jueves, 4 de mayo de 2017

Tonino: Cap 18; Autora Marambra

Tonino
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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 4 de Mayo del 2017
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Capitulo 18
La lente del horror
Autora: Marambra

  • Que hermosas fotos conservas papá

La voz de mi hija me despertó de mi somnolencia, esta mañana Anja esta hojeando el álbum familiar de fotos de su infancia, sentada aquí a mi lado en el sofá; estamos solos ella y yo, mi hermana Laura y Moritz fueron a comprar el vestido de novia para Romina, están ultimando los detalles para el gran evento y la verdad estoy muy entusiasmado por aquello, yo ya entregue en matrimonio a mis tres hijos así que sé muy bien de las emociones esas que a uno como padre lo invaden… nervios, ansias, estrés, nostalgia, amor, miedo incluso... en fin, pero les decía, estoy solo con mi hija,  Tonino y su esposa Lena llevaron al bebé a su vacuna, le toca la segunda dosis de no sé qué  y estoy seguro que esta noche tendremos serenata porque cada que lo vacunan el pobrecito lo pasa muy mal dolorido de la pierna y con algo de fiebre y no para de llorar, Oliver con su esposa Fresia se fueron al cine con todas las niñas y al decir eso me refiero a mis 7 nietas, las cuatro niñas de mi Anja y las trillizas de Oli, pero no fueron solos con una tropa tan elaborada, los acompaño Börj el esposo de Anja a quien quiero como si fuera mi propio hijo, es que es un hombre muy bondadoso con un corazón de oro… tranquilo, educado, trabajador, no bebe en exceso, es divertido y siempre está pendiente de mi hija y de mis princesitas… ¿qué más puedo pedir para mi hija?, pues nada ¿no?.
Ella y yo nos quedamos en casa porque anoche me puse muy mal, me pegue un resfriado de esos demoniacos y la noche previa tuve bastante fiebre, sin duda me agarro de cortito un catarro descomunal creo que después de unos 20 años, siempre tuve la salud de hierro, pero los catarros son mi peste, siempre lo fueron desde que era niño, así que ella decidió venir a cuidarme y a mimarme a casa y pues aquí estamos y mientras yo miraba la tela Anja  preparo una exquisita tarta de nueces con relleno de crema pastelera muy suave y en el punto mismo donde el dulce es apetecible y no empalagoso y debo confesar que lo disfruté en vuestro nombre, mientras ella disimuladamente hurgaba mis cosas buscando algo… algún secreto importante dice ella.. jajajaj… como si escondiera algo muy valioso en medio de todo lo que hay en mi habitación.
Pero no se equivocó,  todo lo que tengo en mi poder son cosas valiosísimas para mi, verdaderas joyas que valen más que mil diamantes y que mis hijos ya conocen, son esas cosas que todos los padres guardamos como un tesoro, interminables cartas a Papa Noel de cuando empezaron a escribir, dibujos de una familia feliz donde me han retratado de color verde y por supuesto fotos de su infancia y adolescencia… en realidad de toda su vida, de los pequeños momentos cotidianos como de los grandes eventos  que me han llenado de orgullo y emoción como fueron el nacimiento de todas mis nietas y mi hermoso principito equiparable a cuando recibieron sus títulos en la universidad o cuando se desposaron…

  • Realmente son muy lindas fotos – siguió diciendo ella a la hora del almuerzo en una pausa en la sobremesa – ¡OH!... por Dios una foto de ¡mamá! – hablo emocionada con los ojos llenos de lágrimas, han pasado tantos años y aun llora por su madre,  a decir verdad Anja sufrió mucho con su fallecimiento y creo que de no haber sido por mi hermana Laura mi hija quizás no lo hubiese superado
  • ¿A  ver? – dijo de pronto Oliver, acaban de alistar a mis nietas para almorzar y salir al cine cuando oyó a mi hija comentar aquello, así que se apuro a entrar para curiosear lo que mi hija tenía entre manos – hola papá – me saluda como siempre a ingresar a mi alcoba

Y como siempre me dio un beso en la mejilla pese a mi resfrío y como es de esperar se ha puesto de cotilla con Anja mientras disfrutan del trozo de tarta que mi hija trajo extra para mí y como es costumbre cada que se juntan ambos empezaron a reír a carcajadas mirando sus propias fotos, las fotos de sus primeros años de vida, lo sé porque el álbum esta etiquetado con el título de “mis primeros pasos”; cada uno de ellos tiene su propio álbum el de Anja es de color malva y el de Oliver es verde pastel, mi Tonino también tiene uno de color azul marino, él lo escogió, obviamente su álbum tiene muy escasas fotos y no son como las de sus hermanos de cuando aprendieron a caminar, gatear, comer, o jugar en la bañera, porque las fotos de Tonino de “sus primeros pasos”, tienen otro contexto y más que mostrar fotos de sus primeras experiencias como bebé como casi todos los padres tenemos en el baúl de los recuerdos.
Las fotos de mi Tonino son más bien testimonios de que nada estaba perdido todavía, es decir que su capacidad de sonreír y relacionarse espontáneamente pese a su tremenda desconfianza, me hizo pensar que podía seguir adelante, en resumen son fotos que muestran los primeros momentos de felicidad que experimento en mi hogar aun cuando todavía  no era oficialmente mi hijo… a partir de ahí se ha creado un paso a paso como el resto, pero me ha costado mucho que se deje fotografiar, es más las primeras fotos suyas son todas capturas de soslayo, es decir cuando no me veía, es que Tonino no se dejaba tomar fotos, nunca quiso posar para mí ni para nadie aquella época y tardamos lo nuestro para lograr que se relaje completamente frente a una cámara; tiempo después supe la razón… cuando la investigación sobre la trata de niños siguió avanzando y yo encabezaba aquella labor de la que luego fui retirado por pedido expreso de la defensa al juez, argumentando conflicto de intereses indicando que yo no manejaba una investigación imparcial pues tenía intereses personales que no me dejaban ser objetivo, cuando se enteraron que había adoptado a Tonino, cosa que si bien me saco de la investigación directa, no me aparto del camino e hice mi propia pesquisa comparando mi trabajo con lo que realizaban mis compañeros que en parte no se cerraron a las órdenes superiores, sino que decidieron coger las cosas que yo les ofrecía, después de todo Tonino estaba en mis manos y abrir sus recuerdos fue abrir la caja de Pandora y aunque tenía que aplacar aquellos traumas con el psicólogo y lidiar con el disturbio de sus emociones, la información obtenida no iba a quedarse en un registro de hospital, iba a servir para fundir en la cárcel a toda esa red de mafiosos.
Pero como les contaba, Tonino tenía miedo a las cámaras fotográficas o cámaras de video y había una razón poderosa para aquello, o mejor dicho razones para eso, razones que fueron fermentando por un año entero; el año previo a que el Gato se hiciera cargo del nido, e hubo otro hombre al mando, un tal Andrei, un ser ruin y enfermo que disfrutaba con el dolor ajeno y una de sus actividades favoritas por mucho era dar un escarmiento a los niños que no cumplían con la “renta”, dicho escarmiento consistía en hacer desnudar a los pequeños que no habían alcanzado la cuota de robos y los hacía parar en medio del patio de unas de las tantas casas abandonadas a las que llevaban inicialmente a los chicos, los mojaba con agua fría a chorro expulsado por una  manguera hasta que los chicos no dejaban de gritar que les hacía frío y apenas decían aquello, él entraba en lo que llamaba la fase de calentamiento y era cuando les propinaba una paliza que solo paraba cuando los chicos se orinaban encima solo por el mero placer de volver a mojarlos y todo esto mientras eran filmados y retratados, pues al lado de este infeliz que menos mal esta pudriéndose en la cárcel ya que está condenado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional, obraba otro sujeto como su mano derecha, un hombre al que nunca pudimos identificar o mejor dicho nunca pude identificar porque el muy desgraciado sabia como limpiar sus huellas, usaba guantes y una máscara y jamás hablaba delante de los pequeños raptados, así que los niños no supieron reconocerlo ni siquiera por audio y la policía hasta donde yo sé, no logro dar con su paradero.
Desgraciadamente Tonino fue una de sus víctimas apenas fue sacado del orfanato, el infeliz me lo había golpeado hasta romperle las costillas y hacerle un tajo en la cabeza que nunca fue atendido por un médico, como recuerdo de aquello Tonino tenía una horripilante cicatriz en la cabeza de aproximadamente 10 cm de largo y tan gruesa como un dedo que obviamente resaltaba con el pelo corto, una de las razones por las que Tonino no quería cortarse el cabello y menos mal Gerhard reconstruyo con un poco de anestesia local removiendo la horrible cicatriz y haciendo una sutura intradérmica y usando corticoides para evitar que la nueva herida cicatrice monstruosa como la previa, apenas Tonino empezó a confiar en él y en sus actos, cosa que costo más o menos como un año en efectuarse, cuando Tonino cumplió un año de vivir conmigo…
Pero como les estaba contando, Tonino no quería ver una cámara fotográfica y creo que muchos de esos niños rescatados hoy hombres deben tener si no es un conflicto un sinsabor amargo en la boca cada que tienen que posar para una cámara fotográfica, y cualquiera en su lugar, de ser yo la victima tampoco quisiera que me tomen fotos posando porque luego de maltratarlos este famoso Andrei y su cómplice, hacían posar a los niños para mostrar sus heridas  y luego revelaban las fotos y las pegaban en el mural de la vergüenza que así denominaron aquella pared de color indeterminado de lo vieja que era la pintura, en la que hallamos cientos y cientos de fotos de los niños retratados en los momentos más desesperantes de su dolor y su miedo,  de mi hijo habían como 70 fotografías que muestran a mi hijo semiinconsciente por el dolor sufrido... son unas imágenes tan crudas que aun ahora tengo que cerrar los párpados para borrar el recuerdo de lo que mis ojos vieron y me impactaron en lo más hondo de mi ser… como policía toca ver muchas cosas feas, extrañas, desquiciadas; muestra clara de lo enajenada que llega a ser la gente en su maldad, pero cuando de todas estas cosas los protagonistas son niños, el asco, la rabia, el enojo golpea tu ser como un puñetazo justo en la boca del estómago y debo confesar que una vez concluida la investigación solicite las fotos de Tonino a través de un juez para quemarlas, no quería que aquellas dantescas fotografías estén guardadas en una caja de archivo por muy evidencia que fuera o por muy resguardo que tenga sobre todo sabiendo que en cualquier momento puedan ser objeto de miradas curiosas aun cuando esas miradas tengan propósitos investigativos, era lo mínimo que podía hacer por el pasado de mi hijo, casi lo único que tenía en mis manos para preservar su intimidad.
Es que no creo que en el mundo exista un solo padre que se digne como tal y le guste ver las fotos de sus hijos sin ropas, llenos de moretones y hematomas en diferentes estados de evolución,  con los ojos cerrados de los golpes recibidos o el llanto sin cesar, la nariz chorreando de mocos y sangre, horribles raspones en todo el cuerpo u objetos incrustados en la piel como agujas, vidrios o arena, barro o mierda encima incluso, como fueron algunas de las imagines no de exclusividad para mi Tonino solamente, sino de todos los niños que fueron víctimas de aquella organización y compartieron la desgracias de ser huérfanos y caer en manos ruines…

  • ¿Y eso que es? – preguntó Oliver abriendo un pequeño sobre manila que me había olvidado en medio de alguno de los álbumes de fotos – ¡OH! DIOS MÍO… dime que no es Tonino papá – grito de pronto haciendo a un lado la cara mostrándome lo que tiene en las manos…
  • No hijo, no es Tonino – le respondí tras estudiar detenidamente la imagen que tenía frente a mis ojos, aunque por un momento dude, dude porque estaba recordando aquella época dura que toco vivir – es Moritz – agregé mirando la fotografía, me había olvidado por completo de aquello, yo sinceramente creí que se lo había devuelto a mi hermana, pero al parecer se quedo dentro del sobre con el informe médico
  • ¿Moritz? – pregunto Oliver como no creyendo lo que sus ojos veian o lo que le respondó, sin dejar de mirar la foto, es mas acercándola a su rostro como tratando de entrarse dentro de ella; la verdad a mi no me gusta ver esa fotografía, es la muestra trágica de que los malos hábitos se pegan más rápidos que los buenos en las personas y en cuanto la tenga en mis manos la haré desaparecer, no quiero traer dolorosos recuerdos a Moritz, menos a mi hermana… ella no lo vio nunca en ese estado, pero fue la razón por la que decidió adoptarlo
  • ¿A ver? – dijo Anja quitándole la fotografía de las manos y tras estudiarla un largo rato agrega – Es de cuando… ¿cuando esos chicos lo golpearon en el colegio para intimidar a Tonino? – me pregunta
  • Si hija, es de aquel entonces – …y mi mente y la de ellos divagaron sin querer en el pasado

Fue justo dos meses después de que Oliver fuera castigado en la dirección por mala conducta… bueno, eso es lo que decía el papel que me enviaron, un formulario de mala conducta, tras aquello Oliver y Tonino se hicieron inseparables en casa, compartían casi todo lo que se puede compartir entre hermanos con la diferencia de edad que ambos tenían, la única cosa que no mezclaron fueron los amigos, cada cual permaneció con su grupo etario y del saludo casual no pasaron, por tanto no hacían nada juntos cuando de amigos se trataba y era lógico porque Oliver estaba en la época del pololeo, de salir con chicas de su edad, ir a fiestas y cosas por el estilo, en cambio Tonino andaba en la época del cambio corporal, la ambivalencia entre la niñez y la pubertad con sus bemoles emocionales que obviamente tras su amarga experiencia vivida en las calles eran más intensas que en un niño con una infancia normal, bemoles que iban del enojo sin sentido a la alegría desbordante, del aburrimiento total a la desquiciada violencia  que cada vez era menos para suerte mía, lo que si tengo que destacar, es que aquella época menos mal no volvió a sentirse triste una buena y larga temporada lo que ayudo a que suba de peso, gane estatura y mejore su rendimiento académico.
No había duda, aquel evento marco un antes y un después en la vida de ambos, la confianza mutua creció de tal manera que cualquiera diría que realmente eran hermanos de sangre a tal punto que jamás de vendían entre ellos y tenían un pacto de silencio en cuanto a problemas se trataba que era digno de admirar, pacto que Oliver se vio obligado a romper cuando entre los involucrados salió mal parado Moritz, razón que llevo a mi hermana a solicitar su tutela y adopción posterior.
Aquel día, mis hijos como de costumbre fueron al colegio, era jueves santo y estábamos a puertas de un largo puente por el feriado de pascua, mi hermana y yo habíamos planeado con bastante antelación viajar al lago justo para estas fecha, íbamos a su casa, así que entre ambos empezamos a cubrir todos los detalles, incluso los billetes de tren los compramos con antelación y yo había solicitado a un compañero cubra mi turno para hacer aquel viaje; así que solo quedaba confirmar a los chicos del evento, es que no habíamos querido decirles nada por si ocurría algún imprevisto por lo general en relación a mi trabajo, aquel entonces estábamos en medio de los arrestos a los sospechosos por el caso de trata de niños, así que siempre podía ocurrir algo que me impida viajar, pero en vista del feriado muchas cosas quedaron congeladas desde la fiscalía a la portería, así que noche antes había hablado con los tres y quedamos en que yo iría al colegio a recogerlos sobre las 10 de la mañana a Tonino y Oliver, ya que Anja no tenía clases, ella iba a quedarse en casa a ultimar los detalles del viaje con Laura.
Ahora que lo recuerdo incluso estuve tentado a solicitar un permiso para los dos chicos y ganar esa media mañana, madrugando para llegar antes del miedo día a Voralberg pero Oliver se opuso porque estaba haciendo el cursillo de confirmación y esa mañana todos los cursantes debían ayudar con la preparación de la procesión de las imágenes del colegio, además él iba a hacer una de las lecturas de la misa después del primer recreo, por o que no podía faltarse, debo confesar que con disgusto disimulado tuve que aceptar aquello, es que yo casi contaba con que ambos salten de alegría ante la idea de faltar del colegio, ahora me doy cuenta que Tonino no se opuso a la idea de su  hermano, es mas parecía que aquello le llegaba como anillo al dedo.
A la mañana siguiente todos tomamos los caminos que nos correspondían, yo fui a la comisaria a dar un vistazo a mi compañero, el que iba a cubrirme, le deje el número de teléfono de mi hermana por si acaso y tenga que volverme antes de lo requerido, es que si bien la fiscalía y todo el resto aparentemente harían uso de su derecho al feriado, nosotros como cuerpo policial teníamos que estar mucho más atentos a los movimientos de los implicados con la red esa que robaba niños, porque era más que seguro que aprovecharían la supuesta guardia baja para desaparecer de Austria, así que no podía desconectarme del todo de mi trabajo,; aun asi con todo aquello a  mis espadas lleve a mis hijos  al colegio a pasar clases supuestamente los primeros dos periodos, así que hasta las 9 de la mañana no paso nada inusual, excepto que Tonino desapareció en el recreo… nadie lo había visto, no había por ninguna parte y lo peor nadie en el colegio se percato, porque aquel día las clases fueron irregulares y al ser un colegio católico pues como dijo Oliver estaban más inmersos en los preparativos de la procesión que cada año realizaban los curas del establecimiento… ni mi hijo se percato que su hermano había desaparecido hasta que fue demasiado tarde y me llamaron al móvil desde el hospital… Moritz estaba ingresado a terapia intensiva y Tonino tenía un brazo quebrado.

Recuerdo que respondí al llamado con bastante aprehensión apenas vi el número de Gerhard en la pantalla, como una premoción ahora lo sé, pero ese momento sacudí mi cabeza y me dije que no tenía porque ser algo malo, después de todo Gerhard tiene un hermano en Voralberg y alguna que otra vez envió correo o algún presente conmigo o con Laura así que creí que quizás se trataba de aquello, pero apenas respondí la voz de Gerhard me lo dijo todo y mi  mundo se cayó cuando me dijo que Tonino estaba en el hospital y que tenía una fractura en el brazo… no supe que hacer, momentáneamente me quede aturdido cuando me dijo que estaba herido, es que esa palabra en mi área la mayor parte de las veces significa que alguien recibió el impacto de una bala, menos mal me supe sobre poner y salí rajando de la comisaria camino al hospital donde oí a mi hijo gritar su alma detrás de una puerta sin que nadie me deje entrar.


4 comentarios:

  1. Un capi muy impactante, como casi todos desde que esta historia me atrapó, me duele pensar en que lo que es ficción para mi es realidad para alguien más e imagino que en tu profesión te habra tocado ver tantas cosas acabras como a este poli.
    Pero siguiendo la linea de ficción te voy a decir que fue un acto de total crueldad de tu parte dejarlo tan inconcluso y con tanto suspenso.
    Esta vez no pido, ni ruego, ni espero... Directamente demando más. Jeje

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  2. jajajaja Chanyyy te pasas...
    U.u pobre Moritz!!

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  3. Espeluznante real mente espeluznante las cosa que le hacían se que esficion pero luego me siento mal aunque me guste mucho tu historia
    Un beso TERRY

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  4. Me has dejado con la piel de gallina, pero no dista mucho de la realidad, incluso hay realidades mas crueles que salen a diario en las noticias., te felicito Marambra, siempre haces que mi corazón se acelere.
    Pero ahora nos dejaste con mayor angustia, por lo menos a mi.
    Ginebra

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