Covid - 19: Libertad 3º parte (Los gemelos); Autoras Terry y Marambra

Covid – 19

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 30 de Junio del 2020. 

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Libertad

Tercera parte

Coescrita Terry y Marambra

• Ven aquí Hugo – a leguas se notaba que Rafael estaba enojado pero aun así, Hugo negó vigorosamente con la cabeza, estaba asustado – cuento hasta tres y ya llevo dos – eso confirmaba sus sospechas, papá estaba decidido y nada lo iba a hacer cambiar de opinión, aun así Hugo puso un puchero conmovedor

Él no tenía intención de desobedecer, solo se encontró con los gemelos por pura casualidad y solo se  fueron a tomar un refresco, pero el tiempo se les pasó volando nada más, solo que su padre no quería oír razón alguna y solo le había dicho al subir a la movilidad que no quería oír ninguna explicación y que llegando a casa se bañe antes de ser castigado, y ahí estaba ahora, con el pelo húmedo, un chándal suelto y un nudo en el estómago

• Bien  tú lo has querido – Rafael bufó acercándose al menor de sus hijos, cogiéndolo por el brazo con algo de rudeza, sentándose en la cama donde le dio un tirón al pantalón deportivo antes de ponerlo sobre su regazo y sin esperar nada más, empezó a repartir duras nalgadas... es que la ocasion lo ameritaba   – PLAS PLAS PLAS PLAS PLAS  
• AUUUU Papaaa – Hugo se quejó prácticamente desde la primera nalgada, solo que eso no ayudo a su causa, su padre siguio como si no oyera nada, al contrario, empezó a regañarlo  
• ¿Qué indicaciones que te di antes de salir?  – pregunto en medio de la nalgueada pero Hugo no dijo nada, solo rogaba que parara – plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas
• Yaaa papaaaa… ya para
• ¡No voy a parar! Plas plaf plaf PLAS PLAS ¿Que te dije al salir?
• Que no mee pararaaaa y que shjss shjss no me sentara en ningún sitio
• Exacto plas plas plas plas plas y tú hiciste todo lo contrario – Rafael cogió el cepillo que había llevado
• Buaaa solo shjss shjss solo nos paramos a beber un refresco shjss shjss shjss pero se nos fue la hora –  Hugo ya lloraba abiertamente pero eso no freno a su padre, Rafael alzó un poco le pierna para que el culo de Hugo quedará más arriba y Hugo al darse cuenta de las intenciones de su papá quiso ponerse de pie, pero Rafael lo cogió bien por la cintura – nooo nooo papá, por favoooor
• plop plop plop plop plop plop plop plop plop plop
• BUAAAAAAAAAA – y Rafael por fin lo levanto sentándolo en su regazo
• No se trata de que tardarás Hugo, sé que está siendo difícil para ti, pero lo que hiciste hoy fue poner tu vida en peligro – Hugo permaneció callado sin decir nada –que pasa si te contagias y te enfermas, te llevarían al hospital y yo no podría estar cerca tuyo, umm ¿dime qué haría yo?, ¿a ver?
• Lo siento shjss shjss – Rafael le dio un beso en la coronilla
• Anda ya no llores, tendremos cuidado por si tienes algún síntoma y si es así tendremos que aislarnos lo tres en casa – y con eso Hugo lloro con más desesperación
• Papá yo no pensé que podía contagiarme… lo siento shssj yo no quiero ponerlos en peligro – lloro con más sentimientos
• Bueno ya, no creo que eso pase...

Y con esas palabras de consuelo Rafael llevo a Hugo al comedor para merendar, mientras a 4 cuadras de la casa de Rafael, Rubén estaba a punto de estampar la cuchara de palo en un par de traseros hasta dejarlos como tomates maduros.

• ¡Iváaaaan!.... Alexaaaander!

El grito de Rubén retumbó hasta el holl donde estaba Clara hablando por teléfono con Logan, contándole lo que paso en casa y lo que estaba a punto de suceder

• Uyyy, ¿y eso? – pregunto Logan oyendo claramente a su padre antes de que su madre cerrara la puerta de cristal y se sentara en el pequeña y acogedora salita del patio con la estufa encendida, no podía acostumbrarse al frío del ambiente pese  a que era primavera ya – ¿qué han hecho? – la preocupación se destila en la voz
• Que nos han pedido permiso para salir a caminar por una hora y  tu papá tuvo que salir a buscarlos porque no regresaban ni contestaban el teléfono, y según ellos se dejaron el móvil en el baño y la verdad no tengo idea de si es cierto o no
• Pues no es cierto mamá – afirmo Logan con pesar en la voz tras dar un suspiro, dándose cuenta que sus hijos no daban signos de madurar  – los he llamado y me han contestado del teléfono de Iván y Alexander me envió fotos de ambos y lo que es peor me han mentido porque me han dicho que estaban con ustedes paseando porque se terminó la cuarentena
• Que va a terminar hijo, han flexibilizado algunas cosas nada más y estos chicos…

Y le iba a explicar lo que sucedió con los chicos cuando Rubén interrumpió la conversación, entrando enojado.

• ¿Tienes las llaves de ese baño? – pregunto con impaciencia desde el rellano de la puerta de cristal           
• ¿Llaves del baño?  – Clara frunció el ceño sin preocuparse por cubrir el auricular del móvil permitiendo a Logan escuchar su conversación
• Ese parcito se ha encajado en el baño y no tiene intenciones de salir
• Pero si ya es más de media hora – dijo Clara mirando su reloj, entregándole el móvil a Rubén – toma, es Logan, voy a ver las llaves, se han pasado estos mocosos, ¿que se han creído?, que van a estar como tarzanes en el baño tanto tiempo, ¡con el frio que está haciendo! – definitivamente Clara se olvidó que la casa contaba con un moderno sistema de calefacción

Y ni corta ni perezosa se fue a buscar el juego de llaves que le confiaron los dueños de casa seguida muy de cerca de Rubén que le iba contando a Logan los pormenores de la última trastada de los chicos.

• Entiendo papá, pero por favor no seas muy duro con ellos, después de todo sus vacaciones se han arruinado –  Logan empezó a abogar por sus enanos
• No me lo recuerdes – contesto Rubén a quien también le habían fastidiado el paseo – pero no me pidas indulgencia Logan, lo que han hecho fue peligroso… no solo no han vuelto a casa a tiempo sino que ni les dio la gana de responder el teléfono y para rematar han violado un precinto policial para ir a sentarse en una plaza como si estuvieran en un picnic
• ¿Qué han hecho que? – Logan no podía creer aquello
• Lo que acabo de contarte, han roto un precinto policial para perder su tiempo en un parque – para ese momento a Clara le sobraban solo dos llaves por probar en la cerradura y tarde o temprano los chicos
• ¡Podían haberlos arrestado! – respondió Logan enojado, pensando en la imprudencia de los muchachos
• Todavía pueden – aseguro Rubén – porque tú sabes hijo, aquí en Europa no hay una sola calle sin cámaras de seguridad

Y antes de que pueda decir algo más, el click del seguro de la puerta se abrió por fin y Rubén le entrego el móvil a Clara para atrapar al par que quería huir.

• ¿¡Y!?... ¿hasta qué hora los voy a esperar? ¿Ja? – oyó Logan desde el otro lado del auricular y supo que los chicos perdieron su tiempo de gracia
• Pero no hicimos naaaada AAAUU – ese es Alexander pensó Logan a miles de kilómetros
• Así están las cosas hijo – dijo en cambio Clara, alejándose de la escena para despedirse de su hijo mientras enviaba un millón de beso a su otro nietecito

Y apenas colgó, regreso al dormitorio que compartían los chicos solo para ver a Iván  caer sobre las rodillas de su marido y prefirió seguir de largo a su dormitorio y subir el volumen de la televisión, no quería oír a ninguno de los chicos llorar.

• ¡Que te has imaginado! Plaf plaf PLAF PLAF plaf plaf plaf – la palma de la mano de Rubén se estampo duramente desde un inicio apenas le bajo el pantalón corto que vestía y que de paso era de Alexander, seguro se vistió con aquello por no quedarse envuelto en su toalla húmeda pensó Rubén, acertando en aquel hecho – ¡que encima! PLAF PLAF PLAF PLAF de perderte toda la mañana PLAF PLAF PLAF PLAF vienes a discutirme boca a boca  plaf plaf plaf como si estuvieras  PLAF PLAF con el mocoso de tu hermano o tu amiguito plaf plaf plaf haciéndome avergonzar delante de su padre  – e Iván se encogió sobre el regazo de su padre,  se notaba que a papá no le gusto que defendiera su punto de vista tan acaloradamente – que pensara… ¡que no se educarlos! PLAF PLAF PLAF y llegamos a casa y haces lo mismo – le reclamo recordando todo  lo que paso en la movilidad y en la entrada de la casa
• Yeu yeu yeeu – Iván empezo a gimotear y con razón… las palmadas de su padre empezaron a arder la piel – auuu yaaa papa paaara, paaara – empezó a rogar
• ¡Que para ni que para! – advirtió Rubén subiendo la rodilla y empujando el cuerpo de Iván un poco mas abajo para tener el trasero del muchacho en punta, e Iván se alarmo por aquel cambio de postura y giro la cabeza para ver a su padre justo en el momento que alzo la cuchara, la intención era clara… iba a estampar aquella horrible cuchara de madera sobre su trasero
• NO NO NO NO – gritó llevando una de las manos hacia atrás procurando protegerse pero de nada sirvió, papá atrapo su muñeca y la sujeto detrás de su espalda y sin perder más tiempo hizo lo que tenía que hacer
• Clap clap clap clap clap clap clap clap clap
• WAAAUUUU aggg aggss – y sin en que momento estaba de pronto llorando sobre el pecho de su padre, mojando su camisa, mientras Rubén lo medio regañana y medio consolaba
• Ya, ya… ya paso, por eso hay que obedecer y no discutirme – le decía frotando su espalda
• Pero niff niff me pegaste más aggga aggs que a a  a a Leeex – dijo bajito pero tanto su padre como Alexander oyeron la queja
• Pero a mí me pego como 60 veces con esa horrible cuchara – respondió Alexander todo indignado acercándose a su hermano
• Veinte – refuto Rubén acercando a Lex bajo su brazo para tener a ambos gemelos consigo – te di veinte no sesenta – vaya pensó Lex y su lengua lo traiciono como siempre
• No me digas que ahora resulta que tengo que agradecerte el detalle papá
• ¡Leeex! – advirtió Iván sin poder creer dos cosas, primero que su hermano le conteste aquello a su padre y segundo que haya contado el número de cucharazos que le dio
• Creo que ¿este huevito está pidiendo sal? – murmuro Rubén levantando una ceja – quizás veinte no fueron tantas
• Fueron papá… fueron tantas – se apuro Lex a contentar pensando en la paliza recibida

Fue todo tan rápido que no supo en que rato su padre lo tenía bajo el yugo de la cuchara, solo recordaba estar discutiendo con Iván si abrir o no la puerta, obviamente él no quería a diferencia de su gemelo que no quería sumarse más problemas de los que ya tenía cuando pasado el clímax de su enojo, se dio cuenta de que no fue buena idea discutirle a su padre tan groseramente como lo hizo; pero Alexander independientemente de los lios de Iván no quería ser castigado, según su óptica no hizo nada realmente malo y en su nerviosismo o en su simple lógica de ir siempre en contra de Iván cerro con llave el baño y no quiso soltarla hasta que fue demasiado tarde.

Rubén entro al baño con la cuchara en la mano y cogió al que estaba más cerca que resulto ser Alexander y doblándolo sobre su cadera empezó a estampar la cuchara de palo sobre su trasero apenas le bajo el pijama que se había puesto para no estar con solo la toalla húmeda como su hermano.

• Clap CLAP clap CLAP clap – conto mentalmente mientras estampaba la cuchara en una nalga mientras Lex hacia todo por no gritar – clap clap CLAP CLAP clap – la nalga contraria y aún Lex no gritaba pero tampoco se estaba quieto ni tan callado, empezó a gemir
• Yuy yuy yuy paaa, no hicimos naaada maaalo
• No llegar a la hora que se les dijo es desde YA MUY MALO CLAP CLAP CLAP CLAP CLAP
• BUAAAA
• Y ESO SIN CONTAR QUE SE PUDIERON CONTAGIAR CLAP CLAP CLAP CLAP
• AAAAUUUUUUUU AUA AU AUAUUU… NO MAS – grito y su padre lo soltó

Y ahora estaban los dos abrazados prometiéndole a papá no salir ni a la esquina, mientras Rubén cronometraba mentalmente hasta cuando duraba aquello.