viernes, 3 de noviembre de 2017

Hermanastros: Cap. 15; Autor Pablo

Hermanastros
一一一一一一一一一一一一一一一
Los derechos de autor de este texto pertenecen única y exclusivamente a su autor. No pudiendo ser publicada en otra página sin el permiso expreso del mismo.
Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 3 de Noviembre del 2017.
一一一一一一一一一一一一一一一 
 Capitulo 15
Rondando la Parca

Autor: Pablo

Issac:

Estuve con los mellizos en la piscina toda la tarde, mi papá había salido a vernos un rato pero no me llamó para la charla que dijo que tendríamos. No sé si se había olvidado o es que ya no quería hablar conmigo, prefería no pensar mucho en eso porque me daba vergüenza la escena de “nadie me entiende” que había hecho en el cuarto delante de todos. Al menos no estaba Renzo en ese momento porque ese si era desubicado para hacer bromas y seguro lo usaba en mi contra.
Este se estaba convirtiendo en uno de los días más aburridos del verano, Gian estaba de mal humor, supongo que porque le había pegado mi papá y Renzo estaba con él hablando en secreto, así que aproveché para hacer unos clavados porque tampoco estaba de buen humor. Se estaba terminando el día y como Marco estaba peleado con papá, aunque él quisiera ya no me iba a poder ayudar a que me den permiso para ir a la competencia de Triar el sábado. Sabía que no podía competir porque no me había inscripto pero al menos podía ir a practicar y ver a mis amigos, pero parece que me las tenía que arreglar solo. Creo que di mil clavados hasta que a las siete salió papá a llamarnos para entrar a la casa.
Estaba muy raro, hablo poco, dijo que tenía que salir pero no dijo donde y cuando le pregunte me respondió que tenía cosas pendientes. Eso me hizo sospechar que algo pasaba porque siempre que iba a algún lado nos decía, no tenia problema en contestar las preguntas que le hacíamos, no como el abuelo que si uno le preguntaba respondía que él no tenía que dar explicaciones a los mocosos o decía frases como “ahora resulta que el árbol mea al perro” que me daba gracia hasta que entendí a que se refería. Después de cambiarnos me mando a buscar a Marco porque quería que baje a ayudarnos, no me gustaba cuando nos ponían a limpiar, odiaba limpiar, pero cuando se peleaba Marco con papá prefería hacerlo solo a soportarlos enojados “ayudando”, pero como no estaba el horno para bollos no dije nada y fui a hacer lo que me había dicho.

  • Dice el papá que bajes a cenar – le dije entrando al cuarto, Marco estaba jugando con el celular y salió del juego para ver la hora
  • Son las siete y media recién – dijo y se sentó en la cama
  • Es que hay que ir a ayudar – le expliqué, a mi me habían mandado a sacar todo de las alacenas y después tenía que ayudar a lavar y mi mamá no había empezado a cocinar nada – la má está haciendo limpieza de todo en la cocina por lo que no estuvimos toda la semana – repetí lo que me había dicho ella aunque mi papá no quería que se lo diga a Marco
  • Ha… entonces quiere que vaya a ayudar no a cenar – Marco también estaba raro, como triste, era raro porque cuando le pegaban él se enojaba y hablaba mal de papá, no se ponía así – ¿por qué no me dices que baje a ayudar en vez de a comer? – no me pregunto de mala manera sino como extrañado

Yo también me había extrañado cuando mi papá me había dicho que le diga eso, era una mentira tonta si de todas formas lo iban a hacer limpiar. Además Marco no era malo, si había que ayudar lo hacía, no le gustaba, como a mí, pero no se negaba a hacer las cosas; es más muchas veces el proponía limpiar de la nada, porque a veces mi mamá no estaba y la señora que limpiaba no daba abasto sola pero mi mamá no quería contratar a nadie más porque no quería extraños en la casa.
Marco decía que la casa era chica pero eso es porque la comparaba con la casa en la que vivían cuando estaban en Los Ángeles o esa donde vivía ahora su mamá, pero nuestra casa también era grande, solo que tenía una sola planta con desniveles que hacía que nuestra habitación quede más arriba que el resto de la casa y el altillo si estaba en otra planta pero solo era para guardar cosas. En fin, era mucho para limpiar, pero no tenía idea de porque papá no quería que le diga a Marco que todavía no estábamos por comer aunque tenía mis teorías.

  • Supongo que no quiere que te niegues a bajar – le dije encogiendo los hombros – o que te la agarres conmigo si estabas enojado – eso era algo que no solía pasar, Marco no se enojaba conmigo cuando se peleaba con papá aunque papá me usaba para no tener que decirle las cosas directamente a él, tal vez papá no quería hacer enojar a Marco
  • Yo no hago eso – no lo dijo enojado sino como dolido, no sé si estaba cansado o qué, pero no se veía bien – sabes que no me enojaría contigo por pelearme con papá ¿no?
  • Ya lo sé – le dije aunque si lo había hecho un par de veces, parecía que Marco necesitaba que yo le responda eso, estaba medio raro definitivamente, extraño hasta en su tono de voz, como… sensible
  • Perdón por lo que te dije hoy, de que era tu tío querido – me dijo y se levantó de la cama y pasó el brazo por mis hombros
  • Claro – le respondí, ya ni me acordaba de eso, había sido una tontería y no solíamos pedirnos perdón por cosas así, solo hacíamos como que no había pasado nada y ya; tal vez había pasado algo más con papá y por eso los dos estaban así de apagados –  ¡ah! – me frené porque me acordé que tenía que hacer otra cosa – también dice que bajes tu plato para... – y vi que su plato estaba lleno – ¿No comiste nada del medio día?
  • No tenía hambre – me dijo y juro que parecía que iba a llorar
  • Es mejor que lo tires así no se enoja el papá – le dije y busque donde tirar la comida – Va a ser peor si ve que no comiste
  • Ok – respondió y se sentó en la cama, mejor dicho se dejó caer en la cama dejando en claro que yo me tenía que ocupar de la comida
  • Lo pongo en esta bolsa y cuando él se vaya y la mamá este distraída la saco – era una tontería pero no sé porque quería contarle mis planes para su plato de comida despreciada
  • Gracias – volvió a hablar como si no tuviera fuerzas para vivir, me estaba asustando, no era normal que este así – ¿a dónde se va el papá? – recién me miró desde que había entrado al cuarto y vi que tenía los ojos rojos
  • Dijo que “tiene cosas pendientes” – entrecomillé con las manos y Marco levanto una ceja – no quiso decir donde pero ya se tiene que ir por eso quiere que bajes antes
  • Bueno vamos así no se enoja – ¿que no se enoje?, tenía que hablar con Marco porque lo normal sería que si está enojado quiera hacer enojar mas a papá, no era lo más inteligente claro, pero así era él y dudaba que justo hoy haya aceptado mis consejos, esto me causo algo que no se explicar pero que lo sentí dentro mío… una premonición
  • ¿Estás bien? – le pregunté, uff, no sé con qué cara le pregunte eso, pero no podía aguantar ya ese cambio tan radical de un momento a otro, algo… algo se ha roto
  • Si… ¿Por qué? – me pregunto extrañado, con la mirada apagada
  • ¿Desde cuándo no quieres hacer enojar al papá? – tuve que decir y el suspiro antes de contestar un poco enojado
  • Desde hoy, no tengo ganas ni de verle la cara ¿sabes?, pero como vivo aquí al menos no pienso hablar con él ni en un sentido ni en el otro – asentí en respuesta sin entender o mejor dicho sin querer entender lo que creo estaba dándome a conocer, necesitaba tiempo para asimilar aquello, pero no podía hacerlo ahora, tenía un montón de preguntas en mi cabeza pero no podía formular ninguna y no solo porque no estaba con las ideas ordenadas sino porque él se levantó de la cama bruscamente para que bajemos juntos

Papá no hablo con nadie más y se fue, no supe si estaba enojado o que le pasaba y cuando le pregunte a mamá me dijo que solo estaba muy ocupado con cosas del trabajo pero estaba claro que me estaba mintiendo. Al final la noche fue la misma porquería que el resto del día, limpiamos en silencio, comimos en silencio y a las diez nos fuimos a dormir porque nadie quería verse la cara más de lo necesario.

  • Buenas noches – dije a todos cuando apagamos la lámpara de Marco y solo respondieron los mellizos porque Marco ya se estaba durmiendo
  • Buenas noches – dijeron los dos, estaban durmiendo en mi cama porque aunque nosotros teníamos un sofá cama para armar y catres bajo la cama, nadie había tenido ganas de acomodarlas sabanas y era obvio que ni pagado Marco cedería su espacio ni a mí ni a sus enemigos
  • Dijimos buenas noches Marco. ¿por qué no respondes? – dijo Renzo levantando la cabeza detrás de Gian para mirar, habían tratado sin éxito alguno conseguir de él una respuesta desde que mi padre había salido, pero Marco los había ignorado como todo un maestro, cosa que hasta a mi me dio miedo, Marco sin gritar estaba dejando clara su postura y era difícil discutir con alguien que ni te mira – ¿Todavía estas enojado porque te pego tu papito? – siguió como siempre el idiota de Renzo, me daba ganas de pegarle un golpe pero me contuve, no iba a empezar una pelea de nada y menos dar un motivo a mi madre o padre para castigarme – es eso ¿cierto? – no era muy bueno haciendo bromas, era muy tonto y molestaba como un pendejo pero era un pesado y encima era fácil hacer enojar a mi hermano y eso me preocupaba que Marco caiga en sus provocaciones
  • No lo molestes Renzo – dije pero Marco ni siquiera abrió los ojos y yo sinceramente no creía que ya estuviera dormido, estaba fingiendo o mejor dicho su guerra había empezado, su guerra fría
  • ¿Encima necesita que lo defienda su hermano? – que mierda podía ser Renzo en serio, era obvio que quería seguir provocando, creo que es de ese tipo de personas que no son felices si no hacen maldades, pero como Marco no decía nada yo también lo ignoré
  • Cállate – dijo Gian al final, creo que emputado como yo de sus payasadas y lo empujo para que deje de apoyarse en él para poder vernos
  • ¿Que tiene? – se hizo inocente y volvió a sacar la cabeza para molestar
  • ¡Basta boludo! no seas pesado – dijo Gian y lo volvió a empujar, Gian estaba empezando a perder la paciencia
  • No es mi culpa que sea tan “sen-si-ble” – podía no ser bueno haciendo bromas pero su insistencia cansaba a cualquiera, así que me acosté bien y me tape la cabeza con la almohada para no escuchar, o al menos para no escucharlo fuerte, porque se oía o mismo
  • Basta Renzo no seas idiota vamos a dormir – y ahí se escucho un golpe, Gian acababa de golpearlo harto de la insistencia de su hermano
  • ¡AUU! – me asome a ver pero ya habían apagado la lámpara que había de mi lado del cuarto – Solo estaba jugando. No pasa nada... ¿Verdad llorón? – era obvio que no podía evitar joder y complacerse provocando, lo que me hacia poner como loco, en cualquier momento la mecha de Marco se agotaría y todos seriamos historia
  • ¡Dije basta! – Ellos estaba todo el tiempo “peleando” no eran como mi hermano y yo, nosotros nos llevábamos mejor, pero en realidad nunca peleaba de verdad, pero esta vez parecía que Gian si se había enojado porque se escucho otro golpe
  • No seas bruto – se quejó Renzo, creo que le había pegado en la espalda o el pecho por como escuchó – solo estaba jugando
  • ¡Y yo dije que pares! – estaban hablando casi en secreto pero estaban molestos, sobre todo Gian que le volvió a pegar a Renzo, esa vez ya ni me levante a ver, no me iba a meter en su pelea
  • Auu – se quejó pero no dijo nada más y al fin pudimos dormir

Marco parecía que se había dormido apenas toco la almohada, como siempre o al poco de eso, lo envidie ese momento porque yo tuve que dar un poco de vueltas cuando la parejita de mellizos se calló por fin, y me quede mirando la silueta de Marco a través de la luz tenue del patio, estaba respirando suavemente, pero se quejaba y hacia unas muecas raras en el rostro, parecía que lloraba dormido, finalmente el sueño pesado lo acudió del todo, que capacidad que tenia para hacer eso, no sé si por las pastillas de la epilepsia o era algo suyo, pero yo me tardaba una hora en poder dormir y cuando por fin lo estaba logrando empecé a escuchar de nuevo las voces de los mellizos.

  • Te estás pasando para mi lado – se quejó Renzo ¡mierda! que cagada, no definitivamente no iba a poder dormir, iba a decirle que se calle pero Gian hablo primero
  • No busques roña porque no te hice nada
  • ¿Nada? Me pegaste y te estás pasando para mi lado – tenia sueño y el reclamo de Renzo era muy tonto, si seguía no me importaba que me digan buchón, le iba a decir a mi mamá, o a mi papá si es que ya había vuelto porque no oí la movilidad llegar
  • No te pegue fuerte y no me pasé
  • Si te pasaste – siguió insistiendo, no quería que sepan que yo estaba despierto así que gruñí imitando como hacia Marco cuando se estaba por despertar
  • ¡shh! ¡Vas a despertar a los demás! – dijo Gian hablando muy bajo – Quiero dormir Renzo, mejor la terminamos acá porque si no te voy a pegar de verdad – lo amenazó
  • Y yo le voy a decir a Sergio – después decían buchones a los otros cuando ellos era iguales
  • No le vas a decir nada a nadie porque no podemos dar más problemas estúpidos
  • ¿Qué te pasa? – no se veía mucho con la luz del baño pero pude ver que Gian se había movido, creo que lo tenia del cuello o algo porque además la voz de Renzo sonó asustada
  • Pasa que los papás nos mandaron aquí para descansar de nosotros – dijo Gian y se acostó de nuevo, yo cerré los ojos porque se giró para mi lado y no sabía si él podía verme – lo mínimo es no cagarla
  • ¿Recién ahora te preocupa?, el que hizo enojar a Sergio fuiste tú – eso era verdad
  • No quise ¿bueno? Yo quería hacer las cosas bien y no me salió – no sé que se supone que quería hacer, yo había estado ahí y el solo molestó a Marco
  • ¿Bien? Le pegaste al def..
  • ¡No digas así! – interrumpió y no supe que iba a decir pero era claro que estaban hablando de mi hermano –  quedamos en que no lo íbamos a hacer ¡mas! – en ese momento me entro la duda y abrí los ojos para darme cuenta que Gian ya no estaba mirando para mi lado
  • Quedamos en que no se lo íbamos a decir a él – le contesto Renzo medio confundido
  • Es lo mismo… y yo no le pegue, él me pego, si sabes que me gana – en eso Gian tenía razón, Marco sabia pelear y al menos cinco trompadas le había pegado a Gian antes de que llegue papá y Gian solo se había podido defender
  • ¿Y porque te pego Sergio? – supongo que papá si había sido injusto
  • No quiso escuchar nada… igual me hubiera pegado porque yo empecé a bardear – al menos no era un mentiroso, hubo silencio por un rato y creí que ya se habían dormido, pero Gian volvió a hablar – le mande un mensaje a mamá y no respondió, creo que ellos están enojados así que no hagas quilombo o vamos a dormir bajo un puente – mi papá no haría algo así por mas enojado que esté pero no discutí porque parecía haber funcionado para que Renzo se calle.
  • Ok – respondió y al fin pude dormir


Sergio:

Anoche no había dormido nada, en la tarde mi padre me había llamado de urgencia según Amalia, solo para pedirme que pasara por su casa para hablar; se suponía que ellos iban a salir a cenar pero por alguna razón suspendieron los planes. Acordamos que a las ocho de la noche iba a estar ahí porque antes tenía que hablar con mis hijos y arreglar un poco la casa ya que había olor a humedad y polvo por que había estado cerrada una semana.
Fue un error posponer la reunión con mis padres porque estuve todo el día pensando en que podía suceder como para que me pida que vaya y las veces que intenté retomar la conversación con Isaac que era la que me parecía más urgente terminaba retrocediendo. Por un lado porque lo veía entretenido en la piscina y no quería interrumpirlo cuando lo veía que estaba pasándola bien y por otro lado porque no quería enfrentar más problemas. Se suponía que iba a ser un buen día, el primero desde el casamiento, pensé que al fin íbamos a recuperar la paz después de tanto movimiento que había causado la organización los últimos meses en los que me había arrepentido de querer hacer una fiesta en varias oportunidades.
Cuando fue hora de irme intente dejar las cosas en paz pero Marco me huía como siempre, Gian parecía haberse unido al club para ignorarme y Renzo me decía con la mirada que me estaba despellejando en su mente, por solidaridad con su mellizo supongo. El único que parecía no detestarme era Isaac y yo estaba en deuda con él. Al final me resigne a que tendría que arreglar las cosas cuando volviera o al día siguiente en todo caso.

  • Estuve haciendo mal las cosas con los chicos y te agradezco que me hicieras darme cuenta – me dijo mi madre después de hablar trivialidades durante la cena, las cosas parecían formales porque esperamos hasta que vino mi hermana y no tocamos el tema hasta que terminamos de comer
  • ¿Qué pasó con los chicos? – preguntó Sara, ella no los visitaba mucho porque además de vivir más lejos que yo, a su esposo se le dificultaba moverse en sillas de ruedas dentro de la casa de nuestros padres. De todas maneras me parecía raro que no sepa nada con todo lo que hablaba por teléfono con mamá
  • Estuvieron portándose mal – respondió mamá con una mueca que pretendía ser una sonrisa, ella y papá habían estado muy serios durante la cena
  • Mamá los estuvo apañando – matice porque si íbamos a hablar no tenía sentido disfrazar las cosas
  • Sergio – dijo mi padre, me llamó como si me estuviera dando una advertencia, incluso mi hermana se sorprendió de aquello, yo era un adulto y no iba a permitir que me degradaran a mocoso
  • Si nos llamaron a hablar es por algo; entonces hablemos honestamente – dije y como ninguno respondió continúe para aclararle las cosas a Sara – mamá los estuvo apañando y ahora se están pasando de la raya
  • No es tan simple Sergio – me dijo mamá ofendida, eso que aun no les había dicho como de simple que había cortado los problemas en casa con Gian
  • ¡OH! vamos mamá yo estuve aquí ayer – le respondí, no podía creer que pretenda seguir apañándolos
  • Sergio deja hablar a tu madre – mi padre volvió a hablarme como si le molestara que yo hable, como si yo tuviera doce años y me estuviera pasando de la raya
  • Vamos papá ¿no me vas a decir que ahora estas de su lado? –   le pregunte porque aunque eran raras las ocasiones en que lo hacía cuando yo era chico, pero mi madre podía persuadir perfectamente a mi padre si quería – ¿me vas a decir ahora que mamá tenía razón?
  • No – me respondió molesto – pero ahora entiendo algunas cosas
  • ¿Qué vas a entender? no entendía para que nos llamaba, a mi no me tenían que dar explicaciones de como criaban a mis hermanos, es más, prefería que no me digan nada, a que los estén excusando – Mamá perdón pero no hay excusas para estar pasándole las cosas y de ultima es asunto de ustedes. No los voy a cuestionar – deje en claro – pero tampoco pretendan que no sentemos de palco a ver como las cosas se desmoronan
  • No entiendo que tenemos que ver nosotros en eso –interrumpió Sara – ¿es que necesitan ayuda con los chicos? – preguntó y tomó la mano de mi madre sobre la mesa para darle apoyo porque ya se la veía afligida, mientras me miraba mal como si yo tuviera la culpa
  • No necesitamos ayuda con los chicos por ahora pero si tenemos que explicarles algo – le respondió mi madre hablándole solo a Sara, perfecto ahora me ignoraba
  • Yo no quiero explicaciones mamá – le corté, mi madre tenía tendencia al melodrama – ustedes verán como los educan pero ya me quedo claro ayer que Marco tenía razón cuando se quejaba – me molestó mucho aquello, había discutido con mi hijo, lo había retado e incluso le pegue una vez por decir que mi madre era injusta creyendo que me mentía cuando decía que cuando mis hermanos hacían algo no los retaban y a mis hijos si. Me molestaba saber que yo trataba de ser parejo e incluso era injusto con mis hijos porque no podía ser muy duro con mis hermanos y ellos hacían esto
  • Te estás desubicando Sergio – me espetó Sara, para ella era fácil, hacia su vida y solo aparecía en fastas y fechas especiales
  • No dije nada que no sea verdad – le respondí y después miré a mi madre para dejarle unas cosas en claro – no estoy peleando – dije y me acerque a mu madre para agarrarle las manos, la note intranquila – no me voy a desaparecer – aclare mirando a Sara esta vez, y me parecía justo que se de cuetna de su error, porque ella si se peleaba con mamá y después no respondía ni las llamadas hasta que se le pasaba, al punto que había estado un año sin hablar con nuestros padres cuando yo volví al país después de divorciarme – ni voy a dejar de lado a los mellizos, solo voy a seguir como antes, sin meterme en la disciplina que les dan pero sin obligar a mis hijos a venir – como era de esperarse mi madre empezó a llorar en silencio, al parecer ella estaba consciente de que su actitud lastimaba a mis hijos, pero no pude decir nada y fue cuando mi padre me apartó con brusquedad – son bienvenidos en mi ca…– intente suavizar las cosas pero mi padre abrazo de manera posesiva a mi madre y me miró de mala manera
  • ¡Basta Sergio!me gruñó mi padre pegando la cara de mi madre en su peche si los llamamos no fue para hablar de tus hermanos, fue para decirles que tu madre tiene cáncer...


Y el mundo acaba de abrirse bajo mis pies…


13 comentarios:

  1. (Puedo decir cada uno tiene lo que cosecha pero no lo voy a decir porque luego dirán que soy insensible)
    mm hasta que se dio cuenta como es que pone a sus hijos a un lado por culpa de sus hermanos!!
    Oye no sabía que tenía una hermana mm oh no recuerdo la verdad si lo leí...
    Ya decía yo que ibas a hacer justicia e ibas a matar a la señora por grosera con sus nietos...
    Chany tienes que continuar pronto porque yo ya estoy con dudas de que es lo que sigue y los mellizos viviendo en casa de su hermano no es opción!!
    Y de verdad que ese Renzo es fastidioso pero con ganas!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No lo voy a decir? Jaja ya lo dijiste.
      La nombro a la hermana dd sergio en otros capis. Es la madr del primo que les lleva la compu cuando sergio moja la consola de juegos. Pero tuve q leer xq no me acordaba el nombre y resulta que nunca la puse nombre jajaja

      Eliminar
  2. Woo... pero me dejas inconforme yo quería otro capitulo T.T
    Que decir de este capitulo, me a encantado, mas que nada es el desenlace de todas las emociones que van cargando a todos los personajes.

    Los mellizos son muy torpes para hacer las cosas, uno trata de hacerlas bien y al otro tiene un pajarito cantando en su cabeza (no piensa antes de hacer las cosas).

    Issac es el que esta viendo que algo anda mal con su hermano tiene buen ojo para percatarse de las cosas, pero siguen con la idea de ir a esa competencia eso le traerá problemas :S si va.

    Marcos a entrado a una deprecio... me gusta que ignore a todos mejor menos problemas se gana. Aunque su padre no esta dando prioridad a su hijo eso lo sigo pensando. si bien su padre lo apoyo un poco en la conversación que tuvo con sus padre siento que las prioridades cambiaron.

    Y con respecto a la abuela.. okey tiene canser pero no le da derecho a ver tratado a sus nietos de esa manera. justifica a los mellizos y el comportamiento de estos solo por el hecho de estar enferma y no es justo yo creo que la "Sangre es primero" y ahora el abuelo hará lo mismo, y Sergio de igual forma?? espero que no, porque lo único seria que va alejar mas a su hijo de lo que ya esta logrando. Con esta enfermedad que ira hacer Sergio? va a llevarse a sus hermanos a vivir por un tiempo? espero que no, porque seria una ruptura y distanciamiento mas fuerte con su hijo.

    No se porque, pero la señora sigue sin caerme bien, y de pilón empieza a llorar :S

    Me encanta espero el siguiente capitulo :)
    MaryC

    ResponderEliminar
  3. Que bueno que Sergio haya pensado un poco mas acerca de su hijo y todo el conflicto con los gemelos lo malo es que debio hablar con el antes de ir a la casa de sus padres, es una pena que la señora tenga cancer pero siento que con lo que se acaba de enterar se olvidara de la situación en su casa y en lugar de solucionar las cosas las va empeorar... la tormenta se acerca y Sergio ni se entero.

    Erina

    ResponderEliminar
  4. No se alomejor lo estaba protegiendo por que sabría que otra vez estaba por quedarse uerfanos de madre otra vez pero creo que con los nietos se pasó no se lo que van hacer con los mellizos pero sería mejor que quedarán con sus padre porque si seguía se los queda en casa yA vale a ser mucho y más como ésta Maco qué no sabemos que le esta pasando por esa cabecita yo también quería otro Capi lo dejastes en lo más interesante
    Un besote

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Al fin alguien que no pide la cabeza de la abuela en bandeja... y sip a mi tambien me daria pena que los mellizos pierdan otra madre...pero ni yo se que va a pasar TT

      Eliminar
  5. Ahora si que las cosas se estan poniendo feas, y creo que sera peor para MArco sobre todo si los mellizos no se van a su casa, espero que encuentren un punto medio para todos.

    Olivia

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Punto medio... desastre total... arreglar las cosas... mmmmm que hacer?
      Jaja me enxanta que t preocupe Marco

      Eliminar
  6. Esto se ve feo por todas partes, pero a mi el que me preocupa y mucho es Marco. Todo está mal y parece que se va a poner peor, pero Chany, no metas a los mellizos en la casa de Sergio plisssss!!!! Yo estoy pensando si acaso... la epilepsia de Marco no habrá afectado su reacción, o apatía o su hambre o su depre, no sé . . . Algo me huele mal. Continúaaaaaaaaa
    Grace

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Grace creo que habrieron votaciones paea no dejar a los mellizos en casa de Sergio, voy a tener que hacer caso?

      Eliminar
  7. Pues acá con noche de insomnio poniéndome al día y solo queda decir...LO SABIA!!!! TENIS CÁNCER!!! Y conste no es que me alegré pero se lo que es eso y lo que está haciendo ella no es justificable no le puede pasar todo por encima y se entiende que el no quiera llevar a sus hijos más donde su abuela ahora espero que deje de autolamentsrse la vieja y se de cuenta que tiene que salir adelante

    ResponderEliminar