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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 13 de Abril del 2016
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Un
doloroso comienzo
Capitulo Unico
Capitulo Unico
Autora: Marambra
Jim Ellison ex
ranger del ejército de los Estados Unidos y que ahora trabajaba como detective
de la unidad de crímenes especiales de la Policía de Cascade, una ciudad del
Estado de Washington, acababa de colgar el teléfono después de unos larguísimos
5 minutos tras que su interlocutor colgara el suyo, oyendo no el silencio de la
línea cortada, sino como un familiar pitido como si llegara desde lejos
magnificado cada vez más y que amenazaba con dejarlo sordo, era su caldera que
estaba pidiendo a gritos que la retiren del fuego.
Caray,
él hombre estaba más que sorprendido, casi en coma más bien y caminó como
sonámbulo hacia la fuente del sonido al otro lado de la pared y en vez de
vaciar el agua caliente de su caldera al termo, la tiró sobre una de sus
macetas asesinando a la pobre planta en un acto despiadado, de no ser por su
amigo y compañero de trabajo el Capitán Simón Banks, ahora mismo estaría
tomando tierra en lugar de café.
¿Qué
sucede Ellison?, pareciera que te llamaron de ultratumba – no
pudo evitar bromear al mirar la cara de su amigo, toda pálida y desencajada
como nunca, es que era raro ver así a Ellison, un hombre que se jactaba de no
tener miedo a nada, incluso sus compañeros de trabajo solían burlarse de él
ganándose el apodo del “DESPIADADO”, porque jamás de los jamases lo vieron reír
a carcajadas y menos llorar… obviamente – ¿y sabes qué? – le
dijo quitándole la caldera – no es necesario asesinar a las
margaritas, con regalarla a tu vecina era más que suficiente – sonrió
mirando de soslayo la casa de lado, apuntando disimuladamente a una mujer
cincuentona que cada que se cruzaba con Jim en la calle coqueteaba
descaradamente con él, la mujer había pasado la época del recato y las buenas
costumbres de una dama, y solía decir que ella ya no era la presa sino el
cazador – todo el mundo sabe que los hombres no sabemos nada
de plantas, menos de flores – dijo sin dejar de reír, sirviendo él
el café que le prometiera Jim esa tarde de sábado nevado plantados alegremente
frente al televisor mirando su programa favorito, un partido en directo de la
NBA, y lo hizo Simón, porque a este paso Jim terminaría quemándose alguna parte
de su cuerpo, pero antes de que vuelva a burlarse, Jim lo miró de frente y con
la mayor seriedad del mundo de ser posible en él, vamos que todo el mundo solía
decir que Jim Ellison nació con un palo de golf metido en el trasero, hizo
aquella extraña pregunta que tomó totalmente por sorpresa a Simón…
- ¿Y de niños?, sabemos algo de niños? – de no ser por la cara que se gastaba, Simón Banks ahora mismo hubiera lanzado una risotada y un tremendo golpe sobre la espalda de Jim a manera de camaradería como si compartieran un chiste de mal gusto, pero no, aquello no era una broma y esta vez Simón recién reparo no solo en la cara casi fantasmal de su amigo, sino en la mirada de total preocupación, Jim Ellison estaba al borde del pánico
- ¿De niños? – repitió para sí Simón – ¿a que te refieres exactamente Jim? – entrecerró los ojos con suspicacia, una pregunta como esa en su mente mal pensada solo tenía una dirección, pero era mejor preguntar por si acaso, que Jim Ellison no era un hombre que se tomara la vida a la ligera, peor su vida sexual – ¿a niños en misión rescate?, ¿por un secuestro o catástrofe quizás? – dijo tras poner azúcar a su taza – en ese caso sabemos todo lo que tenemos que saber – hizo una pausa esperando que sea Jim quien diga algo al respecto, pero el hombre estaba mudo, ido en realidad, así que sondeo un poco más – ahora, ¿de niños en plan creación?, eso nos enseñaron en la escuela con el cuento de la abejita, la flor y la calabaza como resultado de aquel encuentro – y puso cara de asco al recordar la primera vez que le hablaron de sexo sin rodeos y no precisamente sus profesores que le quisieron dorar la píldora, sino su vecino de 16 años cuando él tenía 13 y le dijo que debía dejar de ser crío y ser un hombre y lo invitó a su club privado para degustar una peli porno y aprender en directo – ahora sí a recién nacidos te refieres – agregó con cuidado sacudiendo la cabeza como si aquello fuera lo más descabellado que se le pudiera ocurrir a Jim, pero antes de que diga nada, Jim lo corto
- No de un bebé, sino de un adolescente – agrego como un hijo que confiesa el pecado capital a su padre, mirando el suelo y de pronto tan rojo como un tomate, su presión acababa de subirse y devolverle el color a sus mejillas
- ¿De un adoooo? COOF COOF – Simón no pudo siquiera terminar de decir adolescente con la impresión, tras atorarse al decir aquello y escupiendo como el demonio del exorcista antes de ni siquiera gritar – ¡¡¡PERO QUE CARAJOS JIM ELLISON!!!, ¿NO TE ENSEÑARON A TENER LOS PANTALONES BIEN SUBIDOS Y LA CREMALLERA CERRADA? – exploto y nada fuera eso, sino que agarró su gorra de aficionado y le pegó un golpe con aquello en la cabeza, como si fuera su hijo
Y
a Jim lo único que le quedó por hacer, fue poner cara de circunstancias, él
estaba tan o más sorprendido que Simón Banks, ni en un millón de años hubiera
imaginado estar en la posición en que estaba, la Corte Suprema del estado de
Washington capital, acababa de llamarlo para hacerle saber que lo estaban
notificando para presentarse a declarar ante un jurado por su supuesta
Negligencia familiar al abandonar a su hijo menor de edad Blair Sandburg, hijo
de Naomi Sandburg quien falleciera en el hospital oncológico de aquella ciudad,
dejando a Blair en completo desamparo desde hace un año ya, lo que lo impulsó a
cometer una larga lista de delitos menores que por su edad no quedaron en su
expediente, pero el supuesto robo a mano armada junto a una pandilla de mala
muerte eran palabras mayores, y si él como padre no se presentaba y daba la
cara por él, garantizando que esta sería la primera y la última vez en un
delito como tal, podría pasar a ser residente permanente en la correccional de
menores del estado hasta su mayoría de edad, que vamos Blair no estaba
precisamente como dama de compañía de uno de los jefes de la famosa banda los
Diamond bullets (balas de diamante) … estaba como segundo al mando.
Aquello
obviamente a cualquier padre de familia que se digne como tal ocasionaría un
infarto y a Jim le faltó muy poco para llegar a ese final, pero su parte
centinela, su espíritu hipersensible no podía darse el lujo de semejante
niñería, No cuando tenía entre manos la vida de un niño para cuidar, moldear y
encaminar, Jim Ellison iba a asumir sus responsabilidades y lavar su nombre
ante la Corte Familiar, es que se acababa de desayunarse la paternidad de un
lindo neonato varón de escasos 16 añitos de vida, justo en la flor de la
adolescencia.
Y
cada que lo pensaba su cabeza le daba vueltas, ¿cómo podía ser eso posible?,
¿tener un hijo?... bueno teniendo una tórrida noche de romance alocado en sus
años de melena suelta podría ser una muy buena explicación, sobre todo si esa
noche se la pasaron en una alcoba de soltero al final de su adolescencia y el
inicio de su juventud sin un condón disponible; pero ¿tener un hijo
delincuente?, esas eran no solo palabras mayores sino era un golpe bajo del
destino; él era la personificación de la justicia, un amante de la leyes, es
más, se sabía de memoria la constitución más que un propio abogado o juez así
que esto solo podía ser resultado de un mal Karma… una maldición de algún
delincuente y creía saber de quién: The Sorcerer un mafioso mitad navajo (que
Jim dudaba aquello) y mitad irlandés que según muchos decían que tenía la
capacidad de mandarte un mal de ojo jodido… y ahora que lo recordaba, El
hechicero había jurado venganza cuando lo atrapó con las manos en la masa, pero
eso era hace años, no era posible que El Hechicero le guarde rencor hasta ahora
¿verdad?... o ¿podía?... Jim Ellison acababa de sacudir la cabeza como
queriendo quitarse de ella aquella descabellada idea de encima.
- Es que… ¿no sé cómo pudo ser posible? – le pregunto a su amigo con la mirada perdida en la desesperación del momento – Yo… yo la verdad no lo entiendo – aseguro y Simón ya más relajado primero descargo una carcajada de película antes de sentarse a su lado y ofrecer su comprensión y ayuda a su amigo que realmente parecía estar perdido
- Mmmm – musitó pensativo – no creo que procrearas un hijo de manera diferente al resto de los mortales – le aseguro a manera de broma para aligerar el ambiente – vamos Jim – le dijo golpeando su brazo – MÍRATE… eres un hombre sano y supongo con todas las capacidades biológicas en su lugar, deberías estar feliz de saber que sabes procrear, lo terrible sería que no pudieras – dijo a manera de torpe consuelo – pero OJO he!, que de ahí a que ciegamente aceptes la paternidad de un mocoso de 16 años es una locura, tienes que pedir un examen de ADN urgente antes de que te compliques la vida
- Y si es? – pregunto cómo una ardilla asustada
- Pues nada ¿no?, a asumir tu responsabilidad y compensar años de ausencia – sonrió Simón sabiendo que no habían palabras para poner fácil aquello que intuía Jim lo sabía, no era un niño de quien hablaban al que regalar un peluche lo haría feliz, sino de un adolescente y ¿qué tienen los adolescentes en común con los adultos aparte de ser testarudos?, nada, así que o era el crío o era Jim, pero uno de los dos terminaba reventando
- ¿Y si ese hijo es un delincuente? – aquello si tomo por sorpresa a Simón, no se imaginaba semejante panorama
- ¿Estas bromeando no? – preguntó algo incómodo con la mirada que le dio Jim, dando a entender que no era una broma
- No, no estoy bromeando Simón – respondió sosteniendo los ojos a su amigo – acaban de llamar de Servicios Sociales para notificar que mi hijo está involucrado con una pandilla y que protagonizaron un robo a mano armada, provocando un fuego cruzado con la policía de Washington – dijo sintiendo su alma estrujarse al imaginar ese panorama, su hijo, su bebé estuvo en un fuego cruzado contra la policía, podía haber muerto y nunca enterarse que tenía un hijo – los famosos Diamond bullets – agregó con desespero moviendo las manos, todos sabían de ellos, eran un grupo de lo más disparatado y loco que cometían desde asaltos, robos, asesinatos y sus componentes eran tan variados que digamos que era una pandilla multi mix, algo así como que reclutaban a todos los rechazados por otras pandillas – y si yo no hago nada mi hijo ni siquiera irá al hogar de menores al que estuvo destinado en un inicio y del que a propósito salió supuestamente conmigo – dijo frunciendo el ceño, es que acababa de desayunar la noticia de que había unos papeles de compromiso firmados por él ante la corte como padre de Blair, unos papeles que por cierto no sabía ni de qué color eran – sino que ahora lo encerraran en la correccional para delincuentes juveniles por su vinculación con esa pandillita de pacotilla – le informo a su amigo – OH MIERDA!... SOLO TIENE 16 AÑOS, NO ES MÁS QUE UN MOCOSO IRRESPONSABLE – colapso – AHHH! PERO QUE PONGA MIS MANOS ENCIMA, ME VA A CONOCER... – grito recordando de pronto las dolorosas lecciones que su padre le impartía cuando crío, ahora entendía porque el viejo Ellison colgaba una más vieja correa de cuero detrás de su puerta y guay que la saque de su lugar, no se sentaba cómodo una semana
- Ya… pero antes tienes que hacerte un ADN – dijo Simón más calmado, ya tenía su respuesta… Jim Ellison iba a reventar, pero a reventar el trasero de cierto delincuente juvenil de ser su padre, que Dios se apiade del muchacho, Simón no pudo evitar mirar los brazos de Jim y las manos de Jim… joder.
Pero
a decir verdad y que ambos ignoraban y para desgracia de Blair nadie quería oír
y los que lo hacían pegaban la carcajada burlándose de él, era que Blair
Sandburg era un maldito genio que se ganó una beca en la Universidad de Rainier
en Cascade, el poblado donde vivía su padre y que ahora a raíz de eso, estaba
trabajando en una tesis para su doctorado, que trataba sobre la conformación de
familias alternas, sus grados jerárquicos, su modus operandi y vivendi y su
impacto social que incluían a las pandillas, los orfanatos y otras
interacciones sociales que no tenían vínculo consanguíneo.
Habiendo
ya realizado la mayor parte de sus investigaciones literarias... él, Blair
Sandburg, un consumado curioso, decidió que tenía que ponerse en la piel de sus
protagonistas, y habiendo estado en un orfanato por 5 meses llego a la
conclusión que no valía la pena indagar sobre lo que ya había vivido en carne
propia, y decanto su curiosidad a ser saciada por los grupos de mayor riesgo,
así que apostó por las pandillas a las que veía con ojo crítico y clínico, con
un entusiasmo desbordante porque para él, las pandillas eran la panacea de su
tesis; sí, eso mismo, muuuuuuy
impresionante; oportunidad que se presentó en la casa de acogida donde fue a
parar y conoció a Luis, un miembro base del clan Diamond que tras hacer buenas
migas lo invitó a echar un vistazo a la organización y Blair claro, aceptó
encantado, porque si él iba a estudiar a un grupo alterno se apuntaría a lo
alto y que mejor que una gran pandilla.
Y
nadie podía culparlo, él pobre muchacho soñaba que con aquel trabajo no solo
obtendría su título, sino que tendría una importante mención honrosa, un grado
honorífico por hacer una investigación de primera mano como todo buen
antropólogo lo debe hacer, claro eso solo si no lo encerraban primero en la
correccional del estado si su famosísimo padre decidía darle la espalda como
había supuesto desde que su madre le contara quién era Jim Ellison… un estirado
policía que dejó a su madre panzona y le valió un comino, porque él no se creía
eso de que el famoso Jim ignorara que tenía descendencia.
Y
frunció el ceño ante ese pensamiento, queriendo golpearse la cabeza por
estúpido, ¿cómo no se le ocurrió llamar al profesor Klauss Weber?, ambos tenían
una relación muy estrecha casi de padre a hijo, pero sobre todo profesional,
su testimonio hubiera sido más que
suficiente para sacarlo de aquel agujero, testificando que percibía un sueldo
por dictar ayudantías en la U, que vivía en una residencia en la U y sobre todo
que era un genio... pero no, él tuvo que cagarse de miedo en sus calzones cuando
lo esposaron y lo metieron al carro policía, una sensación de terrible
humillación y desamparo se apoderó de él y que tenía que describir en su tesis
desde el punto de vista psicológico… pero volviendo al hilo de sus
pensamientos, él se cago de miedo y tuvo que decir la verdad, confesar que su
padre era un miembro de la policía de Cascade (creyendo que eran las palabras
mágicas), que era huérfano de madre, que su padre no sabía de su existencia, y
este detalle solo lo dijo con la esperanza de que la policía de Washington le
sugiera llamar a otra persona cuando fracasó eso de que es hijo de un colega,
pero no, la tonta policía tuvo que llamar a servicios sociales y servicios
sociales revisar su hoja de vida y declarar que su padre lo sacó del orfanato
tras reconocerlo y que por tanto se debía notificar de este incidente al mismo…
fue allí, donde empezaron todos sus problemas.
……
Jim Ellison tras la charla que sostuvo con Simón se dirigió esa misma noche a
Washington para estar a primera hora de la mañana en la estación policial donde
tenían retenido a su hijo; y ambos experimentaron la misma sensación después de
estudiarse mutuamente en completo silencio en aquel apartado de la policía
donde suelen llevar a los delincuentes para ser interrogados, aquel primer encuentro fue casi eléctrico para los dos,
Jim agudizando sus sentidos supo de primera mano que aun cuando el muchacho se
mostró desafiante y desdeñoso, su corazón no lo engañaba, el chico estaba
meándose de miedo, bien por ti Jim, pensó para sí mismo el centinela,
convencido que era mejor para todos que aquel mocoso le tenga un poco de temor,
así sería mucho más fácil manejarlo, ilusión de padre primerizo le dijo el
capitán Banks riéndose irónicamente de su colega de trabajo, pero Jim estaba
convencido que lo lograría, porque de su
parte él no tenía ningún inconveniente en adaptarse a su nueva situación, ser
padre de un adolescente.
De
eso ya había pasado como tres meses y la convivencia no fue nada fácil a decir verdad, entendiendo
recién con el paso del tiempo aquel viejo refrán que cita: Otra cosa es con
guitarra; es que Blair Sandburg después de un tiempo de adaptación, al mes
justamente de vivir con su padre biológico y conocer más a fondo sus neuras,
empezó a darse cuenta que era casi imposible seguir con aquel ritmo de vida y
empezaba a sofocarse de las exigencias y olvidos de conveniencia de Jim; vamos
que de ser enteramente libre y caminar a sus anchas, de la noche a la mañana se
vio en la penosa situación de dar explicaciones hasta de lo que respiraba; de
estar acostumbrado a cubrir sus necesidades más básicas en el sentido literario
de ser un hombre socialmente autosuficiente que se pagaba su café, alguna que
otra vez una cervecita sin alcohol, el dar una pitada a un cigarrito más por
pinta que otra cosa, fue una soberana pesadilla llegar a depender totalmente de
un hombre tan intransigente, mandón, obsesionado con la pulcritud, la
puntualidad y la salud y ni qué decir de la ciega obediencia al punto de la
taquicardia, para pedir monedas incluso para su pasaje de metro, es que por la
cabeza de Jim Ellison, jamás se le ocurrió pensar que el muchacho tenga necesidades
típicas de la edad y en vez de tratarlo como a un universitario de respeto lo
trataba como a un crío de colegio, al que se le COMPRABA el tiquet para el bus
y dos dólares para sus dulces, pero el colmo de todo fue pedir permiso para
realizar su trabajo investigativo fuera de los límites del loft.
Detalle
que fue afectando enormemente a Blair a medida que pasaba el tiempo, ya que
aquello iba en desmedro de su investigación, porque esta nueva rutina lo
colocaba en una delicada situación que perjudicaba enormemente su trabajo; ya
de por sí era demasiado feo con no poder contar con dinero cuando lo requería
para cubrir sus gastos en la compra de alguno que otro libro a última hora, o
un chicle en un momento de estrés, pero la peor parte era no contar con la
disponibilidad y soberanía de su propio tiempo para decidir qué cosas hacer de
inmediato o que cosas aplazar porque tenía que pedir permiso como un simple
colegial y esto empezaba a llegarle al huevo…. en pocas palabras su padre se
estaba convirtiendo en un gran obstáculo en su carrera y no quería tener que
verse en la penosa situación de elegir entre su título y su vida personal.
Pero
aun así decidió ver que se podía hacer al respecto, después de todo Blair
Sandburg tenía un lema como todo gran antropólogo, o por lo menos como uno que
se digne y era que todo ser humano merece la oportunidad de darse a conocer y
ser estudiado, ¡si señor!, Blair como buen observador de la gente que era,
había decidido conocer a su padre no como padre sino como hombre y su curiosidad
aumentó, cuando percibido algunas de las habilidades de centinela que Jim
poseía y como siempre fue directo al grano, preguntándole de frente si sabía o
no que podía ser uno de esos seres misteriosos o si oyó hablar de ellos alguna
vez, pero ante la negativa de Jim, Blair decidió investigarlo por su cuenta,
pero así como Blair iba de ida, Jim estaba de vuelta y astuto como era, fingió
interés logrando entablar una tupida la
charla que relajo al muchacho a tal punto que fue el mismo Blair quien sugirió
a su padre que su relación pase al siguiente nivel, es que Blair le había
pedido que vayan paso a paso, que no era fácil para él depender de alguien, así
pues de ser conocidos, a tener una relación inquilino casero cuando se mudó a
su casa a ser amigos en proceso hasta que los resultados de ADN lleguen,
tuvieron que hacer muchas modificaciones en su comportamiento, básicamente
Blair por las grandes desventajas económicas que tenía, pero esta charla le dio
a Blair la confianza de querer conocer a Jim un poco más como padre que como
hombre, vamos que era alucinante de por sí tener como progenitor a un
centinela, algo en lo que Jim estuvo muy de acuerdo, pero Blair puso una
condición, que si iban a pasar de ser conocidos a amigos y querían construir un
lazo filial a futuro, su relación debería estar basada en la sinceridad ante
todo sea cual sea la situación.
Cosa
que interesantemente fue Jim quien se lo llevó a la ligera muy seguro de sí
mismo; quizás por ser una figura de autoridad pública y estaba acostumbrado a
que la gente confíe en él, quizás por ser adulto o quizás por ser su padre,
creyendo que Blair aceptaría aquello ciegamente y casi arruina todo, porque
Blair una vez que entro en confianza con Jim aunque todavía no lo llamaba papá,
no tuvo tapujos en contarle su vida, revelando incluso algunos escabrosos
detalles de cómo timó a servicios sociales para abandonar el orfanato para
postular a la beca en Cascade, delito que confesó a la policía de Washington
una vez que se hizo a la idea de que haga lo que haga a partir de su arresto,
no saldría de aquel lugar si no era bajo la custodia de Jim Ellison, incluyendo
que de no ser por ese detalle, Jim jamás se hubiera enterado de su persona,
pero que ahora que compartían el mismo techo haría su mejor esfuerzo para
entablar una verdadera relación padre - hijo a futuro, ocultando para sí un
único detalle, que si esa relación fracasaba, utilizaría esa oportunidad para
profundizar en su corazonada y descubrir lo que según él, su padre
inocentemente ignoraba de sí mismo, que era un centinela y publicar un artículo
en alguna revista antropológica de la universidad y ganar algunos puntos extras
para su hoja de vida; obviamente le hizo saber que esperaba el mismo grado de
confianza cuando estuviera preparado para aquello.
Y
después de aquello no le dio mayor importancia al tema, porque ahora, Blair
estaba concentrado en un solo detalle, su tesis; ya llevaban casi tres meses de
convivencia con su padre en Cascade y entre tener que cumplir las exigencias de
Jim y el presentarse cada sábado a trabajo social para cumplir la pena impuesta
por el juez del menor por supuestamente negarse a cooperar con la justicia al
no dar los nombres de los cabecillas del clan que sirva para encerrarlos de una
vez por todas y no ser enviado a un reformatorio, haciendo hincapié de que
aquello era por consideración a su padre, Blair perdió mucho tiempo y descuido
su trabajo investigativo, pero lo peor era que no podía acercarse a menos de
100 metros de ningún miembro fichado de la pandilla por lo que su trabajo se
vio gravemente afectado, él necesitaba organizar el material recolectado para
documentar sus hipótesis confirmadas y sus nuevas teorías ya que se iba
acercando la fecha de entrega de los trabajos finales y él no tenía nada
avanzado ya que todo el material filmográfico que incluía sus fotos, sus
entrevistas grabadas, filmaciones del día a día en el interior de una
pandillas, estaban en poder de la policía, quien se la hizo quedar como
evidencia a ser usada a futuro mientras ellos seguían rompiéndose la cabeza por
saber quiénes eran los verdaderos líderes de aquella organización clandestina;
información que Blair se negó en redondo a revelar por cuestión de código de
honor, así que decidió hacer algo al respecto: hablar con Jim para ver si él
podía obtener aquel material de trabajo, después de todo era un poli, y sacarle
una copia devolviendo los mismos una vez que tuviera lo que necesitaba, algo
que Jim Ellison se negó en redondo…
- ¿Qué pasa Blair? – Jim decidió romper el silencio agobiante que se apoderó de ambos a la hora de almorzar, su hipersensibilidad le decía que algo tenía preocupado y molesto a su hijo – hay algo en que te pueda ayudar?
El
realmente estaba interesado en que su relación padre - hijo pasen a la segunda
base y sean algo más que compañeros de piso como hasta ahora venía siendo, pero
Blair no se lo ponía nada fácil, el chico andaba osco la mayor parte del
tiempo, quejándose directa o indirectamente de su falta de libertad, es que no
acababa de adaptarse a su nueva vida llena de reglas, el quería tener un poco
de autonomía para moverse a sus anchas, después de todo no hacía nada malo,
decía echándole en cara aquel detalle a Jim, quien le daba parte de la razón ya
que el pobre solo iba de biblioteca en biblioteca, pero para Jim las cosas
estaban claras, Blair tenía un semi arresto domiciliario y un toque de queda
que cumplir no solo por su edad sino por su estatus de digamos convicto juvenil
a prueba, hasta que el juez del menor revoque aquello, cosa que Blair no tomo atención
y estaba convencido que no era nada más que maniobras de Jim para sofocarlo y
dárselas de padre controlador.
- Bueno, sí – dijo Blair – si hay algo que puedes hacer por mi – el encantador muchachito de rulos despeinados y oscuros se dignó a mirarlo con aquel par de impresionantes ojos azules – quiero que me des permiso para llamar a Chalo o en su defecto ir a buscarlo hoy a la plaza – Chalo era un miembro de la pandilla que no estaba fichado pero del que se tenía una fuerte sospecha, por lo menos por parte de Jim, razón por la que no quería que contacte con él y se meta en problemas, es que Jim tenía un sentido de paternidad muy desarrollado y no era porque ya tenía las pruebas de ADN en la mano y su paternidad confirmada, eso era lo de menos... él quería a Blair por lo que era, hijo suyo o no , Blair era brillante y le dio sentido a su existencia; y por nada del mundo arriesgaría a su hijo y menos su brillante futuro, él sabía muy bien lo que le podía pasar si lo veían nuevamente involucrado con algún miembro de los Diamond Bullets – necesito documentar mi trabajo de investigación y quiero hablar con él y ver la forma de volver a ingresar al grupo – dijo agregando ya no más ante el levantamiento de cejas de Jim – solo para sacar algunas fotos y grabar pequeñas entrevistas a los chicos o tal vez, ver si él lo puede hacer... ya que tu me prometiste hacer algo al respecto con todo mi material que quedó confiscado, pero nunca tienes tiempo y yo estoy al filo de mi entrega... – dijo alzando la cafetera sirviéndose el resto de café que quedó en ella
- Lo siento Blair, pero no puede ser – corto Jim quitándole la cafetera de las manos adelantándose en vaciar la leche en su taza, antes de que Blair diga algo más; es que el pobre muchacho sacaba el tema cada que podía y a él se le estaban agotando las excusas
- ¿Qué no puede ser? – preguntó Blair algo enojado con la actitud de su padre al quitarle la única cosa que le suponía placer: tomar café tinto en la mañana – ¿el que hable con él? o no pueda tomar ni cafe
- Cualquier cosa que se te pase por la cabeza, tu No puedes contactar con ningún miembro de la pandilla esa – dijo tranquilamente – así que olvídate de esa tontería… y tampoco puedes tomar café, eres muy niño
- NO ES NINGUNA TONTERÍA – Blair se paró de un brinco apenas Jim hizo lo mismo para dar por finalizada la charla, algo que Blair ya lo venía venir; es que Jim hacía lo mismo cada que le convenía, se retiraba y daba por concluida cualquier discusión que implica ser flexible con sus demandas – ES MI TRABAJO – agregó – Y NO VOY A PERDERLO POR UNA CAGADA… Y NO SOY UN NIÑO – tenía que dejarlo claro
- No grites, habla – replicó Jim con un pitido en el oído, su sensibilidad auditiva si bien era una bendición la mayor parte del tiempo, en situaciones como esta era todo lo contrario y la voz chillona que ponía su hijo cuando se enojaba solo lograba alterarlo y dolerle el tímpano – y deja de decir groserías
- ES QUE ESTO ES UNA MIERDA – a Blair como que le importaba un pepino la nueva regla del hogar: dejar de lado el vocabulario soez... herencia de sus días de pandillero aficionado, una de las malas cosas que a la gente se le pega rápidamente tenga la edad que tenga o el grado cultural que posea
- BLAIR – amonestó Jim contando hasta el infinito mentalmente – deja de comportarte como un niño haciendo berrinche ante una negativa, ya te lo expliqué mil veces – dijo mirando a Blair con desespero ante su obstinación – sabes que no puedes acercarte a ningún pandillero
- Entonces ayúdame a recuperar mi material de trabajo, por favor – dijo haciendo una pausa para que su padre se ponga la mano al pecho y lo ayude en esto que era importante – de verdad lo necesito Jim, de eso depende mi tesis – explico procurando hablar civilizadamente, poniendo en práctica la teoría de que la gente te trata como lo haces tu primero, pero no funcionó, su amabilidad fue confundida por Jim con obediencia de hijo
- Lo siento mucho Blair, pero sabes muy bien que ese material es evidencia y no puede ser retirado de la estación policial – dijo calmadamente y esta vez dirigiendo sus pasos a la puerta, iba siendo hora de ir a trabajar
- ENTONCES CONSÍGUELO TU – Blair no solo grito sino que corrió a su lado y atajó a su padre por la muñeca, era la primera vez que lo tocaba, ni siquiera se habían dado un abrazo cuando se conocieron, peor cuando tuvieron las pruebas de ADN en sus manos; que en el caso de Blair en lugar de aliviarlo al quitarle sus dudas lo puso de muy mal humor, porque a medida que fue conociendo a Jim y sus obsesiones con todo, menos lo quería como padre, ya que ambos no tenían absolutamente nada en común; él era todo sonrisa, bulla, ilusión y era re parlanchín, en cambio su padre era un completo aburrido – USA TUS INFLUENCIAS JIM – sugirió – EL CAPITÁN BANKS ES TU AMIGO…
- CREO HABERTE DICHO QUE NO GRITES – Jim también elevó la voz y Blair lo soltó automáticamente al darse cuenta de lo que estaba haciendo, estaba rogando como un hijo a un padre
- Pero es que él entenderá, yo solo le haré una copia a algunas fotos y… – Blair buscaba justificar aquel acto de piedad cristiana para con su tesis
- ¿Me estas pidiendo que haga mal uso de mi vinculación con la policía? – ¡oh por Dios!, pensó Blair, de todos los defectos de Jim nunca imaginó que sea un mojigato
- ¿POR QUÉ NO?, A VER ¿DIME? – volvió a gritar desesperado, pero esta vez Jim prefirió callar y contar hasta mil, sino haría algo impensable, darle de nalgadas a ese muchacho, pero Blair dándose cuenta de su actitud procuro bajar el tono de sus reclamos y hablar – tus influencias, tu amistad o lo que haga falta... Jim por favor – agregó compungido – por favor – volvió a repetir con la voz en un hilo – de verdad lo necesito, de eso depende que me gradue este año – suplico con voz chillona – sino tendre que suspender mi tesis y volver a empezar y no creo que eso sea posible, tendría que cambiar todo mi trabajo, desde cero
- Ni modo Blair pero yo no voy a meterme con la evidencia policial solo por complacerte – a Jim no se le estrujo ni un poquito el corazón cuando le dio esa respuesta a su hijo, ni se conmovió en lo más hondo incluso al ver los ojos de Blair aguarse
- ES MI TRABAJO – gritó Blair apasionadamente, al recuperar la postura – ADEMÁS SON MIS COSAS LAS QUE SE ROBO LA POLICÍA – Jim tenía que enterarse o mejor dicho recordar aquel detalle por si acaso – BOLA DE LADRONES – los insulto – YO HICE TODO LA INVESTIGACIÓN Y NO PARA LA PUTA POLICÍA SINO PARA MI TEEEESIS – chilló desesperado y Jim hizo algo impensable le dio un manotazo en el trasero
- PLAFFF BASTA! – grito enérgico – SUFICIENTE DE GRITOS Y BERRINCHES BLAIR – advirtió en tono severo – te estas ahogando sin motivo en un miserable vaso de agua – que descarado pensó Blair momentáneamente, colapsado por el manotazo recibido, ¿qué era eso?, ¿acaso iba a empezar a usar la fuerza bruta para someterlo?, ¡claro! era eso, típico de la policía, hacer uso del poder – para todo en la vida hay solución – siguió Jim ajeno a los pensamientos lúgubres de su hijo – y si tienes que cambiar de trabajo no hay problema, yo no me voy a enojar porque no termines tu tesis – dijo sin pensar en cómo se sentía Blair – total tienes 16 años…. ¡POR DIOS! deberías estar pensando en salir a fiestas no en ir a juntarte con pandilleros de pacotilla – prácticamente acusó a su hijo como si lo que hiciera Blair fuera un delito por no decir un crimen, pero a Blair le afectó muchísimo y Jim lo sabía, el pulso, la respiración y la presión de su hijo estaban empezando a subirse
- FALTABA MÁS – contestó Blair fuera de sí – COMO SI TU HUBIERAS HECHO ALGO POR MI – ahí el primer reclamo de hijo abandonado – ¿CUANTO TE HA COSTADO MI MATRÍCULA?... ¿DIME?... MI ROPA, MIS CUADERNOS – siguió gritando – NI SIQUIERA ME HAS ENSEÑADO A LEER O ESCRIBIR
- OYE QUE YO NO SABIA QUE EXISTIAS – se defendió Jim desbordado por el ataque de su hijo
- SÍ, CLARO, LO QUE TU DIGAS… PERO ESO YA NO ME IMPORTA, SINO LO QUE SABOTEAS MI TRABAJO… MI VIDA – acuso
- YO NO ESTOY SABOTEANDO NADA
- ¿Y EL QUE TE NO TE IMPORTE QUE PIERDA MI TESIS QUÉ ES?... – grito desesperado – ME HA COSTADO LLEGAR A DONDE ESTOY – frunció la frente al recordar todos los obstáculos que tuvo que pasar – HE TRABAJADO DURO PARA ESTO Y HE CORRIDO MUCHOS RIESGOS PARA HACER DE MI TESIS EL MEJOR TRABAJO INVESTIGATIVO DE TODOS, COMO PARA QUE AHORA LA PUTA POLICÍA ROBE MIS DOCUMENTOS – dijo frustrado
- NO TE PERMITO QUE – Jim empezó a avanzar intimidantemente hacia Blair, es que hasta ese momento prefirió ponerse lejos de su alcance por si acaso se le crucen los cables y le suelte un revés como solía hacer su padre con él cuando se portaba mal educado
- TU NUNCA ME PERMITES NADA – contraataco Blair muy herido – pero qué puedo esperar de un hombre que solo patea traseros – agregó a manera de insulto modulando la voz y dándose la vuelta, no quería que lo vea llorar, era demasiado humillante, y Jim no necesito verlo, el olor a lágrima salada inundó su nariz
- MIDE tus palabras hombrecito, piensa antes de hablar – mordió Jim su enojo – no tienes porque insultarme, yo no tengo la culpa de que te veas involucrado en un asalto a mano armada – le recordó por si acaso
- ¿TENÍAS QUE DECIRLO NO?... ¿DONDE QUEDO ESO QUE DIJISTE?.. ¿QUE AQUELLO PERTENECÍA AL PASADO?, TU NO TIENES HONOR – definitivo Blair estaba exaltado, tenía la adrenalina corriendo por sus venas y no podía controlar su lengua y Jim lo sabía, era el enojo, la frustración, la preocupación y todo lo demás que estresaba a su hijo y no podía culpar a Blair de aquellas reacciones, era la parte irracional de su hijo lo que comandaba su cuerpo y su boca – pero te voy avisando desde ya, Jim Ellison, yo voy a cumplir con mi trabajo cueste lo que me cueste – agregó a manera de amenaza sin necesidad de gritar, pero Jim no pudo hacer mucho más que quedarse con la palabra en la boca porque para eso Blair ya estaba huyendo y su teléfono sonando
- NO HAGAS TONTERÍAS BLAIR – grito para que su hijo lo oyera mientras miraba la pantalla, era el capitán Banks con un mensaje que decía que debía ir a una escena de robo, pero antes tenía que dejar algunas cosas claras con su hijo
- SI NO ¿QUE? – contestó furioso Blair llegando a su dormitorio cerrando la puerta con llave pero aun así, desafiando a su padre – ¿ME VAS A DAR DE NALGADAS COMO A UN NIÑO DE CINCO AÑOS? ¡TROGLODITA! – y fue todo, Blair acababa de sacar a Jim de sus casillas, él había ido tras de su hijo y se paró al otro lado de la puerta con la intención de decirle que verían la manera de solucionar juntos el problema con su tesis, sin embargo estaba ahí, dejándose llevar también por un irracional enojo y contestar de la misma manera gritando y luego salir de casa dando un portazo
- NO BLAIR, NO SOLO VOY A DARTE DE NALGADAS COMO A UN NIÑO, SINO QUE LUEGO TE VOY A DAR UNA PALIZA CON EL CINTURÓN, COMO A UN ADOLESCENTE Y NO TE VA A GUSTAR… ASÍ QUE MEJOR NI SE TE OCURRA SACAR UN PIE FUERA DE ESTA CASA
Solo
que Blair no tomó en cuenta aquellas palabras como una amenaza sino como un
reto y apenas ordenó sus ideas en la cabeza decidió que era hora de retomar el
control de su vida, así que junto sus pocas ropas en la misma mochila con la
que llegó, dejando todo lo que le compró Jim intacto, decidió salir de la vida
de su aburrido y tirano padre, él era un antropólogo, él era una eminencia, a
él nadie le decía que hacer y que no y ahora mismo él quería salir, y saldría
por la puerta grande se dijo a sí mismo, pero se llevó la peor sorpresa de
todas, Jim Ellison le puso llave al piso… Blair Sandburg estaba encerrado en
casa como un mocoso de 5 años. AHHHHHHH...
- ¡¡OOOH!!, NO, NO, NO… NO PUEDE SER, NO PUEDE SER, NO PUEDE SER – pateó la puerta lastimándose los pies – MALDITO PUTO CABRÓN, PERO SI CREES QUE ESTO ME DETENDRÁ, ESTAS FRITO…. ¡¡¡JODETE!! –
Chilló
elevando su dedo corazón a la foto de su padre en un gesto obsceno antes de
abrir la ventana y salir por las gradas de emergencia, si Jim Ellison creyó que
cerrando con llave controlaría al díscolo de su hijo se llevaría soberana
sorpresa, pero dicha sorpresa no solo fue para Jim, sino también para Blair;
¿es que qué otra cosa más se podía esperar del consumado estudiante de
antropología?, nada excepto ser fiel a sus instintos, fiel a su palabra,
después de todo llevaba viviendo completamente solo desde hace dos años, desde
que su madre muriera, por lo que no necesitaba a Jim Ellison casi para nada, si
acaso para amargarle, mientras huía del
loft con la intención de controlar su vida convenciéndose a sí mismo que huir
era el primer paso a su libertad y autonomía, y el segundo paso era hacer algo
por su futuro y eso significaba su tesis, así que ignorando totalmente la orden
de restricción impuesta por el juez del menor, él contactó con Chalo para
pedirle lo ayude a ingresar nuevamente al clan, claro que aquello ya no era
posible porque muchos de los miembros de la pandilla lo querían muerto por alta
traición…
- Imposible hermano – contestó Chalo a su pregunta mirando de soslayo a un lado y a otro como si se escondiera de alguien – estás en la lista negra; six fingers está preguntando por ti y a jurado perforarte el ombligo – le contó
- Mierda y ahora ¿qué voy a hacer? – se lamentó Blair cogiendo una mata de rulos entre los dedos y caminando de un lado a otro – estoy con la soga en el cuello con esto, debo preparar mi trabajo para dentro de 10 días y no tengo nada avanzado hermano, estoy muerto – agregó tirándose de espaldas en aquella banca vieja de la plaza a donde se fueron a encontrar
- ¿Y tu viejo no puede ayudarte? – le pregunto medio en broma, medio en serio, después de todo Blair acababa de contarle lo sucedido
- ¿ESE CABRÓN?, lo dudo – dijo abriendo los párpados pesadamente, eran ya cerca de las 7 de la noche, seguramente Jim ya estaría por volver a casa, el muy grandísimo no le dio una sola llamada, pensó, porque si hubiera llamado a la casa, el no recibir respuesta del teléfono fijo le hubiera puesto sobre aviso y hubiese marcado el móvil, pero no tenía una sola llamada de su padre y tampoco ningún mensaje
- VAYA! VAYA! BRO, no puedes decir que no mejoramos tu incultura – ironizó Chalo ante la pachotada de Blair – te enseñamos la verdadera lengua, toditito y significados… esa que ni está en los libros, ja jaj jajaj anda; si te da categoría chato, no puedes negarlo – dijo alabando las malas palabra de Blair sonriendo al recordar lo remilgado que era cuando ingreso al clan – choca esos cinco mi cuate – alzó la palma derecha esperando la reacción de Blair – y pa´que no digas que me rajo y soy un ingrato, voy a echarte una manito mi carnal
- Vas a hablar con el Gringo – dijo Blair esperanzado de que Chalo lo haga y poder reingresar a la pandilla y tomar unas cuantas fotos que necesitaba y hacer algunas entrevistas por lo menos a las bases
- NOOO!!!... QUE VAAA, ¿tu estás loco?... NADA QUE VER, el gringo me mata si sabe que estoy charlando contigo – le dio un golpe en la espalda como en los buenos tiempos, Chalo no era solo un miembro de la pandilla, era uno de los grandes en la parte logística, hacia el trabajo fino de relojería, controlaba a las masas y administraba los recursos, casi, casi era la mano derecha del Gringo, y si nadie lo tenía fichado aún con la sospecha, era porque él era un genio del escape y del soslayo, se las sabía todas
- ¿Entonces? – preguntó Blair – a no ser que hayas cambiado de opinión y tomes algunas fotos por mi, no veo cómo – dijo tirándose de espaldas de nuevo sobre el banco entrecerrando los ojos por la luz que se prendió del poste
- Pues robando la evidencia – sonrió de oreja a oreja
- ¿TU ESTAS LOCO? – Blair se paró rebotado – no pienso ir hasta Washington, además no tengo ni un duro, con decirte que tengo que pedir hasta para mis boletos ya te imaginas la precaria situación en que me encuentro
- Y quien dijo nada de viajar… las pruebas están aquí – dijo, algo extrañado de que no sepa que las pruebas las tenían en Cascade, un misterio para todos claro – no tenemos que ir a ningún lado para tenerlas, excepto a la estación policial – dijo a manera de reto elevando una ceja en claro desafío – ¿cómo es?, ¿lo hacemos? – pregunto y a Blair se le revolvieron los sesos
- Me canso
E
hizo un puño para chocar sus nudillos con el de Chalo, acababa de sellar su
destino, Blair y su acompañante se encaminaron rápidamente a la estación
policial, eran las 7 y algo de la noche, Chalo, ya habiendo hecho espiar el
lugar semanas antes para ver la oportunidad de hacerse con el material
filmográfico de Blair pero no para ayudar a su amigo sino para destruir las pruebas
incriminatorias de su clan; guió a Blair por un hueco en el garaje y se
escondieron ahí hasta casi las 8 de la noche entre las movilidades confiscadas
en espera de que el recinto se quede más o menos vacío y esto porque claro, era
la estación policial; el caso fue que pudieron colarse a su destino: el área de
evidencias, un lugar en el que siempre habían dos personas de día y una en la
noche, que interesantemente estaba vacía, no había nadie lo que levantó las
sospechas de Chalo, quien como buen ladronzuelo y visitante digamos asiduo del
lugar por delitos de poca monta, sabía que la estación policial nunca, pero
nunca dejaría aquel lugar sin vigilancia.
- Algo no anda bien mi chaparrito – indicó frunciendo el ceño metiendo la mano al bolsillo donde tenía listo el trapo empapado con cloroformo dentro de una bolsa – aquí debería haber alguien – dijo mostrando el área
- Oh vamos Chalo, es nuestra oportunidad – rezaba Blair ya saboreando el momento de tener la cámara en sus manos, aquel aparatito le costó una pequeña fortuna y tres años de duro trabajo lavando platos, no era justo que la policía se la guarde dizque hasta el juicio
- No quiero arriesgarme Blair – contesto Chalo moviendo la cabeza de un lado a otro como un pequeño suricato – mejor vámonos – ese era un buen consejo que Blair debió oír
- NO – gritó para luego bajar la voz y agacharse – mira yo entro y tu me proteges si algo sale mal, tú huyes, yo asumo la responsabilidad – dijo muy convincente, es que para Blair no había otra oportunidad, era ahora o nunca
Y
apenas Blair ingreso que lo hizo sin problemas se dirigió a los estantes y
empezó a buscar la caja que contenía sus objetos personales, pero en cuanto la
alzó, sonaron las sirenas como si hubiera un gran robo al banco central o un
incendio en la casa blanca, Chalo obviamente huyó quedando Blair atrapado en el
recinto porque las puertas y ventanas se cerraron en automático..
Lo
que pasó luego fue una pesadilla o un sueño, Blair nunca lo sabría, lo único
que sabía era que ahora mismo estaba siendo arrastrado por el cuello de su ropa
a su dormitorio por nada menos que Jim Ellisón, quien llevaba una cara de perro
doberman con rabia…. ÉL había llegado a casa a las cuatro de la tarde con la
noticia de que el capitán Banks le permitiría hacer copias a las fotos y
traducir la cinta de sus entrevistas, las más básicas de los componentes cuyos
nombres no estaban registrados en la ficha policial, pero cuando llego a casa
se pilló con la sorpresa de que Blair había huido llevándose solo la ropa que
trajo y se puso a buscarlo calle arriba y calle abajo, incluso su compañero de
ronda lo ayudó en su tiempo libre, dándose por vencido, teniendo que ir a la
estación policial a las 8 de la noche para dar el reporte de su desaparición
con la única foto que tenía en su poder y que estaba en su móvil para poder
hacer un identikit de búsqueda, imaginando que si no pillaba a su hijo antes de
24 horas, tendría que dar parte al juzgado del menor y quizás perder a su
muchacho en un reclusorio para menores de edad, cosa que no sucedería, porque
las alarmas estallaron cuando él estaba ingresando a la oficina.
Jim
y otros compañeros de trabajo rodearon el edificio, entrando armados y se llevó
tremenda sorpresa cuando vio al Capitán Banks salir con Blair con la caja de
evidencias en su mano, menos mal, el hombre entendía el dilema del muchacho y
del padre y todos en la oficina prefirieron pasar por alto aquello solo por
estima a Jim…
- Sube a tu habitación Blair – ordenó Jim y Blair al ver la cara de su padre cerró la boca y subió corriendo, no sabía qué hacer, así que decidió la salida más rápida, poner en orden los documentos que indicaban era hijo biológico de Jim para que éste los destruya y cada quien siga por su camino, es más, él mismo llamaría a servicios sociales pero antes le debía una disculpa a Jim, no quería que se haga a la idea de que era un ingrato – se puede saber qué demonios estás haciendo – preguntó Jim al entrar a la alcoba 20 minutos después de que ordenara al crío a subir, mirando todas los papeles sobre la mesa y su ropa vieja doblada y sus calzados ordenador en fila en bolsas de basura
- Preparo mis cosas para marcharme – contesto y se apuro a agregar – es lo mejor para los dos – dijo
- ¿Para los dos?, o para tu trasero – contestó Jim poniendo las manos en jarra sobre su cintura mientras la cara de Blair se incendiaba ante la sola idea de lo que su padre estaba sugiriendo, así que decidió jugar al universitario maduro
- Jim yo, realmente lo siento pero tú no me dejaste otra opción – y fue basta, aquellas palabras eran la invitación al desastre, Jim maniobró sobre el muchacho y sin saber exactamente como, Blair término sobre sus rodillas, mientras sus grandes y largas manos le bajaron la ropa de un tirón para apuro y vergüenza de Blair quien se puso rojo como un tomate y empezó a forcejear para liberarse – JIIIIM PERO QUEEE, QUE HAAACES DÉJAMEEE, DÉJAME SUEEELTA PERVERTIDO – no se le ocurrió mejor cosa que decir
- PLAAAFFF – cayó el primer golpe de todos calcándose la mano de Jim en el trasero
- AAAAHHHUUUU – gritó a voz en cuello, aquello dolió de veras, pero no tuvo tiempo de decir nada más o preguntar algo, su padre empezó a azotar su trasero con la mano abierta
- Plaf plaf plaf PLAF PLAF PLAF plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf – le dio una ráfaga aguda de manotazos dejando rojo el trasero mientras Blair se retorcía y mordía su queja, procurando ser valiente pero empezando a transpirar – plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf
- Auuu auuuu auuu ayyy ya yaaa YAAAA YAA JIIIM... JIIIM – pero Jim ni caso, en todo caso volvió a lo suyo, pero después de cada tanda preguntaba
- plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf…. ¿TENÍAS PERMISO PARA SALIR DE CASA?
- BUAAAA BUAAA YAAA AUUU WEEEUUU JUUU – a Blair solo le salían balbuceos
- plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf – los manotazos siguieron – ¿TENÍAS PERMISO PARA SALIR DE CASA? – pregunto nuevamente y seguiría haciéndolo hasta que responda sin importarle que Blair forcejeé por proteger sus nalgas
- Auuuu YYAAA, SUEELTA, SUEELTA MALDITO CABRON – mala idea
- Plaf plaf PLAF PLAF PLAF plaf plaf plaf PLAF PLAF PLAF PLAF – Jim subió la apuesta – BLAIR TE ESTOY PREGUNTANDO, TENÍAS PERMISO PARA SALIR DE CASA? – esta vez incorporando al crío esperando que responda
- NOOO, NOOO – respondió creyendo que se salvaba de la paliza, pero no, su padre lo volvió a acomodar pero esta vez sujetando su manos por detrás – PERO NO TENIA AUUU YEU YEU YEU PORQUE PEDIRTE PERMIIISO… YO SOOOY UNI… AHHHJJJ –
- PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF – era evidente que aquello era una mala respuesta
- BAAAASTA BASSSTA DUEELE DUEEELE
- plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf ¿TENÍAS PERMISO PARA SALIR DE CASA? – volvió a preguntar mientras Blair se movía como una culebra en su regazo
- NOOO, YA TE HE DICHO QUE NOOO – chillaba escupiendo ya sus pulmones, Jim estaba asando su trasero, aun faltaba mucho para domar al potro
- plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf ¿TENÍAS PERMISO PARA SALIR DE CASA?
- NOOO, NOOO nooo nooo AARDE, AUUU – empezó a toser y a patear sus pantalones lejos de todo
- plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf ¿TENÍAS PERMISO PARA SALIR DE CASA?
- NO PA...PÁ, NO… NO TE noo no teníiia per per PERMMMII... MISO – por fin completo la frase por fin y por fin Jim paro los azotes y lo llevó de la oreja a una esquina
- Tiempo fuera hijo – indicó – manos en la cabeza y nada de moverse
Agrego
por si acaso mientras el pobre mocoso iba comiendo sus mocos en cada gemido, le
dolía horrores su cuerpo y que decir su trasero, pero no se atrevió a moverse
aun cuando su padre hacía ruido tras suyo y es que Jim no abandonó la estancia,
se quedó ahí a acomodar la ropa de su hijo y finalmente a escribir una larga
lista de reglas para él con las futuras consecuencias, hasta que finalmente
Blair oyó un singular plop plop plop que no sabía de qué se trataba hasta que
Jim lo jalo del brazo y sujetó sus muñecas
- NO; NOOO, NOO POR FAVOOR, POR FAVOR ME VOY A PORTAR BIIIEEENNN – empezó a prometer todo con tal de librarse de aquello mientras el miedo lo cogía apretando el trasero – NUNCA MÁS VOY A DESODECEEEERTE, NO VOY AAA MIRAR NI AAA LA LUUUNA – gritaba atropelladamente mientras su padre subía el ruedo de la camisa de Blair para evitar que algo se interponga entre la piel de su hijo y el cinturón
- NO ESTAMOS HABLANDO DE LO QUE HARÁS, SINO DE LO QUE HICISTE – gritó Jim alzando el cinto con intención de impactarlo donde ya saben
- PERO ME VA A DOLEEER Papaa PAAPAAA – gritó sin darse cuenta que empezó a llamarlo papá de nuevo al ver a Jim blandir su grueso cinturón en la mano, estaba más que clara cuál era su intención
- ESA ES LA IDEA ZAA ZAAS ZAASS – cayeron las tres primeras en la corona de sus nalgas haciendo que él muchacho se retuerza y jale hacia abajo con el afán de huir de los azotes, aquella había dolido como ninguna cosa que pueda comparar en su corta vida – TE DIJE BIEN CLARITO ESTA MAÑANA QUE SI TU HACÍAS ALGUNA TONTERÍA – por fin se dignó a hablar – YO IBA A DARTE DE NALGADAS COMO A UN CRÍO Y LUEGO UNA PALIZA COMO A UN ADOLESCENTE Y ESO ES LO QUE ESTOY HACIENDO Y ESO ES LO QUE PASARÁ CADA QUE ME DESOBEDEZCAS – le informó con voz regia y muy enojado – ZAS ZAS zass zaz ZAAS ZAAS zas zas….
Y
con eso inauguró su primera paliza oficial de padre, dándole 16 cintazos para
que a Blair no se le olvide obedecer a papá; está demás decir que luego de
aquello Jim Ellison abrazo a su hijo como nunca antes en el vida, lo que era
muy cierto, y disfruto muchísimo, porque recién podía tocarlo y mimarlo como
quería, diablos, solo que le hubiera gustado que sean otras las circunstancias
para disfrutar de aquello, sobre todo después de tres meses de convivencias y
lo arrulló, lo lleno de beso y apretó a su pecho hasta que dejo de llorar
mientras el mocoso hacia mil promesas mojando y manchando de mocos la camisa de
su padre.
Blair y Jim me encanta aunque no e visto la serie me gusta e buscado por todos lados para leer todas las versiones así que amiga me haces una historia con este padre e hijo jajjja
ResponderEliminarLinda tanto tiempo que no leía de Blair!!!
ResponderEliminarMe gusto todo menos que sea un unico capi, cuando te quedo tan bien.
Gloria
Interesante la historia pobre chico el solo quería recuperar sus apuntes :(
ResponderEliminarQUE BONITS HISTORIA ME HA GUSTADO CAPTASTE BIEN LA PERSONALIDAD DE BLAIR Y DE JIM, NUNCA HE VISTO LA SERIE, PERO ME ENCANTAN TODAS LAS VERSIONES QUE HAN ESCRITO DE EL CHICO AUNQUE YO SENTÍ PENA POR CUANDO LE DIERON CON LA CORREA, PERO BUENO FUERON GANADOS A PULSO LOS CUERAZOS Y VAYA VOCABULARIO QUE APRENDIÓ PARA SER UN GENIO MUY ORIGINAL, Y TIENES RAZÓN LAS MALAS PALABRAS ES LO QUE MÁS FÁCIL SE PEGAN, SABES A MI ME GUSTA QUE BLAIR LLAME A JIM JEFE, ASÍ LO LEÍ EN OTRAS VERSIONES, PERO PAPÁ ME PARECIÓ MUY TIERNO. LINDO LA RELACIÓN DE PADRE-HIJO GENIAL TE HA QUEDADO, TE FELICITO HAS EVOLUCIONADO, EMPEZASTE CON ORIGINALES Y AHORA ESCRIBES DE SERIES Y HASTA DE SUPERHEROES TODO LO QUE ESCRIBES SE TE DA BIEN...
ResponderEliminarMarambraaa me urgía tener cuenta porque te quería pedir que hagas más capiiis de ellos,,,
ResponderEliminarSoy mega fan de Blair y más si lo jun tan con Neal!!!!
Peero este capi me encantó muchooooo!!!
uuff se llevó una muy buena nuestro niño genio pero papá se lo prometió lue4go no puede decir que no cumple con sus promesas jejeje!!!
porfis posfis porfiiis regalanos más capis de esta historia!!!
Holaaaa. Me encantóooooo. Pobre Blair, tenía que ser el cinturón???
ResponderEliminarQuiero más capítulos porfissss.
Graciela