viernes, 23 de marzo de 2018

Carrusel: Cap. 9; Autora Nicole

Carrusel
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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 23 de Marzo del 2018.
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Capítulo 9

Autora: Nicole
El padre de Kokimoto había entrado en la habitación de su hijo, lo miro de arriba abajo, lo agarro, por debajo de los brazos, luego lo sentó en la cama y procedió a hablar con él.

  • Muy bien hijo quiero saber por qué razón, el jovencito se ha comportado de esa forma tan grosera delante del señor y de sus amigos – le pregunto todo serio
  • Tú, ya sabes muy bien, mis razones
  • ¿A sí? Y ¿cuáles son sus razones? – al sr. Mishima le gustaba tratar a su hijo con el respeto que se merecía para hacerlo sentir importante
  • No me gustan los médicos, odio que me revisen y me hagan preguntas y luego me manden medicamentos extraños de mal sabor – contesto con el ceño fruncido, obviando lo de las inyecciones – Tú me conoces, pero parece que te encanta verme sufrir, ya que si, no fuera así, no hubieras traído a ese señor
  • ¿Sufrir? No puedo creer que pienses así, si lo único que quiero es verte mejor. Si supieras, el terrible dolor de cabeza que he tenido, por estar pensando en ti, me preocupe tanto al dejarte solo, pensé tantas cosas… ya no me quiero ni acordar
  • No esto no puede ser posible, y encima me lo hechas en cara, pero ¿Qué clase de padre eres eh?
  • Uno que te ama y no le gusta verte enfermo y ahora basta ya con los chantajes y manipulaciones. Vas a ir donde el médico Medsen, te guste o no y más te vale que te comportes sino –  no termino la frase ya que fue interrumpido
  • Sino ¿Qué? – dijo bien gallito
  • Si no, te voy a hacer esto – Mishima agarro bien fuerte a su hijo de la oreja – A mí no me vas a faltar al respeto insolente!
  • Ayyyyy suelta me duele – se quejó el niño
  • No te voy a soltar hasta que obedezcas
  • Ayyyyy me duele déjame
  • No hasta que aceptes ir con el médico
  • Ayyyy está bien, está bien lo que usted diga honorable padre –  entonces su progenitor lo soltó, mientras el niño se sobaba la oreja con su mano
  • Bien hijo, así está mejor. La verdad no quería tratarte así, pero es que estas algo insoportable, bueno ahora quiero que cuando lleguemos a la sala, te disculpes con el señor Medsen y con tus amigos por la actitud que mostraste ¿estamos?
  • Si, de acuerdo – dijo y luego pensó –  ni creas que voy a dejar que me atrapen tan fácilmente, ese médico no sabe con quién está tratando por algo me llaman el “artista del escape” y a ti mi querido padre te aseguro que te irá muy mal, ya verás cuando llegue mamá, ella te pondrá en tu sitio, por atreverte a tirar de mi oreja, vas a ver…
  • ¿Qué sucede hijo? – preguntó a su hijo al verlo demasiado pensativo
  • Nada, padre – respondió de manera formal como solía hacer
  • Bueno entonces vamos, que no están esperando

Y lo tomo de brazo y se fueron a la sala a encontrarse con los visitantes que habían permanecido sentados medio aburridos en aquel lugar.

  • Vamos hijo ofrece disculpas al Señor y a tus compañeros – Mishima le indicó a su hijo
  • Oh Señor eso no es necesario – dijo Medsen
  • Si, si lo es – corto el padre de Koki –  Este niño tiene que comportarse como es debido, vamos Kokimoto discúlpate inmediatamente
  • Siento haber sido grosero con ustedes – dijo haciendo una venia
  • Koki, disculpas aceptadas – dijo Miguel
  • No te preocupes por nosotros – dijeron los niños al unísono
  • Bueno, ahora si doctor mi hijo es todo suyo, yo voy a mi habitación a revisar unos documentos y regreso en un par de minutos. Ah y me avisa si el niño se porta mal y no quiere cooperar. ¿De acuerdo?
  • Sí, no se preocupe señor, aunque no creo que eso pase –  sonrio el doctor mirando al pequeño que parecía encantador
  • Solo lo digo por si acaso – dicho aquello se fue a su habitación
  •  Bien Koki, ven aquí – El niño se acercó y se sentó al lado del médico
  • Para empezar, te voy a hacer algunas preguntas, no te pongas nervioso no te voy a pinchar con nada, ni a darte ninguna medicina de mal sabor, solo te hare un cuestionario, ya que necesito conocer; cuál es la razón de ese dolor que tienes en el abdomen. ¿Te parece? – le explico el papa de María Joaquina muy amablemente
  • Por supuesto que no, pero no tengo más opciones – murmuro resignado y con mal gesto
  • ¿Qué dijiste?
  • Nada, haga las preguntas 
  • Bueno primero voy a anotar tu nombre aquí y luego colocaré las repuestas de acuerdo a lo que me vayas diciendo
  • Me dices tu edad por favor
  • Ocho años
  • ¿Ocho de verdad? Vaya pareces más joven – dijo dudando porque en realidad por su estatura y complexión física si parecía de menos
  • En realidad tiene ocho señor – casi se lo jura – y este año cumplirá nueve como casi todos, es que es japonés y además de baja estatura – añadió Daniel
  • Un enano dirás – interrumpió Jaime y Koki lo fulminó con la mirada
  • Silencio Jaime –  dijo nuevamente Daniel
  • Ah me parece perfecto, pero el tamaño no importa pequeño –  dijo el doctor –  apuesto  a  que eres muy inteligente ¿no es así?
  • Sí, pero a lo que íbamos señor. Siguiente pregunta –  lo cortó
  • Vaya pequeño, parece que estas a la defensiva hoy
  • Se equivoca señor, lo que sucede es que tengo mucha tarea por hacer y debe ser entregada mañana
  • Está bien, entiendo, bueno haremos esto lo más rápido posible – sonrió el doctor siguiendo con sus instrucciones – lo primero que quiero que hagas es que me describas el dolor que estas o estabas sintiendo anteriormente, dime donde exactamente te duele o te dolía y cada qué tiempo, porque según lo que oí de tus compañeros, es que hace días andabas enfermo y no le habías dicho a tus papás, bueno yo supongo que no los querías preocupar
  • Si es cierto japo en la escuela estabas demasiado enfermo, te quejabas de dolor, yo me acuerdo y siempre metido en el baño. Ah la última vez – Ay maldita sea el bruto de Jaime  ya va a meter la pata, ¿quién rayos lo invitó? lo único que hace es enredar más la situación, pensó Kokimoto
  • Ajá Jaime tienes razón, yo también he visto un comportamiento extraño en Koki, esos dolores de barriga lo están perturbando demasiado – dijo Adriano, ¡Mierda! ¿Por qué diablos se tienen que meter en la conversación? pero ya van a ver en la escuela voy a hacerles una broma bien pesada para que dejen de hablar de más renegaba Koki dentro suyo
  • Oigan chicos dejen al doctor hablar con Kokimoto, están siendo muy imprudentes, yo creo que lo mejor es que vayamos a conversar un rato afuera – hablo Daniel, ya era hora que se marcharan, acaso pretendían quedarse mientras yo hablaba con el padre de María Cretina
  • Pero yo solo quería ayudar – que terco es Jaime, que no entiendes que es un tema privado, se lamentaba Koki
  • No Jaime ven, que no es recomendable estar acá, vamos tú también Adriano –  Mientras Daniel indicaba a sus amigos la salida, de la misma forma se despedía del médico, Uff que bien, ahora solo tengo que enredar al doctorcito, y  conseguir salir de este lio en un abrir y cerrar de ojos, ay tengo que inventar algo, creíble, pero que podre decir…
  • Hasta ahora tío, estaremos afuera por si se lo ofrece algo
  • De acuerdo, Daniel
  • Pero… yo me quería – ya lárgate a comer Jaime, nadie te necesita, Kokimoto rogaba mentalmente que su amigo se marchara
  • No Jaime ahora no, mejor camina para el patio – los tres niños se fueron y dejaron a Koki con el médico a solas gracias Daniel, si llego hacer alguna maldad, tú serás el único que se salve, fue uno de sus últimos pensamientos
  • Bien pequeño ahora que se han ido tus amigos, me imagino que estas más tranquilo ¿cierto?
  • Si
  •  Bien, ¿en que estábamos?, ha si, quería que me describieras el dolor
  • Sí, claro que lo hare señor
  • Vaya que educado, bueno haber cuéntame
  • No necesito contar nada, ya le dije que no estoy más enfermo, me cure solo, no era más que un simple dolor de estómago
  • ¡Simple!, pero si tu padre estaba muerto de angustia, yo y tus amigos lo vimos
  • Ay señor. Cómo se nota que no lo conoce. Mi padre es muy exagerado, se preocupa por todo y sin razón, y no les crea a mis amigos ellos también se alarman por cualquier cosa. Yo creo que lo mejor es que se retire, aquí no hay más nada que preguntar – le dijo amablemente, incluso le hizo una reverencia en agradecimiento
  • A  ver Kokimoto, yo lo que creo es que estas siendo bastante desconsiderado con tu papá, él realmente estaba perturbado por tu salud y tú lo tomas como si nada. Mira yo solo te voy hacer unas preguntas, te prometo que será rápido y luego podrás ir a jugar con tus amigos. ¿Estamos?
  • Está bien pues.
  • Bien primera pregunta, ¿Dime exactamente donde te dolía?
  • Ya le dije que en la barriga
  • Sí, pero que parte, en el centro o en los costados
  • Todo
  • Segunda pregunta
  • ¿Has tenido fiebre, vómitos, cuantas veces has ido al baño?
  • No nada de fiebres, ni vómitos, solo fui al baño en la escuela un par de veces porque comí algo que me hizo daño
  • Hmm ya veo… última pregunta  ¿Qué comiste si se puede saber?
  • No me acuerdo
  • Oh que extraño con lo inteligente que eres no te acuerdas de algo tan simple –  dijo sarcásticamente, pero Koki no le tomo importancia – bueno niño eso era todo lo que necesitaba saber al parecer no tienes ningún tipo de virus, eso es bueno y debo felicitarte por ser un niño bastante independiente y cuidarte solo, ahora ya te puedes retirar
  • Oh muchas gracias señor – parece que fue más fácil de lo que creí, terminó pensando
  • A la orden siempre

Kokimoto se fue a jugar con sus amigos, mientras el doctor Medsen llamó a Mishima para conversar con él.

  • Señor Mishima necesito hablar con usted  –  lo llamo desde la sala
  • Si diga, es sobre mi hijo ¿Cómo sigue?
  • Su hijo está perfectamente señor
  • ¿Cómo? Pero si lo deje bien mal
  • Señor, venga – lo invito a sentarse – Deje que le explique lo que sucede, pero prométame que lo tomará con calma
  • ¿Tomar con calma? Pero ¿De qué está hablando? – para eso el señor Mishima se puso histérico creyendo que su hijo se moria
  • Señor parece que hemos sido engañados, mejor dicho usted porque yo me di cuenta de la verdad a tiempo
  • ¿Engañados? No estoy entendiendo nada
  • Si señor su hijo no está, ni nunca estuvo enfermo. Todo fue una mentira, lo que no me explico es ¿por qué lo hizo?
  • ¿QUEE? Esto no puede ser posible – la cara del señor Mishima era digna de una foto de la vergüenza que sintió
  • Si, lamento informarle que sí, mire le hice tres preguntas a su hijo, y cayó en dos de ellas. Sabe yo ya he tratado con niños de la edad de su hijo y no es la primera vez que ocurre esto. Cuando un niño no quiere hacer algo, inventa historias y enfermedades es lo más normal del mundo – dijo a modo de consuelo ante la mortificación del pobre hombre
  • Ay no lo puedo creer a mí me va a dar algo – El padre de Koki empezó a ponerse de todo color, caminaba de un lado para otro y se agarraba la cabeza varias veces
  • Señor le traigo un vaso con agua
  • Si gracias, pero voy con usted a la cocina necesito urgentemente una pastilla para el dolor de cabeza
  • De acuerdo vamos – lo acompaño el doctor

Ya en la cocina, Mishima abrió tremendos ojos cuando encontró el desastre ocasionado por su hijo. El cuchillo por un lado, la mayonesa compuesta por la mitad, sin la tapadera y en el piso, la refrigeradora abierta gastando luz y en la bolsa de pan solo habían dos rodajas, el papá del niño al ver la cocina en tales condiciones solo dijo:

  • AYYY YO MATO A ESE NIÑO EN ESTE INSTANTE, PEQUEÑO FARSANTE PERO VA A VER DE ESTA NO LO SALVA NADIE…
  • Señor cálmese, mire relájese es solo un niño pequeño
  • No, ya estuvo bueno, he sido muy consentidor con ese mocoso, y por eso hace lo que se le da la gana, pero ahora si lo voy a poner en su sitio – Anuncio moviendo el dedo como si fuera un profesor dando un sermón
  • Señor tiene que tranquilizarse, mire yo no me voy a meter en la educación de su hijo, pero la violencia no es el mejor camino. Hable con él y hágale ver que estuvo mal lo que hizo y disciplínelo como crea conveniente, pero sin causarle ningún daño.
  • Está bien, voy a esperar unos minutos y luego trataré con él
  • Bien pensado, le doy un calmante para que se lo tome tenga
  • Gracias me hace mucha falta – dijo y se tomó lo que el médico le paso

Mientras tando Koki se fue al patio un rato harto de la intromisión del médico ese.

  • Oye Koki, ¿ya te vio el doctor Miguel? – pregunto Adriano
  • ¿Ya te curaron?  ¿Qué te dieron para tomar? y ¿te van a mandar exámenes? – preguntaba  Jaime con genuino interés
  • Todo bien yo, ya estoy mejor
  • ¡Qué bien! Cuanto me alegro
  • Gracias Daniel, vamos a jugar a algo, estoy aburrido
  • Bueno creo que será en otra ocasión porque parece que ya casi nos vamos – El doctor Medsen estaba saliendo de la casa
  • Señor recuerde lo que hablamos, actué con inteligencia y sobre todo con mucha calma
  • Si lo hare, no se –  En lo que hablaba vio a su hijo lo más fresco y tranquilo riéndose con sus amigos como si nada – Si  ve lo que digo, ese mocoso es un inconsciente, poco le importa lo que he pasado el día de hoy
  • Señor recuerde es solo un niño, tiene que actuar como tal, bueno yo ya me despido – llamo a los chicos, que también dijeron hasta pronto y se subieron al carro junto con Medsen y partieron

Kokimoto se quedó solo con su padre que lo observo de pies a cabeza y luego le dijo:

  • Entre que tenemos que hablar
  • Pero padre, yo iba a pedir permiso para ir a la casa de David, ¿no podemos hablar luego?
  • Kokimoto Mishima entre es una orden
  • Ya está bien, lo que diga el señor – el niño entro a la sala
  • Se sienta ahí y me espera hasta que vuelva – el niño, no entendía nada, pero hizo lo que su padre le dijo

Su padre se dirigió a su cuarto, abrió la gaveta y cogió el cepillo cuadrado de madera que usaba su mujer para peinarse, seguidamente regresó a la sala, se sentó en el sofá que allí había y colocó el instrumento en una mesa que tenía al lado.

  • Kokimoto ven aquí – lo llamo haciendo un gesto con la mano. El niño se quedó observando a su padre, al cepillo que trajo consigo y tragó saliva, era lo menos que esperaba, estaba tan nervioso, que no se movió ni un milímetro – Kokimoto ¿acaso no entiendes que te estoy hablando? dije que  –  lo jalo del brazo y lo sentó a su lado
  • Padre que me va a hacer – habló con respeto
  • Te voy a castigar como nunca antes lo he hecho, te aseguro que después de esto no vas a volver a engañarme en tu vida
  • Padre disculpe, lo siento no lo volveré a hacer pero no me pegue – dijo temblando de miedo
  • No quiero oírte, me mentiste y te burlaste de mí y vas a aprender a no volver a hacerlo nunca  
  • Dicho aquello, Mishima puso a su hijo de pie frente a él,  le desabrocho el conjunto que cargaba,  se lo bajo hasta medio muslo dejándole los calzoncillos aún puestos, lo ubicó en sus rodillas, luego agarró el cepillo  y se dispuso a calentar el trasero de su hijo.
  • A MI crack, crack NO crack, crack ME crack, crack TOMA crack, crack EL  crack, crack PELO crack, crack NINGÚN crack, crack MOCOSO crack, crack DE crack, crack PRIMARIA crack, crack – el método era dos cepillazos en un nalga dos en la otra, haciendo una pausa para que chico se recuperara. Kokimoto trataba de mantenerse estoico y no quejarse porque quería demostrar que no era ningún niño débil al cual podían dolerle unos simples azotes, sin embargo todo el esfuerzo que estaba haciendo se fue a dar a la porra y empezó a quejarse desesperadamente por el picor-dolor agudo que le producía el condenado cepillo cada vez que hacia contacto sus posaderas
  • BUAAAAAAAAAA – y claro Kokimoto se puso a llorar
  • ¿Quién se cree  que es usted  para  mentirme  de esa manera  tan descarada eh? – preguntó bajándole los interiores, dejando de lado aquel instrumento y le soltó ocho buenas palmadas en el final de las nalgas. Kokimoto termino suplicando y llorando desesperadamente
  • ¡Nooo más por favor! ¡Padre, por lo que más quiera, no más,por favor !¡Me duele mucho!¡Lo siento, seré bueno señor, lo juro! – ya todo había terminado, pero el niño seguía disculpándose y sobándose su retaguardia
  • Ya hijo ya paso, ya tranquilo – le dijo acariciando sus cabellos que estaban húmedos del movimiento que dio en medio de la tunda. El sr, Mishima levantó a su hijo y le acomodo la ropa para después agregar – Vaya a su habitación queda castigado dos semanas, de escuela a la casa – dijo, pero el chico no se movió –  Kokimoto le hable haga caso o ¿Tengo que recordárselo de otra manera?
  • No, señor –  dijo respetuosamente y fue para su cuarto




4 comentarios:

  1. Pues Kokimoto no hizo otra cosa que llevarse la paliza que se mereica por mentiroso y teatrero, creo que ahora no se atrevera a subestimar mas a su padre, jajajja me causo gracia este capitulo
    UN abrazo Nicole, el lunes publicare lo que quiers que ponga, cuidate
    Marambra

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  2. Hasta que le llego la hora a Koki por andar de mentiroso y con un tema tan delicado como una enfermedad. Me molesto que el padre de Maria Juaquina atienda a Kokimoto delante de sus compañeros, no me pareció muy profesional que digamos y Jaime fue muy metiche, me irrito bastante.
    Te quedo muy bueno el capítulo.

    Erina

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  3. A Koki le llego su hora por mentir, pero creo que el niño debería decirle a su padre la razón, tampoco puede estar pasando hambre por su comida.
    Y erina tiene razón, no fue profesional el doctor, ha sido incomodo para Koki.

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  4. Uy pobre Koki jajajaja pero ya era que le tocara!!
    No que sólo estaba tocándole al maestro del crimen por culpa de su traidora hermana!!
    Muy genial amiga!!

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