Una verdad inquietante 5; Cap. 5 Autora Cath Blue Red

Una verdad inquietante

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 20 de Junio del 2016

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Capitulo 5

Consciencia, ¡maldita consciencia!

Autora: Cath Blue Red

Me lancé a la cama y golpee con fuerza mi almohada una y otra vez, estaba furioso. Estúpido de Joel como se le ocurre ir a espiarme, papá me matará por su culpa, estaba punto de llorar de pura rabia y frustración cuando escuché que golpeaban la puerta suavemente pero con urgencia. Me levante por inercia y la abrí, tragándome las lágrimas que se habían acumulado en mis ojos ante mi futuro próximo. Lo que vi me dejo sin aliento, ahí estaba Joel de pie temblando como una hoja y con las lágrimas corriendo como cascadas por sus mejillas.

• Tengo miedo – me dijo y  antes de acabar de decir es pequeña frase se lanzó a mis brazos como si yo fuera su tabla de salvación. Por instinto correspondí el abrazo y la verdad no entendí el por qué estaba tan asustado, al extremo de buscar protección y amparo en mí. Así que me limité a llevarlo hasta mi cama mientras trataba de calmarlo
• Tranquilo, no llores así, no llores más, te va a dar algo… –  y noté como poco a poco iba retomando la compostura hasta que se separó de mi  un poco avergonzado
• Disculpa, me voy a mi cuarto – y trato de levantarse
• ¿Qué te pasó? – le pregunte tomándolo de la mano para evitar que se fuera
• Tú dijiste….dijiste…
• OOOOOH…  – dije al recordarlo “papá va a pegarte a ti, querías un padre?, pues disfrútalo!” – perdóname ¿si?.... no quise asustarte – le dije muy sinceramente, la rabia hacia él  había desaparecido y mi conciencia no paraba de gritarme que Joel solo era un niño y que había sido muy malo con él.
• ¿Es verdad lo que dijiste? – pregunto con miedito en su voz
• Si – respondí con tristeza
• ¿Cuántas veces has estado en el hospital? – preguntó luego de soltar un suspiro de resignación
• ¿Qué? – pregunte confundido, no entendía a que se refería
• ¿Cuándo papá te pega cuantas veces tuviste que ir al hospital? – esa era una pregunta muy extraña
• Jamás, ¿por qué preguntas eso? – tenia curiosidad 
• Porque cuando el esposo de mamá me pegaba fui a parar varias veces en el hospital, por eso mamá lo dejó, por mi culpa se quedó sin esposo

No podía creer lo que estaba escuchando, el animal del esposo de su madre lo golpeaba hasta lastimarlo y ella lo permitió por varias ocasiones, con razón se asustó así con lo que le dije, soy un bruto, y para colmo piensa que es culpable de que su madre se quedara sin pareja, INCREIBLE…..parece una novela de terror. Sé que debo decirle algo, pero qué?. Permanecí en silencio por un instante procesando todo esto.

• Creo que tu madre hizo lo que debía, mi mamá habría hecho lo mismo, tú no tienes la culpa de nada, ese tipo era un animal, eso es todo, olvídate de eso – le dije muy convencido tratando de quitarle importancia al asunto
• Gracias – susurró y bajo la mirada, así que le pasé mi brazo por los hombros,  levanto la vista y los  dos sonreímos
• No debes tener miedo de papá – le asegure dándole un apretón en los hombros como papá hacia conmigo cuando yo tenía miedo y él me apoyaba y daba ánimos – él jamás  va a lastimarte, así cometas la peor cagada del planeta – eso era verdad nunca me dio la espalda a mí, a lo mucho me hizo llorar – solo te dará unos azotes con el cinto, si duele y mucho pero no te dejará marcas que no se borren en unas horas o en un par de días en el peor de los casos – no podía mentirle, así eran las cosas en casa conmigo y no creo que haya diferencia con él – luego te abrazará fuerte y de ser el caso estarás sin privilegios unos días y listo, borrón y cuenta nueva.
• No lo haces sonar tan mal – me contesto pensativo
• Bueeeno, tampoco es que querrás repetir la experiencia, no es para nada bonito te lo garantizo – agregue mientras cogí mi almohada para abrazarla, algo me decía que en pocos minutos seria mi fiel compañera –  detesto que lo haga, pero a veces toca, te prometo que papá nunca de los nunca nos lastimaría, antes se corta un brazo.
• ¿Seguro? – mmm el pobre tenía sus dudas, y quien no, vivió malas cosas en manos de un hombre que no era nada suyo
• Mírame, ¿crees que estaría tan tranquilo si supiera que papá va a subir a golpearme hasta que pierda la conciencia? – le dije parándome de mi cama y dando vueltas para que apreciara todos mis ángulos
• No…claro que no – respondió bajito mirando el suelo avergonzado de sus temores
• ¿Ves? – respondí levantando las cejas
• Ahora es mejor que vayas a esperarlo en tu cuarto como ordenó, que seguro no tarda en subir y como están las cosas es mejor no dar más lata – agregue y le regale una sonrisa, para darle ánimos
• Si…..y gracias – dijo levantándose para irse
• De nada… – le sonreí mientras Joel se dirigía a la puerta
• Una última cosa – le dije al recordar lo que pasó en la sala
• ¿Sí? – preguntó volteándose de inmediato
• Cuando suba a hablar contigo no le alces la voz por nada en el mundo y muéstrate muy obediente – sonrió y se fue a esperar a papá en su habitación

Volví a recostarme en mi cama a pensar en lo que acababa de pasar, jamás de los jamases me habría imaginado que el esposo de su madre maltratara a Joel, ni siquiera pensé en que ese señora hubiese tenido un esposo, pobrecito, yo fui realmente cruel al decirle esa frase, pero es que no tenía idea de eso. Creo que debería comentárselo a papá.

La puerta se abrió y papá entró en mi habitación, se veía bastante molesto. De inmediato me puse de pie y retrocedí unos pasos.

• ¿Quieres explicarme que pasa contigo?
• Yo… yo te pedí que me tengas paciencia papi – traté de apelar a su promesa
• Te escapaste dos días del colegio, mentiste, FUMASTE, ¿realmente crees que es cuestión de paciencia? – bueno desde mi punto de vista si, pero claro el no estaba en mis zapatos, así que permanecí en silencio y papá seguía mirándome furioso con sus brazos en las caderas, entendí que quería una respuesta
• Noo – respondí abatido
• No ¿qué? – uy decir esa frase siempre me eriza la piel
• No papá – respondí y me mordí suavemente el labio inferior, de inmediato llevó sus manos a desabrochar la hebilla del cinturón, retrocedí dos pasos
• Paaapiiii – supliqué bajito, no quería que Joel se asustara
• No Raúl, nada de papi, te lo buscaste muchachito – respondió mientras ese instrumento del mal se deslizaba por las trabillas de su pantalón. Papá lo dobló en dos sujetándolo fuertemente por la hebilla como hacia siempre.
• Ven Raúl – ordenó
• NOOO – alce un poco la voz pero no mucho, papá me miró con firmeza
• Raúl sabes que si tengo que ir por ti te ira mucho peor – era cierto,  y aun así ese argumento jamás había funcionado antes…..pero hoy si, lentamente me fui acercando y cuando estuve lo suficientemente cerca papá me tomo del brazo, me giró y de inmediato sentí estrellarse con fuerza el cinturón sobre mi… ayyy
• ZAZZ ZAZZ ZAZZ ZAZZ ZAZZ
• AyayayyaYaaaapapiiiiiyaaaaaYAAaa
• Por mentir – bueno ya tenia una deuda saldada
• ZAZZ ZAZZZAZZZAZZZAZZ
• Nooo, ya noooo, AAAAAAaaaaayyy
• Por faltar a clases – dijo papá soltándome del brazo
• Buuuuuuuuuu – continúe llorando bajito y no puede evitar frotarme, esa cosa quema
• Quítate el pantalón Raúl – ordenó papá, como si preguntara la hora
• NOOOOO, NOOO QUIERO – respondí  suplicante, sabía lo que venía, castigarme por fumar, un hermano de papá murió de cáncer al pulmón por ese vicio y en mi familia se convirtió en un gran pecado, así que  eso sí que iba a estar bien feo y ya me dolía mucho.
• OBEDECE RAÚL EMILIO – ordeno papá, como odio que me llame así
• POR FAVOOOR – volví a suplicar, aunque sé que nunca funciona
• TE LO ADVERTÍ RAÚL EMILIO – era verdad, “si nos volvemos a enterar que fumas te voy a dar con la correa a calzón quitado Raúl Emilio”
• Noo por favooor – volví a mendigar, pero bueno…
• LINDO EJEMPLO PARA TU HERMANO – vaya, ya empezó, mis amigos ya me habían advertido que ser el mayor era una cagada, te portas mal y eres el peor ejemplo, te portas bien y no dicen nada – FALTAS A CLASE, MIENTES, FUMAS Y AHORA DESOBEDECES – joder, era toda una canasta de ingratitudes
• y fuiste muy cruel con ese niño – hizo su aparición mi conciencia, inoportuna como siempre, ¡Aaay¡ como quisiera poder deshacerme de ella, siempre me hace muy malas jugadas
• Uuuuummmmmm – me queje mientras lentamente, muy lentamente me quite mi pantalón, mientras papá acomodaba dos almohadones en mi cama
• Sobre la cama Raúl Emilio – ordeno – si pones las manos serán 5 más – sentencio papá mientras me acomodaba, dejando mi cadera sobre los almohadones, abrace fuerte una almohada y hundí mi cara en ella, sabía que iba a gritar, papá iba a ser muy duro conmigo. De un tirón bajo mi calzoncillo, me sentía indefenso era como si cayera la última barrera de protección de mi dignidad adolescente.
• Paaaaapiiiii – suplique nuevamente
• ZAZZ… ZAZZ… ZAZZ… ZAZZ… ZAZZ… ZAZZ… ZAZZ
• AAAAAAAAAAYYYYYY NOOOO  PAAAPIIIIIIII YAAAA – como dolió, no paro ni un segundo, me quede sin aliento ahogándome en mi propio llanto
• NO VUELVES A FUMAR MAS NUNCA RAÚL EMILIO VIETRI – gritó papá, soltando el cinturón, para que pudiera escucharlo a pesar de mi llanto, yo solo lloraba, me lo busque, lo sé…pero dueeele.

Las caricias de papá me fueron calmando de a poco y sus palabras también

• Ya mi chiquito ya paso, por eso debes portarte bien hijito, ya mi amor ya no llores más

Decía mientras se recostaba con suavidad a mi lado, de inmediato me hundí en su pecho y papá me abrazó y besó  mi cabeza sudada sin importarle que le deje su camisa de seda blanca manchada de lágrimas…entre otras cosas… Cosa que se mesclaran luego con las cosas de Joel… mi medio hermano.