La familia: Cap. 7; Autor Adán

La familia

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 7 de Mayo del 2019. 

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Capitulo 7

Autor: Adán

• Hermana – Aurelio movió la mano delante del rostro de Mónica haciéndola volver de sus pensamientos
• Ahh si – sonrió mirando a su hermano recuperando la postura – hermano… bueno… ¿y qué harás al final? – pregunta Mónica
• Pues no la dejare escapar esta vez… la reconquistare, ella siempre fue el amor de mi vida – respondió Aurelio muy seguro
• Pues no sé – respondió ella un poco reacia – será un difícil tarea, ella no busca un marido por ahora, no está en sus planes – le contó Mónica yendo por un paño para limpiar la pared que rayo Andrea
• Por eso mismo te digo que “la reconquistare” – volvió a repetir mordiendo una manzana – y eso tomara su tiempo lo sé, además no está en busca de marido porque no ha encontrado al indicado y el indicado soy yo – como siempre Aurelio hablo muy seguro de sí mismo
• Bueno pues, si lo pones en esa perspectiva seguro lo consigues – Mónica le dio un pequeño puñete en el brazo mostrándole su apoyo a su hermano

Y así entre una y otra cosa se quedaron hablando hasta después del almuerzo, Aurelio se quedó un poco más a jugar con sus sobrinos y luego se fue a alistar para su “cita” con Cat, aun tenía tiempo para recogerla; mientras tanto Cat aun se encontraba finalizando las clases de baile y ordenando todo, además acababa de hablar por teléfono con su madre para avisarle que no llegaría a cenar.

• Hasta mañana profesora Cat – se despidieron algunas alumnas sonriendo
• Hasta mañana chicas recuerden, mañana competimos con las bailarinas del otro instituto – Cat sonrió viendo la hora, al parecer Aurelio se había atrasado un poco pensó
• No la decepcionaremos se lo prometemos  

Y con eso las niñas se fueron a tiempo que entraba Aurelio con una gran sonrisa en los labios y un ramo de flores en la mano.

• Hola – saludó Aurelio con un beso en la mejilla
• Hola – devolvió el beso – al fin llegaste, por un momento pensé que tendría que volver temprano a casa para verle la cara a mi padre – le dijo Cat en tono un poco acusador pero sonriendo
• Jeje no tranquila – Aurelio le devolvió la sonrisa – ¿nos vamos? vi un restaurante muy bueno por aquí – agrego  doblando el brazo caballerosamente para que ella se sostenga mientras caminaban
• Genial – ella acepto el cortés gesto agregando – después podríamos ir a pasear por ahí – sugirió – y si llegamos a mi casa después de las 10 mucho mejor… Es que pelee con mi padre – le conto Cat con humor y guiñándole un ojo
• ¿Qué ha pasado?
• Te cuento en el camino… – respondió Cat empezando a contarle su dilema mientras caminan al restaurante, enterándose Aurelio sin querer del eterno tema de discusión entre Cat y su padre… su soltería

Mientras tanto Arturo y Pamela los padres de Cat, preparaban la cena en casa contándose su día.

• La niña llamo y dijo que no llegaría a cenar…ira con un amigo… – le informo Pamela sentándose tomando un vaso de agua, decidiendo tocar el tema que la estaba molestando – a propósito, hoy si te pasaste Arturo
• ¿Qué hice de malo? solo mencione a Dulce que también es mi hija – se defendió Arturo
• Si, hablando de su familia, de sus hijos comparándola con ella que ni al caso venia – le recordó –  ¿acaso ha llamado últimamente como para nombrarla?, hace tiempo que ni viene ni llama y con suerte sabe que seguimos vivos – dijo Pamela muy enojada
• Esto es tu culpa Pamela, si le hubieras inculcado la importancia de tener familia desde niña ella estaría casada y no estaríamos pasando por esto – se defendió Arturo machista como siempre, para él toda la culpa era de Pamela
• ¡Pues si no le da la gana de casarse y formar una familia es su decisión, ¡su vida no la tuya! – le recordó una vez más – ¡Y si vamos a hablar sobre en que nos equivocamos en educar a nuestros hijos! ¿¡porque no partimos por ti!? – lo cuestionó, hacia ya mucho tiempo que tenia eso atragantado – ¡Porque llevamos 35 años juntos de los cuales los primeros 10 años nada más eras un gruñón que castigabas a tus hijos por cosas mínimas y encima les diste un mal ejemplo como padre y esposo porque a mí también me tratabas mal… llegabas borracho y me faltabas el respeto!, ¿o no te acuerdas? – Pamela ventiló lo que había silenciado por 25 años y sabía Dios lo que había pasado para que Arturo prometa cambiar

Como sea Arturo se quedo sin palabras y Pamela no dijo nada más lo que acelero la cena en un incomodo silencio, mientras Aurelio y Cat disfrutaban de su cena hablando sobre su vida.

• Oye ¿Nunca pensaste en hacer una familia entonces? Mónica me conto que no estabas interesada en eso – preguntó Aurelio partiendo su carne
• Pues no me ha llamado la atención hasta ahora – le dijo mirándolo significativamente – después de que terminamos, nunca más tuve un novio y me centre en otras cosas, pero mi padre siempre me fastidia con que me case… de hecho hoy pelee con él por el mismo asunto
• Si me contaste – respondió Arturo – pero bueno se dice que los padres quieren lo mejor para sus hijos – agrego elevando los hombros
• No siempre es cierto… Mi padre solo quiere que todos sus hijos le den un nieto y ya – contesto tras analizar un poco las palabras de Arturo – mi hermano con 5 hijos y mi hermana con 2 hijos y sabes ¿qué? desde que mi hermana formo su familia no me cae bien, siempre me ha estado soltando indirectas hirientes igual que mi padre y eso me molesto mucho, pero hoy rebasó el vaso al comprarme con ella – sin querer volvió a enojarse – además el no fue un buen padre… Bueno yo no lo recuerdo directamente, pero mi hermano siempre dice que mi padre no era un buen padre y hacia sufrir mucho a mi mamá…
• Que mal…
• Bueno no sigamos hablando de eso – corto Cat hasta del tema – mejor cuéntame de ti, seguramente ya te has casado y estás cenando aquí con una novia de tu adolescencia – Cat sonríe en tono de broma
• Jeje… No estoy casado… Yo tampoco encontré a la persona perfecta – Aurelio sonrió sirviendo vino
• Oh vaya jeje…

Y continuaron hablando sobre sus vidas y sus planes a futuro, mientras eso ocurría ya eran las 8:30 de la noche y Adán seguía en la fábrica ordenando todo a punto de irse a casa hablando con Mónica por teléfono.

• Ya voy en camino amor ordeno algo y ya – murmuro mientras firmaba los últimos documentos de su mesa
• Bueno – contesto resignada mirando la hora – Oye deberías contratar más gente… pero gente joven con más ganas de trabajar, si trabajaran más rápido no tendrías que hacer horas extras y podrías venirte a la hora que corresponde – sugirió Mónica
• Justamente eso veo ahora, pero los trabajadores tienen familia – respondió Adán pensando que su mujer sugería despedir a sus trabajadores cosa que no era el plan de su esposa, ella sabía mujer bien que los trabajadores superaban los 40
• No me refiero a que despidas gente… si no que contrates más gente
• Si… Es solo que aquí hay algo que está mal organizado… Bueno hablamos en casa amor, te amo – respondió Adán cerrando la carpeta
• Yo también

Tras eso, Adán se dispuso a marcharse pensando que tenía que hablar urgentemente con su padre sobre los cambios inmediatos que necesitaba la empresa, pero sus pensamientos se vieron interrumpidos cuando una mujer se le acerca, era la misma mujer con la que se topaba desde hace algún tiempo.

• Señor… – interrumpió ella
• ¿Sí? – Adán se volteó a verla
• Disculpe la pregunta, pero… ¿usted es hijo de Arturo Osorio Espinoza?
• Si… Es mi padre, ¿por qué? – Adán frunció el ceño
• Antes de decirle debo mostrarle esto – respondió ella sacando una foto en la que estaba retratado su padre con otra mujer y una bebé en brazos, la foto era de aparentemente hace unos 30 años
• ¿Mi padre?... – Adán estaba realmente sorprendido, no pudiendo dejar de ver la foto
• Yo soy Maggie Osorio – se presento – hija de Arturo
• ¿Qué?...

Adán quedo impactado, nunca imagino esto de su padre… sabia que cuando niño no era muy buen padre, pero esto era otra cosa.