Lazos de amistad: Cap. 7; Autora Mary C

Lazos de amistad

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 15 de Agosto del 2017
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Capitulo 7

Autora: Mary C.

Álvaro se fue al terminar el año escolar una semana después del termino de clases, cosa que también paso con Gabriel; solo que este se fue tres semanas después del terminar el año escolar, se  fue con su  familia a su lugar de origen donde vivían sus abuelos,  los cuales querían que sus hijos Daniel y Francisco se encargaran de unas tierras y un negocio que tenían,  la edad no les dejaba hacer mucho,  Daniel fue el que acepto ya que no estaba yendo bien económicamente hablando, el negocio había decaído y era mejor no correr riesgos, por lo que decidió aquel cambio antes de que empezaran el nuevo año escolar por lo que tendrían tiempo de adaptarse, Mark empezaría su carrera en una universidad cerca de la casa de sus abuelos estos le prometieron al muchacho un carro para que se moviera. Así que Gabriel trataba de aprovechar al máximo las vacaciones de ese año para compartir un poco con sus amigos del lugar y amigo de toda la vida; la que se había sentado a llorar fue  Alondra cuando Daniel le dijo a su hermano que las cosas no estaban bien económicamente y se irían a probar  suerte en el negocio de sus padres.

Solo les quedaba una semana para estar juntos sin saber en cuanto tiempo se volverían a ver, los cuatro chicos la pasaron de un lado a otro,  el jueves un día antes de que Álvaro se fuera, salieron los tres muchachos desde muy temprano, dejando dicho a sus padre que regresarían pronto pues quedaron de salir a ver una película que se estrenaba ese día pero nunca llegaron y los hermanos de los tres chicos ya estaban cansados  de esperar sin duda se perderían la primera función.

• Me dejaron plantada – se quejo Alondra
• Así es el idiota de mi hermano ya deberías acostumbrarte – le dijo Fátima, abrazándola, Alondra estaba muy triste
• Mo tiene caso que se pierdan la película, váyanse, si llegan tempranos yo los llevo – dijo Eduardo mirando el reloj, preguntándose donde se metieron los chicos
• Vámonos entonces – Mauricio se paro dispuesto a salir
• Entonces no necesitamos los dos carros – murmuro Mark
• Yo manejo – le quito las llaves Mauricio
• Tu estas bien pendejo para manejar, además cabemos todos en el carro de mi padre – respondió Mark
• Eee cálmate experto, si tu solo llevas medio año con el permiso – se rio Mauricio descaradamente de Mark
• Si pero el no a tenido ninguna multa – Mario se metió entre ellos – y no me mires malos … que es la verdad.

Así los 5 muchachos se fueron al cine, salieron de ver la película y regresaron a sus casas y sus hermanos seguían sin llegar, los padres ya estaba preocupados pues no habían dado señal de vida y  habían quedado de regresar temprano. Daniel y Francisco habían  salido a buscarles a los alrededores pero  no les encontraron es más, ya había caído la noche y estaban a punto de ir a la policía, pero no fue necesario a las 9  llego una patrulla a casa de Daniel con los tres chicos  que solo veían al piso como perritos regañados.

• Buenas noches señor – saludo uno de los oficiales
• Buenas noches oficial, que es lo que paso? – pregunto Daniel que estaba con las llaves en la mano para ir a la policía a sentar denuncia de desaparición
• Los chicos se agarraron a golpes con un grupito, estaban  en la casa abandonada de la afueras ocasionaron un pequeño incendio y algunos destrozos – le comunico el segundo uniformado
• ¿Los van a detener? – pregunto Antonio
• Solo es una llamada de atención por esta ocasión, en vista de que el incendio no paso a mayores y no  hay una persona que reporte daños materiales, pero que sea una llamada de atención no quiere decir que no pasa nada, una segunda ocasión que sean sorprendidos dañando serán detenidos – contesto el primer policía
• Y eso que significa, que se van a llevar a los chicos? – repitió Antonio preocupado
• No señor, tenemos que dejarlos en sus casas – agrego entregándole en sus manos a sus propios hijos, quedando Álvaro en custodia
• Su padre está por venir no tardara – le dijo Daniel que había llamado a Eduardo por móvil contándole lo sucedido

Los policías esperaron junto a la puerta sin soltar a Alvaro, repitiendo las mismas palabras a Eduardo cuando este se presento, haciendo que el hombre se enfade con las explicaciones dadas por la policía.

• Me dices que mierda tienes en la cabeza? – pregunto Eduardo apenas la puerta se cerro
• Deja te explique – rogo Álvaro
• ¡Claro que me vas a explicar! – dijo mientras se quitaba el cinto de la cintura
• No papá espérate – Alvaro retrocedió
• Saben lo preocupados que estábamos y ustedes todo el día afuera haciendo travesuras – hablo Lety enfadada
• Mamá lo podemos explicar… es que  lo que pasa, es que…
• ZASSSS, ZASSSS, ZASSSSS – pero el cinto de Daniel voló antes de tiempo
• Aaiigrrr – grito Gabriel sorprendido
• No,  lo que hicieron no tiene explicación – grito Daniel enfadado con el cinto en la mano – quiero que te metas a la casa de una vez, ya vamos vas a ver – le dijo moviendo el cinto que ya había caído en su trasero
• Pero – gimió Gabriel triste
• Pero nada, será mejor que entres – contesto su padre muy enojado
• Empieza a caminar Álvaro que estoy así de darte la paliza aquí mismo – amenazo Eduardo mirándolo feo
• No, no papa – contesto rápidamente Alvaro – yo si camino
• ZAASSSS – pero igual Eduardo le calco uno bien dado
• Aaaiipaa si ya estoy caminando – se quejo
• Pues camina más rápido – fue la respuesta de su padre
• Muévete Salvador que estas en muchos problemas – dijo a su vez Antonio
• Pero pa
• No me hagas perder la paciencia ¡adentro! – elevo la voz de nuevo
• Sshff pero papá te lo puedo explicar – Salvador insistió sin querer entrar
• Antonio: quiero que te metas – dijo Antonio tomándole de la mano y dejando caer palmadas fuertes – PASS, PASS, PASS, PASSS
• Shhffaiishh – Salvador se fue rápidamente a su casa las lágrimas ya empezaban a traicionarlo

La cantaleta llego a cada casa, mientras los hermanos solo trataban de ignorar la situación del momento.

En casa de Salvador…

• ¿Qué fue lo que paso? – pregunto Mauricio – ¿Por qué llegaron tan tarde?… anda ya no llores – decía consolando al menor
• Nos hemos peleado shhhff – confeso Salvador con un nudo en el pecho
• Eso ya lo note, pero porque?
• Toño y Sergio se han puesto a decir que como Álvaro y Gabriel ya no van a estar… que no voy a tener quien me defienda – empezó a contarle a su hermano lo sucedido en medio de llanto e hipos – pero yo no necesito que me defiendan, empezamos a pelear, nos empezaron a insultar… pero ellos se fueron y se escondieron en la casa abandonada donde estaban tres amigos de ellos, los buscamos y los encontramos pero no sabíamos que eran más… y pues la pelea se salió de las manos – le decía mirando sus manos –    ellos llevaban una vela con la que prendían los cigarrillos, no sé en qué momento se empezó a quemar una cortina y la empezamos apagar y en eso lego una patrulla… shhff papá me ha pegado fuerte y está enojado – y se abrazo a su hermano, ahora mismo necesitaba mimos
• Se le va a pasar como siempre – respondió Mauricio acariciando su espalda

En casa de Álvaro

El chico no dejaba de llorar, era su ultimo día y no había podido estar con su novia, y de pilos su papá le había dado una paliza y tenía que acomodar todas sus cosas que aún no guardaba, dejo un cambio fuera y se  fue a bañar viéndose el trasero, vaya recuerdo que le quedaría, tenía algunas franjas rojas en todo el trasero y no deja de llevarse las manos atras, aun le dolía.

• ¿Ya terminaste de bañarte? – pregunto su padre impaciente
• Ya casi.
• Pues apresúrate que ya es tarde
• Ya voy shff.

Se apresuro y se cambio, era las 10 de la noche, no era tan tarde pero aun tenían cosas que arreglar para salir temprano.

• ¿Cómo se te ocurren tantas tonterías Álvaro? – le pregunto Fátima cuando salió del baño
• ¡Calla! – le dijo entre dientes faltaba que lo mortificara
• Dejaste a tu novia plantada – le recordó
• Shhff de seguro está enojada conmigo… y mañanas nos vamos a ir temprano shhff – y se puso a llorar de nuevo
• Ve a verla es temprano – le dijo con lastima su hermana
• Papá no me va a dejar ir está enojado
• Ve a preguntarle,  nada pierdes, pero serias muy tarado si te vas sin despedirte de ella, todavía que la dejas plantada – y lo ataco por el lado del honor

Álvaro se fue al cuarto de sus padres donde estos estaban acomodando algunas cosas, entre papeles y ropa.

• ¿Pa? – musito lo más bajito posible
• Terminaste lo que tenias que hacer? – dijo serio Eduardo sin dejar lo que hacia
• Ya casi – dijo entrando al cuarto
• Pues ve a terminar
• Pa – repitió con miedo..
• ¡Que paso?
• Puedo ir hablar con Alondra – le pido mirando el piso
• Tú qué crees? – respondió enfadadísimo su padre, todavía quería salir
• Pero pa..
• No seas así, es el último día que vamos a estar aquí, deja que vaya a ver a la niña – intercedió su madre
• Mmgg… bien ve pero no te tardes entendido.
• Gracias pa.

Álvaro salió corriendo a casa de la chica donde la encontró en la sala de su casa, estaba en el sofá con la cabeza pegada al piso y los pies en la recargadera del sofá.

• Hija llego Alvarito – le dijo Sandra a su hija mirándolos con pena – …aa muchachitos pero que no se están quietos verdad – dijo pasando su mano por la cara del chico que tenía un golpe en la cara por la pelea que tuvieron
• Es que somos jóvenes – vaya estupidez pensó avergonzado – Alondra… Alondra perdón… ¿estás enojada verdad?
• ¿Y tú que crees?  Me dejaste sola, se supone que íbamos a ver la película, era el último día que estaríamos juntos
• Perdón, perdón. Shhf di que me perdonas
• Ustedes no tienen remedio – murmuro Alondra
• ¿Me perdonas?
• Si te perdono.
• Mira te e traído esto – dijo Alvaro entregándole una caja –  te lo iba a dar después de la película…
• ¿Que es?
• Ábrelo

Alondra se paro del sofá y abrió una caja de regalo, era un hipopótamos de peluche muy bonito que llevaba un collar con un dije de corazón.

• Aaaaaa gracias – dijo emocionada y dándole un abrazo el cual le hizo caer de trasero, reacción que solo ocasiona una cara – uups perdón.
• Hija pobre chico, ya tan jóvenes y ya lo estas maltratando… - dijo con una sonrisa Francisco – ¿Estás bien?
• shhaaa si, estoy bien
• Perdón… de verdad estas bien? – pregunto Alondra
• Si estoy bien, no es que sea la primera vez que me castigan.
• Ni la última – dijo la madre de Alondra sin poderlo evitar

Álvaro solo se avergonzó pues los padres de Alondra no pudieron esconder una risita a las gracias que hacían  los chicos, lo más seguro era que uno de sus muchachos estaría en las mismas condiciones.

En casa de Gabriel

• ¿Pero yo qué? – reclamo Mark
• ¿Cómo, que tú que Mark? – le respondió Lety enojada – tengo toda la semana diciéndote que recojas esa cascara de naranja y solo la cambiante de lugar
• Es otra mamá, no es la misma – quería convencerla a toda costa
• Que otra ni que nada Mark es la misma de hace dos semanas
• Aaagg… como están enojados con él ya me regañas a mí, no tienen consideración por uno – reclamo y su  madre le dio un tremendo tirón de orejas – … AAAAA maaaauuuuuu.
• Recoge la basura y la vas a tirar
• Mmmaaa me vas a arrancar la oreja
• No, si no va hacer lo único que haga, estoy así de ponerte en mis piernas y darte las nalgadas que te mereces,  cuanto llevo diciéndote lo mismo, ni cuando tenias 5 años, si ya te está faltando tu buena nalgasera – lo amenazo su madre elevando un dedo
• Maaa que no tengo 8 años – dijo ofendido por las amenazas
• No, no tienes 8 años, estas peor que un niño Mark, escondiendo todo en vez de limpiar, ¿cuándo fue la última vez  que limpiaron el cuarto? – pregunto con suspicacia, quería guerra, guerra tendía
• Shhh yo si limpie mi parte – dijo desde la cama estaba acostado solo con el bóxer y unas notorias franjas en las piernas y el los muslos y algunos otros que no se veía
• Eso no es limpiar Gabriel
• Pero  la basura está en su lugar maa
• Y la ropa? – pregunto su madre mirando todo tirado
• La sucia en el bote
• Y la limpia.
• ¡En los cajones! – grito
• ¿Doblada?
• Pero maaa, si de todos modos la tengo que desdoblar – dijo y fue basta, Lety alzo la regla del escritorio – … no mami, no…– rogaba saltando de la cama
• Saca la ropa y la doblas que yo ¡no la voy a planchar! – dijo aun con la regla en la mano –  y tú también Mark que ya esta bueno, en dos semanas nos vamos y ustedes tienen todo un desastre
• A ma te vas hacer mas viejita – contesto Mark
• CRASSS, CRASSSS – y dos reglazos le regalo su  madre con gusto
• Auuuuu
• A recoger – dijo con regla en mano – ¡los dos!
• Ya voy ma… ya ves todo por tu culpa – Gabriel le metió un codazo a su hermano
• ¿Yo? tu también tienes la culpa – dijo frotándose el trasero

Al poco rato en casa de Alondra se escuchó un golpeteo en la ventana.

• Aaa cuidado enana casi me pegas – le dijo Mark al entrar a la cara de Alondra – … ee romeo que haces en casa de mi niña?
• Vine a despedirme – contesto Álvaro de mala gana
• Aaaa te estoy viendo ee – dijo en señal de que lo estaba cuidando
• Y ahora porque los regañaron? – claro imposible no escuchar pensó Alondra
• Mi mamá… disque, que no limpiamos el cuarto – contesto Mark con una sonrisa
• ¿Qué haces con mi prima? – pregunto Gabriel de mal humor
• Es mi novia, y estoy despidiéndome… tu ¿qué haces en calzones? – le pregunto Álvaro mirando feo a Gabriel
• Ni loco me pongo el pantalón, ve como me dejaron – dijo mostrando dos marcas del cinto
• Áaagg… uuu… no alegues que a mí también me pegaron… ¿pero porque no te pones algo de ropa?
• Tengo ropa, se llama bóxer, que tu solo uses calzoncillos no es mi culpa – respondió Gabriel sentándose en el piso
• No es cierto, yo uso Boxer – dijo rojo de vergüenza pues era cierto que los usaba, se le hacían más cómodos que los bóxer pero para su edad era raro el chico que los use
• A ver si es cierto – lo reto Gabriel
• No te los voy a  mostrar – respondió Álvaro con cara de loco
• Es que tiene calzones jajajaja
• ¡Que no! – contesto enérgico Álvaro
• A ver pues – insistió Mark
• Estoy en  casa de mi novia, no puedo hacer eso, no soy como ustedes
• Si trae calzones – dijeron a coro Mark y Gabriel  viéndose con una risita
• Aaagrrrr
• Jajaja… anda ya idiota no reniegues – le dio un codazo suave Gabriel – ya los dejamos tortolitos porque si no límpianos mi madre nos da de reglazos…
• Cuidadito con tus manos Alvarito eee – lo amenazo Mark –  buenas noches Hermanita. Y adiós y buen  viaje mocoso – se despidió Mark dándole un abrazo
• Hablamos después – le dijo Gabriel a Álvaro
• Adiós – dijo con una sonrisa definitivamente extrañaría a sus amigos

Por la mañana los cuatro amigos fueron a despedir a Álvaro ese sería su último día que se veían  y no sabían cuando volverían a verse…