Un ramillete de flores: Cap. 4; Autora Nicole

Un ramillete de flores

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 21 de Diciembre del 2016.

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Capitulo 4

Conociendo a los novios y pretendientes del ramillete 

Autora:Nicole

Mientras Ariadna y su hermana dormían bocabajo cada una en su pieza. Juan Camilo corría a la velocidad de Usain Bolt y no es exageración aunque sus padres se encontraban en la capital con Charlie por asuntos de trabajo, (ni lo iban a llevar, pero el muchachito se había metido en la camioneta de papá sin que este se diera cuenta) Juan Camilo sabía que hoy volvían junto con Navid; quien había estado en un paseo del colegio y su regreso era viernes.

El adolescente que se había preocupado por el tiempo y por dejar a su primo ebrio en aquel bar, pensó en devolverse y rescatarlo, pero miró su reloj de pulso y vio que eran la una de la madrugada sin carro; generalmente su padre le dejaba el otro auto a él para hacer sus diligencias. Oliver confiaba mucho en el mayor de sus hijos, no era tan loco como Navid, ni tan impulsivo/analítico como Charlie que aunque aún no cumplía los trece años ya sabía manejar. Oliver Iván padre de los chicos les había dado ciertos privilegios a los tres mientras que estos no se pasaran de la raya.

El sr. Correa era una persona muy pasiva que nada le molestaba y todo se lo tomaba con calma, quien más heredo su temperamento fue su hijo mayor por lo que se entendían bien;en aquellos instantes el adolescente de recién cumplidos quince años no quería tampoco abusar de la confianza de sus progenitores,  y allí iba aquel guapo chiquillo como alma que lleva el diablo, paso de casualidad por una residencia donde habían dos enormes perros pitbull y por poco uno lo muerde, pero no sucedió nada grave  gracias a  la intervención de un  chico de aquella cuadra, quien  les arrojo un par de piedras y los ahuyento. Camilo le dio las gracias sudando nervioso y bueno afortunadamente ya faltaba poco para llegar a su casa. Estando allá encontró su residencia cerrada, se fue a la habitación que compartía con Navid y tiró una piedra a la ventana luego lo llamo:

• Llave… abrime la puerta. Soy yo Camilo – se anunció, pero parecía que su hermano estaba dormido profundamente
• ¡Que hubo parcero! – Se asomó Charlie Iván por la ventana – mi hermanito está muy cansado. Yo voy a abrirte – dijo y fue hasta la sala para recibir a su compinche
• Gracias – dijo entrando – ¿y mi papá? – preguntó como si nada
• Está dormido marica... vino muy cansado. Parece que tuvo mucho trabajo – dijo con un fuerte acento rolo
• Ahhh ya… ¿y mi mamá? – hizo otra pregunta ahora con nervios en su tono de voz, pero rápidamente se controló
• ¡Ella se quedó! Viaja mañana – mencionó arqueado una ceja
• Uffff que suerte – dijo dando un gran suspiro
• Lo noto preocupado chino… ¿Qué le ocurre? – Dijo al ver que su hermano mayor se quedaba pensando como si estuviera en otro mundo – Uich marica. Usted siempre anda como perdido ¿no? – agregó
• ¿Ehh? – Camilo en la inopia
• Párame bolas pues…– dijo algo fastidiado el menor de los Correa
• Si claro. No me hagás caso, tengo dolor de cabeza. Solo una última pregunta…
• ¿Dime?
• ¿Vos desde cuando sos rolo? – preguntó confundido al notar ese fastidioso acento de gomelo rolo en su hermano y claro para cambiarle de tema y que no se ponga de cansón a hacer preguntas bobas.
• Yo siempre he hablado así güevón….
• Ah bueno si vos lo decís – dijo tratando de entenderlo
• Camilo ¿En donde andabas metido hoy eh?
• Estaba con Cata. La lleve a cenar – mintió
• ¿Y ustedes cómo van? Por ahí escuche que andaban peleados – mintió también
• ¿Quién te dijo eso?
• Navid marica… Él dice que Catica está encantada con él
• Vos estás confundido llave… Hasta donde yo sé. Mi hermano está es enamorado de Danna y Emily
• No chino… A lo bien, eso ya no es así, y te mostraré pruebas. Además vos sabés lo cambiante que es esté pirobo – dijo y se fue a su habitación, dejando intrigado a Camilo…

Y en la calle a altas horas de la noche iba Brian tambaleándose de un lado para otro muy pasado de copas cuando de pronto un chico en un BMW deportivo lo pillo y le dijo que entrará:

• ¡Bien pueda parcero! – dijo abriendo la puerta para que Brian entrara. Ya dentro lo llevo a su residencia, le ofreció un tintico negro para bajarle la borrachera y luego le dijo – Qué bueno que lo encuentro llave. Tengo un buen negocio para usted – dijo el chico de escasos quince años
• ¿Qué tengo que hacer? Como está la situación toca hacer lo que sea – dijo ahora sobrio
• Es fácil. Tome esto para que vaya preparándose – le entregó una pistola

Aquel muchacho llamado Xavier Abdiel Jaramillo Yepes alias el “El Jefe violento” o “Demonio” UN TRAQUETO con mucha influencia en la cuadra donde Vivian los Piedrahita, quien a pesar de su corta edad, tenía vasta experiencia en el oficio del tráfico de sustancias ilegales. Junto a él estaba su hermano gemelo Abdiel Javier conocido como el “Jefe Impasible” o “El Santo”. Iniciaron ambos a la edad de doce años y ahora ya eran conocidos y respetados por todos los adolescentes del barrio eran como los padres de todos los chicos del barrio incluso mayores que ellos como por ejemplo Brian Alexis Piedrahita alias “Esquizofrénico” o “Vicioso” y Ryan Anderson Montoya alias “Cocinerito” o “El Chef” ambos por cumplir los dieciséis.

• Y que voy a hacer con esto – preguntó él
• Venga marica. Le explico…

Mientras tanta la madre de Brian, se encontraba dormida en los sillones de la sala de aquella humilde casa esperando por su hijo muy preocupada que algo malo le hubiera ocurrido en la calle. Había intentado localizarlo, pero sin obtener respuesta ni de sus hermanos ni de vecino alguno… ya iban a dar las tres y media de la madrugada y nada del jovencito...

En la residencia de los gemelos Jaramillo… Hablando con Xavier pues Abdiel no se encontraba en aquellos instantes…

• ¿Entonces qué parcero? ¿Cuento con vos? – pregunto extendiéndole su mano para sellar el compromiso. Brian miro ambos lados, trago saliva, no quería hacer algo ilegal, pero pensó que por necesidad se iba a ver obligado. Así que le dio un apretón de manos a su nuevo patrón.
• Así me gusta. La gente que no pone peros para trabajar – Dijo con una sonrisa diabólica – Tenga un adelanto – Le dio cinco millones de pesos y agregó:
• ¡Paque te comprés un celular decente y le des a tu mamá! – Brian los tomo y sintió una alegría al tener el billete en las manos. Se imaginó manejando los carros más lujosos, viajando el mundo con las viejas (mujeres) más ricas del mundo entero, con ropa de marca y muchos más beneficios que solo un negocio como ese podría dar… también pensó en lo que su madre le había dicho que mejor terminara su colegio que después podía conseguir un buen empleo y comprar todo lo que quisiera y se lo comento a Xavier a lo que este le informo de forma clara y concisa:
• Marica no sea bobito. Escúchame bien pues, si vos le pones cuidao a tu cucha, jamás vas a darte la vida que querés y vas a desperdiciar tus mejores años. Colegio jajajaja no me hagás reír ome – Comentó burlándose – Es que el estudio no sirve para nada güevón por eso yo lo deje y mira la gran vida que me doy: Viajando, con dinero, apartamentico, carros lujosos y las viejitas más mamacitas que en mi vida me imagine tener. Y vos me hablás, que querés seguir en el colegio. No pues…jajajaja – no paraba de reír…

Brian lo escucho y luego le dio otro argumento:

• Pero los Cardona tienen mucha plata y no son narcos…
• Jajajaja eso es un caso de los pocos que se pueden contar en este país ¿Y vos sabés cuanto tiempo les demoro a ellos construir sus negocios? – preguntó mirándole de frente
• No lo sé – respondió Piedrahita
• Años… con ñ no días y meses. Años parcero y no uno ni dos ni diez, fueron muchísimos años. Nuestro negocio si sos inteligente y me hacés caso en todo lo que te voy a enseñar como yo le hice caso a mi patrón. Te va a ir bien. Yo llevo cuatro años en esto y no me quejo – aseguró – cuando cumpla los dieciocho voy a ser el duro de toda Colombia y a los 23 seré reconocido fuera de país. ¡Espere y verá! – anuncio convencido, parecía un disparate para un mocoso de recién cumplidos quince, pero Brian vio que estaba determinado con sus objetivos y decidió aceptar el primer trabajo
• Listo llave. En mi tiene una persona de confianza – le aseguró
• Más vale. No me llevo con los sapos ni faltones – fue lo último que dijo y lo despidió

Brian llego a casa alrededor de las ocho con veinticinco minutos, abrió la puerta y se iba directo a su pieza para dormir cuando su madre lo llamo:

• ¿En dónde andaba mijo? ¿Por qué llega a estas horas? – preguntó angustiada mientras lo tocaba por todas partes para ver si estaba herido o algo
• Trabajando mamita – fue su respuesta mientras le daba un beso en la mejilla derecha
• ¿Trabajando Brian?  ¿Cómo así? No les he dicho a ustedes que solo estudien pues…
• Si mamita, pero yo ya decidí hacerlo. Además no es justo que usted se encargue de esta casa sola – le dijo
• Pero mijo…
• Fresca mamacita. Ahora voy a la cama. Tengo que dormir… Mi primer día de trabajo estuvo muy afanado
•  ¿Y dónde es que está trabajando pues? – cuestionó nuevamente
• Hago varias cositas… pero por el momento Barman – mintió
• Pero como así que Barman. Mejor me termina el colegio y busca un mejor trabajo. Todo trasnochado y en mal estado parece que hubiera tomado toda la noche – dijo desconfiada la madre frunciendo el ceño
• Mamacita no se preocupe eso es porque estoy empezando. Tenga para que compre un buen mercado – le dio la plática y se fue a su pieza mientras la madre quedaba atónita al ver los billetes…

Mientras tanto en casa de los Correas Tabares, Juan Camilo dormía profundamente mientras su hermano Navid se ponía sus mejores pintas. El chico era hermoso, cabello castaño claro con los ojos miel y de buen cuerpo porque hacia deporte. Y así salió en Jeans, una camisa a cuadros y tenis color blanco marca nike.  Chicaneando por todo el camino ante la mirada de su padre y de su hermano menor que también andaba de presumido, pero aún no había cambiado de voz y eso lo enfadaba mucho… Charlie quien también era guapo: su cabello castaño oscuro, ojos color marrón y muy parecido a su hermano iba con una camisa blanca, pantalón jean oscuro, tenis color negro y la cachucha para atrás color rojo.

Su padre se les ha quedado mirando a sus dos muchachos y les preguntó.

• ¿Y para dónde van tan pintas ustedes dos?
• Voy a ver a mis novias – se apresuró Navid en responder
• ¿Novias? – preguntó confundido
• Si parce. Son dos chicas hermosas. Yo después te comento
• Es papá. Más respeto, y además lo que dices en mentira. Emily es mi novia – replicó el menor de los Correa fastidiado
• Creo que hay un gran problema con ustedes dos – intervino su padre que no sabía de qué lado ponerse.
• Jajajaja vos no estás en edad de novias. Y con esa pinta no le arrastras el ala ni a Betty la fea
• Uich marica. ¡Espere y verá! Se va a tragar sus palabras – dijo otra vez con el acento de la capital
• No pues… este poco original – contratacó – marica madure – agregó

Mientras Oliver solo miraba nervioso que la discusión iba en crecimiento,  y los reprendió a ambos por llamarse maricas; que eso era tan inadecuado y no le gustaba escucharlo de sus bocas, que ambos eran muy chicos para emplear ese vocabulario. Les informo también que se dejaran de pelear y que ganara el mejor en la conquista de las chicas Cardona…

Los chiquillos fueron directo al garaje donde estaba el auto de su padre, Navid a quien le dieron las llaves se subió al carro, levantó el seguro de las puertas y prendió el motor para que Charlie se afanara. Cuando empezó a mover el carro, su papá le hizo señas para que bajara el vidrio; el chico obedeció y lo miró, Oliver solo le informo que tuviera mucho cuidado y fuera juicioso en el manejo. Lo hizo hasta que se alejó de su casa, luego ni paro bolas al consejo de su cucho, el loco muchacho iba tan rápido que podía matar a alguien del corazón. Charlie quien iba en el asiento del copiloto muerto del miedo; pensando cuando su hermano chocaba, se le escapo una risa estrepitosa mezcla de paranoia con euforia.Y eso fue muy gracioso para su hermano que hizo lo mismo y grito con emoción ¡Qué Chimba de día mi llave! ambos hermanos iban escuchando reggaetón y electrónica hasta que el conductor paró por un momento en la droguería (botica, farmacia como deseen llamarle) compro unas pastillas de Valium.

Luego invito a su hermanito a tomar una gaseosa que era una de las cosas a las cuales Charlie no podía resistirse y eso lo sabía el segundo de los Correa y no perdió su oportunidad de hacerle una mala pasada y lo engaño fácilmente, minutos antes le dio una chocolatina que sabía que al niño le revolvía el estómago cada que la consumía y cuando estaban en la heladería, sirvió en un vaso la gaseosa y le echo tres pastillas de Valium molidas y cuando su hermano regresó del sanitario se tomó la gaseosa. Navid dijo que iba a hacer una vuelta, que por favor lo esperaba, que era cerca… se fue y lo dejo… corrió en el carro con una velocidad impresionante que casi se lleva a una señora quien le grito, que era un irresponsable en el manejo, claro que no hizo caso, el se fue a comprar chocolatinas y dos enormes ramo de flores rosas para llevar a sus novias como él las llamaba. Estando allá toco la puerta. Salió el sr. Cardona.

• ¿Cómo está muchacho? ¿Se le ofrece algo? – Preguntó al ver al jovencito al cual miro de pies a cabeza
• Yo…bueno… yo – se puso nervioso – Yo estoy rebien señor – dijo – ¿Están Emily y Danna? Vine a verlas
• Danna no está – informo sin dejar de mirar la traza del crio –  Salió temprano a su clase de cocina – mm la mami aprendiendo a cocinar, que bien así no moría de hambre, pensó contento – Si querés le dejo tu mensaje
• No señor – faltaba más – no se preocupe, es personal. ¿Puede llamarme a Emily? – solicito por la segunda hermana, si no había una la otra
• ¿Personal? – repitió indignado el sr. Cardona – Vea muchachito todo lo que tenga ver como mis hijas es de mi interés. Si vos no me decís para que buscás a Danna no llamo a Emily – dijo tajante cruzándose de brazos, ¡Oigan al cucho este! Ahora me pone condiciones. ¡Que man tan descarado! Mal suegro. No pues…. ahora le tengo que dar explicaciones. ¡Qué chimbada ome! Pensó el muchacho – ¿Y entonces que niño?
• Eh… está bien, es que ella prometió enseñarme una receta de cocina irlandesa... es solo eso – mintió para que se dejara de hacer preguntas bobas
• Listo ome. Ya te la llamo – que fácil el buey, pensó el muchacho, se trago cuchara y todo el cuento
• Por fin… dijo bajito.
• ¿Qué decís?
• Si… por fis ósea por favor más cortico – y el suegrisimo fue en busca de su hija….
• Emily mamita la buscan
• ¿Quién papito? – pregunto ella
• Un muchacho…
• ¿Cual muchacho papá…?
• Mija yo no sé. Se me olvidó preguntarle el nombre. Vaya a atenderlo pues
• ¡No voy! Porque no sé quién me busca
• Mija no seás grosera y bajá por favor
• Mamita dice que es Navid Correa y quiere decirte algo muy importante – grito la madre desde la sala
• Ya voy pues – y la nena bajo rapidito
• Que hubo Navid Oliver que más pues – saludo
• Hola princesa, solo llamáme Navid – la saludo con un beso en la mejilla y le entrego un ramo de rosas y una caja de chocolatinas – Son para vos
• Eh gracias Navid – dijo omitiendo su segundo nombre que al chico no mucho le gustaba y las cogió – ¿Y esto a que se debe? –      preguntó confundida
• Me gustás y quiero que seás mi novia. Decime que si por favor – le pidió arrodillándose y besando la mano de la chica en presencia de la madre. Que solo le dijo al chico:
• Ambos son muy niños para andar de novios. Hágame el favor y no vuelva a proponerle a mi hija tal cosa
• Pero señora si yo a su hija la amo – declaro dramático, se olvido de la suegra metiche

Emily Cardona Betancur la penúltima hija de la familia una chica tranquila, estaba confundida. La verdad no había pensado en tener novio por el momento y este chico la había sorprendido con tal propuesta de buenas a primeras. Era el primer chico que se acercaba a hablar con ella de frente, en el colegio ninguno se atrevía y es que al conocer a los progenitores de la señorita y como eran de estrictos pues nadie quería enfrentarlos. La cuarta niña Cardona era pacífica, pero no boba e iba a escoger un buen chico para ella. Un muchacho serio y educado… Navid no parecía ser tal chico, pero por ella seguro que intentaría ponerse a leer para tener un amplio vocabulario, a meditar a interesarse por la gimnasia y todo lo que a ella le apasionaba. El chiquillo como buen sanguíneo es divertido ama la fiesta y es de los que se gozan hasta el último minuto, pero suele ser prudente por momentos. Una muy rara personalidad.

Carlos había bajado para conocer al sardino que se quería cotizar a unas de sus flores y le informo.

• Muy bien muchacho. Te permitiremos a vos y a Emily que empiecen como amigos. Ya para el otro año tratare de considerar su noviazgo. ¿Estás de acuerdo conmigo mujer? – preguntó a su esposa para buscar su apoyo.
• Yo bueno…creo que la niña es lo suficientemente madura para iniciar una amistad con el chico y el otro año, vemos si es conveniente que formalicen su noviazgo. ¿Qué piensan ambos de esto? – pregunto muy seria mamá, pero dando una opción eso era mejor que nada
• Me parece bien mamá. Navid me cae bien, pero tengo que conocerlo mejor – dijo la niña tranquilamente. Suegros descarados. Yo aquí ilusionándome como pendejo, para conseguir una puta amistad. Malos suegros: no los voy a tratar bien, ni les haré favores, que les quede claro. Voy a hacer que Emily pierda el año esperen y verán, pensó
• ¿El niño no dice nada?
• Si gracias señores – dijo sin mucha emoción
• Si ya quedan advertidos. Solo amigos – volvió a decirles el papá
• Ya mijo que los muchachos ya entendieron – intervino la madre. No pues que emoción, amistad como si tuviera 6 años ¡Estos cuchos que pensaran de la vida ome! ¡Qué maricada!, pensó nuevamente.
• Listo don Carlos y doña Carmen. ¿Será que deja salir a Emily a tomarse una gaseosa conmigo? – dijo todo respetuoso había que ganarse la confianza
• Está bien, pero me la trae a las tres de la tarde – dijo el padre
• Si como digás – respondió el adolescente, mientras Emily se fue a vestir rápidamente. Era la primera vez que un chico la sacaba aunque fuera en plan de amistad y estaba contentísima
• ¿Y a vos que te pasa? – dijo Mia al ver a su hermana emocionada
• Voy a salir con Navid a tomar gaseosa
• Y por eso estas así. Ni que te hubieras ganado el chance – mencionó la menor de las Cardona
• Solo estoy feliz y ya – repitió
• ¿Te gusta ese loco? – preguntó ella
• No le se aun, pero le daré una oportunidad, me pareció muy lindo mirá – le mostro los regalos y su hermanita se alegró mucho por ella
• Bueno solo te doy una sugerencia. ¡Poneme cuidao pues! – le dijo al ver a Emily mirando para otro lado como distraída – Ese peladito es un revoltoso, al igual que el hermano y Brian. Mirá como le dejaron las nalgas a nuestras hermanas – advirtió porque ella se sabía el cuento – ¡Pobres parceras! Hoy amaneció la pobre de Ariadna con un guayabo y el sentadero adolorido lo mismo Catica que por lo menos no se echó los chorros – dijo toda entusiasmada – Danna me lo conto todito. ¡Así que pilas y juiciosa, mi llave! No quiero que te llevés una pela por boba
• ¿Vos crees que soy igual a ese par? – preguntó con los brazos en Jarra – Además no les eches la culpa a esos peladitos. Ellas pudieron pensar y no lo hicieron y allí las consecuencias de sus malos actos… Otra cosa todas las personas no son iguales a Brian – dijo y se marchó no molesta, pero si indignada por los comentarios de Mia quien quedó sola en la pieza de su hermana sobándose su colita ya que, aún le dolían los correazos recibidos por parte de papá

Cada una tenía su propia habitación, sin embargo solían mudarse para compartir juntas. Y estas dos eran uña y mugre, pero al parecer Mia Valentina había cometido una imprudencia con sus recomendaciones…

Emily