Père Fouettard 6: No, es No; Autora Marambra, para Pablo

Père Fouettard

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 8 de Enero del 2018. 

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No, es No

De: Marambra
Para: Pablo

• Ya`sta gueno de tirar la cola al chancho… he dicho que NO y no voy a darte libre pa nada – y Pascual se dio la vuelta y dejo a su hijo mayor rebuznando su enojo, según él su padre no era justo con esto
• Pero pa, deje que vaya, si la paga esta buena – José seguía reclamando sin dejar de hacer lo que tenía entre manos

Su padre, él y los rumanitos estaban armando una gran jatata para reemplazar la que había en la hacienda de Rubén en el lado de los potreros antes de traer el nuevo ganado, era un trabajo que solían hacer unos benianos muy entendidos en la materia, pero no habían podido llegar a causa de la riada y Rubén preocupado porque la jatata que tenía el potrero estaba ya en malas condiciones empezó a buscar quien sepa hacerlo, llevándose la sorpresa de que Pascual, uno de sus vaqueros sabía hacer dicho trabajo porque había vivido muchos años en Riberalta y él le había enseñado a su hijo mayor José de 17 años a quien le faltaba apenas 4 meses para terminar el colegio.

• Apuesto que don Arturo no se opondría de ser Jacinto – murmuro cuando su padre se alejo, mirando de reojo a Lorenzo que había venido con Yhanku a echar una mano al negocio
• Puej te equivocás – respondió el mayor de los rumanitos –  Lorenzo se llevo una tunda por dejar el cole e ir a zafra – agrego como si hablara del tiempo mientras Lorenzo le dedico una mirada asesina, ese era un tema tabú en su vida
• ¿En serio? – pregunto curioso José pero Lorenzo prefirió hacerse el loco, en cambio Yhanku no se hizo ningún problema en contestar
• ¡Oh si!, claro que sí, sino pregúntale a don Rubén – respondió comedido entre risas apenas disimuladas mirando a Lorenzo quien se preguntaba porque se reía si su padre también lo había sonado a gusto y peor aun
• Porque no cerrás el pico, bocón – le riño Lorenzo dándole un golpe en las costillas – además no se dé que te reís si a ti también te ha sobado y peor que a mi
• Ya, pero no delante de don Rubén
• Maldito…
• Jaja jaja jaa jaaja

Y un ataque de risa los hizo preso a ambos, pero luego de aquello distraídos con el trabajo y la pausa de la comida, Lorenzo recordó todo lo sucedido pensando en ello minuciosamente y no le pareció tan divertido como hace un momento, sino le supo tan aterrador como cuando ocurrió.

Aquel entonces Lorenzo tenía 15 años recién cumplidos, la empresa azucarera había expandido sus instalaciones, abriendo una de sus plantas en Warnes y necesitaba mano de obra de inmediato no importaba la experiencia porque en realidad se expandieron los cañaverales y requerían zafreros de inmediato y ante la escases de mano de obra habían empezado a circular afiches buscando jóvenes que estén dispuestos a trabajar con contrato indefinido, supuestamente con todos los beneficios… muy tentador pero a la larga esclavizante, algo que vio a leguas su tata Arturo y su padrino Rubén.

Por supuesto que aquello pico no solo para los jóvenes sino también para muchos adultos jóvenes desesperados de trabajo, así que no fue raro que a los pocos días hubiera un gran ausentismo escolar sobre todo de los estudiantes de cursos superiores y en las calles, las esquinas y la plaza el tema principal era la paga que daba la zafra, pero no era solo tema de conversación callejera sino también empezó a zumbar como una mala colmena en la mesa de Arturo y es que Lorenzo quería ir a trabajar tentado por la paga.

• Y dicen que la paga es buena – le estaba contando Lorenzo a Yhanku mientras su abuelo les servía el almuerzo – mil pesos – dijo entusiasmado por aquello, pero mil no eran nada para semejante esfuerzo – y estoy deseando entrar a trabajar – agrego y Arturo solo se limito a sentarse a la mesa y oír lo que hablaba su pequeño y tener todas las piezas para dar su opinión
• Pero necesitás un permiso – Yhanku estaba muy enterado del asunto porque el también había averiguado la posibilidad de trabajar en el ingenio pero cuando vio el papel de permiso ni lo intento, sabía que su abuelo no se lo daría
• Si y traje el papel – contesto feliz, sacando el documento poniéndolo en la mesa – ¿me los podés firmar tata? – le pidió extendiendo los papeles hacia su lugar, sabiendo que su abuelo no leía, pero pidiéndole a Yhanku que lo haga – léeselo por favor, así no piensa que le quiero fumar – dijo entusiasmado con una sonrisa brillante y con los ojos como luceros imaginado que su abuelo se sentiría orgulloso por su decisión, sobre todo ahora que necesitaban ese dinero para pagar las cuentas de la cirugía de su madre y cuando su hermano termino de leer, porque eso sí; Arturo no le negó nada desde un inicio, solo se limito a oír para confirmar lo que ya sabía… que aquello era una estafa, se negó – son mil pesos tata, mil pesos al mes y tendremos un seguro – y era claro que el chico no había leído la letras chica de aquel contrato
• Y según tu, si yo firmara, a ¿qué hora pensás ir al colegio si esta vaina es todo el día? – pregunto Arturo sin dejar de comer, mirando el papel sobre la mesa y Lorenzo se removió en su sitio, eso significaba que tenía que dejarla escuela, y aun faltaban dos meses, tendría que hablar con sus profesores para adelantar exámenes, aunque no creía eso sea posible, a ninguno de sus compañeros se les permitió tal lujo – Lorenzo a ¿qué hora pensás que vas a ir al colegio? – pregunto su abuelo de nuevo tras el silencio del chico y el semblante que puso, todo serio, ja… el mocoso sabía que ambas cosas no eran compatibles
• Pues… tendríamos que ir a la escuela tata, pa que usté hable con los profes yyyy y pues adelantar los exámenes – dijo al final sin querer mirarlo, sin animarse a decir que tenía que dejar el cole… algo en su corazón y en los ojos de su abuelo le dijo que no había trato
• Y si no te quieren adelantar los exámenes, porque aun falta como dos meses y algo más, ¿qué pensás hacer? – pregunto con aspereza mirando fijamente a Lorenzo, cuando quería Arturo podía ser un intimidante
• Tendría que dejar la escuela – contesto incomodo con aquello, ya no le gustaba el rumbo de la conversación
• Pues entonces mi respuesta es NO
• Pero TAAATA – quiso defender su postura en esto, el trabajo convenía a toda la familia – si no es pá mi no más, es pá todos, además todos mis compañeros ya se han presentado soy el único que no ha asistido al ingenio – dijo con bastante voluntad parándose enojado, tratando de controlar su voz – además estoy cansao de ser la comidilla de mi curso, si solo falta que lleve bordado a mis clases
• Pues si hace falta que llevés agujas y aprendás a zurcir, que así sea – escupió su padre con el enojo empezando a bullir en las venas – porque usted no me va a trabajar y punto… menos a la zafra, eso no es trabajo, ahora ¡siéntese! – sentencio su padre parándose de golpe ante el capricho del chico que siguió de pie retador hasta que su padre hizo un amago de acercarse
• Ya me siento tata, me siento – reculó Lorenzo sobre sus pasos tomando asiento como un rayo – no estoy siendo maldriao, mire ya me estoy sentando, pero debe darme una razón de peso pa que se niegue – le dijo sin dejar de mirarlo a los ojos – me lo debe – agrego
• Porque no quiero que terminés como yo – respondió sin pensarlo su padre – como un peón que hasta mierdas tiene que hurgar pa ganarse el pan, ¿safistecho? – pregunto tras mirarlo sobre el hombro antes de sentarse, esperando que eso sea todo – ahora por favor sentáte bien, cogé tu cuchara que se te enfría el cheruje y dejáme comer tranquilo que quiero pegar una cabeceada antes de tener que volver al trabajo – agrego con tal aspereza y amargura en la voz que Yhanku sintió pena de su abuelo, quien ahora mismo estaba trabajando doble jornada por la cirugía de Narda
• Pero no es lo mismo tata
• Pero ¡que mula el pelao y mierda! –  murmuro su padre mirando al cielo y mirando a Yhanku esperando que intervenga, pero Yhanku solo cerro el pico; era claro que Arturo estaba aguantándose de darle un palmetazo y acabar con aquello, pero opto por la diplomacia 
• Es que…
• ¡Carajo! He dicho que NO, Lorenzo… ¡no insistás! que no voy a dar mi brazo a torcer, usté me termina el colegio y ya en vacaciones podés hacer lo que te venga en gana, pero ahora mismo, NO – y el abuelo se cerró en su postura, dando por terminada la tertulia al coger de nuevo su cubierto y meterse en la boca un trozo de pato asado que le supo a hiel, esperando que aquel gesto sea suficiente para su hijo; bueno lo fue para Yhanku que se acomodo de nuevo en su silla lo mejor sentado y miro su plato y se dispuso a comer, rogando que Lorenzo haga lo mismo, pero no, Lorenzo salto como un peto de bravo
• ¡ES QUE YO QUIERO IR A TRABAJAR!... ¿POR QUÉ NO LO ENTENDÉS? – grito en un momento dado, no le gusto la reteada que le estaba dando su tata y se paró de la mesa enojado con la negativa de Arturo
• CRAACK ¡SILENCIO! – Arturo dio un manotazo a la mesa que hizo volar su propio plato y Lorenzo no sabía qué hacer si sentarse o pararse o huir, se pego un susto de muerte y todo quedo en silencio por un largo minuto tras el cual Arturo se calmo – ¡comé más bien! – ordeno aun en voz alta pero ya sin gritar, medio parado todavía esperando que Lorenzo se siente – andas culipandeando (moverse indeciso) perdiendo tu tiempo – dijo al final cuando el muchacho tras mirar a Yhanku se sentó de nuevo, que bueno que Jacinto no estaba en casa ese día sino se hubiera llevado la peor vergüenza de su vida, es que ambos andaban a la competencia de cual se portaba mejor y no se hacia retear o huasquear con el tata y seguro perdía puntos

Cuando el almuerzo concluyo en un espeso silencio e incomodidad tras el cual Arturo volvió al trabajo dejando a los chicos solos como siempre sin siquiera descansar Lorenzo se puso a llorar en silencio apenas su abuelo se marcho conmoviendo a Yhanku, porque el chico se tiro a su cama mirando la vieja pared descascarada y no quiso salir a la acequia a bañare con el mayor, ese día no tenían ninguna obligación que cumplir en casa porque todo estaba hecho y no podían ir a visitar a su madre al hospital porque las visitas empezaban recién a las 6 de la tarde.

• Anda Renzo, lamentándote no conseguís nada – le dijo Yhanku sentándose a su lado poniendo su mano en el hombro de su hermano a manera de apoyo
• ¿Y vos crees que no lo sé? – respondió mirándolo con los ojos rojos limpiándose los rastros de llanto – no sé porque no quiere que trabaje si ahora mismo tenemos que pagar lo de la mamá

Y con eso embauco a Yhanku quien de buena fe firmo el consentimiento a nombre de su tata, sin darse cuenta de lo aquello implicaba… cometer un fraude que podía meterlo en serios problemas legales no solo con la empresa, sino con el colegio porque Yhanku redacto otra nota para el colegio pidiendo permiso para saltarse las clases pero pudiendo entregar tareas y dar exámenes los fines de semana y claro el colegio accedió por conocer la situación de los muchachos y porque el que iba a recoger las tareas de Lorenzo era Yhanku el mas responsable de los hermanos, toda una garantía.

Y de lo único que ambos tenían que cuidarse era de que su padre sospeche, así que a diario se levantaban como todas la mañanas y se vestían como siempre para ir a la escuela, cogían el bus juntos pero Lorenzo se bajaba antes de llegar al cole, menos mal Jacinto no iba en el mismo turno sino, hace cuanto que su tata se hubiera enterado de lo que hacía y que Yhanku callaba, de ahí Renzo tomaba el bus de la empresa e iba de un lado a otro llevando carga, menos mal no lo metieron a la zafra, zafra… sino a limpiar los camiones y llevar mandados, sino no hubiera podido sostener su mentira por largo tiempo, pasando así un mes, un mes que dejo la escuela, pero como no se puede tapar el sol con un dedo, la verdad salió a la luz antes de lo previsto; el profesor Gallardo mando llamar a Rubén pues sus señas figuraban en la inscripción del colegio porque estaba pagando las pensiones de los tres chicos, él y Clara habían querido ponerlo en el mismo colegio que iba Logan y lo lograron, no era un colegio particular sino uno de convenio católico manejado por religiosos que procuraban excelentes maestros a cambio de un bono que se sumaba al pago estatal, bono que salía de las pensiones de los alumnos, un pago simbólico muy mínimo que ellos querían gastar en los chicos y que Artuto a regañadientes acepto por ser muy orgulloso y como él era quien inscribió a los chicos y entendía la dinámica escolar, acudía la mayor parte de las veces a sus reuniones escolares junto con Clara y por eso es que lo habían mandado llamar, pues no podían dar con Arturo.

• Siento mucho que Lorenzo tuviera que dejar el colegio por ir a trabajar a la zafra – le dijo el profesor, muy amigo de Rubén y que fue profesor de Logan años antes – no sabía que estaban con tantos problemas económicos y es una pena que el muchacho se perjudique – agrego con la confianza de siempre, sabía que habían operado recientemente a la madre de Lorenzo y que estuvo largo tiempo delicada, así que el profesor Gallardo creyó sinceramente que era por las cuentas medicas
• ¿Cómo? – respondió Rubén enterándose recién de todo y algo enojado porque él se había ofrecido cubrir las cuentas medicas y como siempre Arturo rechazo
• ¿No está enterado? – pregunto sorprendido – Lorenzo ha faltado por un mes, obviamente con permiso pero no se presento a los exámenes y si no lo hace mañana perderá el año
• ¿Puedo ver la hoja de permiso? – pregunto suspicaz porque Arturo ni llorando hubiera mandado a los chicos a la zafra o ¿si?, y el maestro saco la hoja firmada y claro ahí estaba el nombre de Arturo, y no supo decir si era falsa o no, porque quien firmaba la mayor parte del tiempo era Yhanku a pedido del abuelo – voy a hablar con Arturo y ver qué sucede, pero ¿qué se puede hacer para que no pierda el año? – preguntó tras un suspiro, sin mencionar que podía ser patraña de los chicos de Arturo
• Pues por tratarse de ti, mañana que de el examen que corresponde, le envié a Yhanku las tareas porque en eso se quedo, y voy a tomarle yo los exámenes la próxima semana al final de las clases, pero tiene que entregar sus tareas hasta el viernes próximo, sino sus calificaciones bajaran…

Y con esa novedad se fue a casa de Arturo teniendo que darle el coleron, enojando tanto al hombre que aunque hubiera querido Rubén no pudo evitar que les dé una paliza a ambos muchachos apenas cruzaron la puerta, eso sí, no le permitió irse… Arturo quería que los chicos sepan de donde se entero todo, así fue que ambos se llevaron una paliza del tata delante de Rubén, solo que Yhanku nunca le dijo a Lorenzo aquello, y el pobre hasta el día de hoy vivía con la idea de que solo a él su abuelo lo sonó delante de su padrino.

• Y ¿¡Dónde está tu yunta!? ¡ja! RWAS – pregunto Arturo a Yhanku apenas cruzo la puerta soltando un tremendo rebencazo en medio de las flacas piernas desnudas del chico, que llegaba del cole con ropa deportiva, por el calor no se volvió aponer pantalones y regreso como muchos de su clase con los pantalones cortos de deporte pegándose un susto de muerte cuando vio a su abuelo en casa cuando se suponía que regresaría como siempre a la hora de la cena 
• AUUUU ¡TATA! – Yhanku pego un grito de susto y de dolor poniéndose rojo y soltando la vieja mochila y las tareas de Lorenzo para frotarse la picadura y evitar las que seguro llegarían
• Te´cho una pregunta… DONDE RWAS CARAJOS RWAS ESTA RWAS TU RWAS HERMANO RWAS – pregunto punteando las palabras, bravo como el solo y no era para menos, había visto la nota que trajo Rubén del colegio y en ningún momento reconoció saber nada al respecto, pero si supo identificar la letra de Yhanku, y claro como no iban a dudar de aquello si cuando necesitaba permiso para cualquiera, Yhanku redactaba todo y el firmaba al final y por lo visto Yhanku imito su firma, su nombre que era casi lo único que sabía escribir bien
• AUUU ya tatiiita, tatiiiita – chillo Yhanku muerto de vergüenza cuando vio a Rubén parado en el umbral de la puerta sin mover un dedo desconcertando al chico
• RWAS RWAS RWAS Estoy hablando contigo… DONDE ESTA TU HERMANO – volvió a decir mientras el pobre no sabía dónde meterse – Y NO ME DIGÁS QUE EN EL COLE porque ahí no ha ido desde hace UN MES, así que si no querés que te rompa el culo a cimbronazos vas vomitando lo que sabés – lo sentencio
• Peeeerdoooon tatita peeerdooon – se puso a llorar arrepentido dándose cuenta de su error

Fue cuando Rubén puso su mano en el hombro de Arturo apaciguando su enojo en silencio, dándole a Yhanku la oportunidad de explicarse.

• ¿Sabés lo que has hecho? – pregunto después de un largo silencio en el que solo se oían los sollozos de Yhanku – me has engañao, has roto mi confianza y has cometido un delito – mordió su padre las palabras agarrando la mano derecha de Yhanku apretando su muñeca, lo que significaba una sola cosa, su padre le iba a sonar la mano con el trenzadito que acababa de calcarse en el trasero y las piernas
• NOOO taaata nooo – rogo asustado pero de nada sirvió, Arturo con solo una mirada le obligo a abrir la mano y soltó el primer rebencazo de los cinco que quería darle
• RWASSS
• AAAAUUUUUUUUU YAAAAAAAA – grito y Rubén no pudo mas, se lo arrebato de las manos
• Ya Arturo, es suficiente – dijo abrazando al muchacho con fuerza pegando su cara a su pecho para que grite ahí cuanto quiera mientras el pobre no sabía como apaciguar el dolor y la picazón que provoco aquel rebencazo y Arturo tiro el rebenque a un lado, sintiéndose dolido y traicionado
• Lo siiiiento – se disculpo Yhanku haciéndose chiquito
• Lo sé, lo sé – murmuraba Rubén sobándole la espalda y acariciando su cabello, cuando le hubiese gustado darle un beso en la frente pero no creía tener ese derecho asi que se limito a frotarle la espalda y abrazarlo mientras susurraba palabras de consuelo y reproche amigable
• Mi tata no me va a aa aa per perdonaaar – sollozaba –esta braaaavo cooon conmiiigo ags ags

Y Rubén se quedo un buen rato consolándolo, mientras Arturo se sentó en la entrada de la casa esperando al menor, menos mal sin el rebenque en la mano y no porque no lo quiera usar que si lo quería, sino porque al tirarlo lo arrojó sin saber a dónde y el chicotillo quedo en el techo de la vivienda.

Rubén y Yhanku se sentaron a conversar, como siempre Rubén lo reflexiono sobre lo que hizo mal y le reprocho el que no acudan a casa a pedir consejo, molesto por la falta de confianza de Arturo sobre el dinero, después de todo el quería pagar la cuenta de Narda, cuando ya no mas se oyó el grito de Lorenzo, a falta de rebenque bueno quedo el cinturón.

• ¿QUIÉN TE HA DAO PERMISO A TI PÁ IRTE A LA ZAFRA JA? Y DEJAR EL COLEGIO – Arturo apenas vio a su chichilo lo agarro del brazo y sin pena ni gloria hizo circular su cinto, estaba tan enojado que lo único que quería era justicia – ZAS ZAS ZAS – y esos cayeron como barra caliente sobre los muslos tirando del chico a su lado y hacia un tronco que servía de asiento en medio del zaguán
• BUAAA TAAAATA – grito de dolor tirando su mochila con la ropa del trabajo dentro que salió disparada porque él la había abierto para dejarla en el agua y lavarla rápido antes de que llegue su abuelo – DEJE QUE LE EXPLIIIQUE – rogaba cuando adivino las intenciones de su tata mientras Arturo lo colgó sobre sus rodillas, iba a darle una buena paliza y eso llevaría tiempo por lo que no creía que pueda sostenerlo en una sola pierna de montarlo encima, así que decidió sentarse en aquel tronco y castigarlo como a Jacinto
• ¡EXPLICAR QUE! ¡¿COMO ME VIERON LAS PELOTAS CON TU HERMANO?! – chillo el pobre hombre verde de la rabia sonándolo con el cinto – zaas zaass zass ZAAS ZASS ZAAS
• BUAAAAA – lloro Lorenzo apretando el traserito que ahora llevaba tres bandas de un rojo furioso calcados en la piel, algo que hizo que Arturo cambie de opinión y tire el pedazo de cuero con que obro aquello y prefirió plantar su mano en el trasero
• TE DIJE plaf plaf plaf BIEN CLARINGO plaf plaf palf QUE NO TENIAS PERMISO PLAF PLAF PALF PA IR A LA ZAFRA PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF – y una orquesta de manotazos sonó sobre la piel desnuda y no dijo nada mas – plaf plaf palf plaf plaf PLAF PLAF PLAF plaf plaf palf plaf plaf PLAF PLAF PLAF
• Buaaaa AAHHH AUUU BUAA – lloraba avergonzando pues acababa de darse cuenta que no estaba solo sino que ahí estaba su padrino y su hermano mayor, pero aquella vergüenza quedo en segundo plano cuando su padre continua con su tarea y su prioridad es que termine aquello
• PA QUE SEPÁS PLAF plaf plaf VOS  plaf PLAF PLAF NO  plaf plaf PLAF TE MANDÁS PLAF PLAF, SOLO Y SEGUNDO NADIE PLA plaf plaf PLAF, NADIE ME MIENTE PLA plaf plaf PLAF Y ME ENGAÑA PLA plaf plaf PLAF COMO VOS Y TU HERMANO PLA plaf plaf PLAF  LO HAN HECHO PLA plaf plaf PLAF
• BUAAAAAAAAA ABUUUU AUUUU YAAAA – y Lorenzo tras aquello se limito a llorar rendido sobre las rodillas de su padre, sin atreverse a rogar clemencia, sintiéndose culpable por lo que hizo y obligo a hacer a su hermano
• Ya papá Arturo, ya lo ha castigado es suficiente – intervino Rubén y como a Yhanku se lo quito de las manos, subiéndole la ropa rápidamente al pobre de Lorenzo que parecía un pollo remojado que no paraba de llorar muy sentido, pero algo le dolió el corazón de Arturo y abrazo a su hijo con amor y llamo a Yhanku a compartir aquel gesto

Obviamente ambos aceptaron de buena gana el cariño de su tata, porque aquello significaba una sola cosa, que el abuelo los había perdonado y podían enderezar las cosas; después de eso, de unos minutos de intimo cariño y palabras de disculpa, justificación, perdón y oportunidad, los chicos se fueron a bañar y comer mientras Rubén tuvo unas últimas palabras con Arturo, ahora si no podría negarse nada con él.

• ¿Se siente bien papá Arturo? – pregunto Rubén al ver a su mentor sentarse derrotado en la vieja tronca donde minutos antes a castigó a Lorenzo, se lo notaba algo abatido
• No tan bien, no me gusta huasquearlos – murmuro – pero me han desobedecido y mentido
• A pues, pero usté debe reconocer que es culpa suya también – le dijo sin amilanarse, Rubén era uno de los pocos hombres que tenía esa libertad de decirle las cosas en su cara
• ¿Mi culpa? – pregunto sorprendido realmente, no se esperaba aquello
• Si… suya, porque por andar de orgulloso y no querer recibir mi ayuda como si yo fuera un extraño, ha preocupado a los chicos innecesariamente con la deuda del hospital – le dijo y eso le cayó a Arturo como un revés, dándose cuenta que la última temporada no hacía más que hablar de eso justamente, de donde sacar dinero para cubrir el pago del hospital –  cuando bien podía aceptar que yo pague la cuenta del quirófano por lo menos si tanto se empeña en eso y no tener que estar partiéndose en quinientos por unos pesos, me siento ofendido – dijo muy serio y Arturo se sitio muy mal – preocupo a los chicos por nada y los obligo a hacer cosas que no debían, acaso no se da cuenta que los chicos no se preocupan por usté y su madre?, deje de ser tan tozudo, y acepte eso de mi parte… es más ahora mismo voy a saldar la cuenta de Narda
• Pero y Clara
• No ponga a Clara como pretexto, ella sabe que no lo hago por Narda sino por usté y los chicos

Y a Arturo no le quedo otra que aceptar aquello aunque como siempre a regañadientes porque si algo tenía como defecto Arturo, era que no le gustaba pedir favores a nadie y menos dinero.

Pablito, espero te haya gustado tu regalo, me gusto escribir de los rumanitos, se que pediste a Illien, pero esta vez no pudo ser, aun así espero que te agrade..

Marambra