Shimakura Nara: Cap. 2; Autora Nicole

Un vago, ¿sin remedio…?, ¡en serio!

一一一一一一一一一一一一一一一

Los derechos de autor de este texto pertenecen única y exclusivamente a su autor. No pudiendo ser publicada en otra página sin el permiso expreso del mismo.

Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 17 de Diciembre del 2019.

一一一一一一一一一一一一一一一 
Capitulo 2

Contra la flojera… ¿diligencia?

¡naaaa, es mejor la chancleta!

Autora: Nicole

• Asuma-sensei – menciono tímidamente el muchacho
• ¿Qué sucede Shikamaru? – Se giró y lo miró fijamente, el jovencito extendió su brazo; y  en  su  mano  derecha  tenía dos paquetes de cigarrillos que le ofrecía a su profesor
• ¿Qué rayos te pasa? Dame eso inmediatamente – se los arrebató y agregó disgustado – Eres muy pequeño para estar fumando,  ahora sí  estoy más que decidido, hablaré seriamente con Yoshino sobre tus malos hábitos – Pero miren quien habla, con qué cara me dice eso, sí el único vicioso es él. ¡Ay no, ya empezó de nuevo con sus sermones, que aburrido!, pensó porque Sarutobi lo seguía reprendiendo y  entonces  le  explicó  poniendo ahora cara de santito
• No son míos, los compre para usted, son un regalo, pero no le cuente a mi madre lo de hoy por favor.
• ¿Y piensas que me voy a dejar sobornar por dos simples paquetes de cigarrillos? Ni lo sueñes – se mantuvo firme el hombre y se cruzó de brazos
• ¿Ah no…? – preguntó haciéndose el tonto y luego dijo  – entonces cuatro le parecen razonables – sacó otros dos  de  los  bolsillos de sus pantalones, es  que  mientras  Asuma conversaba con unos amigos  había ido a un establecimiento a comprar  un  jugo y  de paso se acordó  de  su respetado mentor
• Bueno este en ese caso lo… lo considerare – dijo ya en la puerta de la residencia de los Nara – pero en otra ocasión – se mantuvo lo más tajante que pudo y en su mente Shikamaru que en un inicio estaba satisfecho con su plan termino desanimándose con el último comentario
• Viejo, esto no es más que una pérdida de tiempo, que fastidio – dijo

Bostezando abriendo la puerta principal, entrando y su maestro le siguió.

• Buenas tardes ya llegamos – se anunciaron al mismo tiempo y  para mala suerte del genio flojo su madre los recibió, había vuelto después de su larga caminata y al ver que su hijo llegaba con el maestro a casa,  se imaginó lo peor, empezó a reclamarle  sin saber nada, pero adivinando lo que pudo haber hecho en el entrenamiento
• ¡Ya suéltame, mujer problemática! – se le escapó aquella frase grosera al ser cogido por sorpresa, pues Yoshino le dio un fuerte tirón de orejas
• Respétame, que soy tu madre – amonestó ella dándole ahora una palmada en la boca y  las  siguientes  en  las  nalgas. El chico no pudo evitar sobarse con una mano la boca y con la otra el trasero, todavía lo tenía bien caliente, ¡¿por qué rayos su madre tenía que ser tan estricta?! Siempre cuestionaba lo mismo
• Tranquila, hablemos primero – Propuso Asuma sensei y así lo hicieron los tres, sentándose en la sala de la casa a conversar
• Eso no es cierto, solo se me hizo un poco tarde – replicó Shikamaru al escuchar la frase: todos los días se ha presentado tarde a entrenar por parte de su sensei
• No hables, solo escucha – le dijo la madre y añadió – cuando los adultos hablan los niños se callan, creí que te había quedado claro la última vez – el pre-adolescente se hartó de estar ahí y se levantó para irse, pero su madre lo detuvo – ¡Siéntate que no hemos terminado! – lo cogió fuertemente del brazo para hacerlo sentar de todas maneras

Pero el muchacho se jalo violentamente y la miro medio molesto, pero no dijo nada ni se inmuto en hacer lo que le pidieron por lo que ella le soltó dos manotazos con bastante fuerza, el mocoso se quejó un poco y está vez, no estaba exagerando, tenía esa parte de su cuerpo sensible por la zurra que le había dado su mentor, así que con los ojos aguados decidió hacer caso a las órdenes de su progenitora y terminar de escuchar toda esa fastidiosa conversación y luego fue regañado duramente por su madre que además lo mando a su habitación a esperar por el castigo,  que por supuesto  sería una buena cuera, su profesor por supuesto quería intervenir; sintió mucha pena al ver la cara de poema del pobre niño;  era para enmarcar,  se notaba el miedo que le tenía a Yoshino.

• No, no se meta en este asunto, este mocoso tiene que aprender a ser más responsable, no voy a permitir que siga avergonzando a la familia con su negligencia, sí no se corrige por las buenas tendrá que ser por las malas ¡Shikamaru sube a tu habitación y me esperas ya sabes cómo! – anunció ella y el pre-adolescente lo sabía perfectamente, ya lo había experimentado años atrás, pero ahora con casi trece sintió subirle el calor a la cara  al pensar en una fracción de segundos todo lo que le esperaba, imaginándose cada detalle del  castigo que en poco tiempo recibiría, el infierno que viviría su retaguardia que ya de por sí estaba adolorida

¿Por qué tenía que tocarme a mí una madre tan brusca? él día de hoy solo pensaba tener un día normal como una persona normal libre de preocupaciones y me he metido en algo muy problemático, se preguntaba y comentaba internamente, para alguien como él que se auto-declaraba como el número uno en escaparse o el cobarde número uno de Konoha, era tedioso todo,  pero aunque no quisiera pasar por esa humillante   situación, argumentar solo podía empeorar las cosas, y tampoco le gustaba discutir menos con una mujer, y todavía menos si esa mujer era la tétrica de su madre; sí ni Asuma podía convencerla, él ni hablar, así que se rindió ante sus amenazas, camino rápidamente al escuchar a su madre gritarle nuevamente.

• No sea tan dura con él, yo ya lo castigue – Asuma intento hacerla recapacitar pues estaba dispuesta a pegarle con el cinturón de cuero de su marido, el último que había comprado y aun no lo había estrenado, ¿sería era posible que las nalgas de aquel vago lo probaran antes que las trabillas de los pantalones de vestir del papá?
• Tiene que aprender, está así por culpa del padre, que es demasiado blando con él y encima heredo su temperamento; es que son igualitos
• Lo sé, pero comprenda… aun es joven, le queda mucho por aprender, además es muy inteligente solamente le falta esforzarse más.
• De qué sirve que sea inteligente si es demasiado perezoso, lo siento, pero voy a corregir a ese vagabundo en este momento – anuncio tajante
• Señora por favor castíguelo con otra cosa que no sea la correa – insistió él y por primera vez Yoshino acabó cediendo y decidió usar la chancleta de madera japonesa, pero de suela plana que tenía guardada en la alacena y que usaba  solamente  para castigar a su incorregible hijo

Mientras tanto en otro lado de Konoha…

• ¡Ese Shikamaru, es el más problemático de todos! – Dijo Yamanaka muy enfadada – Mira que hacer enojar así a Asuma sensei, pero ¡¿qué rayos tiene ese niño en la cabeza?! Es más idiota que Naruto – la rubia estaba que explotaba de enojo por la actitud de su compañero – Tan bien que estábamos haciendo nuestras técnicas y de la nada Asuma-sensei nos corre
• Tienes razón Ino, pero que vamos a hacer, a Shikamaru nunca le ha interesado involucrarse en ningún tipo de responsabilidad, todo le fastidia – habló el gordito
• En el mismo momento que lo pronunció se escuchó un estornudo por segunda vez provenir del cuarto del Nara.
• Seguro alguien está hablando de mí – dijo el jovencito frotándose la nariz – Me preguntó ¿sí están diciendo algo bueno o malo? – Y la conversación de sus colegas siguió un rato más
• Eso es verdad, pero nos perjudica, ojalá recapacite algún día y deje la flojera de lado porque no es justo ni para nosotros ni para Asuma sensei – añadió convencida la muchacha
• Tiene que buscar alguna motivación para cambiar esa actitud –  mencionó Akimichi
• Creo que ese perezoso no tiene remedio – decreto convencida la rubia
• ¡No seas tan dura Ino! – No le gustaba que criticaran a sus amigos, una vez casi se va a los golpes con el propio Shikamaru por llamar a Naruto tonto y no querer retirar lo dicho, pero claro no haría lo mismo con una chica así que prefirió cambiar de tema – Bueno iré a verlo más tarde y hablaré con él, le daré ánimos – aseguró Chōji
• Lo siento – se disculpó ya más calmada y añadió – Creo  que  te  acompañaré

Regresando a la residencia de los Nara, Shikamaru mordía las sábanas, mantas y el cojín que tenía cerca de él cada vez  que un nuevo chancletazo caía en sus ya ardientes nalgas.

• Hasta PLOP, PLOP, PLOP, PLOP cuando PLOP, PLOP, PLOP, PLOP  vas PLOP, PLOP, PLOP, PLOP  a estar PLOP, PLOP, PLOP, PLOP  perdiendo PLOP, PLOP, PLOP, PLOP  el tiempo PLOP, PLOP, PLOP, PLOP de esa PLOP, PLOP, PLOP, PLOP manera PLOP, PLOP, PLOP, PLOP ¡irresponsable! PLOP, PLOP, PLOP, PLOP  Te voy a PLOP, PLOP, PLOP, PLOP marcar PLOP, PLOP, PLOP, PLOP  el culo  PLOP, PLOP, PLOP, PLOP  hasta que PLOP, PLOP, PLOP, PLOP  se me canse PLOP, PLOP, PLOP, PLOP la mano PLOP, PLOP, PLOP, PLOP ya verás PLOP, PLOP, PLOP, PLOP como te PLOP, PLOP, PLOP, PLOP lo voy PLOP, PLOP, PLOP, PLOP a poner PLOP, PLOP, PLOP, PLOP ¡insolente! PLOP, PLOP, PLOP, PLOP ¡sinvergüenza! PLOP, PLOP, PLOP, PLOP ¡vago! PLOP, PLOP, PLOP, PLOP – los azotes eran dados en tandas de cuatro; dos en una nalga y luego dos más en la otra de forma contundente mientras le reprochaba su comportamiento,  el muchachito agitaba sus caderas como si quisiera salir huyendo de las rodillas de su mamá llorando desde el inicio
• AU, AU, AHHH – Shikamaru no aguanto más y soltó un grito mientras suplicó a su madre que parara haciendo sus acostumbradas promesas de mejorar, pero esta lo mando a callar diciendo que no había terminado todavía y aplico otra serie de recios chancletazos está vez en la parte baja del trasero
• PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP, PLOP…
• AHHHGGG YAAAAAA – Chilló nuevamente, el trasero ya no solo le dolía sino que le ardía y escocia ferozmente, empezó revolverse de nuevo saliéndose de su posición ya sin pantalones ni interiores pues estos salieron volando de tanto pataleo que dio
• Quédate PLOP, PLOP, PLOP, PLOP quieto PLOP, PLOP, PLOP, PLOP o voy PLOP, PLOP, PLOP, PLOP  a  darte  PLOP, PLOP, PLOP, PLOP con la correa PLOP, PLOP, PLOP, PLOP – lo volvió a acomodar y  siguió sonándole la retaguardia con ganas, el mocoso ya no sabía ni que hacer para soportar la dura de azotes que estaba recibiendo e intento meter una mano, grave error, su madre se enojó mucho más y como no quería quitarla,  se la apresó a la espalda y estrello la suela de madera doce veces seguidas  nuevamente en el final del nalgas. Shikamaru terminó berreando desconsoladamente con algunos moretones y marcas de la suela en su trasero – Ya está, ya paso hijo – le dijo ella acariciándole la cabeza mientras sobaba su espalda con cariño
• Perdóname, me es… esforzare un… un poco más… aunque… aunque sea un fastidio.
• Aunque sea un fastidio fue lo que pensaste ¿verdad? – cuestiono seria y lo llamo por su nombre completo –¡SHIKAMARU NARA! ¡PLASSS! – Una fuerte nalgada cayo en el centro de aquel lastimado culo y añadió – No quiero que pienses en decir esa palabra nuevamente porque sí no lo intentas siquiera tu trasero la va a pagar bien caro ¿Me has entendido?
• ¡AHHHHGG! Sí, señora, es… está, está  bien lo… lo siento, no lo,  no lo repito  – prometió con  la cara  llena  de mocos y lágrimas mientras con ambas manos subía y bajaba su trasero con afán de aliviarlo, estuvo así un largo rato cuando se percató que seguía desnudo, se levantó  rápidamente del regazo de Yoshino apresurándose a recoger sus ropas para vestirse inmediatamente aun con la cara colorada por la vergüenza que su madre lo hubiera visto el culo y lo que no era el culo cuando hacía tiempo que eso no pasaba,  ella lo noto, pero no le dio importancia, total  no era la primera vez que lo veía así y quizás no sería la última, le advirtió que estaba castigado sin salir; tiempo indefinido,  le dio un beso en la frente y salió de su habitación para dejarle algo de privacidad.