Amor sin barreras: Cap. 4; Autora Marambra

Amor sin barreras

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 6 de Marzo del 2017.

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Capitulo 4

Autora: Marambra

• ¡Mierda!... qué cagada carajo – murmuraba Dominic golpeando su frente caminando de un lado a otro como un fiero león enjaulado que no veía la hora de saltar sobre su presa, cosa imposible claro, así que decidió dar vueltas en su alcoba, yendo de un lado a otro con el estúpido cepillo de su madre en las manos, al parecer Angus tras la paliza de papá había regresado ese tonto pedazo de madera a su sitio – grrrr ¡Puta suerte la mía! – se lamentaba dando riendo suelta a su picante vocabulario que ahora mismo hacia juego con su rebelde cabellera y todo eso sin dejar de hacer sonar el lomo del cepillo sobre su palma, pensando si así sonaría luego su trasero, cosa que hizo que trague saliva y renazca la rebeldía – ¡estúpido Parker y sus malditas reglas – dijo en voz alta tirando el cepillo de mamá contra la pared a milímetros de la foto familiar, una foto que colgaba en las 5 alcobas, las de ellos y de los papás y que el amaba pero que ahora mismo como que no le conmovía – ¡A LA MIERDA TODOS!

Grito sobre su almohada aplastando su cara en la mullida pieza de plumas de ganso que mamá le compro cuando dijo que nunca tuvo almohadas tan suavecitas como esa en el orfanato; Dominic acababa de tirarse a su cama como si se tratara de una piscina, él amaba su cama, otro capricho concedido pero esta vez por papá que no compro para ninguno camas de soltero pequeñas e incomodas, sino de dos plazas para desplazarse como quieran en verano, cosa que el agradeció porque nunca antes había tenido un lecho tan cómodo y mullido como aquel, realmente todo un mimo para su delgado cuerpo, tanto así que solía asegurar que su cama era un avión de primera clase a la hora de dormir y hoy no fue la excepción… ojala fuera de noche murmuro parpadeando de cansancio sintiendo un dolor agudo en el costado derecho, al parecer la patada que le dio Alan fue algo más que una caricia…

Y con ese pensamiento se dejo llevar por el cansancio durmiéndose profundamente mientras esperaba a papá, quien por su parte estaba ocupado con Anir que peleaba con uñas y dientes en su dormitorio reacio a aceptar su castigo porque según él no era su culpa que Dominic quiera invitarle una cervecita en plan hermanos, que eso eran al fin y al cabo y los hermanos comparten momentos de filosofía y que él solo acepto unita, nada más, que no hizo nada malo, además que ni siquiera se terminó toda por miedo a quedar con tufo…

• No es justo papá… ¡no es justo! – repetía cruzándose de brazos mirando feo a su padre que acababa de declarar sentencia, iba quedarse lavando los platos de la cena toda la semana para empezar
• ¡Pues a mi si me lo parece Anir! – respondió Parker elevando un poco la voz, estaba enfadado porque encontró en su mochila una latita de cerveza vacía – quiero saber de dónde sacaste esto, quién te lo dio o como lo compraste y donde ¡además! – decía batiendo la lata delante de sus ojos, había hecho sentar a Anir en la cama mientras él se paro en toda su altura frente a él hojeando las carpetas del día, él como ya estaba lidiando con el problema de las huidas de Dominic había decidido revisar las tareas de todos ellos y colocar la fecha el día siguiente en sus hojas, y las de Anir estaban como las de Dominic… vacías, como si no hubiera avanzado absolutamente nada en el cole
• ¡Naaadie! me lo dio porque NO ES MÍO – grito más fuerte y apretando los puños golpeándolos sobre la cama en un claro signo de rebeldía – ya te dije que Dominic me dio una latita, pero solo le di una lamidita nada maaaas, es más solo la olí – repitió ya cansado de ser interrogado, que fastidio de padre le había tocado, para eso era mejor quedarse en el orfanato pensó fugazmente, total ahí seguro se podía tomar una cerveza o un whisky con Dominic y nadie lo hubiera notado – no sé de donde salió eso, no es mío, si quieres busca mis huellas vegetales – le dijo medio en broma y medio en serio, total la lata la compro Dominic y se la metió en su bolso para la noche, que como la consiguió no tenía ni idea
• Digitales – corrigió papá – huellas digitales – repitió al ver la cara de consternación de Anir que no sabía de dónde venía eso ahora, vamos que papá estaba loco
• Como sea que se llamen, pero ya te dije, no es mío, si quieres busca al FBI o a los hombre de negro – tuvo el descaro de decir
• ¿O sea que esto apareció en tu mochila por obra y gracia del espíritu santo? – repitió como una letanía, sin querer creer lo que acababa de repetir, ¡diablos! era la misma frase que su padre solía decirle cuando él negaba rotundamente algo que saltaba a la vista como obra suya previa a una paliza claro, como ahora; comprendiendo algo más… que Anir tenía la capacidad innata de sacarlo de sus casillas incluso más que Dominic, pero juntos eran un arma letal, eran la regla que confirmaba ese viejo dicho popular,  eso de: Dios los crea y el diablo los junta
• No, fue la Virgen María… ¿qué te parece esa? – respondió con mayor ironía Anir y fue suficiente Parker se quito el cinturón en una impresionante velocidad que dejo atónito a Anir, cosa que cuando quiso huir era demasiado tarde, papá lo agarro del brazo y aprovechando que el chico apenas vestía el deportivo escolar, se lo bajo hasta los tobillos como cuando Sara castigaba a Jasir por alguna travesura, solo que no sería su mano sino el cinto quien se calque en el trasero – NOOO PAPA, NOOO NOOO – empezó a gritar y pellizcarlo por soltarse, pero era como arrancar un pelo a un gato, Parker apenas se dio por enterado
• Zass zass zass
• BUAAAAAAAA AAAA AAA – grito jalando el cuerpo por huir, pero Parker no había terminado, tiro a un lado de la cama el cinto y coloco a Anir sobre sus rodillas, esta vez usando solo su mano
• Plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf DE DONDE SACASTE ESA LATA DE CERVEZA – él ya lo sabía, sabía que le dio Dominic, pero quería estar completamente seguro – plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf LA COMPRASTE CON DÓMINIC O LA COMPRASTE SOLO – pregunto una vez más papá
• AYYY ayyy GAGG NO ESSS JUUUSTOO AGGG AGGG AYY yaaa no eees JUUUSTO BUAAA − Anir gritaba a voz en cuello como si lo estuvieran desollando vivo y no era para menos, llevaba buen rato que su padre no dejaba de nalguearlo queriendo que admita que se había equivocado, pero eso era como pedir camisa planchada a Tarzán, antes muerto que admitir eso ante su padre − NO VOY A AYY ayyy aya a AA DECIR NAAADA
• BUENO PUES, si así lo quieres que así sea − dijo Parker sin gritar, pero alzando el cinto que dejo sobre la almohada y desde donde Anir lo lograba ver, aun en medio de los nubarrones de lágrimas
• NOOO PAPÁ NOOO PAPA YA TE LO DIGO YA TE LO DIIGO... − empezó a mendigar Anir al darse cuenta que su cabezonería lo conduciría directito a otro nivel de dolor, uno que acababa de descubrir… pero papá no hizo caso, esta vez iba a dejar un precedente en su hijo: mejor aceptar la culpa a la primera
• Demasiado tarde jovencito – respondió Parker sin perder la calma pero levantando el brazo para tomar impulso – Zass zass zasss zass zass zas zas − y siete cintazos visitaron su trasero – ZAS ZAS ZAS ZAS ZAS ZAS ZAS – y otras siete la unión de glúteos con muslos y todos a un ritmo casi constante, doliendo obviamente más aquellos que cayeron en las flexuras
• AHHHH AYYY auuu yaaa PAPAAA, YAAA PEEERDOOONNN NUNCA MAS VOY A COOOMPRAR NAAADA − grito despavorido sintiendo un mareo horrible cuando su padre lo suspendió de sus rodillas para abrazarlo, ya había castigado al pequeño y era hora de mimar
• Yaaa Anir, yaaa paso − lo sentó en su regazo para mecerlo, algo que le agradaba hacer cuando podía y que pocas posibilidades había, porque de todos ellos que eran grandes solo había castigado a Anir en 4 oportunidades y en todas ellas después de una paliza lo había rehuido de su abrazo por puro orgullo y seguro también por falta de costumbre, algo que Parker quería cambiar aun cuando le lleve toda una vida, pero parecía que ahora no iba a ser el caso, Anir se estaba dejando mimar − espero que ahora hayas aprendido a no mentirme y admitir a la primera tus errores, nada de esto hubiera sido necesario si no fueras tan obstinado − agregó besando su frente y acariciando su espalda
• ¿O oo sea que nop, nop nop me hubieras cass, castigaaado? − pregunto en medio de teatrales sollozos mientras se frotaba las nalgas
• No hijo, igual te hubiera castigado, la diferencia hubiera sido que no hubiera usado el cinturón − le contestó haciéndole notar la diferencia
• Oooohhh − fue todo lo que dijo antes de pegar su rostro avergonzado en el pecho de su padre, por alguna extraña razón, esta azotaina había marcado la diferencia con sus acciones anteriores
• Pero bueno, ya termino, todo está saldado, ahora ve a bañarte si quieres o ve a ver la tele, yo tengo que ir a tratar con Dominic – anuncio con algo de fatiga en la voz, algo le decía que con el pequeño petirojo no iba a ser tan fácil… mmm como si con Anir lo hubiera sido, ja, reformulo su pensamiento
• Nooo, mejor me quedo un rato aquí − contestó tumbándose boca abajo, subiéndose la ropa en esa posición
• Como tú quieras pequeño − sonrió Parker colocándose el cinturón en el pantalón, esperando no tener que usarlo con Dominic
• No seas tan malo con Dominic ¿bueno?, solo quería defenderme – dijo sin pensar en las consecuencias
• ¿Defenderte de que Anir? – pregunto Parker elevando una ceja, eso era para levantar las orejas
• De nada olvídalo ¿bueno? – respondió Anir dándose cuenta de su error poniéndose rojo
• ¿Olvidarlo?, no jovencito ya abriste la boca, ahora dime, que de tenia que defenderte Dóminic – repitió la pregunta muy decidido a que le responda porque papá volvió sobre sus pasos, algo que no quería Anir
• PAAAAPI PAAAPPPI – y Anir sintió que su alma volvía a su cuerpo cuando Jasir entro como una pequeña bala perdida jalándole los pantalones a su padre gritando – LA MAAAMI TE LLAMA VAMOOS, RAAAPIDO
• Ya pequeño, ya voy… ¡ya voy! – respondió Parker resignado, alzando a su hijo menor por los aires como si fuera una cometa, arrancando en el pequeño una sonrisa de oreja a oreja, pero sin dejar de pensar en lo que Anir acababa de decir, ¿sería que Dominic se lio a golpes de nuevo con alguien?
• ¡Parkeeer, ya estoy en casa amor! – grito Sara desde la sala, ¡demonios!, no pudo ser más inoportuno, de no ser por ellos ahora mismo Anir estaría cantando la vidalita
• Hablaremos luego – murmuro papá mirando a Anir con el ceño fruncido antes de salir y cerrar la puerta

Y Anir se quedo con el amen en la boca, ¡diablos! y ahora ¿qué iba a hacer?, Dominic lo iba a matar.