Aventuras de Ranma Saotome: Cap. 7; Autora Nicole

Aventuras en la vida de Ranma Saotome y sus amigos

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 28 de Mayo del 2018.

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  Capítulo 7

Dulces intenciones a la orden del día

Autora; Nicole

Nota de autora: Aclaró lo siguiente Café del Gato es el NekoHanten es decir dónde Shampoo y su bisabuela trabajan, Akari es la prometida oficial de Ryoga, es decir cuando él venció a su cerdo Katsunishiki en combate se convirtió en su novio y el único que se podrá casar con ella, pero mi Ryoga todavía siente algo de afecto por Akane así que acá leerán sobre eso.  El Director Kuno según cuenta en la historia original se desapareció por tres años (no sé si son más en el manga, eso dijeron en el anime, yo no he terminado de leer el escrito) estuvo en Hawaii y otras cosas más que han pasado entre él Kuno para que esa relación ante no muy bien, le dice de cariño Tachi a su hijo y Kochi a su hija.  Ahhh y Akane es malísima cocinera por eso aunque Ranma es de buen apetito y fuerte no puede soportar su comida, todo lo que hace le sale fatal, el único que adora su comida es Ryoga ya saben porque jajaja.

La joven amazona continuaba practicando con su bisabuela en la cocina del Café del Gato, Nabiki en su salón de clases contemplaba cada una de las fotografías que había tomado a su cuñado cuando estaba recibiendo su castigo, una sonrisa de satisfacción se dibujó en  su  rostro al imaginarse que cumplía sus deseos codiciosos, para ella el fin justificaba los medios, no iba a perder oportunidad, aunque ello implicara perjudicar al novio de su hermana, en la vida solo le importaba el dinero y conseguirlo era pan comido para ella, le había sacado a Kuno en muchas ocasiones cuando este quería recibir información sobre Ranma, por ejemplo: para conseguir ventaja sobre él en algún combate, pero fallando en la mayoría de los casos o cuando le consiguió las fotos de Akane y la pelirroja.

También hizo lo mismo con Ryoga quien tiene en su billetera una foto de la hija menor de Soun junto a la de su prometida. Y la lista seguía, la muchacha era astuta para manipular y chantajear a diestra y siniestra. Las clases culminaron y los estudiantes regresaron a sus residencias, en casa de la familia Tatewaki hubieron algunas situaciones no agradables para Kuno, quien encontró al director sentado a la mesa tomando té verde con galletas  al  lado su hermana, eso lo llenó de cólera y empezó a herir verbalmente a  quien decía   ser  su padre, Sasuke su sirviente intento hablarle de forma Cortez, pero el jovencito estaba fuera de sí.

• No quiero a ese en mi casa – gritó  molesto dedicándole una severa mirada al Director del Instituto Furinkan
• Tachi no me odies por favor – pidió amablemente el señor –  Dame la oportunidad de empezar a ser un mejor padre para ti hijo – Kuno seguía serio, no iba a ceder ante ese cambio repentino de actitud
• Lárguese de mi casa señor – fue lo que repitió el adolescente
• Hermano, papá está delicado de salud, no seas insensible – intervino Kodachi y recibió el apoyo de Sarugakure
• Su hermana tiene razón señor Tatewaki, dejemos que se quede con nosotros hasta que se restablezca – sugirió el ninja de la familia
• Hagan lo que quieran, parece que este señor es más importante que yo – Kuno se dio vuelta y se dirigió a su habitación
• Ya se le pasara, mi Tachi es muy orgulloso – dijo el señor sonriendo
• Papito yo sí estoy feliz que regreses con nosotros – comentó emocionada Kodachi – Esta siempre será tu casa.
• Gracias Kochi, yo también estoy contento de estar nuevamente con mis dos hijos, así Tachi no me quiera – el señor bajo la mirada
• Tranquilo señor Tatewaki, su hijo solo está molesto, pero en el fondo él también lo quiere
• Gracias por los ánimos Sasuke
• No es nada señor

Mientras tanto… Akane Tendo llevaba ya más de una hora dentro de la cocina, parecía que estaba peleándose con los ingredientes mezclando como siempre sal, vinagre, harina y otras cosas más con la intención de hacer un pastel de chocolate para contentar a su prometido, aquello en ese espacio parecía la guerra de Vietnam, Kasumi asustada por las reacciones de su hermana cuando algo no le salía como ella quería, Soun y Genma perplejos y Nabiki en su habitación acostada boca abajo leyendo una revista indiferente a todo.

En otro lado de Nerima, mientras el señor Unryu estaba comprando algunas cosas en el mercado de la avenida central, Akari se encontraba durmiendo  en  los  sillones  de la  sala con el pequeño cerdito en las manos; el animal quería escapar; más no podía ya que esta lo apretaba fuertemente como si fuese una almohada consiguiendo que P-chan se pusiera rojo por falta de oxígeno, sin embargo el puerco no se dio por vencido y después de tanto luchar consiguió liberarse del amarre de su ahora dueña que parecía que estaba soñando algo horrible, hasta se parecía a Akane cuando dormía, ¿cómo era posible que tuvieran algo tan en común?, la señorita Unryu era tan dulce con él todo el tiempo, pero ahora no lo parecía, así que  rápidamente corrió por el pasillo en dirección  al  baño, se metió por  la rendija de la puerta, luego  se  tiró  a la tina con agua caliente,  allí estuvo como media hora relajándose y pensando mientras en la residencia de los Tendo Akane ya había sacado su pastel del horno, se acercó a la sala donde estaban su suegro y su padre pues Kasumi salió a comprar algo para la cena. La chica inmediatamente preguntó por su novio.

• ¿Dónde está Ranma?
• En su cuarto descansando – dijeron ambos señores al unísono
• ¿Akane ese pastel que hiciste para quién es? – preguntó su padre con voz nerviosa
• Para Ranma, lo hice especialmente para él – dijo sonriendo mientras Soun y Genma tragaron saliva
• Hija, ¿tú ya lo probaste? – Ante esa pregunta Akane frunció el ceño
• ¡No, y no es necesario! – contestó tajante y el suegro trató de intervenir a ver si le salvaba la vida a su único hijo
• Ranma no ha probado bocado desde la mañana, algo dulce podría caerle mal – aquel comentario irritó a la chica de cabellos azul/corto quien no demoró en responder
• No creo que le haga daño, no soy la mejor repostera, pero me aplico muy bien, además seguí todas las instrucciones de Kasumi
• Bueno pues en ese caso a Ranma le va a gustar mucho, estamos seguros
• Gracias papá y tío Genma – añadió la niña y se dirigió al cuarto donde estaba su futuro esposo
• Pobre Ranma no quiero estar en su lugar en estos momentos – comentó Soun
• Yo tampoco – dijo Genma a su vez

Y se miraron como si rogaran a las fuerza de la naturaleza que ese par no se agarre a golpes, mientras en otro punto de la tierra, alguien acababa de descubrir el secreto de Ryoga.

• ¡Ryoga tú eres P-chan! – Exclamó la chica de ojos marrones y cabello castaño verdoso sorprendida y a la vez emocionada, había entrado al baño, encontrando a su chico y es que todo estaba claro, el joven dejo caer su pañuelo moteado amarillo a medio camino cuando estaba en su forma maldita. Ahora la bella dama lo sostenía en sus manos. Además ella sabía que cuando su chico iba a visitarla se anunciaba; nunca lo pillaría como estaba en aquellos momentos, él era muy respetuoso con las mujeres
• Akari mi amor, puedo explicarte – dijo él entre nervioso y ruborizado pues estaba de  pie desnudo  ante una mujer, que aunque fuera su prometida, igual estaba incomodo en esa situación;  él seguía siendo un hombre tímido, así que como un rayo se sumergió en la tina. Ryoga con ella no tenía la necesidad de convertirse en P-chan como lo hacía con Akane, con la jovencita Unryu era distinto, se enamoró de él desde la primera vez que lo vio aquella en dónde venció a su cerdo de pelea Katsunishiki
• ¡Eres el hombre perfecto para mí! – Exclamo muy feliz – Ahora te amo más que antes – añadió y es que ella amaba los cerdos y descubrir que su novio podía convertirse en uno era fascinante, Ryoga al medio escucharla sacó la cabeza y preguntó aun desconcertado
• ¿Quieres decir que no te importa que sea P-chan?
• ¡Claro que no! Sabes que me encantan los cerdos – volvió a asegurarle ella regalándole la mejor de sus sonrisas
• Akari ¿Te puedo pedir un favor?
• Dime Ryoga querido
• ¿Puedes guardar mi secreto? – Akari noto el semblante triste y de preocupación en el rostro de su amor y aunque en un principio no entendía por qué su chico detestaba tanto a los cerdos, luego que este le explico cómo ocurrieron las cosas; todo lo que había tenido que pasar, ella lo comprendió como siempre; aceptando su petición
• ¡Claro que si, lo que tu quieras mi amor!
• Gracias cariño – contesto aliviado de poder contar con ella
• De nada mi amor, te he extrañado tanto – se abrazó a él – te traeré ropa limpia, la que dejaste la última vez que viniste a visitarme – el chico cerdo asintió y la jovencita se fue hasta su habitación a buscar lo prometido