Solitarios
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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 16 de Febrero del 2018.
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El mejo San Valentin de Ryoga
Capitulo único
Ryoga - Akane - Akari
Autora: Nicole
- Hoy es un día muy importante en mi vida, finalmente he tomado la decisión de confesarle a Akane mis verdaderos sentimientos, pero antes iré por un ramo de flores y una caja de chocolates – hablaba Ryoga mientras salía de su casa
En otro
lado de Tokio…
- Ranma, ¿Sabes qué día es hoy? – una molesta jovencita de cabellos cortos se acercó a su prometido
- Viernes ¿Por qué – preguntó confundido el chico de cabello trenzado, mientras veía la tele
- Sí, eso lo sé, pero hoy…
- ¡Entonces para que preguntas! – respondió de forma brusca sin despegarle la vista al televisor
- ¡IDIOTA! – Exclamó furiosa
La menor de las Tendo fue a la cocina, agarró una cubeta,
luego la lleno de agua y se fue nuevamente hasta la sala, el muchacho al sentir
que el agua hizo contacto con su cuerpo la insultó.
- ¡ESTUPIDA DE MIERDA! – Ranma en su forma femenina se puso de pie frente a Akane – ¡¿QUE DEMONIOS TE PASA?!
- PLAFFFFFF – sonó la bofetada en el rostro de la pelirroja –¡Cállate ingrato! como puedes olvidar una fecha tan importante
- Fecha importante ¿De qué diablos estás hablando? Pero si hoy no es mi cumpleaños. ¡ESTAS LOCA!
- ¡ESTO SI ES EL COLMO RANMA! HASTA AQUÍ LLEGO NUESTRO COMPROMISO, NO QUIERO VOLVER A SABER NADA DE TI NUNCA MÁS EN MI VIDA – salió corriendo del Dojo Tendo, dejando a Ranma solo, en la casa pues Genma estaba en la clínica del doctor Tofu trabajando y el resto de la familia Tendo en Okinawa, pues querían ellos pasaran solos y fortalecieran su compromiso
- Akane lunática, siempre con su mal genio. Desearía que no fuera mi novia – declaró Ranma volviendo a su estado normal
Mientras tanto Ryoga iba caminando algo distraído (lo
usual en él) con un enorme ramo de rosas rojas y una caja de chocolates suizos
de marca exclusiva, había agotado la mitad de sus ahorros en esos regalos para
el amor de su vida, cuando de pronto ve a lo lejos a Akane Tendo con un semblante depresivo y va tras ella.
- ¡Akaneee! – grita desesperado al ver que le pierde el rastro – ¡OH NO! ¡AKANEEE!¡¿DONDÉ ESTÁS?! – siguió llamándola dando vueltas en un callejón sin salida
- En el Dojo Hibiki
- Así que estuviste esperando a Ryoga desde ayer en la tarde – el sr. Hibiki conversaba con una hermosa jovencita de ojos café claros y mirada tierna
- Sí señor, quedamos de vernos en el parque de la calle 7, por ser el día de San Valentín, pero como Ryoga es tan distraído, seguramente se volvió a perder – ella suspiro preocupada
- ¡Si, que muchacho este! Que falta de respeto haberte hecho esperar y tener el descaro de no aparecer – el abuelo frunció el ceño – Ya va a ver apenas entre por esa puerta – añadió
- Señor por favor no castigue a Ryoga, no es su culpa; él tiene problemas para orientarse y yo lo entiendo.
- Está bien Akari, solo porque tú me lo pides, se lo voy a pasar por esta vez
- Gracias señor, sabe me – Akari no pudo continuar porque oyó que alguien tocaba la puerta de la residencia Hibiki con desesperación
- Pero quien podrá ser, espérame aquí muchacha, iré a abrir – Ichiro abrió la puerta y…
- Aka… Aka… Akane… ¿Dónde es… donde es…estás…? – Un mugroso Ryoga calló tirado en el piso y con el Ramo de rosas rojas vuelto una pena, lo único que estaba intacto era la caja de chocolate
- ¡Oh Ryoga mi amor! ¿Qué te paso? – La dulce Akari lo ayudo a entrar
- ¿Dónde estabas jovencito? ¿Qué son estas las horas de llegar? son las 6:00pmy aquí está Akari esperando por ti desde ayer en la tarde y mira tú que irresponsable te comportas con ella – Ichiro lo retaba mientras la chica de cabellos verde le limpiaba el rostro
- Akari, siento mucho lo que paso – se incorporó con algo de dificultad – Mira ten, son para ti – le entrego el ramo hecho una porquería y la caja de bombones suizos, pero el abuelo le arrebató el ramo a la muchacha y reprendió a su nieto
- Ichi – iba a llamarlo por su nombre, pero recordó la última vez que lo hizo en un rio, tuvo una no muy agradable experiencia – Abuelo ¿Cómo se atreve?
- No señorito como te atreves tú a entregar este regalo en semejantes condiciones, ¿Qué no tienes vergüenza?
- Ryoga no contesto, solo volvió a pedir disculpas a Akari, mientras, su abuelo se dirigía a la cocina para dejar a los chicos a solas
- Akari voy arreglarme y te llevaré a cenar – anunció sonriendo
- De acuerdo cariño – asintió la jovencita
Ryoga se bañó rápidamente y se vistió con el mejor
smoking que tenía, se puso perfume y colocó una su tradicional cinta en la
cabeza, se veía espectacular aquel mozo de dieciséis años que cuando se
apareció nuevamente frente a su chica, casi se le salen los ojos a esta al
contemplar la belleza del chico-cerdo.
- ¡Ryoga querido que guapo luces! – comentó haciendo que Ryoga se sonrojara mucho
- Si mi amor, tú también estás hermosa como siempre – le cogió la mano y le dio un tierno besito, el corazoncito de Akari latía a millón – Nos vamos mi princesa
- Si mi amor.
- ¿A dónde quieres…? – no termino la pregunta porque sonó el teléfono y fue hasta a su cuarto para cogerlo, dejando a la chica en la puerta esperando
- RING… RING…
- ¿Aló? – se apresuró en contestar
- Ryoga, quiero conversar contigo podríamos vernos – Akane hablaba con voz quebrada
- ¿Akane que te pasó? ¿Por qué lloras?
- Es que Ranma – Empezó la chica a contar…
- No te preocupes nos vemos en media hora en la casa amarilla que está al lado del restaurante del señor Tanaka
- Gracias Ryoga
- Para eso estamos los amigos – respondió el cerrando el teléfono
Ahora sí, es mi oportunidad de decirle a Akane que la
amo, pero ha vuelto Akari desde tan lejos para verme. No debería, ella siempre
me amado sin condiciones y es tan hermosa, pero aun no puedo olvidar a
Akane ¡Oh Kami no sé qué hacer! ¿Akari o
Akane...? es que me gustan las dos, las amo a las dos, Akane por ser mi primer
amor, una de las pocas personas que me mostró afecto cuando más lo necesite, y
Akari porque me acepta aunque sea un cerdo. ¡¿Qué difícil situación?!, pensaba
Ryoga, para tomar la decisión más correcta. ¡Lo tengo! saldré con ambas, ¡si,
eso haré!
Ryoga planeo todo perfectamente (debía volver a casa a
las 10:30pm por ser menor de edad y porque su abuelo cerraría las puertas con
candado, Ichiro es re estricto con el horario, y eso fue motivo de discusión
aquella tarde antes de salir a sus dos citas, pues el chico quería
volver a la hora que se le daba la gana, y no soportaba que le controlaran el
tiempo, al final después de tanto argumentar tuvo que conformarse con la hora
puesta por su joven abuelo) para verse con sus dos amores, entró al restaurante
del señor Tanaka y pidió dos órdenes de sushi de salmón con té verde y de
postre pasteles de arroz rellenos de frijol, entre otras cosas mientras
conversaba con Akari…
- Mi amor, sabes amo como eres, tan lindo y caballeroso, además de fuerte, que bueno que te conocí – decía con mucho amor la bella señorita Unryu
- Akari yo también me alegro de conocerte, ¿Quieres ir a la casa amarilla, que está al lado? – preguntó pícaro
- Pero creo que tenemos que pagar y yo no tengo para…
- Tranquila – él la callo tiernamente poniendo su dedo índice en la boca de la nena – Yo cubro con todos los gastos, tú no te preocupes
- ¡Qué lindo eres amor! – lo abrazó fuerte mientras se dirigían a un cuarto en aquella pensión, pagó una habitación en el segundo piso para él y Akari.
- ¿Te sientes cómoda? – preguntó él ya dentro de la habitación con su novia, parado al lado de la cama
- Si – ella se recostó en la cama que había dentro
- Mi amor, desde hace tiempo quería estar así contigo – se colocó ahora en la cama al lado de su prometida, mientras acariciaba sus largos cabellos verdes y empezaba a besar dulcemente su cuello
- Yo también – ella se giró hacia él y le miró fijamente – Me gustas tanto – empezó a acariciar los pectorales de su chico.
- Akari ¿Quieres tomar algo...?
- ¡Sí! un jugo de frutas estaría bien…
- Bueno, espérame aquí que ya vuelvo – se incorporó y salió de la habitación, bajó rápidamente las escaleras para toparse con Akane en el primer piso
- Hola Ryoga tanto tiempo sin verte – Akane se abalanzó sobre Ryoga y empezó a llorar mares
- Calma Akane, vamos… no te pongas así, ven – Akane abrazó al chico-cerdo con mucha más fuerza, este espero hasta que se tranquilizara para luego guiarla a una habitación que había apartado para ambos
- Ryoga ¿Qué hacemos aquí? Pensé que hablaríamos en un lugar más público – la chica de cabellos azul corto se puso incomoda, aquello definitivamente la tomó por sorpresa
- Akane relájate – le explicó con calma y paciencia como solía ser él con ella la mayor parte del tiempo – No te haré nada que tú no quieras ¿De acuerdo?
- Si pero – dudando
- Tranquila – tomo ambas manos besándoselas tiernamente y le pidió que contara sus penas – ¿Qué fue lo que te paso con Ranma?
- Bueno, la verdad es que mi relación con él no va muy bien desde hace tres meses, nos herimos verbalmente. Por otro lado, Ranma no está interesado en trabajar, quiere que mi padre lo mantenga a él y al tío Genma toda la vida aun cuando nos casemos. El muy cínico no respeta nuestro compromiso, duerme en casa de Shampoo todos los fines de semana. Si esa zorra siempre se interpone entre nosotros, y claro él la prefiere solo porque tiene enormes senos y viste de forma atrevida. Ay como aborrezco a esa mujer, tan ofrecida; como se atreve a meterse con un hombre ajeno. ¡No es más que una puta barata! Pero lo que más me enoja es que el muy ingrato olvida que hoy cumplimos cinco meses de ser novios por voluntad propia. Ryoga me siento mal, deprimida, no sé qué voy a hacer, la verdad quiero mandar a Ranma al diablo, pero a la vez lo quiero cerca – Ryoga escuchaba cada palabra que salía de la boca de Akane con rencor, como era posible que después de todo lo que le había hecho en los últimos meses, prefiriera a ese cretino en lugar de él que siempre había estado con ella en los buenos y malos momentos; escuchando sus decepciones y apoyándola siempre
- AKANE ¿CÓMO PUEDES AMARLO? ¿CÓMO PUEDES SENTIR ALGO POR ALGUIEN COMO RANMA EH? – agitó de los hombros a la hija menor de Tendo
- Ryoga ¿Que tienes? ¿Porque me hablas así?
- ¿SABES QUE TENGO AKANE? ¿SABES QUE TENGO? ESTOY HARTO DE VERTE SUFRIR POR ESE SER TAN VIL Y DESPRECIABLE LLAMADO RANMA SAOTOME, Y SABES QUE ES LO QUE MÁS ME ENFURECE Y ME COLMA LA PACIENCIA QUE SUFRAS Y LO SIGAS AMANDO. YO NUNCA PENSÉ QUE ME DOLIERA TANTO ESTO QUE – el chico eternamente perdido no podía hablar, sentía atorado el pecho, era el sufrimiento del amor no correspondido
- Ryoga mira, yo no quería que te pusieras así. Fue mi culpa llamarte, tú no tienes por qué cargar con mis problemas, después de todo tú y yo solo somos amigos
En el segundo
piso de la pensión
- ¿Qué pasará con Ryoga que se tarda tanto? – se preguntó Akari preocupada, mirando la calle desde una ventana que había en el cuarto
En el primer piso
de la pensión
- Tu y yo solo somos amigos… tu y yo solo somos amigos… Tu y yo solo somos amigos – esa última frase retumbaba en el cerebro del chico distraído
- YA BASTA AKANE, ¡CALLATE! ESTOY HARTO DE SER TU PAÑO DE LÁGRIMAS, ESTOY HARTO DE OÍR TUS LAMENTOS, ESTOY HARTO QUE AMES A RANMA Y SABES ¿POR QUÉ? PORQUE YO TE AMO, TE HE AMADO EN SILENCIO DESDE YA HACE MUCHO TIEMPO, Y SIEMPRE QUISE DECÍRTELO A LA CARA Y NO ME IMPORTA QUE ME RECHAZES, YO SOLO QUERÍA CONFESARTE MIS SENTIMIENTOS
- Pero Ryoga, yo no sé qué decir, tu – Akane estaba petrificada
- No digas nada, yo me retiro. No tengo nada más que hacer aquí. Me queda claro que Ranma es el dueño de tu corazón. Pero una cosa te digo Akane: “SIN IMPORTAR A QUIEN AMES, MI AMOR POR TI NUNCA CAMBIARA – Ryoga iba saliendo cuando Akane salió de su estado de catatonia
- Ryoga no te vayas, espera. Yo fui una ciega, siempre te utilice para desahogarme y no me di cuenta del daño que te cause, pero ahora, que te tengo en frente y has confesado tus verdaderos sentimientos, quiero decirte que me gustaría que lo intentáramos y si no funciona, pues cada quien por su lado ¿Qué te parece?
- Akane ¿hablas enserió? O solo lo dices porque me tienes lástima, dime la verdad por favor
- Claro que no Ryoga. Lo digo de verdad – repitió la chica, mientras se acercaba al muchacho y lo cogía de la cara para plantarle un apasionado beso en los labios
- Akane mi amor siempre espere este momento – Ryoga cerró la puerta de la habitación cogió a Akane cargada y la acostó en la cama, inmediatamente se colocó encima de ella acariciándola por encima de la ropa de pronto se acordó que había dejado a Akari en el otro cuarto – Akane hermosa – se puso de pie nuevamente – Me esperas un momento debo ir a preguntarle algo a la chica de la recepción, la joven de cabellos cortos asintió con la cabeza y Ryoga se fue a ver a su prometida oficial, en el otro cuarto
Ya dentro de la otra recámara:
- Akari mi reina linda, ¿Me extrañaste mucho mi amor?
- Ryoga ¿qué pasó con el jugo de frutas que me prometiste?
- Oh lo olvidé por completo princesa, pero que tal si, mis besos te quitan la sed.
- Ryoga querido, creo que mejor nos vamos a casa son las 9:30pm y debes volver a las 10:30pm, recuerda lo que te dijo el abuelo
- Aun me queda una hora. Además ya estoy grande y llego a la hora que se me antoja, descuida – dijo muy seguro
- Pero tú abuelo me dijo en privado que – Akari se contuvo de decirle, tal vez Ryoga se molestaría con el comentario…
- ¿Qué te dijo Ichiro nena? – preguntó Ryoga desabotonando la blusa blanca de la muchacha, dejándola solo con su lindo sostén blanco con encajes en los costados y empezó a acariciar los pezones de la jovencita con ambas manos – ¿Te gusta mi corazón?
- Si Ryoga me encanta – ella estaba bastante excitada, él se desvistió rápidamente, quedando solo en bóxer, luego cogió a su chica y la sentó en la cama, seguidamente, procedió a levantarle la faldita a cuadros que casi siempre vestía, le bajo sus calzoncitos blancos hasta medio muslo y así teniéndola a su disposición, empezó a lamer su sexo, mientras con sus manos desprendía su sostén para dejar desnudos sus enormes y redondeados senos, en lo que ocurría aquella escena, la chica Tendo esperaba su turno en el otro cuarto, el chico eternamente perdido lo recordó y dejó lo que había empezado para dirigirse hacia el otro cuarto cuando…
- Ryoga ¿a dónde vas…?
- Tengo que hacer algo muy importante – Respondió
- Deja eso, mi amor – se levantó de la cama y rodeo el cuello del chico-cerdo con ambas manos – Quiero estar contigo!
- Lo siento Akari, pero tengo algo urgente que hacer – sé marchó rápidamente a la otra habitación
- Ryoga ¿por qué tardaste tanto, y que haces en calzoncillos? – Akane estaba realmente confundida de verlo así, el despistado se sonrojo mucho y busco la excusa perfecta
- ¡Tengo calor! No era nada importante – contesto también la primera pregunta – Yo lo que quiero es estar contigo – Rápidamente, el chico, le bajo la ropa a Akane dejándola solo en calzones y sostén. La chica se asustó por un momento, pero luego se calmaron los ánimos…
- Ryoga que te pasa no vayas tan rápido, es mi primera vez con un chico – esa declaración de Akane, hizo que al muchacho se le iluminaran los ojos, Akane es virgen, es decir que seré el primer hombre es un su vida pensó
- Está bien Akane, entiendo… ¿Quieres tomar algo? – la chica de cabellos cortos asintió. Ryoga llamó al servicio del hotel y le trajeron jugo y adicional licor fuerte. Se sirvieron una cantidad considerable de tragos, pero sin llegar a emborracharse. Lentamente el muchacho hizo otro intento por acariciar el cuerpo semidesnudo de la chica.
- Ryo…Ryogaa...
- Si, dime mi amor
- Por favor, tócame aquí
Akane guio las manos del chico hacia su húmedo y ardiente
sexo, al escuchar aquella frase e insinuación, se sintió realizado, sonrió
maliciosamente, entretanto sus mejillas se tornaban rojas,
su mente se llenó de
morbo, pero era lo esperado, pues
tenía a
Akane para él sólito e iba a
hacer realidad aquellos sueños locos que habían
estado en su cerebro desde hace
tanto tiempo y nunca se imaginó que
sería el paraíso. Lentamente
empezó a acariciar el sexo de su amada por encima de aquel calzoncito blanco
que cargaba, mientras lamía su cuello haciéndola gemir e inclinar su cuerpo así
adelante, Akane estaba con los ojos cerrados, disfrutando cada momento. Su
mente se nublo, que no se dio cuenta
cuando fue despojada de sus prendas íntimas,
mojada completamente colocó una teta en la boca de su
amante, para luego tirar de sus
ajustados bóxers y teniendo acceso a aquel bocadillo, empezó a lamerlo cual caramelo, provocando
con ello que el susodicho repitiera su nombre completo una y otra vez con pasión desmedida; susurro al oído de ella
un te amo… ella se estremeció y le correspondió, recorriendo
con sus finos
labios cada centímetro de su formado cuerpo, despertando
en él sensaciones de gran placer; rosando levemente su sexo contra el de su
pareja, y así entre caricias y besos apasionados, Akane gime con un poco de
dolor, al sentir el sexo de Ryoga dentro de ella, entre embestida y embestida aquel dolor dejó de serlo para transformarse
en un placer intenso llegando al límite de aquella noche ardiente y sensual.
Finalmente caen los dos sudorosos y rendidos, en aquella cama uno al lado del
otro.
Amaneció y Akane, ya no estaba, pero en su lugar dejo una
nota, que Ryoga leyó al despertar.
Ryoga fuiste un
gran amante, me hiciste sentir la mujer más hermosa y deseada del mundo.
Gracias, TE DESEOy espero que muy pronto nos volvamos a ver. Del uno al 10 te doy un 11. Besos…
Akane Tendo.
El ego de Ryoga aumentó considerablemente después de leer
aquella carta que no le dio importancia al reloj que marcaba las 4:00 am de la
madrugada, fue al cuarto donde estaba Akari para recoger su ropa y vestirse.
- ¡Oh por Kami! Deje a Akari, en el otro cuarto ¡¿Cómo pude ser tan estúpido?! – exclamó subiendo las escaleras en calzoncillos, pero al entrar a la habitación solo encontró su smoking porque Akarino estaba, pero en su lugar dejo también una nota:
Ryoga. Tuve que
irme. Sé que estas con Akane. No soy tan tonta como crees, pero no te
preocupes, aun te amo y comprendo tu situación, cuando aclares tus sentimientos
hablamos.
Akari Unryu.
Pd.
Vete para la
casa, tu abuelo me dijo que te castigaría durante una semana de día y de noche,
si llegabas después de las 10:30pm. No sé a qué se refiere, pero me dijo que tú
conoces sus métodos disciplinarios.
- ¡Ichiro y sus tonterías! ¡Como si tuviera diez años! – se cruzó de brazos y torció la boca de forma infantil – Seguro Akari va a querer romper conmigo ¡No es justo! – añadió ahora molesto, cogió el teléfono que había en la habitación y pidió una botella de licor del más fino y fuerte cuando se lo trajeron, se tomó siete copas casi seguidas mientras lloraba porque su prometida seguro no iba a perdonarlo tan fácilmente – Ahora que todo se estaba arreglando, bueno pero ya no mi importa, me voy a casa, allá ella si es la que quiere cortar – hablaba con la voz quebrada
Akariiii no me dejes por favor siguió en su lamento unos
minutos más hasta que se calmó y decidió partir a su casa, llegó a su
residencia a las 7:00 am, toco la puerta, su abuelo fue a abrir, entro tan
fresco y tranquilo como si nada hubiera pasado, no había nadie en la
residencia, pues sus padres estaban en Shikoku, Shizuka con su novio en
Yokohama y Mei de compras en el centro. Ichiro con un semblante serio le indico
a Ryoga que fuera a su habitación que estaría castigado durante un mes y además
recibiría una buena tunda durante una semana, dos jornadas con el cinto y la
zapatilla.
- Pase para su cuarto y me espera en la esquina con los pantalones y calzoncillos en los tobillos – anunció el abuelo
- No pienso ir a ninguna parte. Soy grande ya para ese tipo de castigos, además no he hecho nada grave – replicó el chico de ojos marrones
- Te hable y no lo diré más o subes y esperas tu castigo por las buenas o te subo yo por las malas y te doy el doble – añadió el señor
- ¡Si, como no! ¡Oblígame a ver si puedes! – le reto rebelde
- ¡Ryoga Hibiki! Tienes cinco minutos…
- ¡Vete a la mierda! Yo no voy a hacerte caso. Que te quede claro. No eres mi padre, además tengo dieciséis, soy casi un adulto, así que puedes meterte tu advertencia en culo y dejarme en paz, si eres tan amable y si no, pues desaparece de mi vista, te largas a tu cuarto y no me ves la cara hasta que se te pase la amargura porque yo te dije que yo me mando solo y…
- PLAFFF – Sonó la palmada directo a la boca de chico – ¡A mí me respetas mocoso insolente!¡Yo no soy igual a ti! – espetó el abuelo sacándose la correa y allí mismo le dio vuelta y le propino siete cuerazos encima de la ropa
- ¡IMBECIL! ¡QUITAME LAS MANOS DE ENCIMA! ¡NO TIENES DERECHO A HACERME ESTO! – empujó a Ichiro y esa fue la gota que colmó el vaso, quien no perdonó tal agresión
- ¡ZASS! ¡ZASS! ¡ZASS! ¡ZASS – una serie de cintazos con fuerza considerable cayeron encima de los pantalones de vestir del chico, quien dio un leve brinco por el impacto del cuero sobre la mitad de los muslos; a pesar de estar aún con ropa, aquellos azotes resultaron quemantes, pero no sé quejo.
Su abuelo lo
condujo hasta el estudio con algo de dificultad pues Ryoga ya no era un
niño y tenía bastante fuerza, pero como el abuelo era joven y aun podía con él.
Lo arreó a correazo limpio a su futuro
destino.
- Suelta…suéltame – trato de librarse más no pudo
- ¡ZASS! ¡ZASS! ¡ZASS! ZASS! Cállate y camina ahora si vas a conocerme ¡ZASS! ZASS! ¡ZASS! ¡ZASS! ¡ZASS! – y siguió hasta que llegaron a la habitación
Ya dentro, el abuelo le echo una bronca a Ryoga que tuvo
que soportar completamente en pelotas, pues a regañadientes y apunta de azotes
lo obligo a bajarse la ropa y asumir su posición para el castigo, mientras iba
por la temida vara, era la primera vez que el chico distraído la probaba, pues
Ichiro siempre lo había castigado con la zapatilla de goma o de esparto o bien
la correa, esta última desde que cumplió catorce, pero esta vez dada la
gravedad de la falta tenía que ser más severo Siempre las palizas a culo visto,
pues era lo tradicional en la familia Hibiki.
Y así pues estaba Ryoga en aquella antigua
mesa de despacho, con la cabeza y la espalda inclinadas hacia delante,
las piernas entre abiertas y el culo bien arriba esperando para ser castigado.
El abuelo volvió y comenzó el castigo; con la vara en mano descargó una buena tanda
de azotes midiendo muy bien su fuerza, ya que no buscaba lastimarlo, pero si se
aseguraría que su culo quedará bien escarmentado. Ryoga estaba seguro que no se sentaría por
una buena temporada, los varazos eran dados en tandas de diez, de arriba hacia
abajo, y en diagonal, abarcando todo su trasero sin dejar ni un solo espacio
sin castigar, aquello picaba como el demonio, el adolescente daba respingos,
metía ambas manos de vez en cuando y se
movía de su posición evitando que su abuelo lo castigara a gusto.
- ¡swich! ¡swich! ¡swich! ¡swich! ¡CULO EN ALTO! ¡CARAJO! – dijo el abuelo. Ryoga obedeció, pero no pasaron ni tres segundos y se movió nuevamente sobándose la retaguardia desesperado, el dolor era insoportable Jamás había probado algo semejante
- ¡SWICH! ¡SWICH! ¡CULO EN ALTO! ¡SWICH! ¡SWICH – volvió a repetir Ichiro al tiempo que lo ubicaba en su posición, y le regalaba otra tanda de azotes más, ahora en la parte baja de las nalgas. Ichiro le advirtió que cada vez que se moviera, al final de la tunda le daría cinco azotes extra. Sin embargo el jovencito volvió a moverse en tres ocasiones más, por lo que había acumulado quince azotes adicionales, que Ichiro no perdonó
- Que sea la última vez ¡swich! ¡swich! que usted me vuelve a faltar ¡swich! ¡swich! el respeto ¡swich! ¡swich! usted aquíobedece y llega a la hora que yo le digo ¡swich! ¡swich! como vuelvas a ¡swich! ¡swich! nuevamente a las siete de la mañana y con aliento a alcohol ¡swich! ¡swich! No solo te calentare el culo ¡swich! ¡swich! Te lo dejaré más bien señalado en condiciones que no te puedas sentar en meses ¿Te quedo claro?
- AUUAUAUUUUUU AHHHHHHHH SIIIII ME QUEDOOO CLA…CLAROO PARAAAAHH ABUELITO AUAUAUAAU NO LO VOL…VOLVERE HACERR MMMMGGG POR… POR FAVOR – Ryoga lloraba y pedía clemencia.
- Ya está, ya está hijo, ya paso todo – lo cubrió en un abrazo y le dio un beso en la frente.
- Me duele mucho abuelo – sobándose desesperadamente, dando saltos en círculos
- Si lo sé y lo que te va a durar, creo que será mejor que pienses antes de actuar, espero que está paliza te ayude a reflexionar y a no volver a comportarte como lo hiciste hace un rato. Y recuerda que toda esta semana es de castigos. En la mañana con el cinco y en la noche con la zapatilla.
- Pero abuelo aun me duele mucho, no creo aguatar, por favor – La cara de Ryoga se llenó de lagrimones que cubrían desde los ojos hasta la comisura de los labios
- Lo siento, es solo tu responsabilidad. Recuerda hijo, la próxima vez. Te lo piensas antes de desobedecerme y te evitas estos problemas – Es que él ya le había advertido, pero el niño era demasiado testarudo para seguir reglas básicas – Por hoy descansa mañana será otro día – el chico solo bajo la cabeza avergonzado, tendría que afrontar lo que viniera, había cometido varias faltas gordas y sabía de sobra como era su abuelito con los castigos, el sr. Hibiki se fue a la sala de la casa a descansar un rato.
A la mañana siguiente Ryoga despertó con el dolor
terrible en sus asentaderas, su abuela lo miro, pero no dijo nada, sabía que
por algo el culete del adolescente estaba en esas condiciones, en los últimos
meses el muchacho, había estado de un insoportable, queriendo hacer lo que se le venía en gana,
no respetaba las normas, llegaba a la hora que quería, era muy grosero con sus
familiares. En fin, estaba inaguantable pero era lo normal en la edad de los
dieciséis cuando crees que te puedes comer el mundo. Y ahí teníamos al
protagonista de nuestro San Valentín luciendo el traste rojo cual dibujo en
forma de corazón con pequeñas marcas de
la vara; algo hinchado desayunando de pie, viendo la
tele de pie, ya que no podía hacer
ninguna actividad que
implicara usar tan vulnerable zona, así que estaba como Adam en el
paraíso con una gran vergüenza, por tener que mostrar su culo rojo y sobre todo
los genitales a su abuelita.
Luego de desayunar se fue al cuarto y se tiró bocabajo,
al rato entra el abuelo con la correa en la mano doblada en dos, acto seguido,
mando a Ryoga a pararse de la cama y a agarrarse los tobillos sin
doblar las piernas, posición fácil para él porque es
flexible, pero en aquel momento su adolescente trasero estaba en muy malas
condiciones, pero pusiese le cómo se le pusiese el culo, recibiría una buena
cuera con el cinto grueso de Ichiro, y así colocado en posición, cerró los ojos
esperando el primer correazo, manteniéndose estoico porque si algo tenía Ryoga
era que no eran un débil llorón, pero al momento que esperaba el impacto del
¡¡ZAS!! Del cinto lo único que recibió fue un abrazo.
- Ya hijo relaja no te voy a pegar más, creo que has tenido suficiente, pero
- ¿Qué? Oh gracias abuelito. Prometo que te obedeceré en todo lo que digas
- Eso espero si no, ya sabes. No habrá más oportunidades, pero eso si estarás castigado el resto del mes, sin salidas. Del colegio a la casa ¿Entendido?
- ¡Ah no, eso si no! ¡No es justo! – se quejó
- No te parece justo, entonces te dejo salir desde hoy, pero como castigo te propongo tres tundas diarias durante dos semanas ¿Qué me dices? – lo dijo en broma, no pensaba hacer algo tan cruel por muy mal que se haya portado su nietecito
- ¡No! Prefiero la primera opción contigo no se puede Ichiro – dijo mientras se tapaba involuntariamente la boca con ambas y cerraba los ojos, cual gesto de niño de cinco años cuando está en problemas
- PLAFF…PLAFF… PLAFF – tres nalgadas fueron a dar al pobre culito de nuestro protagonista
- AUUUUUU – gritó, no eran tan fuertes pero dada la condición de su trasero, sintió el impacto de aquellas palmadas.
- Nunca aprendes Ryoga ¡Que chiquillo este! – contestó revolviéndole el cabello, saliendo del cuarto en dirección a la sala, dejando al crio acostado bocabajo sobándose sus nalgas con una mano, pero dejo de hacerlo porque el mínimo roce con lo que fuere, le causaba dolor hasta hacerle lagrimear
Paso un mes y Ryoga ya estaba recuperado de su castigo.
Akari no contesto más sus llamadas, al principio estuvo triste, pero con el
pasar de los días logró escapar de aquella tristeza junto a
Akane, con quien se acostaba
todos los fines de semana en aquella
pensión amarilla. Aquel sexo que le daba la chica de cabellos cortos se volvió
algo adictivo, ya no sabía si era amor o solo placer momentáneo lo que sentía por ella, ya que cuando estaban juntos recordaba a Akari,
pero lo disimulaba muy bien, pues
no quería hacer sentir mal a su Akane. Además si la chica se daba
cuenta, posiblemente rompería su compromiso con él, y ya habían acordado que se
casarían a escondidas en un mes y vivirían
lejos de Nerima. Y así una vez más compartían ambos la cama Akane
dormida en brazos de Ryoga, mientras este se sumía en un cumulo de
pensamientos.
Espero hayan
disfrutado de este fic, me costó un montón escribirlo, pues no cuento con
tiempo y saque de lo poco que tengo para escribir está historia del día los
enamorados de mi personaje preferido del anime: RYOGA HIBIKI. Espero que lo
disfruten y espero sus comentarios y críticas constructivas. Los que me leen
comenten please que anima muchísimos. UN BESO A todos NICOLE…
Me había olvidado de este Fic tuyo, jeje. aun así sigo sin conocer la historia original, oye Nicole, como que el abuelillo ese es un maldito samurai de la paliza, jajajajja
ResponderEliminarJajaja que descarado es Ryoga, pa mi que se hace el despistado, teniendo novia y se acuesta con Akane jajaja, le gana a Ranma que tiene tantas chicas a su alrededor y como que no le apetece ninguna. Pero aun así el abuelo se paso, le dio muy fuerte aunque el chico se paso también de grosero. Escribes genial.
ResponderEliminarLo que pasa es que Ryoga es un chico pues como decirte, se confunde, de hecho si viste el anime o leíste el manga (que aún no lo termino) incluso allí se ve como Ranma en su forma femenina lo engaña en varias ocasiones, es que él siempre ha estado solo y al Akane cuidar de él como P Chan (cerdito negro) se enamoró de ella perdidamente y fue difícil que la dejara de amar hasta que llegó Akari y pues ella es la oficial solo que mi mente imagino esto y pues me inspiré en un capi del manga dónde corteja a ambas, Ryoga es un personaje muy complejo y por ello me gusta tanto escribir de él, puede ser Héroe y al mismo tiempo villano, puede ser tímido y atrevido, puede ser suertudo o sin suerte, puede ser tonto o inteligente, en fin es uno de los personajes que más me gustan porque me gustan otros de otros animes, pero bueno de este anime en particular el es mi preferido. Ah y en cuanto a Ranma que también me gusta, solo que cuando esta convertido en chica se vuelve algo insoportable, a él no le apetece ninguna otra chica que no sea Akane aunque como es tan orgulloso no lo quiere reconocer, pero él y ella son tal para cual, pero me agrada mezclar las cosas también es que soy tan impredecible. Jajajajajaja.
EliminarSegún yo me e visto toda la seria de ranma y algunos mangas pero no me suena el que Ryoga tenga un abuelo. Es un aporte a la historia o si tiene un abueno? mes gustaría saber :)
ResponderEliminarMary
Realmente si tiene padres son Sr y Sra Hibiki pero casi no los ve porque se la pasan viajando todo el tiempo y casi no están en la casa; su casa tiene vista al monte Fuji, y mencionan que tiene abuelos, pero no dicen si son paternos o maternos, también tiene una perra que en el anime se llama Blanquinegra y en el manga Shirokuro y tiene cachorritos, toda la familia de Ryoga tiene problemas para orientarse por eso es que siempre anda solito, yo en la historia me tome el atrevimiento de colocarles el nombre a los padres del chico para no llamarlos Sr y Sra Hibiki, lo mismo con sus abuelos para que no sean Sr y Sra Hibiki porque me parece más lindo así, lo único que le agregue fue una hermana que eso si no mencionan ni en el anime ni en el manga, aquí mi variación es que esté conviviendo un poco más con su familia en este caso su abuelo, pero sin quitarle lo independiente, fuerte y distraído que es y que en capis que escriba de él puede estar solo o con la familia. Akari es su novia oficial solo aparece en el manga.
EliminarYa sabia yo que Akane le gustaba el cerdito jajaja quien lo diría, me gusto mucho la verdad una historia interesante aunque pienso que el sr. Hibiki se paso con Ryoga, pero no puedo decir q no se lo busco. Me gustaria leer un Ryoga x Ukyo hacen una linda pareja aunque se que solo para los fans pues su prometida es Akari, pero hayo yo q con Ukyo se complementa muy bien.
ResponderEliminarUuuyyyy que horror con ese abuelito!!
ResponderEliminarQue miedo me dio el señor y sus castigos!!
mm está caricatura si ya la había visto pero no fue mucho de mi agrado y como que no le entendí jajaja será porque no la veía diario pero bueno!!
Amigaaa que modesta tú jajaja ni se ve que te costara jajaja