Mis Gemelos
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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 01 de Mayo del 2016
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Capítulo 153
Ají de lengua y revuelto
de ojos
Autora: Marambra
Contemplar a sus hijos dormir con la
paz reflejada en el rostro y el esbozo de una sonrisa en la boca, es lo que
todo padre desea, sobre todo tras la tensión vivida resultado de los nefastos
acontecimientos acaecidos en la última temporada, pero para llegar a esa paz,
fue un caos, se hubo que caminar por no decir peregrinar por un arduo sendero
de malas experiencias y de eso podían dar fe nada menos que este par de
hermanos que ahora mismo dormía trasero con trasero sobre la litera que
Alexander armo en el suelo de su propia habitación a manera de campamento como
antaño cuando Logan vivía aun en casa de sus padres, de alguna forma verlos así
juntos, con el pelo revuelto, con los ojos cerrados, la boca relajada y un
hilito de saliva chorreando remonto a Rubén en el mar confuso de sus recuerdos,
ahí donde estaban con el brazo escayolado el uno y el otro con los ojos
hinchados de llorar pero no porque se haya llevado una paliza, sino porque
solito se dio cuenta de lo que paso y pudo perder, pero claro para ello papá
empujo y barrio el camino solo para tachonarlo con espinas que lastimaron en su
justo momento y en proporcional medida.
Esos
dos días que Iván estuvo internado y que recibió la visitas de los suyos
incluso de Adelita, significaron para Lex un tormento porque papá lo confino a
su habitación sin derecho a decir una sola palabra ni en pro, ni en contra de
él o de Iván, y lo que es peor, peor que echarlo al hielo que fue lo que Rubén
hizo, le negó la compañía de su hermano y de nada le valieron los mocos, las
lágrimas, o los ruegos, esta vez Rubén fue tajante como nunca lo fue… aquella
mañana de domingo que Rubén volvió a las 9 a casa tras la visita médica del
cirujano, se había quedado a dormir en el hospital, no tuvo corazón para deja a
Iván tras la horripilante experiencia que nada tenía que hacer con el momento
de la fractura sino con su curación, y que se convirtió en la segunda experiencia
más traumática que pudo vivir después de la torsión testicular que le ocasiono
la patada de LEx cuando llegaron de Londres, a tal punto que se orino encima en
el mismo quirófano, pero de eso solo supieron por comentarios de la enfermera
que traslado a un Iván lloroso de la sala de recuperación a su habitación de
hospital donde empezó a llorar peor y peor porque el brazo empezaba a desentumecer
de la anestesia y el dolor era insoportable que tuvieron que aparte de darle un
calmante… sedarlo y Rubén se paso toda la noche velando que no se mueva ni
suelte el brazo del soporte donde colgaron el miembro, aquello hacia casi
imposible dormir, así que agotado, dejo a un Iván completamente dormido en la
habitación del hospital con la promesa de volver en la tarde y ver si le daban
el alta, Clara estaba en espera de su llegada para ir a ver a su hijo y
turnarse en su cuidado.
Mamá
había preparado todo para el día, Adela tras que dejo la ropa del muchacho en
el hospital se fue a su casa a su descanso habitual, así que prácticamente
madrugo para tener todo listo para desayunar y salir pronto, planeando almorzar
fuera de casa y tener la oportunidad de que todos puedan visitar a Iván, el
abuelo Ludwig estaba deseando ver al niño y que Lex y él solucionen las cosas,
después de todo Alexander a su regreso no hizo otra cosa que estar ensimismado,
preocupado y avergonzado de su proceder, y ni que decir del miedo que lo
agobiaba a tal punto que no pudo dormir pues le comía la consciencia, revivía
una y otra vez el momento l en que el hueso de su hermano sonó como un palo
seco doblado en la rodilla, fue horrible y mucho mas verlo ahí chueco sin
movimiento en los dedos y una punta de hueso astillada saliendo de la carne
como si la hubiesen ensartado, y haciendo acopio de todo su valor se levanto
tempranito y fue a buscar a su padre, necesitaba hablar con él….. pero se
encontró con un muro de piedra; vio a Rubén estacionar la movilidad y entrar
con pausado paso a casa, el rostro reflejaba el cansancio que tenia y no
queriendo aplazar más aquello apenas lo vio ingresar a su habitación entro tras
suyo sin animarse a hablar, no pudo decir mucho pero, porque papá corto toda
posibilidad…
- ¿Qué es lo que quieres?, Alexander – pregunto toscamente Rubén con la frente fruncida y Lex respiro hondamente dándose ánimos para hablar con él mientras cruzaba el umbral de la puerta dispuesto a acatar lo que venga incluso la paliza que seguro le daría pero papá al ver el rostro confuso del muchacho acabo con toda su valentía con una sola estocada
- Papa yoooo
- BUENOS DÍAS JOVENCITO – mierda dijo Lex, que huevada como se le ocurre no saludar a su padre?
- Buenos días papi – contesto secando las sudadas manos en su ropa y se quedó mirando a su padre vestirse con ropa de casa tras bañarse… quería dormir, estaba agotado
- Buenos días cierra la puerta al irte que quiero dormir, estoy cansado… por favor – agrego al ver la confusión en el rostro de su hijo, tumbándose a la cama y dándole la espalda, una sutil manera de decirle no quiero hablar contigo, y Lex decidió hablar
- Papi…– era un graznido lo que salió de su boca producto del miedo seguro y Rubén resoplando se dio la vuelta, se paro y agarro al muchacho de los hombros y dijo claro sin adornos y sin anestesia
- SI estas viniendo a hablar de lo que paso ayer, pierdes tu tiempo, que no hay excusa para lo que hiciste – y empezó a sacarlo de su alcoba – NO QUIERO OÍR ABSOLUTAMENTE NADA AL RESPECTO – empujo con suavidad al muchacho que caminaba como el cangrejo no queriendo enterarse que lo echaban
- Papi por favooor – musito retrocediendo al mismo paso de su padre sin hacer el mínimo intento de soltarse de papá, pero Rubén le puso el dedo sobre la boca agregando
- Ahórrate las explicaciones Alexander, las explicaciones y una paliza por desobediente, desaparece de mi vista, no quiero verte merodear en lo que resta del día ni oír un ñar tuyo, que estas a estito – le dijo mostrándole un minúsculo espacio entre su índice y pulgar – de que te de una soberana tunda por lo que hiciste ayer, y no me refiero solo a romperle el brazo a tu hermano sino a tratarlo como basura, ahora déjame dormir – agrego
- Pero paaaaaaa – empezó a gemir, aquello era peor que papá le diga vaya a traer el simbadito de la cocina para atizarlo, no, esto era horrible, papá estaba tan enojado que no quería hablar con él, y ahora que iba a hacer? Como solucionaba esto?
- ¿QUE NO OÍSTE? – elevo la voz Rubén, agotando la poca paciencia que tenia, empezando a sentir el martilleo en las sienes de cansancio, la voz de Alexander aun en un susurro empezaba a sonar como el vuelo de un molesto moscardón que merodea tu postre, si así de feo
- Es que yoooo – y Rubén decidió enviar otro tipo de mensaje, un telegrama Morse a su trasero y lo dio la vuelta y a punta de nalgada lo llevo a su recamara arreándolo en todo lo largo del pasillo enfadado haciendo acopio de no explotar más allá de este pequeño desliz que su real intensión era ni contestar el saludo a su hijo como la vez esa que lo castigo por faltarle al respeto
- PLAF PLAF PLAF – papa pico con fuerza sobre la ropa y era difícil decir que no escocía, porque lo hacía y Lex trato de no quejarse o hacer un intento de ello
- Paaa mmmgrrr – gruño chiquitico como queriendo desaparecer del mapa
- SILENCIOO HE DICHO… PLAF PLAF PLAF… QUE NO QUIERO… PLAF PLAF PLAF… OÍR UNA SOLA…. PLAF PLAF PLAF…. PALABRA – y llegaron a la alcoba y lo sentó en la cama sentenciando sin derecho a reclamo – ESCÚCHAME BIEN ALEXANDER, ES LA ULTIMA VEZ QUE TE LO VOY A DECIR AMABLEMENTE – lo apunto con el índice y la cara grotesca del enojo – NO QUIERO EXPLICACIONES NI POBRES EXCUSAS NI HOY, NI MAÑANA NI NUNCA – y tuvo intención de cerrar la puerta e irse a dormir, pero comode costumbre Lex tuvo que jalar la cuerda hasta insospechados límites
- PEROOOO – decidió darle un poco de volumen a su voz, empezaba a sentirse acorralado y Rubén se giro sobre sus pasos y cerró la puerta, no quería la intervención de nadie, si tanto quería Lex hablar con su padre…el dialogo no sería dialogo, sería un simple y enojado monologo y quería privacidad porque la próxima no lo diría en palabras
- QUE PEROS, DE QUE PEROS ESTAS HABLANDO, QUE COSA QUIERES?, NO FUE SUFICIENTE LO DE AYER?, LA FORMA TAN FEA QUE TUVISTE DE COMPORTARTE PARA QUE AHORA QUIERAS RECLAMAR? – acuso y luego de ello guardo un largo silencio esperando que Alexander diga perdón papá no lo vuelvo a hacer, o disculpa no quería interrumpir tu sueño, pero claro, eso era tan utópico como pensar que la miss Universo viene a darte el beso de buenas noches, así que decidió usar la artillería mayor verbal esperando realmente que fuera suficiente – DEJA LAS COSAS COMO ESTÁN ALEXANDER, QUE CON TUS ACTOS ME HA QUEDADO MÁS QUE CLARO QUE ESA MOCOSA TIENE MAYOR VALOR PARA TI QUE LA FAMILIA – aseguro vehementemente
- Eso no es cieeerto – la vista empezó a nublarse a Lexque empezó a hundirse en el peso de su culpa y de sus actos
- ¿VAS A NEGARLO? – su padre le levanto el mentón para mirarlo – ¿VAS A TENER LAS AGALLAS TODAVÍA DE NEGARTE EN MI CARA LO QUE HICISTE? – pregunto – Y NO ME REFIERO AL EMPUJÓN ALEXANDER QUE POR ESO AYER MISMO DEBERÍA HABERTE DADO UNA REVERENDA PALIZA – y Lex se hizo chiquitito ante aquello, papá realmente estaba malo con él y con todas las de la ley
- Es que yooo
- ¿TU QUE? MM?, ¡TU QUE ! – prácticamente lo increpo – ¿NO QUERÍAS HACER LO QUE HICISTE? – cuestiono su proceder, su bajo proceder – ¿NO QUERÍAS IR A VENTILAR A MEDIO MUNDO LAS ERRADAS ACCIONES DE TU HERMANO PARA SER LA COMIDILLA DE LA GENTE?, ¿DE TODA ESA SARTA DE DESCONOCIDOS? – le reñía – ¿NO QUERÍAS IR A VENTILAR A TODOS NUESTRAS INTIMIDADES?, ¡PROBLEMAS QUE NO DEBERÍAN NI SALIR DE ESTAS 4 PAREDES! – mierda dijo Lex, realmente su padre estaba furioso, el no había pensado más alla de su drama personal sin tomar en cuenta que todo eso afectaba a su familia – O ES QUE ESTABAS SOCIALIZANDO Y ES COSTUMBRE CONTAR HASTA CUANTOS PEDOS TE TIRAS AL ENTRAR AL BAÑO – ya estaba, Alexander sin querer jalo la lengua de su padre y tocaba oír todo aquello calladito si era sabio y apreciaba la paz de su trasero, porque desde el lio que Iván tuvo con Raquel y se entero que esta lo pegaba papá no había cocinado hasta ahora un ají de lengua tan picante
- DEJAAAME QUE TE EXPLIQUE – tuvo la temeridad de decir
- NO ALEXANDER – grito su padre levantando la palma hacia arriba en señal de stop – NO HAY EXPLICACIONES YA TE DIJE, no hay explicaciones ni justificaciones para lo que hiciste, porque nada justifica vengarse del hermano como lo hiciste tu, AVERGONZÁNDOLO HASTA EL LIMITE DE LO INSOSPECHADO – frunció si se podía más el ceño recordando como todos los presentes miraron a Iván, unos con burla… el muchacho ese que esa tarde conocieran… otros con sorpresa, Ulrich en realidad, pues Rubén había mantenido al margen a su familia de aquel asunto, y los que menos con morbosidad Almudena se llevo la flor en este asunto – O YO ESTOY LOCO y esa actual es la forma de hacer las presentaciones en sociedad – agrego – ¡NO!, ¿NO VE?, no es lo que se suele hacer… Y NI QUE DECIR de la forma COBARDE de empujar al hermano por LA ESPALDA para que se rompa la cresta como sucedió ayer ¿CIERTO ALEXANDER? – para ese momento Alexander quería que la tierra se lo tragara, aquellas duras palabras de papá eran mucho más dolorosas que una paliza en sí, y se quedó callado hundiéndose en su cama y su padre se dio cuenta de ello por la forma de sentarse y agachar la cabeza y el silencioso llanto que se desato como una tormenta sin relámpagos y suspirando agrego – ¿por qué no usas la cabeza hijo? – le dio un golpecito medio duro con los pulpejos en la frente reclamando su atención y cogiendo el mentón del muchacho clavo la vista en la escurridiza mirada del crío
- Yoooo – no sabía cómo explicarse, aquello definitivamente era horrible, al llegar a casa creyó que antes de dormir su padre se aplicaría en su trasero pero no, papá no vino a dormir y no pego ojo en casi toda la noche imaginando la paliza que le daría, al despertar de su mala noche pensó que papá lo llamaría al despacho, pero no fue así, por eso decidió no aplazar más el momento, aquello lo estaba comiendo y pensó y se mentalizo que debería portarse lo más humildemente posible y rogar clemencia cuando deba, pero no imagino esto, así que no sabía qué hacer ni que decir, pero papá si sabía y se lo comunico clarito como agua de lluvia
- A ti lo que te falta es aprender a valorar lo que tienes, así que te lo voy a poner fácil, como yo no quiero renegar, ni pelar contigo, y tú no quieres una paliza porque te juro por esta – beso la cruz que pendía en su cuello, un regalo de Logan que desempolvo de un casi olvidado cofre en el último cajón de su escritorio – ….te juro por esta que si eso sucede no te sientas en lo que queda del año porque ahí sí, me voy a cobrar todo lo mal que has estado portándote – y Lex abrió los ojos como platos – pero como sé que eres inteligente y sé que me harás caso al pie de la letra, la orden es simple Alexander, tienes desde ahora terminantemente prohibido acercarte a tu hermano, lo que equivale a que no iras de visita al hospital, ni lo llamaras ni nada por el estilo, te quedaras en casa, tranquilo leyendo el libro que te voy a dejar en el escritorio y me presentaras antes de dormir un resumen con buena letra y sin errores ortográficos, y cuando lo traiga del hospital lo mismo, para ti Iván no existe, vas a aprender a vivir solo y veremos si te gusta…
- ESO NO ES JUUUUSTO – grito
- SILENCIO – elevo un dedo – JUSTO O NO ES LO QUE HAY… TU ARASTE EL RIO, TU SIEMBRAS EN EL AGUA Y VEREMOS COMO NOS VA…
Tras
aquello cerró la puerta dejando a Lex en shock, y tres días después las cosas
seguían igual por no decir peor para él, el libro que le dejo Rubén era
demasiado grueso para leerlo en una noche, así que no le quedo otra que
disculparse por no concluir su lectura y Rubén no dijo nada excepto
- Cuando lo tengas me avisas
Y
con aquello corto toda comunicación con él…. apenas el saludos y el gracias
rompían el hielo, no tanto porque no quisiera hablar sino que iba al hospital
como cuando él estuvo internado, de eso no podía quejarse, su padre no estaba
haciendo nada que no hubiera hecho por él, que igual se pasaba largas horas
acompañándolo y mimándolo, pero el estar encerrado con la simple compañía de un
libro no era vida, no era premio, inicialmente tras asimilar lo que su padre le
había dicho, pensó que bueno, no importaba se había librado de una buena paliza
que era lo que más temía pero al pasar los días que ni siquiera eran muchos
recién dos, la soledad se hizo amarga y pesada, que no era lo mismo hablar con
los adultos pese a que su bisabuelo, su tío o su primo trataban de alegrarle un
poco y no lo lograban, algo faltaba, y él sabía que era, faltaba Iván.
Iván
y sus locuras, sus recuerdos, sus cosas tontas, y faltaba papá con su buen o
mal humor, con sus formas tocas y dulces de ser padre, definitivamente el silencio era mortalmente peor que
cualquier otro castigo, incluido el meterlo a ese internado de SENDA AZUL… el
hubiera preferido que papá arregle las cuentas como siempre, con una tunda,
pero no fue así, Rubén siempre lo sorprendía y él que creyó que ya lo conocía
del todo, pero al parecer no lo suficiente… si bien en estos escasos 6 meses
que llevaba viviendo con su abuelo se llevo más zurras que toda su vida con su
padre, aun cuando éste también hacia lo suyo en su momento, solo que luego de
varias infantiles lagrimitas el caramelo de menta llenaba su boca, endulzaba el
corazón y enfriaba el trasero mágicamente, pero Rubén era otra cosa, Rubén siempre
escribía una inolvidable lección y no siempre por la dura paliza sino por sus
actos en sí, a veces era como si soltara a un ratoncillo de laboratorio en un
laberinto de iguales paredes para ver si encontraban o no la solución, y cuando
lo hacían el premio no era un caramelo precisamente pero siempre endulzaba el
alma con mayor duración que aquellas mentas de papito Logan… y si no, sino él
mismo los sacaba de allá y les enseñaba el camino que debían tomar….
Al
parecer este iba a ser el caso.
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