas – yo no tengo altura para darles consejos de paternidad a ustedes pero si les digo que sigan los consejos que me dieron a mi – abrace a mamá porque era más mas nerviosa – jamás los vi pelear delante de mí o de mi hermana, eso no les hace bien a ellos ni a usted.
  • Hay que hablar con ellos yo tampoco quiero que se junten con esos muchachos   son más grandes y andan en cosas feas – admitió al fin mi madre - pero si les explicamos van a entender.
  • No – cortó papá – ya les expliqué y les dije que si los veía con esos los iba a sonar y encima se mandan cagadas que tengo que pagar yo porque los “amigos” se borraron todos – entonces mamá se alteró de nuevo.
  • Si es por el dinero yo lo pago de
  • Sabes que no es por dinero. Los estas mal criando y te vas a arrepentir – volvió a reclamar y yo miré a la puerta de la habitación pensando en que seguro los chicos podían oír todo.
  • ¿Es una amenaza? – pregunto mamá ofendida y yo no lo podía creer.
  • No se puede hablar contigo – renegó mi viejo y pude ver lo exasperado que estaba – pero te digo algo – advirtió con ese tono de oráculo que usaba a veces – yo no los adopté para que terminen en malos pasos. Son mis hijos y yo los voy a enderezar te gustó o no te guste.
  • Con el que no se puede hablar es contigo – rebatió ella y hablo como si mi padre fuera un dictador y represor – te la pasas detrás de ellos pisando les los talones y sonándolos a la mínima, fue una travesura culpa de esos chicos con los que se juntaron pero los mellizos están arrepentidos – a esas alturas ya tenía mis propias conclusiones y no podía evitar estar del lado de mi padre, pensaba en mis hijos y en que haría yo es el lugar de mis padres o en que hubieran hecho conmigo si yo hacía lo mismo que mis hermanos y la respuesta era clara
  • ¡Claro! entonces ya está. Los señores están arrepentidos y salen campantes – papá sacudía las manos en el aire y yo podía entender su frustración – ¡sabes! ¿no me vas a dejar hacerme cargo de esto? – pregunto molesto –  ¡Perfecto! – se respondió sólo – pero no voy a pagar un centavo por ese alambrado, si no valgo como padre para educar tampoco para hacerme cargo de sus consecuencias. Voy a hablar con Cirino y que haga la denuncia correspondiente. Tus hijos verán cómo se las arreglan porque los que no tienen padres en la casa los encuentran en la calle – sentenció y salió hecho un bólido con dirección  a la calle
  • Pedro… Pedro... – gritó mamá entonces intervine
  • Deja mamá yo hablo con él aunque la verdad creo que tiene razón no pude evitar decir aquello antes de salir – lo que hicieron va más allá de una travesura

Cuando salí tras mi padre vi a Amalia que estaba en la sala esperándome. Me hizo un gesto compasivo y me dejó ir tras mi padre. Ella había escuchado lo suficiente para entender.

  • Papá… papá no estarás pensando en hacer lo que dijiste verdad – le dije cuando lo alcance en el jardín de casa.
  • No – me respondió apretando el portón de la entrada que apenas nos llegaba a la cintura. Era más una división que por seguridad. Era un barrio tranquilo donde todo el mundo se conocía – son mis hijos – dijo agotado – No podría, aunque se lo merecen para ver si así aprenden.

Me quede unos minutos en silencio, yo no podía decidir ni meterme demacrado así que preferí velar por su calma unos minutos apoyando mi mano en su hombro.

  • Pedro – dijo mamá en un susurro, no la había escuchado salir pero su actitud corporal de ese momento había mejorado mucho. Ya no parecía en pie de guerra – tienes razón – admitió – al menos esta vez ellos se pasaron de la raya y te voy a apoyar como decidas castigarlos. Solo no me pidas entrar esta vez

Entonces mi padre sólo asintió con la cabeza y entro en la casa sin mediar palabras. Mi madre me miró con dolor en los ojos, entendía que no le gustará aquello, a ningún padre le gusta, pero es lo que toca y a mí en particular se me hacía más duro escucharlos llorar cuando no los castigaba yo, porque la impotencia es peor que el enojo, aunque después era mejor ser el que consuela sin culpas que cargar con el remordimiento de ser el causante de las lagrimas. Supongo que por esa razón mi madre desapareció en dirección al patio trasero por el camino del costado de la casa, seguro entraría por la puerta de la cocina a la hora de consolar a los demonios.

  • ¿Qué le dijiste a tu suegra que cambió de opinión? – le pregunte a Amalia que había salido detrás de mí madre.
  • Le pregunte que hubiera hecho contigo si hacías lo mismo que los chicos cuando tenías su edad – me respondió y no pude evitar el rubor al imaginarme la respuesta franca y detallada de mi madre.





Trial: Hay dos tipos de competición, el trial bici y el bike trial, en las que se puede participar con bicicletas de ruedas de 20 o 26 pulgadas. Las dos no suelen llevar asiento, y en caso de que si se trata de un asiento muy pequeño. Se trata de intentar llegar sin velocidad y solamente con equilibrio desde el suelo a la cima de un obstáculo como un vehículo, un barril, un pasamano, rocas, etc.


11 comentarios:

  1. Me ha encantado enormemente el capitulo, ha sido muy hermoso el retorno de lo hermanastros Chany, estoy contentisima.
    Estoy en proceso de reeditar el resto, si tengo tiempo estara listo para el lunes, es que no me gusta el lila que te puse en la otra historia, si este es un color muy chillon dimelo, es que otra cosa es viendolo en fondo negro y otra colocando en pagina blanca.
    MMMM ya me diras, mientras apurate con los otros capitulos, ajajajaj

    Marambra

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    1. El realidad odio el rosa heje es uno de los colores más feos que hay pero no te dije nada xq no me iba a poner exigente jaja. El naranja me gusta más.

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  2. El dato me a encantado no sabia que era... mmm realmente no entiendo mucy bien el juego o deporte y buscado una imagen y me parece una motocicleta. Pero se ve que es un deporte un tanto peligroso.

    Y ... y la historia me encanta ... también la de Nacho pero le perdi el hilo y no la e podido retomar :S algo se me paso que no entendí los últimos capítulos de la historia.

    Y esta historia me encanta me produce distintas emociones desde el coraje que mas abunda y no mal interpretes no es enojo o molestia por la historia son las emociones que me da.... signo de si una historia me gusta mucho o me atrapan sus personas, voy a alegar, a legar y a defender y pedir actualizaciones ;)

    La abuela creo que es el personaje que mas... me retuerce las emociones... me da mucho coraje aaaaaaaaaa.... porque la doña a castigado a los nietos por nada... bueno nada malo a mi parecer y a eso mocosos los premia y eso no me gusta :(
    Entiendo, tuvieron una vida difícil y todo eso pero que no se pace...

    Chany me encanta tu historia... :) y espero el capitulo que sigue...
    Cuidate mucho.
    Mary

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    1. Con lo del dato:se puede hacer triar en moto también y no es tan peligroso jeje mi amigo hacia ttiar y se rompió menos huesos que mi hermano en rugby. Yo hacia pero con bici prestada xq son carismas así que nunca competi y nunca me rompí nada aunque unos raspones me lleve. Lo que pasa es que Sergio es muy sobre protector jajaja.
      Con lo de Nacho te entiendo. Tuve un problema cuando mes cel unos capis y olvide de enviar uno importante y después no supe acomodarlo y no me frustre. Los últimos capis ya estaba enojada y quería terminar, estoy re editando todo y ordenado, quisiera republicar antes de la segunda temporada aunque no cambie nada si lo o de me de manera diferente así que es opcional leerlo o no pero creo que muchos perdieron el hilo después de la confusión.
      Y con respecto a lo otro, yo tampoco quiero a la abuela jajaja
      Gracias por comentar

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  3. No sé qué pasó con mi comentario que no se quedó grabado Espero que este si , bueno estoy de acuerdo con Mary lo de castigar a los nietos sin preguntar y creyendo solo a ellos y el abuelo fue justo y ahora creo que también ,y Marquitos me huele a que se va a meter en problemas por Isaac
    Un beso

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    1. Más fas para el abuelo jajaj y no le hagas mal de ojo a Marco jajaja

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  4. Bien por el abuelo que seguro les dejara bien claras las consecuencias de sus actos a sus diablillos y que rabia con la abuela grrrr que no dudo un segundo en castigar a sus nietos por tonterias y cuando sus hijos hacen destrozos los defiende.

    Erina

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  5. Cuánta dicotomía en el comportamiento de la abuela!!!!! Pero es así de fácil ver el mal en el ojo ajeno y las madres somos así. Con nuestros pichones todo se trata de travesuras, pero cuando de otros niños se trata, los tratamos de vándalos o malcriados o lo que sea. Pobre señora traten de entenderla, aunque yo le dé la razón a la objetividad del abuelo. En fin muy bueno el capi. Y yo sí seguí la historia de Nacho y creo haberla entendido bien, también entendí los problemas de la autora, suele ocurrir. Besos a todos
    Grace

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  6. Me quedé un poco preocupado por los mellizos, se ve que les espera un castigo fuerte. Por cierto, no sabía nada de ese deporte pero suena bastante peligroso.

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  7. La abuela me cae mal como a la mayoría jajajja ...
    Porque es injusta se supone que con los hijos se es más dura y con los nietos se les consiente y ella es al revés la mm la no lo voy a poner porque capaz que borran mi comentario jajajja
    Fue un buen capi y ya quiero ver como sigue!!
    Pero me falta leer el capítulo 11 o se equivoco Marambra en poner el titulo??

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  8. Joo que yo quiero seguir leendo, el tema esta buenisimo, y a veces es necesario ese mensaje diciendo de que harian con uno si fuese el otro, me gusto pensar esa frase un monton

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