Razones para amar: Cap. 6; Autora Dani. M/m, M/f

Razones para amar

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 27 de Abril del 2018. 

Etiqueta M/m   M/f

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Capitulo 6

Autora: Danny

Cuando salieron del instituto la brisa fría les pego de lleno en el rostro tuvieron que caminar un poco para llegar a un taxi tenía ganas de llover esa mañana.

• Papá esto es vergonzoso ¡suéltame la mano! – exigió Diego rojo de la vergüenza
• No te voy a soltar la mano – respondió su padre caminando hacia el taxi al que había llamado Amber
• Esto es ridículo hombre que no somos niños – dijo Amelia mirando a todos lados por si no había ningún amigo mirando, pero Adam no le prestó atención y los hizo subir al taxi, todo el trayecto todos estuvieron sumergidos en sus pensamientos

Amelia estaba furiosa con su padre no se había despedido de sus amigas, seguro por  culpa de la profesora chismosa su padre la reñiría, debía justificar lo de las peleas y eso le dio un poco de gracia pues como explicaría a su padre que le dio una paliza a un chico pensó sonriendo.

Diego estaba pensando en cómo justificarse con su padre después de todas las cosas que había hecho y sabia que de una u otra forma terminaría mal parado, miro a su lado y Amelia estaba más tranquila que él y se molesto, Amelia se metía y lo metía en problemas y siempre estaba fresca como una lechuga en cambio el tenia remordimientos de conciencia por sus malos actos y por los de ella y no era justo.

Mientras tanto Amber pensaba en su esposo John y sus contantes discusiones a raíz del comportamiento de sus hijos y el hecho de que ella no le pusiera limites, algo que según ella era un absurdo porque los mellizos ya tenían 14 años y teóricamente eran suficientemente grandes para saber que estaba bien y que no, John pretendía que ella estuviera detrás de los mellizos como si fueran críos pequeños y eso era ridículo, los mellizos la mayor parte del tiempo no la querían cerca, si ella les decía algo ellos se burlaban y hacían algo peor entonces era mejor quedarse callada a sus necedades.

Al llegar a la casa de Amber, Adam respiro profundo debía hablar con los chicos seriamente y también con ella pero al entrar se encontró con John el nuevo esposo de su ex, y se sintio un poco fuera de lugar e irritado pues él nunca estaba en casa cuando Adam venia de visita; John era un hombre de unos cuarenta y cinco era profesor universitario y padre de tres adultos ya, John al ver a Adam se acerco a él y le dio la mano para saludarlo, pocas veces había estado en el mismo lugar que el padre de los mellizos y jamás en nueve años que tenia de casado habían intercambiado palabras, Adam noto cierta aversión de sus hijos para con su padrastro, los chicos le habían contado que su padrastro siempre les decía que cosas malas de su padre para ponerlo en su contra pero a medida que los chicos crecieron se le volteo la tortilla y los chicos lo detestaban.

Amber y Adam cada que podían hablaban con ellos para que mejoraran su comportamiento con John, pero los chicos le dejaron claro que no lo querían porque los maltrataba verbalmente y trataba de dejar mal a su padre… algo que hasta ahora Adam no lo tenía claro, podía ser cierto o podían ser inventos de los mellizos para justificar su mala acción; pero lo que si le quedo claro a Adam, fue lo irrespetuosos que eran sus hijos con su padrastro, algo que lo dejaba en vergüenza hasta cierto punto porque se suponía que él como padre debería recomendar que sus hijos sean respetuosos con cualquier adulto no solo con John, segundo porque Amber como adulta, madre de los chicos y esposa de John debería tener un mínimo de control sobre sus hijos.

• Buen provecho – dijo Adam a todos en la mesa y estos le desearon lo mismo
• ¿Me pasas la sal por favor? – pidió John a Amelia
• Levántate y tómala – respondió Amelia en respuesta haciendo mala cara, Adam oyó la grosería y el gesto de su hija y miro a Amber para ver su reacción, pero ella no dijo nada, así que se abstuvo de hacer algún comentario, pensando que luego hablarían
• ¿Qué les dijo esta vez el director? – pregunto John a Amber pulsando la techa del mal humor en Diego
• No es tu problema – dijo pausadamente el adolescente de catorce años
• Si lo es… ustedes son muy maleducados y el más afectado soy yo – le respondió John y Adam se le fue el apetito y se quedo mirando a ambos sin decir nada
• No lo sería si fueras menos entrometido, es molesto tener a alguien que no es parte de tu familia opinando acerca de temas que no le deberían de importar – dijo Diego desafiando con la mirada a John
• No sabes educar a sus hijos, ambos son demasiados inmaduros para poder con esto – dijo John para sí pero todos en la mesa escucharon y Adam se cabreo en sobremanera
• SI TANTO TE MOLESTA PUEDES IRTE, NADIE TE OBLIGA A ESTAR AQUI – dijo Amber levantando la voz a su esposo dejando caer el cubierto haciendo que el plato de vidrio sonar
• ¿Porque he de irme? – pregunto desafiando a Amber a decir algo mas, pero ella guardo silencio
• En un momento respondo esa pregunta – dijo Adam de forma calmada – ¿terminaron de comer? vayan a su habitación y se dan una ducha – dijo a los chicos
• Si – respondió Amelia levantándose y marchándose a su habitación, el mensaje tácito de su padre era comprensible
• Se me quito el apetito – dijo Diego levantándose a su vez y yendo por donde su hermana segundos antes se había marchado
• No sé que tengas en contra de mi de veras, tengo nueve años viviendo con Amber y tu solo empeoras mi situación con ellos… después de cada maldita visita tuya ellos están cada vez peor, me pelean por todo y por nada, a veces deseo que mueras o te olvides de ellos y ya no regreses – dijo John sonriéndole de manera despreciable y Adam sintió todo el odio que ese hombre destilaba hacia su persona
• A mi no me importas en lo mas mínimo… no viajo cada dos meses para envenenarles la mente a mis hijos acerca de ti y respondo a tu pregunta si mis hijos quieren que te vayas de su casa, !TE VAS! yo la compre para ellos no para ti – dijo Adam tratando de mantener la calma
• Tiene razon los mellizos son dueños de esta propiedad – dijo Amber
• Ustedes son unos MALDITOS IDIOTAS y esos dos pequeños demonios necesitan nada más y nada menos QUE LOS METAN EN CINTURA yo nunca lo he podido hacer porque su papi NO LOS CASTIGA solo les da regalos caros cada que viene y les besa el culo cada que hacen algo mal – al parecer el parcito le hizo creer aquello al hombre, con razón su enojo – y tu eres una simple masoquista enamorada de tu ex esposo infiel – dijo levantando la voz y dando un manotazo con la mesa haciendo que Amber se encoja en su propio cuerpo, Adam estaba a punto de saltar por encima de la mesa y agarrar a guantazos al tipo pero respiro profundo y se dijo así mismo que si lo agarrada a guantazos como quería no tendría moral para decirles a sus hijos que ir repartiendo golpes estaba mal, así que sonrió y se levanto de donde estaba
• ¿Sabes? no me importa lo que un abuelo fracasado casado con una chica joven a la que no le puedo dar estabilidad económica pueda decir de mi – respondió haciendo que John se ponga rojo  –  porque aunque duela yo mantengo a Amber y a los mellizos y lo he hecho durante quince largos años y si no molesta voy a subir a hablar con mis hijos – le dijo parándose de la mesa y soltando sus cubiertos – y cuando baje quiero que hayas sacado tu puto culo lastimero de mi propiedad, porque si no se me va a olvidar lo civilizado que soy y el ejemplo que quiero darle a mis hijos y te voy a sacar a patadas – y se  marcho habitación de los chicos

Los castigaría no por lo sucedido con John si no por su comportamiento detestable en el instituto, eso estaba muy mal tenía pensado dejarlo estar pero después de lo que les conto el director no quedaría en una simple advertencia porque se saltaron muchas normas y se comportaron como verdaderos salvajes.

Adam entro solo a castigar a los chicos pues Amber no tenía el valor de estar cuando Adam los castigara aunque estuviese de acuerdo con el castigo, los chicos estaban sentados con mala cara en la cama donde ambos dormían, estaban ambos con ropa interior blanca solo que Diego estaba solo con el boxer y Amelia tenía una blusita blanca.

• Diego ven para acá y Amelia al rincon – dijo Adam a los chicos y Amelia se fue sin rechistar, pero Diego dudo un poco si acercarse a su papá o no por lo que solo dio dos otre pasos – ven para aca – repitió Adam pero Diego empezó a zapatear en el lugar donde estaba
• No papi no yo no quiero ir – decía con la voz muy infantil
• Hace dos meses, te pedí que dejaras de estarte saltando de clases – le recordó su acuerdo – te llamo cada noche para saber cómo les fue en el colegio y les pedí que obedecieran a tu madre y es lo menos que hacen asi que ahora a sumir su actos – dijo Adam molesto
• No papi yo no lo vuelvo hacer de veras – prometió  llorando el chico de catorce años, el mismo al que en el instituto insinuaron con palabras más amables que se comportaba como un delincuente
• No señorito, no lo vas a volver hacer porque de eso me encargo yo, ahora venga para acá – dijo Adam sin moverse probando al niño para ver si lo obedecía pero este no se movió de donde estaba
• No papi …de veras pero no me pegues yo no lo vuelvo hacer – Adam se levanto de donde estaba y Diego trato de retroceder para salir corriendo, pero se iba a resbalar el piso estaba un poco húmedo porque salieron mojados de la ducha pero Adam lo tomo de la muñeca a tiempo evitando que se golpeara
• DEJA DE ESTAR HUYENDO CUANDO TE HABLO PLASS PLASS PLASS –  y le dio tres buenos azotes en el trasero que estaba vestido solo con la ropa interior
• Buaaaaaaaaaa no es justo buaaaaaa buaaaaaaaa – empezó a llorar Diego pero mas como berrinche que por dolor, Adam estaba enojado con los chicos por lo sucedido, así que lo arrastro hasta la cama pues el niño se negaba a moverse y lo acomodo en sus piernas tomándole las manos en la espalda pero el niño se movía como una culebrilla en el regazo de su papá para que este lo soltara
• PLASSS PLASSS plasss plasss plasss plasss plasss plass plasss PLASS PLASS PLASSS PLASSS – Adam le daba en una nalga y la otra en una nalga y la otra mientras el niño lloraba como si lo estuvieran matando, mientras Amelia lloraba en silencio la pena de su hermano, sentía cada azote como si lo estuviera recibiendo ella y al escuchar a su hermano llorar se le erizaban los vellos
• Nooooo buaaaaaaaaaaaaaa papiiiiiiiiiiiiiiiiii me duele buaaaaaaaa me dueleeeeeeeeeee papiiii papiaaaaaa buaaaaaaaa buaaaaaaaa
• Plasss plasss plass plasss plasss plasss plass plasss plasss plasss plasss plasss plasss plass
• Esto es para que la próxima vez que te quieras ir de listo a otro lugar cuando debes ir al instituto lo pienses dos veces –dijo bajándole el boxer para darle en la cola desnuda, Amelia no dejaba de sentirse mal, en un principio fue su idea lo de no asistir a clases y las próximas veces simplemente ya no les apetecía entrar a ver clases y se iban al cine o demás
• buaaaaaaaaaaaa nooooo papiiiii ya en la cola desnuda nooooo buaaaa me duele ya me dueleeeeeee buaaaaaa buaaaaaaaaaaa noooooooooo buaaaaaaaaa
• plasss plasss plasss plasss plasss eso es por mentirme cada noche cuando te preguntaba si te estabas portando bien plasss plass plasss plasss plasss plasss plasss plasss – pero vamos quien en su sano juicio le dice al papá que no esta asistiendo al instituto pues nadie o por lo menos yo no pero venga Adam era Adam – plasss plasss plasss plasss plasss plassss plass plasss plasss plasss
• buaaaaaaaaaa mi colita ya yaaaaaa me duele papa  buaaaaaaaaaaaaa ya no ya no buaaaaaaa buaaaaaaaaa papiiiiiiiiii ya no buaaaaaaaaaaa buaaaaaaaaaa – y por fin lo solto
• Vete al rincón – le dijo Adam empujándolo un poco para que obedeciera

Como le había dado solo con la mano tenia la mano dolorida, así que espero un poco para llamar Amelia, no le gustaba tener que nalguear a sus niños pero como Elena ni en sueños se montaba en un avión solo para colorarles el poto a los mellizos debía ser él quien lo hiciera porque Amber ni en sueños les daba un azote.

• Amelia ven para aca – y dio la misma orden que a su hijo pero se repitió la respuesta
• No papito a mi no me pegues si yo me voy a portar bien – dijo la niña en cuanto miro a su padre con las mangas dobladas hacia arriba dejando a la vista los antebrazos
• Eso lo debiste pensar antes de pensar siquiera en no asistir a clases y agarrarte a guantazos con medio instituto, así que venga para aca – dijo Adam tomándola del brazo y poniendola sobre sus rodillas
• plasss plasss plasss plasss plasss plasss plasss plass plass plasss plasss plasss plasss
• NOOOOO PAPAAAAAAA ASI NOOOOOOOO ASI NOOOO BUAAAAAAAAAA BUAAAAAAAAAA NO ES JUSTO NO ES JUSTO – grito Amelia indignada roja como un tomate e incómoda de que su padre le estuviera calentando el culete como hacia antaño
• plassss plasss PLASSS PLASSS PLASSS plasss plass plasss plasss PLASSS PLASSS plasss plasss
• BUAAAAAAA BUAAAAAAAA HAAAAA NO ES JUSTO SHIP NO PAPAAA YA YA – rogaba la niña entre quejas y pataleos
• NO ES JUSTO QUE YO PAGUE UN INSTITUTO COSTOSO Y USTEDES NO ASISTAN – contesto Adam elvando la voz sobre los gritos de su hija – PLASSSS PLASSSS PLASSSS PLASSSS PLASSSS
• PAPIIIIIIIII YA YA BASTA YO VOY A IR AL INTITUTO
• PLASSS PLASSS PLASS PLASSS PLASSS PLASS – y le dio mas fuerte que a Diego porque era la instigadora de todo
• NO ES JUSTO QUE YO HABLE CON USTEDES CADA NOCHE DURANTE UNA HORA ANTES DE QUE SE ACUESTEN Y ME DIGAN QUE TODO ESTA BIEN CUANDO VAN TAN MAL EN EL INTITUTO – empezo a reclamarle su mentiras mas de paso – PLASS PLASS PLASSS PLASSS PLASSS  no es justo que te guindes a discutir con los profesores y tus mayores porque aunque sean unos ignorantes les debes respeto por el simple hecho de ser MAYORES QUE TU PLASSS PLASSS PLASSS PLASSS PLASSS PLASS PLASSS PLASSS
• BUAAAAAAAAAA BUAAAA NOOOO LO HAGO MAS BUAAAAAAAAAAAA BUAAAAAAAA AHHHHHH SHIO SHUO BUUAAAAAAAAA BUAAAAAAAAAA – Adam detuvo el castigo cuando vio que lo que no cubría el tanga de su nena estaba bastante rojo, un rojo parecido al de su hermano pues a ambos les dio la misma cantidad de azotes… cincuenta 25 en cada nalga

Asi que la levanto sin decirle absolutamente nada y la dejo en un rincón de la habitación mientras pensaba que decirles y dándoles a ellos un momento para analizar lo que paso, luego saco a Diego del rincón y lo abrazo fuertemente llevándolo a la cama para sentarse en ella y sentarlo en su regazo.

• Me dueleeeeeeeeeee mu gip mucho – dijo Diego en el hueco del cuello de su padre
• ¿Sabes que me dolió mas a mí que castigarte? – le pregunto con voz calmada y mirándolo muy serio – que ya dos personas que no tienen nada que ver el uno con el otro me dijeran que te comportas como un delincuente, dices palabrotas y repartes puñetez, golpeas a chicos y los grabas, y tienes malas notas porque no te da la gana de entregar nada  aunque realices los deberes – y Diego se avergonzó, oírlo de su padre sonaba feo
• Papiiiiiiii – dijo lastimero al saber que el director le había contado todo a su padre
• No te voy a disfrazar las palabras: estoy decepcionado de tu comportamiento Diego – y Diego bajo la cabeza – cada que me llamas y me dices papá quiero tal o cual cosa dime ¿cuál es mi respuesta? – y Diego guardo silencio, pero a Adam eso no le importaba, iba a darle a su hijo algo en que pensar
• Peroooooo papaaaaa – protesto echando un poco la cabeza hacia atrás avergonzado
• Contesta – presiono un poco
• Cinco calificaciones altas y me das lo que quiero – dijo a su padre Diego
• Esa es la regla de oro Diego – su padre le dio la razón – calificaciones altas , notas bajas no obtienen nada, así que tu comportamiento es vergonzoso – le reclamo sin gritar – estoy avergonzado de que el año escolar pasado me felicitaron por tus notas y ahora me dicen que gracias a ambos la mejor profesora a renunciado, eso está mal… deberían sentirse mal por lo que hicieron – dijo mirando a Amelia que aun estaba de cara a la pared viéndole encogerse – y te vas a disculpar con ella en cuanto lleguemos de viaje, y te voy avisando… las peleas y las faltas de respeto al resto del mundo no te lo voy a dejar pasar, cada que me entere que peleaste te voy a dar una paliza peor que esta – y Diego lloró en silencio sintiendo la mirada acusadora de su padre, Adam al notar el arrepentimiento lo abrazo nuevamente y lo calmo – ahora basta de llorar shuuuuuu – dijo mientras le acariciaba la espalda
• Looooo sientoooo papiiii – aquello si sonó arrepentido
• Lo sé y ya está ya estan esas cuentas saldadas, ahora a portarse bien – le recomendó mientras le limpiaba las lagrimas y los mocos con su pañuelo y besaba en la frente continuamente
• Me disculpare de mi profesora – prometió entre gimoteos
• Te amo y se que eres más que un chico problema, eres brillante bebé – le levanto el ánimo

Tras eso lo levantóo de sus piernas para ir a abrazar a Amelia, esta lloro mucho mas fuerte al sentir que su padre la abrazaba y Adam sabia que aunque ellos eran mellizos Amelia era mas difícil que Diego, desde que nacieron fue asi.

• ¿Dime porque mi princesa naranja se esta comportando mal? – pregunto abrazándola fuerte
• Noooo gip es que buaaaaaa no se papaaaaaa – respondió sinceramente, no sabía la razón, solo pasaba
• Mi vida, tiene que haber algo que te molesta – insistió su padre
• Todo buaaaaaaaaaa me molesta, todos son detestables gip no quiero pelear mas – no era una promesa, era algo que ella deseaba hacer pero no podía  
• ¡Ay Amelia!, tu sabes muy bien que has hecho mal, a diferencia de tu hermano que suele olvidar sus travesuras tu no, eres la de la mente de elefante cariño – y le sonrio con ternura – quiero ver más de ambos, se que son muy inteligentes – y los abrazo con amor –  potencial se que la adolescencia los hace sentir extraños, pero eso no debe cambiarlos… y Amelia, no tienes porque agarrar a guantazos a ningún chico para demostrar que vales – le dijo Adam mientras limpiaba los ojos de su hija
• Lo sé papa
• Bueno, pero como le dije a tu hermano, no les voy a permitir comportarse mal nuevamente mi amor, te amo inmensamente y no voy a dejar que te conviertas en un monstruo, la próxima pelea o mala conducta voy a volver a hablar largo y tendido contigo – dijo haciendo un gesto de azote a lo que su hija se volvió a abrazar de él y él abrazándola y besándola disculpo todo – y como te dije te vas a disculpar con la profesora porque eso estuvo muy mal – dijo luego de un momento de abrazarla
• Lo hare… ya lo había pensado pero se me olvido, además me tiene mala espina – dijo la chica mientras su padre la abrazaba y hacia cariños en el cabello
• Eso ya lo cambiaremos… te amo inmensamente

A la mañana siguiente los tres salieron en un vuelo rumbo a Venezuela para encontrarse con mas obstáculos que saltarían con mucho amor y paciencia, aunque los chicos agotaran esta en cuestiones de segundos.