Seres mágicos: Cap. 1; Autora Mary C

Seres mágicos

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 17 de Julio del 2017.

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Capitulo 1

“Lágrimas”

Autora: Mary C.

Mi nombre es Nicolás y son un espíritu, morí bastante joven tenía tan solo 15 años. Fui realmente feliz aunque no todo fuera fácil en mi vida.  Había cosas que me hubiera gustado seguir haciendo, personas a las que quería seguir protegiendo. Como nunca hice maldad a nadie y había fallecido por salvarle la vida a otro, tenía dos opciones inmediatas… uno: podía regresar a la vida, solo que como otro nuevo ser, dos: continuar como un espíritu, esas eran las opciones; pero había una tercera opción que era la que yo quería cuando vi de que eran capaces. Se hacían llamar “Guías”, ellos podían estar cercas de los vivos y ayudarles, podían aparecer y desaparecer, dejarse ver o estar presentes sin que se dieran cuenta, alterar las cosas o la realidad, pero lo que más me encantaba era que tenían la oportunidad de proteger a una persona incluso salvarles la vida y romper con las reglas del tiempo y el futuro. Pero eso no aplicaba para todas las personas, solo para algunos cuántos.

Tengo un año estando a prueba y este seria por decirlo así mi examen final,  se nos da solo dos oportunidades, si en este examen no pasó puedo volver a intentarlo una segunda vez pero tendría que esperar un par de años para eso, si en la segunda vez no apruebo seria todo y ellos decidirían que hacer conmigo y algo que suelen hacer es regresarnos al mundo de los vivos. Tenemos ciertas reglas entre ellas que no podemos salvar la vida de alguien  si el destino ya está fijado tampoco podemos seleccionar a nuestros protegidos. Otra regla es que no podíamos decir quiénes éramos ni quiénes somos, eso nos inhabilita de inmediato y no tendríamos otra oportunidad de presentar otro examen ni volvernos guías.

A los aprendices se les asigna un mentor alguien con más experiencias. Mi mentor es bastante mandón  y quiere todo a la perfección,  es muy fiel a no romper las reglas… cosa que no se me da muy bien y por la que me he  llevado varios jalones de oreja y en el tiempo que llevo de conocerle sé también que es un mirón,  no de los pervertidos, pero si pasaba una joven señorita se le quedaba viendo con picardía en la mirada, de todos modos él lleva más tiempo que yo en el oficio y tiene mucha experiencia, no habla mucho de sí mismo, y por su aspecto se que fue bastante joven cuando falleció.

Las misiones se me asignaron tienen un tiempo determinado y para esta prueba final me dieron exactamente 6 semanas, mi misión es vigilar a  un muchachito de unos 15 años, al cual tengo que aconsejar y en determinado caso cuidar y cambiar su futuro. El primer día me la pase observando la situación, el chico era muy rebelde estando con su familia, es más se sentía una vibra muy pesada a su alrededor. Cuando estaba fuera era como un chico casi común, solo que no media el peligro de las cosas como si se creyera inmortal.

El segundo día estaba en el parque en el que se solía reunirse con una pandilla de amigos, fue complicado conseguir que me aceptaran en el grupito pero después de dos semanas ya me había convertido en su amigo… perdí dos semanas en eso y mi tiempo seguía corriendo. Era divertido estar con ellos lo admito, pero estaba perdiendo mucho tiempo.

A la tercera semana fuimos a un deshuesadero de autos, uno de los chicos tenía un bate y nos pusimos a romper las ventanas que aún estaban intactas, todo fue muy divertido incluso te liberaba del estrés y yo tenía mucho de eso, jeje. El problema llego acompañada del dueño del establecimiento y una patrulla y termino con muchos padres enojados en la estación de policía,  teniendo que pagar por los daño ocasionados… ¿cuales daños si eran carros que no servían?, me pregunte, pero en fin. Fue donde pude conocer más de cerca al padre de Mike el chico al que tenía que proteger, no se veía tan mal hombre, era alto y de porte algo robusto pero no tanto, ya tenía el cabello con canas y su cara demostraba cansancio, no se veía tan viejo pero tampoco estaba en su mejor época.

Mike fue de los últimos chicos a los que pasaron a recoger de la estación de policías, ya que su padre trabajaba a una hora de donde estábamos, eso y el tráfico lo habían retrasado bastante. Como todos éramos menores y lo que habíamos hecho no representaba una falta tan grave solo teníamos que pagar por los daños que según el dueño del lugar hicimos.

Sabía que Saúl mi maestro y mentor me estaba observando,  supongo que pasaría por mí al final para que nadie más lo viera, así que solo tenía que esperar a que el último se fuera para que llegara por mí.  Pero al señor Omar que es el nombre del padre de Mike no le pareció que yo me quedara solo así que hablo con los policías y dio el dinero que me correspondía para que saliera.

• Nicolás: no es necesario señor, pasaran por mí en un rato
• Omar: no quiero que te quedes aquí solo, que tus padres pasen por ti a mi casa o me dices donde vives para llevarte – No era  que tuviera algo importante que hacer, acepte su invitación a ir a su casa diciéndole que mis padres estaban fuera y que lo más probable sería que un primo pasara por mí más tarde
• Mike: te puedes quedar en casa, no hay problema o sí? – dijo con un pequeño toque de enojo en la voz

Omar se lo pensó pero contesto que no había problema.

Así que nos fuimos a su casa, me hice el loco hablando por teléfono  aunque no tan loco porque tenía al otro lado a Saúl que me dijo que aprovechara la oportunidad y que ayudara al joven a resolver sus problemas,  que ya hablaríamos después de las faltas que había cometido… ¡genial!, amenazas… con lo que me encantan. Pase por un momento el teléfono al señor Omar, su pongo que para que fuera más creíble Saúl tenía que hablar algunas palabras con él. Me quede sentado en la sala en lo que el señor Omar y Mike se fueron por un momento,  preste atención a lo que conversaban,  a cada gesto y palabra que decían, tenía un buen oído y me era fácil escucharlos. Algo claro que escuche fue que el señor Omar amenazara a su hijo…. yo estaba en la sala y ellos en el comedor pero aun así, si ponía atención  podía escuchar lo que quisiera aunque hablaran en susurrando a 10 metros lejos de mí… ventajas de mi nueva situación.

• Omar: no te voy a pasar esto Mike, ¿tú crees que no te puedo dar una paliza solo porque está tu amigo? – le pregunto el señor muy enojado – no tienes tu suerte, no te voy a permitir que hagas tonterías hijo… que ya está bueno… – decía el hombre, pero mi amigo no contesto nada, se quedo callado, lo que imagino fue lo que enfado a su padre más de lo que ya estaba – ¿no piensas decir nada, solo te vas a ponerte hacer esos gestos de niño malcriado.
• Mike: no te metas en mi vida…  – uff pensé, esa no es una buena respuesta para un padre  y me dije que tenía que enseñarle eso a Mike… quizás eso tenía que hacer, enseñarle algo de modales – espérate, ¿QUÉ HAAACES? ¡DÉJAME! – grito Mike y eso me lleno de curiosidad sobre todo por el ruido que vino después
• Omar: Passs, pass, passs, pass, passs, passss, passss, passs
• Mike: grrr, mmrr, dejame

Una persona normal solo hubiera escuchado ruidos extraños,  pero yo entendía bien que pasaba. A Mike se lo estaban sonando y como sonaban esos palmetazos eran directamente en la piel desnuda, no eran muy fuertes porque no era un sonido que resonara,  más bien era como una clara advertencia, de igual forma Mike solo rechinaba los dientes del enojo y gruñía muy despacio  según él para que no les escuchara, pero ni se imaginaban.. Me sentía algo mal por el chico, me gustaría tan solo dejar de prestar atención a lo que pasaba pero necesitaba ayudarle y para ello ocupaba saber todo. Tardaron un rato más en la cocina hablando… bueno no exactamente…

• Omar: si me estas entendiendo verdad?? Te estoy hablando Mike o quiere que esto lo terminemos hoy mismo con tu amigo presente – amenazo el padre de Mike sin dejar de sonarlo – Passs, passs, pass
• Mike: arrr aagrrr yaa ya entendí, perdón – dijo  enojado. Solo un poco después salieron como si nada pasara… o algo así
• Nicolás: tienen una casa muy bonita – les dije para tratar de calmar las cosas y para que no creyeran que yo les estuve escuchando
• Mike: vamos a mi cuarto
• Nicolás: bien... con permiso señor
• Omar: adelante

Ese día nos la pasamos hablando en su cuarto  viendo revistas e historietas, poco a poco me empezó a contar de  su vida, no le presionaba con ello porque si lo hacía podía arruinar las cosas. Pase la noche en su casa y por la mañana yo me retire diciendo que mis padres no estaban aún en casa pero que le pagaría.

Menos mal me dejaron ir solo, llegue cansado a donde estábamos “viviendo” Saúl y yo, quería descansar, pero Saul tenía otras intenciones.

• Nicolás: ¿qué? – le dije en cuanto estuve cerca de él
• Saúl: tienes trabajo, no te puedes poner a jugar
• Nicolás: ¡OH!... no hice nada
• Saúl: ¡exacto! no hiciste nada…
• Nicolás: aauuuu suelte, suelta – me dio un jalón de orejas y no tenía intención de soltarme
• Saúl: si lo que quieres es jugar, da por perdido de una vez esta prueba
• Nicolás: no, yo quiero ser un guía… yo lo puedo ayudar
• Saúl: pues deja de jugar que el tiempo corre PLASSS, PLASSS, PLASSS
• Nicolás: auuu, aiii, yaa

Me sobe mi trasero, vamos que tenía la mano pesada eso me había dolido, con una mano termine de sobarme el trasero y con la otra me masaje mi oreja.

Después de ese día no pude hablar con Mike  hasta cuatro días después,  su padre lo había castigado. Paso una semana más y ya éramos buenos amigos, empezó hablar no solo de cosas banales sino de su vida y sus sentimientos pero seguía guardando mucho, el llevaba siempre pulseras en las manos y me dijo el porqué. Pero no era que no lo supiera,  eran cosas que se me dijeron cuando me lo asignaron como protegido… él había tratado de quitarse la vida y las pulseras cubrían lo que era ya una cicatriz de un corte.

Esa era mi misión, hacer que él cambiara, todos tenían un destino marcado y el de él aun no estaba fijado, tenía una oportunidad de cambiar su destino y para eso estaba yo, si fallaba mi misión era porque no le pude salvar la vida y si lograba salvar su vida  sería porque era un buen guía. Los guías no solo estaban para aconsejar, sino también para ayudar en distintas circunstancias, en este caso poder salvar una vida… se nos tenía permitido hacerlo pero no con todos,  solo con aquellos a los que se les asignara un protector o “guía de prueba” o un “guía”, eso era porque su destino aún no estaba claro y para eso estábamos. El futuro de Mike  se podría decir que estaba marcado pero tenía la oportunidad de cambiarse, es donde entro yo y el tiempo se me estaba terminando.

El lunes de la última semana pude ver llorar a Mike, había cosas que no sabía,  no se nos decía todo  a los guías de prueba,  nosotros teníamos que buscar el problema y resolverlo, de ello constaba parte de la prueba. Ese día me puse hablar con él, pero estaba algo difícil… no quería hablar con nadie… pasaron tres días y mi tiempo estaba llegando a su límite, así que fui hablar con el señor Omar, fui directo a donde trabajaba y pedí hablar con él, estuve sentado esperando una hora ya que estaba ocupado y no podía atenderme. El había salido a ver quién le busca y nos fuimos a sentar a un lugar abierto.

• Omar: eres el amigo de Mike… ¿qué es lo que se te ofrece? –  No tenía mucho tiempo así que me fui sin rodeos
• Nicolás: he tratado de hablar con Mike pero se ha enfrascado y no habla con nadie. Esta triste y le he visto llorar y tengo el temor de que intente hacer lo que hizo hace un año – le mostré mis manos, en señal del corte que su hijo tenía. El señor permaneció callado un rato en sus pensamientos hasta que le interrumpí – quiero saber porque esta tan triste, tal vez eso me ayude para poder hablar con él y ayudarle
• Omar: gracias por preocuparte por el – dijo con una sonrisa triste… empezó hablar – hace tres años exactamente… su hermano mayor murió en un accidente… está molesto conmigo porque dice que yo tuve la culpa, pero también se siente culpable él… puede que el único culpable sea yo
• Nicolás: ¿qué paso?
• Omar: Leo mi hijo mayor iba a salir con unos amigos de la universidad, yo necesitaba que fuera a comprar unas cosas así que le pedí que pasara por ellas y que después podría salir a donde quisiera,  él no quería ir porque tardaría un rato en hacer el mandado que le pedí y lo más probable sería que no alcanzará a llegar con sus amigos, al final él fue primero por lo que necesitaba y Mike lo acompaño – Hubo otro momento de silencio – me llamaron diciendo que mi hijo mayor había tenido un accidente, un carro se pasó el alto… todo el impacto se lo llevo el, empujo a su hermano al ver venir al coche – Se detuvo, le era  difícil hablar, se le vea en la mirada y se le oí en la voz
• Nicolás: ¿por eso discuten mucho?, él cree que si su hermano no hubiera ido por lo que le pidió usted él no hubiera muerto – sabía que su hermano mayor había muerto, me había hablado mucho de él, pero no sabía en qué circunstancias fallecido, Omar solo a sitio con la cabeza – ¿pero él porqué se siente culpable?
• Omar: porque las cosas que necesitaba eran para Mike, cosas para la escuela, no quería que él fuera solo y yo estaba ocupado para acompañarlo así que le pedí a Leo que lo acompañara

Pude comprender más las cosas, por esa razón a veces  Mike murmuraba cosas que para mí no tenían sentido, como la vez que le escuche decir “si le hubiera dicho a  papá temprano”, “si hubiera comprado las cosas en cuando salió de la escuela”, “si su padre lo hubiera llevado”. Pero lo cierto era que él hubiera no existe, solo eran suposiciones que se hacían las personas para tratar de que el pasado cambiara pero tan solo con pensar no se podía lograr nada.

Me despedí del señor Omar  y fui a buscar a Mike, el muy carajo no me quiso contestar la llamada y cuando fui a su casa ni siquiera abrió la puerta, así que tuve que entrar por mis propios medio.

• Nicolás: Mike, oye, quita esa cara, que te parece si vamos a jugar, los chicos van a tener un partido de beisbol en las canchas
• Mike: como entraste??? No quiero jugar, vamos vete de mi casa.
• Nicolás: pues te chingas, no voy a ir a ningún lado sin ti.
• Mike: … agggrr no me digas  que eres gay
• Nicolás: ya quisieras, pero no, lamento decirte que no estoy a tu alcance
• Mike: aaggg... tú eres el que  está diciendo cosas extrañas… además como entraste a mi casa, mi padre no está… mamá y mis hermanos tampoco.
• Nicolás: la puerta estaba abierta, tan distraído estas que se te ha olvidado cerrarla – le mentí
• Mike: yo cerré la puerta
• Nicolás: pues no muy bien – Se puso a dudar, por lo menos ya lo había sacado un poco de esa tristeza
• Mike: bueno ya vete a tu casa y déjame.
• Nicolás: ya decía yo que eras un cobarde, no quieres ir a jugar por miedo a perder – su equipo no era tan bueno y los últimos dos juegos los habían perdido
• Mike: no soy un cobarde
• Nicolás: eso dices tú, pero yo creo lo contrario… cookk cokk cookk… gallina

La mirada de tristeza cambio y salimos a jugar un partido de beisbol. En la noche ya se veía más tranquilo así que lo acompañe a su casa, su padre solo me miro con agradecimiento y entraron. Me quedaba poco más de 24 horas para finalizar mi prueba, pasar o reprobar y de ello dependía la vida de mi amigo. Toda la noche me quede observándolo a él y a su familias, tenía un hermano más grande que el cómo por dos años y una hermana tres años más chica.

Esa misma noche don Omar y Susana su esposa entraron al cuarto de Mike y hablaron con él por un rato pero Mike estaba muy encerrado con sus ideas.

Me quedaban escasas horas para terminar y nada estaba  decidido,  me sentía presionado podía sentir la mirada de mi maestro presionando. Me fui toda la tarde a pasarlo con Mike no se veía tan mal pero aun no pasada mi tiempo límite y aun no estaba decidido nada. Estábamos en el parque y él, se paró y se empezó a ir a su  casa, no quiso que lo acompañara, no lo acompañe físicamente pero si estaba cerca de él aunque no me pudiera ver. Se detuvo por un rato en un puente peatonal y se subió a la barandilla, ¡era estúpido o que!… volteé a todos lados, nadie me veía así que me aparecí dándole un susto a Mike pero lo tome de la camisa y lo jale hacia atrás sacándolo del peligro.

• Mike: ¿qué haces aquí?… ¿cómo apareciste?, tu no estabas… como hiciste eso?. ¿Quién eres?? – dijo asustado. En fin sabía que reprobaría por esto, pero si le salvaba la vida diciéndole la verdad para mí sería la mejor recompensa
• Nicolás: soy… bueno… soy un aprendiz de guía… me llamo Nicolás ese es mi nombre o el último que he tenido.  Mi misión era salvarte de este destino – le dijo mostrándole los carros que pasaban por debajo del puente
• Mike: ¿eres un Ángel?
• Nicolás: noo, no estás escuchado… soy un aprendiz de guía…
• Mike: ¿qué es eso?
• Nicolás: se podrían decir que somos la conciencia de las personas mm algo así… nosotros nos encargamos de guiarlos por el camino correcto o ayudarles a superar algún problema aconsejándoles
• Mike: entonces si tengo que morir
• Nicolás: no, no tienes que morir. Con morir no vas a cambiar nada solo vas hacer que  tu familia sea más infeliz de lo que ya es
• Mike: shfh, yo solo quiero regresar a ese día y cambiar las cosas. Shsfff – dijo poniéndose a llorar – a mi papá no le importa, no le importó que mi hermano muriera
• Nicolás: estupideces… como dices eso. Tu papá está realmente triste por la muerte de tu hermano como lo estás tú
• Mike: mentira… nunca lo he visto llorar o estar triste, siguió su vida como si nada pasara
• Nicolás: ¿y cómo sabes que tu papá nunca ha llorado?, como estas tan seguro.
• Mike: porque vivo con él, y nunca ha demostrado…
• Nicolás: p..
• Omar: porque no me puedo derrumbarme, tengo que ser fuere aun que me este deshaciendo por dentro.

Me quede paralizado, en qué momento había llegado… ¿me había visto apareces de la nada? ¿qué iba hacer?… deje eso por un momento y me puse a ver la escena.

Omar abrazaba con todas sus fuerzas a su hijo como si lo fuera a deshacer en ese abrazo, tenía la mirada triste y los ojos llorosos pero aun así se tragaba todas las lágrimas. Mike se dedicó a llorar por un rato hasta que Omar lo levanto del suelo mugroso pero sin despegar a su hijo de su pecho reconfortándolo, bajamos el puente y fuimos a donde estaba su coche estacionado… no estaba muy lejos así que lo más probable fuera que hubiera vista las intenciones de su hijo.

Una vez Mike calmo su llanto se percató de la mirada triste de su padre y vio con detalle como las lágrimas aún estaban presente en sus ojos, algunas lágrimas había caído en el trascurso del camino.

• Mike: perdón papá
• Omar: no vuelvas hacer locuras hijo, por favor – su voz sonaba a suplica
• Mike: nunca más te lo prometo
• Omar: gracias por lo que hiciste – dijo viéndome. Me puse tieso habrá escuchado lo que le dije… lo de ser un aprendiz de guía – siempre has tratado de ayudar a mi hijo y te lo agradezco mucho, eres un buen amigo y las puertas de mi casa siempre vas a estar abiertas
• Nicolás: para eso estamos los amigos – le dije sin saber si ya sabía que no era precisamente una persona
• Omar: lo que no comprendo es de donde apareciste, no te vi, sino hasta que jalaste a Mike – Me puse pálido, pero Mike hablo por mí
• Mike: él ya estaba conmigo papá, él me estaba convenciendo de que no hiciera tonterías
• Omar: gracias
• Nicolás: de nada… pero se está haciendo tarde y me tengo que retirar
• Omar: yo te dejo en tu casa
• Nicolás: no, no hay problema… tengo que pasar a comprar algunas cosas…
• Omar: pues igual te dejo en la tienda

El señor Omar me dejo en el supermercado entre a un baño y me desvanecí de la vista de todos y fui a casa de MIke, llegue incluso antes que ellos,  ya lo estaba esperando dentro de la casa. El hermano de Mike estaba en su recamara y Susana y la niña estaban en la cocina.

Cuando llegaron continuaron hablando pero no dijeron nada de lo ocurrido para no causar más penas a la mujer, se llegó la hora de la cena y todos se sentaron en la mesa,  podía respirarse un cambio de ambiente era más armonioso.

Se hizo hora de dormir y Mike entro a su cuarto acababa de darse un baño y estaba con la ropa de dormir se vía más tranquilo, al poco rato entro su padre y continuaron su conversación, los dos empezaron a sacar todas sus penas y tristezas.

• Omar: nunca más vuelvas a intentar quitarte la vida, eres una de las cosas más importantes de mi vida, ya perdí a un hijo no quiero perder a otro – le dijo con cariño sin dejar de acariciar su rostro
• Mike: te prometo que nunca más lo hare – contesto con voz suave mirando con una leve sonrisa a su padre. Omar respiro fuerte como recordando lo que no estaba muy seguro de hacer
• Omar: ¿recuerdas que te dije la vez que pasó esto? – le dijo tomando su mano y dejando ver la cicatriz, Mike solo se quedó callado viendo al piso, algo rojo. Omar  le levanto la vista para que lo viera a los ojos – si lo recuerdas – murmuro
• Mike: si, papá
• Omar: bien, solo quiero que sepas que lo hago para que te quede grabadito el mensaje de que eres muy importante para mí y que lo que paso no es tu culpa.
• Mike: tampoco es tu culpa papá, perdón por decirte que lo era – dijo por fin, abrazando a su padre en señal de reconciliación
• Omar: gracias por decirme eso – No entendía muy bien lo que pasaba,  ¿qué era lo que tenía que recordar?, ¿qué era lo que le dijo en aquella ocasión?. No entendía nada hasta que la escena se tornó algo incomoda y solo cerré los ojos para no ver. Mike terminó en las piernas de su padre con el pijama y el calzoncillo en los tobillos y una orquesta empezó a resonar en toda la recámara – plaff plaaf plaf plaf plaf PLAF PLLAFF PLAAF PLAAF plaf plaf plaaff plaf PLAF PLAAF plaf
• Mike: AAuaaaa, ayyy grrrr, mmrrrauu, ayyy
• Omar: PLAS PLAS PLAS plaff plaaf plaf plaf plaf PLASSSS, PLASS, PLASSS plaff plaaf plaf plaf plaf PLASSS, PLASSS, PLASSSS, PLASS, PLASSS plaff plaaf plaf plaf plaf
• Mike: Ayyy, yaaa, mmmrrrr,  aaaauuu, ayyy grrrr, mmrrrauu, ayyy

Una lluvia de nalgadas estaba cayendo, solo arrugue  la nariz y salí del lugar parecía que aquello iba a demorar un rato, fuera de la ventana  de Mike estaba un árbol  y me quede acostado en unas de las ramas tratando de no prestar atención a eso… pero aun no me podía retirar quedaba  hora y media  para terminar mi tiempo límite  y todo podía pasar en ese lapso de tiempo.

Estaba algo triste por mi amigo le podía escuchar llorar  pero su padre no le estaba lastimando a lo mejor no se podría sentar cómodamente por un tiempo… también estaba triste porque sabía que  ya había reprobado mi prueba, desde que comencé a presentar las pruebas para convertirme en guía se me  prohibió revelar mi identidad y que si llegara hacerlo reprobaría de inmediato, pero mi amigo estaba vivo así que supongo que valió la pena desobedecer las reglas, me quede meditando en eso, pensando a donde me iban a mandar. Transcurrió una hora,  ya hacia un rato la lluvia de palmadas había terminado y Omar le estaba dando las buenas noches a su hijo como si no quisiera  dejarlo solo esa noche, le dio como mil buenas noche y mis besos en la frente, pero al final se retiró ya era tarde, entre a su cuarto, quería confirmar que estaba bien y que me prometiera que ya no sería tan tonto.

• Nicolás: shhu, ¡no me digas que ya te dormiste! no creo que sea tan fácil dormir en este momento – Mike se me quedo viendo como apenado
• Mike: ¿sabes lo que paso?
• Nicolás: sí – Mike se puso rojo – no es como que seas al único que se lo hayan nalgueado en alguna ocasión – solía ser muy directo con algunas cosas, a mi más de una vez me habían dado de nalgadas como a un crio así que lo entendía, pero solo conseguí que se tapara la cara creo que no use la mejor palabra para la ocasión – pero bueno… tu sabes que tu papá lo hizo porque te quiere mucho, así como quiso a tu hermano, querías ver sus lágrimas y ya las has visto… aun planeas seguir con esas tonterías
• Mike: no, nunca más – dijo viéndome a los ojos con determinación 
• Nicolás: eso espero, porque tú fuiste el examen más difícil que he tenido – y el cual reprobé, pensé para mí
• Mike: ¿ya te vas a ir?
• Nicolás: si, ya termine mi misión
• Mike: gracias por todo, eres un gran amigo… eres como un hermano
• Nicolás: bueno me tengo que ir… pero te lo advierto si tan solo vuelves a pensar en esas tonterías te prometo que vendré a patearle el trasero
• Mike: jaja si claro
• Nicolás: adiós – dije al escuchar una vos que me llamaba… el tiempo había finalizado, su destino había cambiado
• Mike: adiós – solo le pude escuchar

Aparecí frente a varios guías que tenían años en esto,  ellos serían los que me calificarían, respire profundo y solo espere a escuchar esa palabra que tanto temía… tenía la vista en el piso estaba triste pero feliz.

• Alfredo: (guía viejo): tuviste mucho tiempo para resolver este problema, y no solo metiste al chico en más problemas sino que tú también te metiste en muchos por estar jugando… pero al final solo hay un resultado
• Nicolás: aagg
• Saúl: estás aprobado
• Nicolás: ¿queeee? Pero, pero yo
• Alfredo: pusiste la vida de tu protegido antes que tu propio beneficio… demostraste que eres capaz de llevar a una persona por el buen camino, pero aun, no cantes victoria
• Nicolás: ¡¡eehh!!
• Alfredo: aun eres inexperto y te falta experiencia para estar por tu cuenta, así que Saúl será tu mentor hasta que tengas más experiencia
• Nicolás: ¿eso quiere decir?
• Saúl: que eres un guía, ya no estás a prueba pero… aun te falta experiencia y tú vas a seguir a mi cargo por un tiempo
• Nicolás: ¿¿pero ya soy  un guía???
• Saúl: que sí
• Nicolás: geniaaaaal, viva…

Me puse a celebrar como loco… puse atención a lo que me decían los demás guías con experiencias, me daban consejos y me empezaron a dar nuevas tareas. Alfredo me mando a buscar a Saúl que hacia un rato se había marchado,  él me indicaría  quien sería mi siguiente protegido… como guía tenía más fuerza y podía hacer más cosas entre ellas fue poder localizar a mi maestro y llegar directo con él, ¿¿pero qué hacíamos aquí??. Me quede viendo un rato.

• Nicolás: ¿¿Saúl??
• Saúl: sí.
• Nicolás: ¿tú eres su hermano cierto? – dije prestando atención a una fotografía que no había visto, supongo que no tenía que saber que Saúl era su hermano hasta ese momento, en la foto estaban Omar y Saúl que se graduaba de la preparatoria, eran cosas que como guía podíamos hacer,  alterar la realidad ya sea para algún aprendiz (en mi caso) o para un protegido
• Saúl: así es – dijo con una sonrisa
• Nicolás: ¿confiabas en que podía salvar a tu hermano?
• Saúl: eres muy persistente así que confié en ti
• Nicolás: shfff graciassss – dije poniéndome a llorar eso me hacía muy feliz
• Saúl: vamos llorón, que lo has hecho muy bien, ahora tienes que cuidar a otro protegido, pero esta vez no metas la pata y hagas que te lleven detenido
• Nicolás: naaa, eso fue parte del plan
• Saúl: Plasssss – de pronto ya no más me dio un golpe en el trasero… mmm me pregunto si es parte de sus funciones de guía
• Nicolas: aaauu
• Saúl: muévete y deja de alardear
• Nicolás: aaarggg… ¡deja de hacer eso – dije sobándome el trasero