Mis Gemelos: Cap. 296; Autora Marambra

Mis Gemelos

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 30 de Junio del 2018.

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Capitulo 296

Cantando una nana

Autora: Marambra

• ¡IDIOTA!... – grito Alexander a tiempo de meterle un codazo a su hermano apenas se acostó a su lado, estaba con ganas de pelear o por lo menos intimidar a su par, pero Iván lejos de amilanarse se armo de enojo  
• ¡ESTÚPIDO!... – respondió con otro codazo y claro… otro insulto, aguantándose el dolor, vamos que Lex no le dio una caricia precisamente; y ahora mismo la situación estaba tan caldeada que quejarse no estaba en su lista de prioridades, pero tampoco en las de su hermano que sorprendido de la respuesta  volvió a atacarlo física y verbalmente
• ¡MIERDA!... ¡BABOSO!... – pero esta vez hizo un conejo con el que ataco la pierna de su hermano haciéndole un morete a tiempo de tumbarse a su lado obedeciendo a Logan, después de todo la orden de su padre había sido clara: A la cama LOS DOS
• ¡¡¡AUUU!!!...  ¡¡CABRÓN!!… – Iván elevo la voz sin querer, aquel nuevo golpe había dolido de verdad y enojado por eso le metió un guantazo en la cara – PLAAF
• ¡COJUUUU… auuuu – y la palabrota quedo cortada por el dolor sentido, pero no era el dolor producido por su hermano sino por su padre, Logan acababa de entrar de sopetón y lo pillo encima de Iván a punto de soltar un puñetazo y le jalo la patilla para luego calcar su mano en su trasero
• ¡SUFICIENTE! PLAF PLAF PLAF – y tres manotazos resonaron de nuevo sobre el delgado pijama picando la piel debajo de la tela
• Auuu… no fui yooo, fue este COJUDO – al final completo la frase interrumpida y alzo la voz sin importarle que era a su padre a quien le gritaba y claro Logan como cualquier padre reacciono en respuesta al grito, para él gritar palabrotas simplemente no cuadraba en la ecuación de buen hijo, además de un tiempo a la fecha, Alexander Hansen estaba perfeccionando su lenguaje y Rubén ya le había advertido que la proxima le lavaba la boca con jabon
• He dicho ¡basta de PALABROTAS PLAF PLAF PLAF – y tres nuevos manotazos cayeron pero esta vez sobre el calzoncillo, pues Logan sin querer le bajo la ropa cuando Lex quiso huir de él
• PERO NO FUI YOOO – volvió a chillar enfadado mientras su padre lo metía a la cama
• SI, ¡claro!, tu hermano es VENTRÍLOCUO – contesto Logan enfadado moviendo la cabeza, Lex no había cambiando nada pese a toda su odisea, seguía con sus salidas de tono y justificándose por cualquier cosa o culpando a su hermano por sus faltas cometidas e iba a decir eso justamente, pero su respuesta genero la carcajada de Iván lo que enfado de nuevo a Lex, pero no solo a él sino a Ginger que trataba que el bebé duerma sin éxito pues se sobresaltaba a cada grito de sus hermanos mayores y de su padre claro está, solo que con todo lo ocurrido a lo largo del día ni loca entraba a la alcoba de los chicos
• JAAJJJAAA JAAA – seguía riendo Iván sin darse cuenta que Alexander estaba bufando como un novillo que estrena cuernos y antes de que lo vuelva golpear, su padre le soltó tres manotazos en el trasero pero a Iván sacándolo de su estado jocoso
• PLAF PLAF PLAF
• Auuu yo que hice
• No provoques Iván, estas buscando pleito – lo acuso, abriendo el lado de su cama para que el chico se tumbe junto a su hermano, tapándolos como cuando eran niños – ahora a dormir y lo digo en serio, un grito más y les doy con el cinturón a ambos – les advirtió dándoles un beso en la frente tras mirarlos en silencio incomodándolos por su escrutinio, cerrando la puerta después de eso, esperando que esta vez hayan entendido el mensaje

Pero como era de esperarse, los gemelos no estaban muy contentos con aquello de pasar la noche juntos en la misma cama, solo que no tenían voz ni voto en esto, no estaban en la casa principal sino en el área que ocupaba Logan y bueno la única habitación amoblada fuera de la alcoba de su padre, era esa justamente, con una hermosa cuna de color celeste y un sofá cama grande donde estaban ambos tumbados, esa habitación estaba destinada a ser el dormitorio de su hermano menor y habían empezando a decorarla con imágenes infantiles, era claro que del decorado se estaba haciendo cargo Ginger y no Logan, pues ellos nunca tuvieron un dormitorio amoblado ni decorado con diseños infantiles y fuera de los muebles de colores neutros y el piso acolchado por si se caían y  los juguetes tirados en el piso el resto carecía de un tinte infantil, por lo menos eso es lo que ambos recordaban de su vida en Londres; pero no se equivocaban ni Rubén ni Clara eran dados a la decoración moderna actual, cuando Logan llego a sus vidas, Clara fiel a sus costumbres tuvo a su hijo hasta los dos años en su cama y el dormitorio destinado a él no tenía una decoración infantil, Rubén había comprado en cambio regios muebles de cara a futuro, tanto así que la cama de Logan era de dos plazas y aparte de una colcha con dibujos animados y almohadas y peluches por todos lados, el resto exhibía soberbiamente la veta de la madera pulida y hermosamente barnizada y los mismo sucedió con los gemelos, bueno en realidad solo adosaron una reja con pestillo a la cama de Logan para que los nenes no se caigan.

• Deja de moverte, pareces gusano – murmuro Lex esta vez en voz baja
• No me molestes, que me estoy acomodando para dormir – decía girándose de un lado a otro buscando la pose adecuada, solo que era difícil, el dormía boca abajo con las piernas estiradas y ahora a donde ponía las piernas se pillaba con las de su hermano incomodándose entre si
• ¿Y tienes que moverte tanto? – pregunto molesto Lex, pero sin ceder un milímetro de espacio, como su padre lo acostó primero se recorrió casi al centro dejando poca opción a Iván solo por fastidiarlo
• ¿Y tienes que ocupar toda la cama? – pregunto en el mismo tono de voz, si no era tonto y se dio cuenta de que Lex quería seguir con aquella especie de guerra sin sentido, ¡diablos!, eso le pasaba por ayudarlo
• Yo me acosté primero – respondió Lex acomodando su almohada mirando el reflejo de la luz del patio en los ojos de Iván y aun cuando no podía verlo del todo por la oscuridad, sabía que estaba con el ceño fruncido
• Mentira, te metieron a la cama que es distinto – resoplo Iván enfadado, pensando nuevamente que fue muy tonto defender a su hermano pero luego rectificó sus pensamientos, Alexander no le pidió ayuda, fue él solito quien se metió en camisa de once varas como solía decir su amado papá Rubén
• Es lo mismo – prefirió decir Lex de pronto mirando el techo tachonado de estrellas infantiles, planetas de colores y una luna con una enorme sonrisa… vaya se veía fantástico pensó, imaginando a su pequeño hermanito abriendo sus ojitos para mirar aquello tan hermoso
• ¡NO ES LO MISMO! – insisto en cambio Iván ante la terquedad de Lex levantando un poco la voz olvidándose por fracción de segundos que su padre acababa de apagar la luz y amenazarlos, pero no fue solo el, Lex también
• ¡¡ES LO MISMO!!
• ¡¡¡NO ES LO MISMO!!!
• ¡¡¡¡ ES LO MISMO!!!!
• ÑIAA ÑIAAA ÑIAA – y el llanto del bebé inundo sus oídos
• Mierda

Murmuraron los dos dándose cuenta tarde de su error, sobre todo porque su puerta se abrió de par en par y la luz  se prendió de nuevo entrando Logan furioso, cogiendo a Lex para darle tres cinturonazo bastante fuertes en el trasero tomándolo por sorpresa para hacer lo mismo con Iván, ¿la razón?, la habitación estaba justo al lado de la recámara principal y tanto Ginger como él estuvieron oyendo lo que discutían.

• ¡He dicho que DUERMAN!  ZAAAS – y el eco asusto a Iván, realmente le dio fuerte a su hermano
• AUUU
• ¡¡ZZZZAAAASS
• AAYY YAA
• ZAAASSSS
• NOOOUUU AUUAUU – grito Lex frotándose el trasero a tiempo que Logan se acercaba a Iván, aun sin poder asimilar lo que acababa de pasar, no imagino que su padre cumpla con la promesa, quizás porque no era Rubén, quizás porque no había gritado o quizás porque les había besado la frente… joder el beso de Judas, pensó por una fracción de segundos
• NO HICE NAAAADA – grito Iván cuando su padre lo agarro de brazo y saltó como rebotado sobre la cama con los ojos como platos queriendo huir, pero Logan fue más rápido y lo atrapo de la pretina del pijama e Iván cayo boca abajo sobre la cama y quiso gatear, pero su padre le jalo los pies hasta el borde y empujo su espalda baja con una mano  mientras la otra estampaba igual número de cintazos
• ZZAASS ZZASS ZASSS
• AUUUU YAAA AGGGGG
• HA DORMIR – grito abriendo las sábanas y obligándolos a meterse a la cama dando el equitativo espacio a cada cual – ¡TANTA BULLA METEN!

Los regaño sin darse cuenta que el también estaba gritando lo que hizo que Ginger decida entrar a la alcoba de los chicos cargándolos en brazos al bebe que no dejaba de llorar.

• ¡Por favor Logan! ¿puedes dejar de gritar? – le pidió y se volvió a salir meciendo a Bencito y los gemelos hicieron todo lo posible por dejar de gemir más por vergüenza que por el llanto sobresaltado de su hermanito, al darse cuenta que seguro su enemiga acababa de oír aquellos cinturonazos
• Lo siento cariño – murmuro Logan todo serio, pero dándole un beso y quitándole al bebé, tonto, tonto, tonto acababa de asustar a su pequeño – ve a dormir, que él y yo vamos a vigilar a este par

Anuncio y Ginger solo movió la cabeza y se fue al dormitorio mientras Logan fiel a su palabra se sentó en la mecedora que esa misma mañana Ginger acomodara en un rincón bajo una lámpara de pie cuya tenue luz  proyectaba pequeñas siluetas que giraban en la pared cuando se encendía y con esa tenue luz y la canción de cuna que sonaba a tiempo que la luz giraba, se quedo con el bebé en sus brazos mientras este lactaba su mamila y los gemelos al final fueron cerrando sus ojos llorosos cansados de tan estresante día.

• Tu hermanos son un par de necios, amor – murmuro Logan a su hijo menor y el bebé dejo de mamar para mirarlo como si prestara atención a su padre y como confirmando el pensamiento de Logan sonrió antes de volver a meter la tetina en su boca y empezar a dormitar como sus hermanos pero en los brazos de su padre

Mientras Logan no dejaba de ver a sus gemelos ahora dormidos y lo mucho que habían crecido desde que su padre los trajera de Londres y dejando atrás los enojos de día simplemente se relajo para observarlos dormir como en los viejos tiempos, Lex cruzando su brazo sobre el hombro de su par, mientras Iván se hacia un ovillo en posición fetal, al final apago la luz y se marcho a su alcoba.

• ¿Ya se durmieron? – pregunto Ginger, con evidente cansancio pero sin el enojo de hace algunas horas
• Si, ya lo hicieron – contesto poniendo al bebe en brazos de Ginger y sentarse en la cama para quitarse las sandalias – siento mucho lo que hicieron ellos – se disculpo Logan a nombre de sus hijos, de pronto tenia la necesidad de hacerlo, los gemelos le estaban portándose mal con ella y Ginger suspiro tras besar a su bebe y meterlo a la cuna que estaba justo a su lado, recordando lo que paso a lo largo del día
• No es tu culpa Logan y sinceramente creo que tampoco es culpa de ellos – agrego y Logan se la quedo mirando fijamente como si no le entendiera y Ginger se dio cuenta de su desconcierto – vamos hombre, ¿quien en su sano juicio haría eso? – le pregunto elevando una ceja refiriéndose a lo que ocurrió en la tarde – mira… se que a ellos no les agrado mucho que digamos, pero Ben es su hermano y lo adoran y sé que nunca, nunca harían algo a propósito para lastimarlo o enfermarlo… lo que paso, paso porque son descuidados, son adolescentes al fin y al cabo – agrego alzando los hombros y besándolo en la boca poniéndose sobre él para pasar al otro lado de la cama, había tenido tiempo para pensar en eso después de que lograra hablar con el pediatra de su hijo – duerme… mañana será un nuevo día – murmuro dando por terminado aquello, pero parecía que el tema atormentaba a Logan
• Pero estabas enojada, ¡muy enojada! – le recordó de pronto y Ginger se separo lo suficiente para mirarlo seria
• ¿Y quién no?, Rubén estaba chupando un cigarrillo, tu no estabas por ninguna parte y Lex olía a tabaco a leguas… no fue bonito ver eso – dijo y Logan abrió la boca para decir algo, volviendo a renegar del incidente pero Ginger no lo dejo – pero bueno... son adolescentes Logan, tienen 15
• Cumplirán 16 en unas semanas – murmuro sin mucho entusiasmo
• Ya, mientras no soplen sus velas tienen 15 y no creo que con 16 sean un par de iluminados – dijo con sarcasmo
• Pero es que
• Nada Logan, ya los has castigado, el medico vio al bebe y al parecer no se comió esa cosa, a primera hora haremos sus análisis y ya esta... mañana habla con ellos, ahora duérmete por favor ¿si?, esto muy cansada y mañana tengo un largo día por delante – murmuro con una sonrisa en los labios, por fin había encontrado algo en que distraerse y sentirse útil, estaba yendo a dar clases de inglés a una escuelita pequeña en reemplazo de una maestra que tenia baja por maternidad
• Okey… okey…  Goodnight love – sonrió

Y tras un hondo suspiro apago la luz, se giro sobre su espalda mirando la nada, acostumbrando sus ojos a la oscuridad pero oyendo atento el suave ronquido de su bebe y como cambiaba el ritmo respiratorio de su mujer, dio un suspiro y se perdió en sus pensamientos, ¿cómo pudo terminar tan mal el día?, se suponía que habían empezado con pie derecho, incluso Ginger puso todo de su lado para mantenerse a raya en la interacciones de sus hijos y suya pensó, pero al final después de darle tantas vueltas al asunto llego a la misma conclusión que Ginger… eran cosas que pasaban porque sus hijos eran adolescentes.

Aunque eso no quitaba el hierro al asunto, tenía que hablar con ellos y marcar algunas reglas independientemente de las reglas que tenían marcadas con su padre y se quedo mirando el techo, pero también echándose la culpa, no debió confiarles el cuidado de su hermano menor o debió mandar a alguien a que los supervise, o ultimadamente debió relegar la tarea de la valla a otras personas, y hacerse cargo él… ¡Dios todo pudo pasar! pensó con pesar mientras miraba a su pequeño hijito tan inocente e indefenso dormir chupando su dedito y se prometió a si mismo nunca más cometer el miso error… dejarlo al cuidado de sus hermanos, era obvio que no se podía confiar en ellos, pero más obvio era que aquella era una responsabilidad que tenia él y Ginger nadie más, ni siquiera los abuelos, el bebé era suyo, el era un adulto, se suponía que él era quien debía protegerlo, fue cuando recordó las palabras de su padre.

• Serás un verdadero padre cuando te des cuenta de tus responsabilidades, tus errores y admitas que algunas veces necesitas la ayuda o el consejo de otros más experimentados, no antes, mientras harás lo que yo vea conveniente o te lo ordene – le había dicho un día jalándole la patilla a manera de castigo, cuando fastidiado de que él o su madre anden tras suyo o llamándolo a cada rato les reclamo  que los gemelos eran suyos y que él sabía lo que hacía… pero demonios, él nunca había puesto un cigarro en la boca de alguno de sus hijos… no era un suicida