La apuesta: Microcorto 9; Autora Nicole

La apuesta

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 25 de Octubre del 2019.

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Microcorto 9

Después de la apuesta

Autora: Nicole

Nota de autora: la palabras llave, parce y firma es como se llaman los amigos. Espero sus comentarios sí les gusta o que quieren ver en el siguiente capi, ya que pronto va a culminar esta mini secuencia de la vida de las chicas y los chicos revoltosos. Más que todo en esta son más los chicos. Las niñas han estado juiciosas.

• Ey, ey, ey, vení llavecita ¡¿A dónde vas con tanto afán pues?! – preguntó Xavier al Chef al verlo todo nervioso buscando la puerta de salida para marcharse – La farra apenas comienza home ¡¿Sí o que princesa?! – añadió besándole sensualmente a una chica pelirroja que tenía cogida por la cintura
• ¡Claro que sí, papacito divino! – dijo la muchacha correspondiéndole
• Es que ando como maluco del estómago – se lo sobó, de repente le entraron nauseas psicológicas  mientras  Demonio lo miraba re extrañado como que no le creía mucho aquel cuentico recién inventado
• No se preocupe por eso mijo, más bien dígale ahí a una de las muchachas del servicio que le den un analgésico para que se le quite esa joda hombre – sugirió
• No, yo mejor me voy a descansar, es que enserio firma,  me siento re mal – aseguró
• Ah, bueno pues… Usted se lo pierde… – se encogió de hombros y añadió – ¡Ve! ¡¿Y el Brian dónde anda metido?! Me acabo de acordar que ese man me tiene que hacer un par de vuelticas. Antes de irte decile que venga que tengo que explicarle algunas cositas
• Parce creo que no se va a poder; al Brian lo llamaron urgente y se tuvo que retirar – fue decir eso y la cara del Demonio se transformó.
• ¡Que hijueputa tan incumplido home! – exclamó enojado – Me va tocar pedirle el favorcito al Géminis. ¡Ahj que chimbada ome!  Este man se fue para Pereira, es más creí que te habías ido con él. ¿Qué te paso home? ¿Es que a vos no te gusta la platica o qué?
• No parce,  no es eso, es que…. yo mejor me voy, que todo le salga bien. ¡En la buena siempre papá! – antes de salir hizo un gesto de solidaridad que hacen los amigos entre ellos
• Nos pillamos pues mi cocinerito – mencionó y se fue a resolver sus asuntos

Ryan se apresuró en llegar a la casa lo más rápido que pudo, tuvo un berraco miedo,  por lo que le habló el señor Piedrahita, sería posible que supiera en que andaban ellos. Eran mejor mantenerse al margen por unos días por lo menos.

Mientras tanto en casa de los Correa Tabares…

• Ya le has pegado bastante, ya el muchacho comprendió –  mencionó Oliver a su esposa, para hacer que recapacitara  porque  ella  seguía con  la idea de completar el castigo por dos semanas
• Pues dile a tu hijito que se ponga a estudiar qué es su única responsabilidad y se comporte como es debido y no tendremos estos problemas
• Mujer a ver…., pegándole no vas a hacer que no pierda el año, es mejor buscar ayuda, no sé, tal vez un profesor que venga a darle clases extra no estaría nada mal y sobre su comportamiento, no creo que después de la tunda que le diste, lo vuelva a repetir.
• Ese es el problema que nunca estás de acuerdo conmigo –  dijo ella elevando la voz
• No es eso mi amor – trato de tranquilizarla – solo quiero buscar una solución
• Mira, Navid no tiene solución, a ese solo a punta de fuete lo mantengo al margen y no me digas nada más que no tengo ningún interés en escucharte – dijo caminando hacia su cuarto y antes que Oliver pronunciara una palabra más le tiró la puerta en la cara
• Sofía… Sofía ábreme la puerta – se quedó parado llamando un rato más  hasta que se cansó yéndose a la sala a ver televisión, pero haría lo necesario para que su hijo no volviera a ser castigado, ya buscaría la manera

En tanto en el apartamento de Alexander, Brian se acaba de terminar un  delicioso almuerzo  que  le  compró  su cucho.

• ¿Está bien así mijo o quiere algo más?
• No pa, gracias, así está bien – mencionó de pie con harto dolor y ardor en la cola

Su papá que lo miró detenidamente quiso correr por una pomada y colocarle un poco para aliviarlo, pero sabía que el sardino tenía que sentir esa incomodidad  una semana por lo menos;  era necesario para él,  que se acordara toda la vida de la pela que le había dado y de esta forma no se le pasara por la cabeza meterse en líos de aquellos que traen peores consecuencias.

Pasaron las horas con Brian sin salir de la pieza, Camilo estaba todavía en la sala viendo algo de televisión para distraer la mente un momento, hasta que su tío decidió que era  hora de llevarlo a su casa, tenía que hablar con Oliver y Sofí respeto a su comportamiento de la noche anterior;  a pesar de las suplicas del mocoso, Alexander no se dejó convencer e hizo lo correcto, afortunadamente Sofí había salido a atender unos asuntos relacionados con su trabajo.

Oliver regaño seriamente a su hijo al escuchar de boca de su hermano que había mentido y aunque Alex ya lo había castigado, nada más salir el nombrado de aquella casa don Oliver decidió darle una lección a su primogénito.

• ¡Vaya tráigame la alpargata, hágame el favor! – nada más oír esa orden el muchacho se puso blanco como papel, pero hizo caso, no estaba en posición de reclamar nada, así pues fue por ello…

Mientras tanto…

• ¡Que pereza hermana, sin Brian la vida no es lo mismo! – se lamentó Ariadna dentro de  su  pieza
• Pues búsquese otro mamita, que manes son los sobran y mejores que Brian que  no es  sino  un patán igualitico que Camilo – dijo  Cata sentada en una silla frente a su hermanita – Uy no, es que parece que a los dos los  cortaron con la misma tijera – estaba convencidísima
• ¡Y yo que hago nena si ese bobo me trae loca! – añadió la tercera de las Cardona
• Olvidálo home, que ese lo único que hace es meterte en problemas con profesores y con nuestros papitos
• ¿De qué hablan hermanitas? – preguntó la más pequeña apareciendo de repente
• Del guache del Brian, que aquí nuestra hermana está embobada con ese idiota
• ¿Brian te hizo quedar mal otra vez? ¿Te gritó? ¿Te irrespetó? ¿Por qué tu noviecito tiene que ser tan machista? – cuestionó Mia
• No, no y no y ya dejá de hacer preguntas bobas
• Uy no, tan ofendida pues, sí todos sabemos cómo es Brian que no respeta a nadie…
• Ay sí, ay sí, para ustedes y mi mamá Brian es lo peor del mundo, como si  Camilo y  Mauricio fueran tan juiciosos y educaditos, no me hagan reír – se defendió ella
• ¡Con Mauro no te metás pues!, en primer lugar, el sí que es un caballero – Ariadna rodó los ojos
• Yo y el imbécil de Juan Camilo hemos terminado, así que ni me lo mencionés que me da alergia
• Bueno pues no hablén mal de Mauricio
• Ya dejen de pelear por los hombres, mejor pónganse a leer un libro para que mejoren como personas, están gritando igualitico que los maleducados esos – dijo Emily que también se unió a la conversación imitando la pose de su madrecita, los brazos en jara moviendo la cabeza en señal de desaprobación
• Llegó la santurrona de la casa – comentó sarcásticamente Ariadna Sofía
• Por lo menos no ando con un vagabundo vicioso – replicó Emily
• ¡Oigan a esta…! Venís a criticar a mi Brian cuando Navid es un sucio mentiroso, mal estudiante, un morboso de lo peor
• Mira estúpida con mi AMIGO porque todavía NO SOMOS NOVIOS, no te metás
• ¡Más estúpida sos vos! – dijo molesta y agregó – disque no es tu novio entonces ¿porque lo defendés? – le pregunto con malicia, mirándola fijamente – Ah, ya sé, es que también estás tragada del hermanito este… como es que se llama el Charlie Brown, que uno no sabe si es rolo, caleño, pero de paisa solo el apellido, ese peladito no tiene personalidad, todo lo vive imitando, bueno Navid es igualitico, pero al menos sabe fingir mejor. Ahí está pintada usted – la acuso mirando de arriba abajo, haciendo que su hermana se sienta incomoda –  meterse con gente falsa ¡No, eso sí es la embarrada! Por cierto,  el dos por uno no hermanita, tan golosa me salió mamita; quien lo diría lo recatada que te veías. ¡Sos la menos indicada para criticar! – y con eso le cerró la jeta, ya que la niña prefirió retirarse de la habitación.
• ¡Fuiste muy hiriente! Ves que la pobre ni novio había tenido hasta que conoció a ese par – le reclamó Mia, sintiendo lastima por Emily
• Quien la manda a ofender a mi Brian, además lo que dije es la verdad
• Sí pero… – Fue cortada
• Ahj, ya dejá de fastidiarme vos también
• Oigan chicas Emily estaba llorando, ¿Qué le hicieron? – preguntó seria Danna Lucia en el marco de la puerta
• A mí no me mirés que yo no le hice nada – dijo Catalina
• Lo que pasa es que una dramática – dijo Ariadna mirando de manera intimidante a la menor algo así como: Sí hablás te va a ir muy mal

Y la discusión siguió casi una hora y media, en lo que aquello pasaba en casa de los Correa-Tabares un trasero estaba siendo aporreado con ganas, solo se escuchaba el sonido de la alpargata golpeando arriba, abajo, al centro y en medio de las nalgas haciendo a Camilo berrear con ganas, suplicando a todos los Santos clemencia, tal como acostumbraba a hacer cada que su papá, tío o abuelos lo calentaban, la pela parecía no tener fin, tenía el sentadero más colorado que un tomate, los azotes eran firmes, dados en tandas de diez, doce y quince, sin dejar ningún espacio libre sin castigar, tenía todas las nalgas marcadas, pero menos severas que la que le quedaron a su hermano menor Navid  y  primo Brian. 

• YAAAAAHHHHHHHHHHH ME… ME… PORTARÉ… BIIEEEEEN –  prometió sinceramente revolviéndose en las rodillas de su progenitor como si quisiera librarse. Oliver al ver sus intenciones, lo sujetó con más fuerza y aplicó veinte  azotes seguidos en la parte baja y con ello terminó el castigo, ambos cachetes le quedaron completamente incendiados, dolor, pico y ardor insoportables desde principio hasta el final pues el mocoso ya tenía el trasero rojo por la pela que le había dado tío Alex. Camilo seguía llorando en el regazo de su progenitor, cuando el llanto se convirtió en sollozos, el papá le subió los calzoncillos con cuidado – AU, UUUUUFF – se quejó cuando la ropa rozó con la piel ardiente y no pudo evitar llevarse las dos manos al culo intentando buscar algo de alivio, su padre se las apartó inmediatamente, lo puso de pie y le dijo:
• Vete a tu habitación, quedas castigado lo que resta de las vacaciones – el sardino obedeció inmediatamente