Mis Gemelos: Cap. 29; Autora Marambra

Mis Gemelos

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 21 de Abril de 2016.

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Capítulo 29

Los adjetivos del amor 

Autora: Marambra

Al llegar a casa tras un largo silencio apenas roto por los sollozos bajitos de Iván, Rubén al bajar el crio de la movilidad le entrego un sonoro palmazo sobre el pantalón y lo mando a su habitación, mientras el estacionaba la cuatro por cuatro, el crio había chocado la vagoneta que se usaba en la estancia y aún no sabía que destrozos habían en el auto… lo que casi no le importaba a Rubén, eso se podía solucionar con un mecánico.

Luego subió a la habitación del niño que estaba sobre su cama acurrucado abrazando sus piernas sentado sobre su almohada, casi resignado de su futuro, cuando vio a su papá supo que los chicotazos de la estación solo eran una probadita, pero cuando salto por la ventana a esas horas de la noche, sabía perfectamente a lo que se metía, desgraciadamente su esfuerzo no valió la pena, no consiguió liberarse de la loca de Raquel que lo había llamado a esas horas para decirle que se encuentren en las afueras de la ciudad cerca de la estación de trenes para arreglar las cosas y entregarle sus pertenencias, cuando él le pregunto porque a esas horas ella dijo que porque se iría de viaje con su marido una larga temporada y que no quería complicaciones con los objetos que ella se llevo de él, que eran un dije de oro, un libro, las fotos comprometedoras saliendo de un motel, y por supuesto su ropa interior, la que se robo la primera vez, un trofeo interesantemente guardado, fetichista casi o chantajista total depende de cómo se lo vea.

Rubén entro y cerró la puerta, eso significaba grandes problemas para Iván, había parado de sollozar, los chicotazos de la estación habían dejado de doler hacia mucho rato, su padre se los dio solo para que sienta la vergüenza de tener que recogerlo de la estación policial a esas horas de la mañana, ahora venia lo grave realmente, la intimidad de su habitación y ningún par de ojos más que los de su padre para mirarle hasta el alma cuando lo nalguee.

Rubén se acerco con cara de pocos amigos, y le ordeno que se baje de la cama para colocarlo sobre sus rodillas, no había metido ni el cinturón, ni el trenzadito, por una sola razón, quería darle a Iván un castigo que lo sienta de su propia mano, y hacerle recordar que EL era su padre y era a EL a quien debía un sinfín de respuesta y se las arrancaría a mano limpia y de paso le dejaría su firma en el trasero como su sello en un papel.

• Bájate de la cama Iván – ordeno Rubén masticando piedras biliosas
• NOOO – buena hora para hacerse el rebelde, Iván estaba metiéndose en muchos líos
• BAJA DE LA CAMA AHORA MISMO – demando papá señalando con el dedo un punto imaginario en el suelo – ¡NO ESTOY JUGANDO MOCOSO CARAJO! –  grito enfadado

Pero el crio no hizo caso, así que Rubén se acerco a donde estaba el chico, lo jalo de las piernas de un  solo tirón y empezó a desabotonar su ropa como cuando cambias los pañales a un bebe, Iván se asusto y se dio la vuelta para correr a la esquina de la cama, pero su papa lo atrapo de una sola pierna y lo volvió a colocar donde quería, sobre la cama boca abajo, y apreso su cuerpo sujetando las piernas del crio entre las suyas y colocando una de sus manos en la cintura, mientras la otra le baja el pantalón esta vez no tendría escapatoria… las manos de Iván iban y venían sobre su trasero para defenderse y su padre las hacia a un lado…

• Te voy a dar la ÚNICA oportunidad para que esto termine de una sola vez y sin una sola nalgada de por medio – papa había empezado a negociar a favor del mocoso mientras lo jalaba de los pies – pero si no lo haces, yo voy a ampollarte las nalgas aunque me ampolle la mano en el camino – advirtió a un nervioso muchacho que trataba de liberarse de su padre, como si fuera fácil, Rubén le saca 20 cm de ventaja en altura y casi 30 kilos de peso, sin contar con la atlética postura que tenía el hombre producto del trabajo de campo y su genética – Donde fuiste, con quien y para que – numero los delitos como era su costumbre – son tres simples preguntas Iván, solo tres preguntas – mostro tres dedos suspendido en el aire – porque NADIE se sale a las TRES DE LA robando una movilidad que no le pertenece, y se larga por la ventana POR NADA – papá subía y bajaba el volumen de su voz oscilando su enojo luchando con el pantalón del muchacho – NADIE  en su sano juicio se sale DE PASEO a estas horas de la madrugada, así que mejor confiesa de una sola vez y nos iremos a dormir todos en PAZ – dijo esperando que Iván diga algo, pero Iván no iba a soltar prenda – ESTOY CANSADO y tengo un viaje mañana, así que desembucha porque si no, hare oídos sordos a las suplicas que me hagas de parar PORQUE TE DUELA EL CULO… ¿entendido? – soltó toda esa última advertencia esta vez apoyando su palma abierta a la altura del cuello del muchacho mientas su mano libre soltaba de vez en cuando un sonoro y reverendo palmazo en el trasero del crio que brincaba cuando este llegaba

Pero claro que nuestro simpático amiguito no abrió la boca, no dijo ni pío, lo que agoto la paciencia que había tenido Rubén todos esos días que estuvo lidiando y aguantándose de darles unos azotes a los dos hermanos por no hablarse, había sido paciente con Iván y había hablado por las buenas para saber si necesitaba su ayuda, pero el otro hizo oídos sordos y prefirió irse a no sabía donde en semejante hora, lo cual provoco la dolorosa reacción de Rubén sobre el trasero de su hijo, se sentó en la cama y lo arranco de ella para ponerlo sobre si, le sujeto el brazo y las piernas y empezó a nalguearlo sin un solo atisbo de parar por el lapso aproximado de 3 minutos, para esas alturas del partido, Iván lloraba a gritos casi y se movía de un lado a otro sudoroso, lacrimoso, mocoso, lleno de saliva derramada de no poder balbucear “basta papa, basta” y con la agónica tortura de no poder poner la mano para protegerse, que vamos, cuantos azotes puede repartir un enojado padre en ese corto lapso de tiempo? ¡¡¡¡Muchísimos claro¡¡¡¡

• Plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas plasss plassss – sonaba el trasero del crio al mismo cadente ritmo que su padre aplicaba su mano enfadada, arrancando desde casi el inicio lágrimas y suplicas lastimeras, es que el pobrecito ya se había llevado una buena rasta en la poli
• AUUUUU Yaaaaaaaaaa – suplicaba – para para por favorrr – mendigaba prácticamente – au, AUUU, AUU ayyy auuuuuuuu, achichiuuuu, chichiuuuuu, chichiuuuayyyyy – decía como si se hubiese quemado, y bueno la piel estaba ardiendo
• Donde fuiste, con quien y para que – repitió papá sin imutarse y sin dejar de palmear – si me respondes yo paro – declaro, pero Iván no tenia aliento para otra cosa que llorar, no abrió la boca para otra cosa que no sea gemir, sellando su destino – BIEN TU TE LO BUSCASTE ….Plas plas plas plas plas plas plas plas plas plas – para ese entonces Clara desesperada abrió la puerta con su propia llave y corrió hacia donde estaba Rubén con el afán de atajarlo, pero no la dejo – ¡ALTO AHÍ! Clara… esto es entre este mocoso y mi mano
• Lo vas a lastimar – grito Clara desesperada
• NO; solo voy a ampollarle el poto plaf plaf PLAF PLAF
• AUUUUUU ayyy auu yaaa, BAAAASTA DUEELE, POR FAVOR MAMIIITA, DILE QUE PAAARE, QUE PAAARE – rogo a mamá queriendo aprovechar el gancho dado, pero antes de que Clara pueda hacer algo, Lex abrió la boca
• BASTA PAPA – intervino – YO TE LO DIRÉ – grito Alexander que se despertó con tanto ruido e intuyo que Iván hizo alguna locura por Raquel
• NOOOOOO – grito Iván sintiéndose traicionado
• Plas plas plas plas plas plas  plas plas  dime entonces donde fuiste con quien y para que – volvió a gritar Rubén
• FUE A UN CONCIERTO – chillo Lex acercándose a su padre, mintiendo por su hermano – había un concierto en la ciudad terminaría a las 2 y media y él se encontraría con una chica – eso era más convincente dada la naturaleza del pecado de Iván
• ¿QUIÉN? – rugió Rubén – Su nombre – papá dejo de nalguear a Iván y lo paro entre sus piernas sin soltarlo mientras él, aliviado podía por fin frotar el trasero y mitigar algo el dolor
• No voy a decirlo – balbuceaba Iván terco, enfadando más a Rubén
• ¿Quién es? – le pregunto a Lex dirigiendo su mirada tosca al mayor de los gemelos
• NO lo sé – dijo desdeñoso, pensando en que metió la pata –  No sé su nombre – agrego
• Como que no, andas con él todo el día – dijo Rubén – van a todo lado juntos
• SI papa – respondió Lex sin negar aquello – pero no somos siameses ¿recuerdas? – osada respuesta, estaba jugando con las mismas palabras que en su momento su padre le dijera y Rubén prefirió concentrarse en Iván antes de poner a Lex sobre su falda
• ¿Quién es Iván?, ¿con quién saliste? – estaba al borde de la desesperación
• Respeta mi decisión papá – respondió por fin Iván entre gemidos e hipo de tanto llanto – si quieres puedes seguir castigándome por haber destrozado la movilidad – dijo en un momento de valentía por estrés – o por salirme a estas horas o ir a la comisaria pero no voy a decir nada más, ES MI DEREEECHO – lloro nuevamente Iván sin dejar de frotarse las posaderas

Al final Rubén dejo de interrogarlo, estaba dividido entre la admiración hacia su hijo, por la lealtad que estaba demostrando bastante férrea que traspasaba las fronteras de los lazos de sangre y el enojo por su tozudez que resulto mucho mayor que de su par Alexander; al final se paro y lo cogió de los hombros, hubo un pesado silencio en el ambiente, nadie quiso decir nada, la palabra era para el papa, solo se oía los gemidos lastimeros de Iván entre cortados, daba penita verle, parado frente a su padre sin ropa interior que subirse, con el traste bastante rojo, su padre azoto desde las nalgas a la mitad de los muslos concienzudamente.

• ¿Por qué no quieres decirme quién es? – pregunto alzando la vista como tantas veces hacia con los chicos
• Porque soy un caballero – respondió tajante Iván; Rubén después de respirar hondamente como para que no le falte aire en los pulmones, sin soltarle el mentón a su chico le dijo…
• ¡AAAYY IVÁAAN!... Iván, Iván…. Iván…. – murmuro papá, sin saber si estar sorprendido o enfadado, al final decidió por lo primero –  ¿Sabes? – dijo en voz baja – Siempre supe que el amor era ciego – había llegado la hora de filosofar sobre este turbio asunto – hasta yo cometí estupideces en su nombre – suspiro hondamente – con Logan, tu padre – suspiro – aprendí que además era sordo porque por más que yo le recomendaba algo, él hacia todo lo contrario y le valía un tremendo cacahuate lo que yo diga o recomiende, pero contigo Ivancito – en este punto no se sabía cuál de los dos debería vestirse de valor, si él o su hijo, así que solo coloco su enorme mano callosa sobre el hombro del muchacho ejerciendo una leve presión para calar con las palabras, impactar en realidad y prosiguió – …contigo estoy aprendiendo dos nuevas cualidades del amor – e hizo un  movimiento con los dedos de la mano en señal de comillas – que aparte de ser ciego y sordo, el amor resulta ser mudo y cojudo, porque tu prefieres que de té de nalgadas en vez de soltar el nombre de una tonta mocosa mal entretenida que te llama a estas hora de la madrugada para llevarte sobre que malos pasos serán – lo sacudió un rato y luego lo dio la vuelta y le regalo un último sonoro palmetazo en medio del culete ya ardido y añadió enojado – VAYA A DORMIR

Rubén se salió del cuarto enojado para irse a su dormitorio y dejo a Clara y Lex en la habitación del crio, su madre se acerco y lo miro con cariño, lo abrazo fuertemente y lloro con él, Iván al ver que su madre se acercaba abrió sus brazos en señal de consuelo que recibió a manos llenas de ella y se hubiera quedado ahí con él sino era por el llamado de su padre.

• Clara por favor ven aquí – dijo entre dientes a manera de gruñido

Clara salió recomendando a Lex que se quede con su hermano, algo pasaba con Rubén, y no se equivoco, estaba en su baño vomitando bilis y con un cada vez más creciente dolor abdominal…

• Et tefuis noc ase jermu noc? (Te fuiste con esa mujer no) –pregunto Lex en un lenguaje invertido que solían usar como código para que nadie lo pesque
• Si, respondió Iván – dejándose abrazar por su fraterno sentado en la cama
• Tonto, y más tonto et jedieuq et riateme ne masblepro (te dije que te metería en problemas)
• Lo sé – musito bajito sollozando
• Me voy con su padre al hospital se ha puesto mal ….

Clara los dejo a los dos saliendo a toda prisa con Rubén a emergencias, el colerón había empezado a hacer mella en su padre…