Mis Gemelos: Cap. 162; Autora Marambra

Mis Gemelos

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 02 de Mayo del 2016

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Capítulo 162

Ángel de la retaguardia dolorosa compañía

Autora: Marambra

¿Que es lo primero que una persona olvida al calor de la alegría y el entusiasmo?... el miedo, pierde el miedo, miedo a lo desconocido, miedo a la verdad o la mentira, miedo a las consecuencias, miedo al peligro, miedo a todo; es más  pierde no solo miedo sino el RESPETO por el miedo…. ¿Y que pierden los adolescentes al calor de la dicha?...... las recomendaciones de papá; si, justo eso y justamente eso paso no solo con los gemelos, sino ahora mismo con Jacinto Illien López con el Tominovich ausente en su certificado de nacimiento….el mal llamado rumanito que más camba que la yuca era… de zarcos ojos y piel morena, el motivo de alegría de su abuelo, el que arrancaba siempre un último pensamiento a sus hermanos, el niño bueno y bien portado, el ejemplo a seguir que ponía Rubén a sus tojitos por lo sensato que era; pero ahora mismo apenas reconocible… ¿qué había sucedido?... nada fuera de otro mundo, solo la virulencia impulsiva de la rebeldía, esa que te grita al oído romper las cadenas de la esclavitud y muerde las ansias de libertad, y te hace meter la pata al fondo mismo del propio fondo.

Es que dicen por ahí las buenas lenguas que los humanos pero sobre todo los niños y los adolescentes son pequeños ángeles incompletos, que llevan a cuestas una sola ala por eso son imperfectos y de ahí sus ansias de volar, de buscar el libre albedrio aun sin entender bien el concepto del mismo; menos mal por cada ángel caído con una sola ala sobre la tierra, habían otros que aceptaron el reto del todo poderoso y decidieron en ese libre albedrio moldear de la mejor manera a aquellas pequeñas obras de Dios incompletas que les dejo un día en la mano… eso eran los padres en primera fila, ángeles de la guardia, pero había otras formas angelicales a capricho del señor… unos eran los padres sea biológicos o no… otros los abuelos, los hermanos, un tutor, etc, etc etc… todos ellos eran medio ángeles también, que cojean a veces en sus decisiones porque no saben a ciencia cierta si son o no acertadas para el ser que cuidan con celo y con amor siempre con la buena intensión en el corazón, la de hacer que aquel pequeño ser sea lo más parecido a Dios en su visión de lo perfecto en su imperfecto mundo de comparaciones, cánones y modas.

Pero en ese camino recorrido, tropezado y zapateado no todo es luz de luna así de hermosa, o cielo raso con estrellas u horizonte límpido siempre brillante sino la más de la veces hay nubarrones, dolor y desasosiego y las herramientas no siempre son las adecuadas para moldear el barro, la madera, la piedra, el hierro o la plastilina que Dios decidió dar en mayor o menor proporción y voluntad en esas voluntades que nacen bajo la dulce forma de un niño para hacer del mundo un jardín donde contemplar embelesado su obra maestra o sea al hijo de su hijo… ese niño o esa niña hijo de papá o mamá, hermano menor del mayor, apoderado del tutor, sobrino del tío o como este tejida la cadena de mando y por tanto las formas de moldear a ese ser no son siempre cristianas u ortodoxas pero el resultado es que al fin y al cabo logras el cometido de la vida y de esa obra hay una que sobresale, la que más cerca está de la cima según tu visión de vida, y eso era Yhanku para Arturo, el nieto / hijo amorosamente moldeado, terminado casi a la perfección de su perspectiva moral, religiosa, legal y biológica incluso y digo casi porque solo le faltaba la experiencia que solo da el transcurrir del tiempo.

Yhanku era para Arturo, el ángel de la guardia de los menores de la casa, no en vano en el pasado se adjudicaba las travesuras ajenas y ponía el traste por ellos para recibir la reprimenda del abuelo, la mas de mil millones de veces que estuvo boca abajo poto arriba y pelado le dio la experiencia que necesitaba ahora para ser hoy mismo lo que en realidad era…el guardián de los pasos a seguir por parte de sus hermanos… si tuviera que recordar las veces que llorando en su cama tras una huasca meditaba profundamente en sus actos o los ajenos para evitar inconvenientes a futuros se encontraría con una enciclopedia de todo aquello que en su justo momento estuvo prohibido y cuyas letras entraron con dolor al ser no escritas sino grabadas casi con fuego en su trasero, algo así como la nalgas de los mil mandamientos … no romper los vidrios, no faltar a clases, no traer reprobado del cole, no traer nota de la señorita, no hacer enojar a la mamá, no desobedecer al abuelito, no esconder la verduras, no pelear con los hermanitos, no romper las cosas ajenas, no alzar lo que no es de uno, no meter bulla cuando dicen que te calles, no salir a jugar sin permiso o sin terminar los deberes y un larguísimo noooooooooo……… de todo lo que en aquel entonces era divertido y ahora parecía una niñeria  y por cada “NOOO” siempre hubo un no más importante pero que nunca salía de la boca de papá sino de la suya como una promesa pequeñita teñida de lagrimita transparente y que conmovía la mano azotadora:  El…NO papito, prometo no volverlo a hacer.

Y aquellos pensamientos derivaron en otros, no hubo un solo NO que no haya sido por su bien, aunque tardo años en darse cuenta que papá tenía toda la razón, y ahora papá lo hizo su mano derecha, su bastón de vida, su apoyo… su igual, no por nada le recomendó guardar los pasos de su hermano menor, el niño joven en formación, el proyecto de hombre a futuro, la obra aun incompleta que curiosamente no solo era de su viejito sino suya propia, algo así como un borrador con guía porque en su educación también pesaba él, porque aportaba su granito de arena y no por voluntad propia sino porque Arturo su abuelo a su manera lo hacía cada vez más participe de ella relegándole la dura tarea de formar al hombre de la magma de niño que aún era, no por nada había confiado en él, así que para estar seguro de lo que iba a hacer busco en lo recóndito de su mente lo que necesitaba para justificar sus actos y no ser injusto como lo había calificado Lorenzo y ahí estaban, con letras de neón brillantes NO MENTIR, NO SALTARSE EL TOQUE DE QUEDA, NO RETAR A LA AUTORIDAD…

Y estuvo pensando en eso desde que Illien saco los pies de casa bajo la supuesta total responsabilidad de Lorenzo, que tras la discusión sostenida no cruzo palabra con Yhanku y no porque el enojo aun flotara en el ambiente sino porque Lorenzo en el fondo de su corazón aun dudaba de sus propias decisiones y más aún si estas decisiones involucraban el bienestar de Illien; el observar a Yhanku con las manos ampolladas y rojas trozar leña para la matriarca de su casa, el verlo día a día con fastidio y enojo madrugar y revisar el hogar aquel donde creció su abuelo su madre y ahora ellos le hizo darse cuenta de algo…. Yhanku dejo de ser un joven impulsivo para ser un hombre cabal, hecho y derecho, faltaban meses para recibir su título en ingeniería petrolera, trabajaba desde muy temprana edad y no para gusto propio como en los últimos tiempos sino para ayudar a su padre.

Y recordó con nostalgia y algo de amargura ver a su hermano perder parte de su infancia, siempre ahí con la cabeza gacha ayudando a su madre con todo, bañando a Illien o a él mismo, dándoles de comer privándose incluso el pan de su desayuno cuando Arturo cayo gravemente enfermo tras la fractura de su pierna, recordó como lloro toda la mañana y la paliza que se llevó de Narda cuando no quiso ir con ella a limpiar casas y dejar el cole, y recordó como don Rubén vino y se peleó con ella, y se los llevo en la camioneta a los tres junto a la señora Clara, Logan tenía 19 a 20 años aquel entonces y ya no vivía en la hacienda, recordó como Yhanku se avergonzó cuando don Rubén lo metió a la ducha para que se calmara el llanto y lo baño para quitarle el barro y la bosta que llevaba encima.

Había huido de la tunda de su madre, corrección fue salvado de ella, que frustrada en su pobreza quería llevarlo a rastras a la casa de unos extranjeros que tenían costumbre emplear a la gente y llevárselos con ellos a su casa en Santa Cruz, su intención fue dejarlo ahí para que trabaje limpiando el jardín, alguien le había contado eso a Arturo y Arturo llamo a Rubén, don Rubén y doña Clara iban regularmente a verlo al hospital y algunas tardes veían a los nietos con el abuelo, pero Arturo en su orgullo no le comento sobre las penurias que estaban viviendo al no tener dinero y la cosa estallo cuando algún comedido que nunca falta murmuro que su hija había rifado al niño prácticamente, recibiendo dinero de antemano para que el muchacho vaya a trabajar en casa de aquel hombre cuya fama de abusivo con sus empleados precedía incluso su nombre y que sería un error dejar que el muchacho vaya, que el tipo ese había dado una paliza al hijo de doña Juanita que también fue a trabajar a los establos de aquel estúpido y no le quedó otra que pedirle como favor que impida que Narda entregue al niño  a aquel hombre cruel y fue así que Rubén y Clara se desayunaron los problemas económicos de Arturo

• Y PORQUE ME LO DICE RECIÉN AHORA PAPA ARTURO – le dijo Rubén dolido – porque no me tiene confianza para decirme que estaba pasando necesidades, y no quiso siquiera que lo ayude a pagar la cirugía – y Arturo hizo a un lado la cara ocultando la tremenda vergüenza que sentía, hombre de campo acostumbrado a apañárselas como sea, lo último que quería era dar problemas, molestar a ese hombre joven a quien con cariño había acogido en su casa y lo quiso y quería como al hijo que nunca pudo tener – a ver dígame mirándome de frente que no lo entiendo – Rubén le cogió la mano tullida, Arturo había no solo adelgazado infamemente sino envejecido en un dos por tres, tirado en cama con un aparato ortopédico en la pierna, la infección que hubo luego, la embolia en uno de los dedos que casi cuesta la amputación del pie
• No quería molestar, tampoco quiero la lastima de naide m´ijo – contesto comiéndose las lágrimas que de impotencia humedecían los cansados ojos pardos – pero aura mismo no me puedo permitir ningún orgullo porque m´ija quiera deshacerse de mi nieto – y un sollozo lastimero le traiciono la boca – ¿qué culpa tiene mi hirpita (pajarito)? suficiente ha tenido con el desprecio de su padre y de la que lo ha pariu – y el hombre empezó a llorar con todo el desespero que tenía, era una de las pocas veces que Rubén lo vio vencido, atado de pies y manos – ¿qué tal me lo estará martirizando?, riñéndomelo, pegándomelo sin motivo… por favor Rubén… por favor, si querés hablo con Clara pa que no se enoje contigo, no te pediría esto… pero son mis chichilos (monitos)… no sé a quién más acudir
• ¿LASTIIIMA?, ¿eso es lo piensas de mí? O sea cuando tú me tendiste la mano me tuviste lastima?, ¿tan miserable era que me tuviste lastima y por lastima me diste una cama y un pan en tu casa?... o sea me has mentido siempre y no era que me querías como decías – le reclamo obligándolo a mirarle a los ojos
• Yo siempre te he querido Rubén
• ¿Y porque dudas que mi cariño sea de hijo?
• Han pasau tantas cosas entre tú y m´ija, que me han dolio, y lo último que quiero es que mis nietos sean motivo de discordias entre tú y la Clara, sobre todo porque muchos de tus disgustos con ella fueron por Narda
• Deje que yo solucione eso con mi mujer papá Arturo, los niños nada tiene que hacer con ese problema – aseguro serio – menos Yhanku… que bien puede ser mío y no me perdonaría y no le perdonaría a usted, que me niegue la oportunidad de hacer algo por él solo para evitarme un conflicto con mi esposa – sentencio ardido – si ella me ama como dice aceptara a mi hijo, y sino pues tiene la puerta abierta, usted mejor que nadie sabe lo mucho que he querido tener otro niño en mi vida y si Yhanku es mío lo voy a cuidar como es debido… – eso era desde ya un hecho para Arturo y como le habría gustado que su nieto fuera hijo de Rubén – después de todo yo no recuerdo que paso aquella noche que llego Illien padre, y es una duda que no me la puedo sacar de la cabeza, así que desde ahora le voy diciendo que en cuanto yo tenga la mínima idea de donde está el rumano, yo voy a ir por él para zanjar este tema con pruebas científicas… es hora de que deje de vivir atormentado con esto  

Y tras esa declaración Rubén abandono el hospital dando alcance a Clara en la farmacia a donde fue a comprar los medicamentos de Arturo y en el camino le conto lo que estaba pasando, Clara simplemente callo y no quiso discutir con él pues estaba tenso, enfadado, dolido, y cuando él le exigió una respuesta ella simplemente dijo que la prioridad era recoger a esos niños y luego Dios diría, y a recogerlos fueron cada uno estresado esperando que Narda no haya ido a entregar al niño para que ese hombre se lo lleve a Santa Cruz, porque ahí sí que perderían toda posibilidad de encontrarlo pero Dios era Dios e hizo estallar a Yhanku en rebeldía en el momento justo y necesario, pero desgraciadamente aquello derivo en una paliza y la precipitación de Narda al vacío de sus propios sentimientos.

Yhanku en medio del caos de aquel día tras los gritos desaforados de su madre y el llanto de su hermano sin entender de qué iba la cosa, pero ante la violencia de los actos de Narda que empezó a tirar todo de un lado a otro, rompiendo lo que a su alcance estaba llamándolo y al ver el susto de sus propios hermanos, sobre todo cuando su madre en su locura golpeo a Jacinto preguntando por su hermano mayor, salió de la alacena donde se había escondió para evitar que su madre lastime a sus hermanos; se había escondido porque ya sabía que quería llevarlo a casa de aquel hombre, un total desconocido y alejarlo de su abuelo y de sus hermanos… de ella misma, mientras Lorenzo metió a Jacinto bajo la cama de Arturo desde donde vieron abrazaditos y asustados como Narda le rompió los libros a Yhanku mientras el rogaba que no lo haga…

• PERO YO NO QUIERO IR MAMIIIITA, NO QUIERO DEJAR A MI TATA, A VOS… ADEMÁS TENGO QUE IR A CLAAAASES
• ¿Qué clases Yhanku? – en algún momento de cordura Narda quiso razonar con su hijo, hacerle entender que ahora no podía ser, estaba agobiada con todos los problemas, los gastos del hospital y el no tener ni para el pan de la tarde, estaba realmente ofuscada – no tenemos quintos hijo, ¿de dónde voy a sacar pa pagar los gastos de tu tata?, me tenés que ayudar, no hay de otra, ¿acaso pensás que me gusta la idea? – le agarro de los hombros con fuerza mientras veía a su hijo mojar la cara de lágrimas
• ¿Pero por qué en Santa Cruz? ¿Por qué no aquí?, yo voy a ayudarte, voy a trabajar pero no en la capital no allá… MAMÁ… No quiero estar lejos de mi tataaa, por favoooor
• PORQUE NOOOOO, PORQUE YA ME HAN PAGADO POR ADELANTADO EL MES… ¿ACASO NO LO ENTENDÉS? YA ME GASTE ESA PLATA COMPRANDO LAS MEDICINAS DE TU ABUELO, ASÍ QUE MEJOR TE APURÁS, ESTAMOS AL FILO DE LA HORA  

Y Yhanku se arrojó a los pies de su madre, 3 de la tarde y no habían comido nada, por lo menos no Yhanku y Lorenzo, ahora a las 3 y media de la madrugada mientras esperaba la llegada de Jacinto recordó cómo le sonaron las tripas de hambre a su hermano y dijo que tenía dolor de estómago por eso no comería y ellos le creyeron cuando Yhanku les cedió parte de aquel pan que fue lo único que tenían aquel día y recordó con amargura como Narda llego con los ojos rojos, había caminado horas de horas en la mañana y nadie quiso que lavara ropa y decidió que tenía que deshacerse de uno de los muchachos, Yhanku era grande, era fuerte, muy obediente, y sabía hacer muchas cosas de la granja porque ayudaba al abuelo y lo ofreció a una familia para cuidar el jardín todos los días de la semana y ella recibiría el sueldo de su hijo para mantener a los otros dos, restando lo necesario para ropa pues comida y techo tendría en aquel lugar…

• QUE MIMPORTA – grito atragantándose Yhanku con el llanto y el hipo que le dio – NO VOY A IIIIIR
• VAS A IR, PUE´J, VAS A IR – y Narda empezó a poner la escasa ropa de su hijo en una bolsa nylon y al ver esto Yhanku le quito sus cosas y rompió la bolsa
• NOOOO, NO VOY A IR, NO VOY A IIIIIR… YO TENGO QUIR A LA ESCUELA
• QUE ESCUEEEELA, NO HAY ESCUELA HASTA EL AÑO – declaro enfadada Narda mirando la hora, ya debían estar de ida a la terminal
• NOOOO, MENTIROOOOSA
• YA ESTA BUENO DE HUEVADAS… NO HAY ESCUELA, SE ACABO LA ESCUELA PARA TI, HAY QUE TRABAJAR – grito y alzo la mochila del niño y saco los cuadernos y empezó a arrancar las hojas
• Mamiiiiita, por favooor, por favorcito no me rompa el liiiibro, no rompa mis coooosas, tengo tarea que hacer, tengo exámenes  POOOOR FAVOOOOR – y empezó a querer quitarle sus carpetas mientras Narda ciega seguía en lo mismo rompiendo las cosas de su hijo impávida ante el llanto desesperado del muchacho – Maaaamiiiiii mi cuadernito noooooo, MI CUADERNITO NOOOO, MI CUADERNITO NOOO – eso era lo único que oyó Lorenzo mientras un montón de hojas blancas caían picadas al pie de aquel catre viejo y sin saber cómo vio la violenta reacción de Yhanku, una reacción visceral, cargada de toda la amargura que solo el mundo puede dar a un niño – MAAAAALA, BRUUUUUJA… TE ODIO, TE ODIO SABES?... OJALA TE MURIERAS – grito alzando los pequeños pedazos de papel y sus ojos se cruzaron una fracción de segundos antes de ver como el quimsa del abuelo cayó sobre las piernas flacas y desnudas de Yhanku, los tres estaban con ropa vieja de casa, unos pantalones cortos por el calor y las chinelas de goma, la polera llena de agujeros de manga corta
• RWAAAAS, RWAAAAS RWAASS – Lorenzo solo oyó el viento cortarse en dos, nunca vio el cuerito aquel, solo dedujo donde cayeron porque las manos de Yhanku volaron como palomitas sucias tratando de tragarse el dolor picoteando el sobe que no mitigaba en nada el ardor
• AUUUU AUUU MAMAAAAAYYYYY – grito Yhanku rascando los rebencazos mientras se hacia el quite y su madre lo agarro de la ropa rompiendo la vieja polera
• Y YO ODIO NO PODER HACER NAAAADA – la voz de su madre estaba cargada de resentimiento y odio a la vida y a ellos –  NO TENGO QUE COMER, NI QUE DARLES…. ASÍ QUE AQUÍ USTÉ ALISTA SUS TRAPOS QUE SE VA HOY MISMO A CASA DEL GRINGO ESE – y empezó a empujar a Yhanku hacia la calle tal cual estaba vestido con aquellos franjazos en las piernas que moretearon ya no más
• YO NO QUIEEEERO IIIIIR, NO QUIERO IIIIIR A NINGUNA PAAARTE – y se tiró al suelo sentado, pero poco duro, Narda jalo a Yhanku de la axila parándolo de golpe lastimándole el brazo
• USTÉ VA DONDE YO LO MANDO RWWWAAAS RWAAASS –

Y los huascasos volvieron a caer en los muslos y Yhanku miedo al dolor o miedo al alejamiento se deshizo del agarre de Narda como pudo y salió corriendo descalzo por perder las chanclas hacia el corral resbalando sobre la mierda de las vacas, y Narda ida en su enojo apuro los pasos con una sola intensión, azotar hasta el cansancio a su hijo por desobediente y como que…. en parte lo hizo al soltar dos o tres rebencazos más que llegaron a la espalda, a las piernas a los brazos…  hubieran sido cuantos más de no ser porque en eso llego Rubén y Clara como mandados de la mano de Dios y vieron el horrible espectáculo aquel, don Rubén salto con una agilidad increíble la barda aquella del corral y cogió por la muñeca a su madre arrebatándole el latiguillo ese

• CARAJO QUE TE PAAASA ESTAS LASTIMANDO A TU HIJO – pero Narda logró zafarse y quitarle de nuevo el rebenquillo aquel y atesto un sonoro chicotazo sobre las pantorrillas de Yhanku y Rubén hizo lo que hizo soltarle un sonoro revés contra sus principios ante la violencia – ¡PLAF!… MIERDA HE DICHO QUE BASTA QUE NO SABES OÍR

Y le sacudió con ganas pues Narda no se entendía a sí misma, le dio un ataque de ira y frustración, de enojo, estaba ciega… y empezó a temblar como si tuviera fiebre alta a punto de la convulsión mordiendo los dientes de la rabia que tenia de ver al hombre aquel que según ella la había abandonado y se puso peor al ver a Clara agarrar a Yhanku y abrazarlo ensuciándose las caras ropas con bosta y barro besando la zarca cabeza mientras el niño, su niño en una traición al amor que le tenía se fundió en ella, apretando su pequeño cuerpo al de su mortal enemiga como un bibosí en motacú depositando su lastimera queja en el pecho amable de aquella mujer.

• ¡¡DESGRACIADA!! – le grito a la cara a Clara escupiendo el infernal odio que le sentía, ella era la depositaria de su supuesta desgracia – SUELTA A MI HIJO, SUEEEELTALOOO – empezó a forcejear el agarre de Rubén, pero no le hizo caso y decidió alejar a Yhanku de aquel lugar y al ver que el niño aferrado a Clara como a un clavo caliente avanzaba alejándose de ella empezó a gritar – YHANKUUUUU VEN PA ESTE LAO, VEN TE DICHOOOO – y como no le hacía caso empezó a patear a Rubén – SOLTÁME, SOLTÁME COJUDO DE MIERDA, A QUE MIERDA HAS VENIDO TU CON ESA TU PUTA – soltó todo el veneno que tenía dentro mientras con rabia acumulada, cargada de odio vio a Clara y a su hijo entrar a la casa para nada más salir a los segundos con los otros dos niños, Illien alzado en los brazos de la mujer que más odiaba pese a la edad que ya tenía, 6 años más o menos con el dedo en la boca, y Lorenzo abrazando a su hermano en un consuelo menudo y temeroso, los tres lloraban desconsoladamente
• Lávate la boca para hablar de mi mujer, pequeña zorra – escupió entre dientes controlándose de faltarle el respeto, pero no por ella precisamente sino por los niños
• Que me venís a reclamar si te has mandao mudar con esa siripa (chismosa) dejándome preñada, te ha importao bien poco lo que me pase y no te paraste a pensar ni pa largarte lejos olvidándote de mí y de tu bastardo – y un nuevo revés le estallo la boca con el dorso de los dedos, Rubén estuvo conteniéndose el enojo pero oír decir aquello, fue el colmo, entendía hasta cierto punto la frustración de Narda, su casi obsesión con su persona, la rabia de verlo casado con Clara y ocasionarle un sinfín de problemas con ella por chantar un niño que no sabía a ciencia cierta si era o no suyo y hacerlo sufrir con esa duda, entendía casi todo; pero llamar a su propio hijo con tal desprecio era el límite de lo permisible
• Escúchame bien ahora loca de mierda – la zarandeo con violencia – si este niño es mío Narda  y lo compruebo te voy a fundir en la cárcel por abusiva y maltratadora
• Elay ¿ahora salís a defenderlo?, sabes bien que el mierdita ese es de vos, solo que no querés asumirlo, maricón poco hombre, me has desgraciau la vida y todo por esa cunimi culo e´leche  – y fue Clara la que corto el asunto
• Si pues Narda – le dijo toda calmads aunque por dentro ardía y tenia ganas de saltar sobre ella y jalarle los pelos – …. ahora te la chupás y te mordés con ganas, antes me afectaban tus insultos pero ahora no, y si ese niño es de Rubén pues que lo sea y que se lo recoja que yo lo recibo con los brazos abiertos en mi casa, no solo a él sino a los otritos, que a mí me gustan los niños tengan o no mi sangre y si este peladito es de MI MARIDO, en hora buena… con más razón voy a quererle y cuidarlo de tal forma que me diga mamá a mí y no a vos zafada de mierda – y Narda ante esa declaración quiso condenarse, quería saltar sobre Clara y arrancarle el pelo y estuvo a puntito sino era porque Rubén estaba en medio de las dos mujeres que querían comerse los ojos – estoy harta de tus insultos y tus insinuaciones, yo no te quite ningún hombre, vos solita te encargaste de  tirarlo en el camino, vos le sacaste la vuelta y ahora te aguantas cabrona, y si pensás que vas a chantajearnos con que ese niño es suyo – apunto a la camioneta donde estaban los tres pequeños con cara de susto – pues bien que lo sea ya te lo he dicho, PORQUE TODO LO QUE ES DE MI MARIDO…. ¡¡¡ES MÍO!!!!, INCLUSO LOS HIJOS DESPARRAMADOS QUE TENGA EN EL CAMINO… CHULUPACA DE MIERDA (cucaracha)

Y se dio la vuelta toda digna, pero por dentro temblando de rabia, esa mujercita tenía la capacidad innata de sacarla de sus casillas, pero ahora no importaba la loca esa, sino los niños y se subió a la camioneta a la parte de atrás donde estaban los tres  hermanitos temblando con el miedo y el hambre en el cuerpo y abrazo a Yhanku que no podía calmarse y empezó a sobarle las piernas jurando por lo bajo la crueldad de su madre, no quería que siga llorando, pues contagiaba el animo a sus dos hermanos menores quienes ya estaban con los ojos rojos soltando lágrimas pero en completo silencio, entendiendo que aquel era el momento de dolor de su hermano mayor, y que merecía que alguien lo calme, pero sobre todo porque tenían miedo a que Clara se enfade de verlos llorar; Rubén tardo un buen rato todavía dejando a Narda en la casa, donde en su locura momentánea puso todo de cabeza, rompió lo poco que tenía y finalmente se quedó dormida en el suelo, no fue a ver a su padre en días pues entro en un estado depresivo increíble e intento suicidarse al verse sola en el caserón aquel, quien sabe, solo Dios lo que hubiera sido de no ser por una mujer que la conocía y que le encontró trabajo y la fue a buscar y la pillo ahí, pataleando en la rama de un árbol, y alerto a los vecinos quienes lograron al filo salvarla de la muerte, Rubén corrió con los gastos de su internación y su tratamiento con un psiquiatra, habían sido meses muy duros para los pequeños pero lo que conmovió a Clara al extremo fueron las palabras de Yhanku para su madre aquella tarde que se lo llevaron a casa con sus hermanos hasta ver que más se podía hacer…

• Ya Yhanku, ya no llores más mi vida, se están hinchando tus ojitos – le había dicho ella arrullándolo en su regazo mientras Rubén conducía camino a casa temblándole el pulso, fue un milagro que no tengan un accidente después de semejante escena
• Es que me da pena mi mamá – declaro con un hilo de voz mirando por la ventana el camino que se alejaba de su casa – no tiene la culpa la pobre… es que nadie la quiere porque todo le sale mal… es difícil para ella y a veces nosotros le hacemos renegar  

Miro a sus hermanos que ante aquellas palabras se pusieron a llorar, Lorenzo porque entendió lo que su hermano dijo y Jacinto por simple imitación, lloraba porque sus hermanos mayores lloraban y eso le generaba un profundo sentimiento de abandono y desamparo, en su fuero interior el llanto de sus pares gritaba que tenían miedo, y si ellos, los grandes temían él con más razón porque seguro no podrían defenderlo de sus miedos simples de niño pequeño y Clara ante aquello sintió en su corazón una aguja picar con inmenso dolor su pecho y atrajo a Yhanku hacia ella y a Lorenzo y a Illien que busco automáticamente su confort, Rubén había oído esas palabras y se amargo en su silencio, ese niño defendía y justificaba a su madre porque la amaba como era, porque Dios en sus muchos y complejos misterios, había querido regalarle a esa loca de mierda un hijo tan sensato como aquel…todo un lujo, un lujo realmente… un niño con la madures de un anciano y la sabiduría que no te dan los libros sino la nobleza de los sentimientos….

Lorenzo no recordaba que fue lo que le dijo Clara o Rubén a su hermano, pero lograron que ese llanto angustioso que dolía el alma cese, fue un extraño mes y medio que vivieron en casa de aquel hombre, quien tras las tareas del cole los llevaba a visitar al abuelo todas las tardes… Rubén lo traslado de clínica y volvieron a operar limpiando la infección del hueso, tras aquello vieron recién a su madre, algo había cambiado en ella, ya no los trataba como si fueran un estorbo sino con dulzura, un amor que mordía a veces pero ya no con la crueldad de siempre, pensó que era la lejanía pero lo cierto era que fue la medicación para la depresión y las sesiones con el psicólogo a la que iba Clara como familiar, ironías de la vida; tras aquello Narda y ella firmaron una silenciosa tregua, sobre todo cuando Clara llevo a los niños a visitarla al hospital sin decirles que era un psiquiátrico en Santa CRuz, simplemente que su madre tuvo un catarro muy malo que estuvo malita pero que ahora estaba bien, así no angustiaba a los muchachos sobre todo a Yhanku que seguro hubiera cargado con la culpa de aquello y como que lo hizo, ver a su madre internada le dio mala espina y recordó el deseo de muerte que tuvo para con ella y se sintió mal y por ello tenía miedo acercarse o mirarla de vergüenza y ante la huraña reacción inicial Clara los insto a abrazar a su madre y mimarla, uno de los más grandes miedos de Narda fue que Clara aproveche la oportunidad de poner a sus hijos en contra… un algo que nunca se dio ni daría, y Narda sintió por fin el abrazo de los suyos y los vio bien cuidados, limpiecitos, aumentaron de peso y talla incluso

• Pensé que mis hijos te dirían mamá – hablo con voz quebrada en uno de esos momentos que se quedaron solas mientras los chicos salieron a correr tras los gansos del hospital, parte de la terapia de los internos 
• Ellos ya tienen una madre Narda, y eres tú, pero debes sanarte para tenerlos a tu lado – le dijo mientras contemplaba a los niños reír en el inmenso patio aquel del Centro de Salud Mental, sentadas ambas en una de las tantas bancas que había bajo los árboles
• Es que yo pensé que…. pues…
• ¿Que los pondría en contra tuya?... yo puedo no quererte o tolerarte Narda, pero jamás te haría eso porque eso solo lastimaría a los chicos y a Arturo – le apretó la mano – yo sé que vos los amas , los quieres…. son tuyos y por ley nadie debería quitártelos, solo espero que ahora las cosas mejoren para ti y los niños…

Definitivamente fueron demasiadas cosas duras las que les tocó vivir… a Yhanku especialmente, que tras aquel incidente se obsesiono con la salud de su madre y su abuelo, con su pobreza, empezó a darse cuenta de las falencias de su hogar y no las materiales precisamente, sino la presencia de un hombre que no sea su abuelo al que vio frágil por primera vez y se dio cuenta que su abuelo era eso…. su abuelo y no su padre, si él hubiera tenido un padre como todos no estarían como ahora de la mano de Dios y de don Rubén quien le daba dinero al abuelo y este lo aceptaba a regañadientes tragándose el orgullo que no lo abandonaba, y siempre decía es un préstamo y Rubén riendo contestaba…. si lo tengo apuntado con intereses bajos y eso no le gustaba, era como que alguien ajeno asumía la responsabilidad que debía ser suya por ser el segundo hombre de la casa, y como tal debía cuidar a su padre, a su madre y sus hermanos, debía ser él quien procure el pan del día.

Fue tal su desespero que no quería ni que su abuelo le dé el preciado quintito del recreo, la monedita pal dulce a las 10 de la mañana, o el juguito de naranja, o el yogurt en bolsita y guardaba aquellas monedas en una cajita y las contaba día a día y preguntaba los precios de la carne, de la fruta, de la ropa y se dio cuenta que todo era demasiado caro y que ahorrar le llevaría años para logra algo, esos detalles le dieron el primer revés de la vida  así que se faltó un día a clases y caminando en las calles empezó a buscar trabajo y encontró uno a su medida y su experiencia y empezó a trabajar con la ilusa idea de traer dinero a casa, pero para lograr su objetivo tenía que salir todos los días y no se le ocurrió mejor idea que la de abandonar la escuela sin decir nada a nadie, saliendo como de costumbre en las mañanas temprano con sus hermanos pero despistándolos a la entrada.

Y su abuelo cuando se enteró que salía todos los días y no iba a clases y fue llamado al cole por las dos semanas perdidas, Arturo creyó que el chico se hizo la rata para ir a los juegos de la feria a la que tanto pidieron ir y no pudo llevarlos porque no podía estarse de pie mucho tiempo, y cuando regreso Yhanku cansado de limpiar establos todo quemado del sol y sudoroso, estuvo decidido a darle una soberana paliza, protestando ante la poca madures del muchacho, sobre todo cuando él apenas podía hacer algo en casa y trabajaba a medias aguas por estar aun recuperándose de la última cirugía; y cuando Yhanku cruzo el umbral de la casa y el doloroso cinturonazo del abuelo le dio la bienvenida en el trasero supo que estaba en serios problemas…

• ZZZASS
• Auuuuuu paaaaaapiiii – grito de la sorpresa y del dolor soltando la mochila al suelo viendo con pánico ya no más el cinto viajar en el aire y no supo cómo pero logro del puro milagro librarse de aquel chicotazo
• DE DÓNDE ME ESTAS VINIENDO TU – pregunto el abuelo sin moverse de su sitio pero atrapando el brazo flacuchito de Yhankuen un descuido de este, pero sin soltar la correa de la mano – Y NO ME VENGÁS A DECIR QUE DE LA ESCUELA, QUE DE ELLA VENGO YO ENTERAO YA – y elevaba el índice de la mano armada apuntándolo – QUE USTÉ SE FALTO A CLASES DOS SEMANAS, ASÍ QUE CARAJITO Y MIERDA AQUÍ ME DICE DONDE ESTUVIERON ANDANDO ESAS PATITAS A LAS QUE VOY A REVENTAR POR MAL ANDADAS Y MAÑOSAS… MIENTRAS YO ME ROMPO EL LOMO PA USTÉ ME ESTUDIE – pero Yhanku se quedó sin palabras se suponía que el sueldito que traía en los bolsillos ahora mismo iban a ser una sorpresa, pero el sorprendido fue él, y como no dijo nada, el dolor del cinturonazo que cayó en el trasero por segunda vez hablo por su abuelo, quien ya tenía la intención de quitarle la ropa – ZZAASS – este había sido más duro – MUY BIEN SI ES LO QUE QUERÉS... PUÉ NO SE DIGA MÁS – y un tercero cayó sobre los delgados bóxer – ZAASS
• AUUUUU AUUUU YAAAA TAAAATA
• DONDE ESTUVISTE TODA LA MAÑANA – volvió a inquirir mientras Lorenzo se pegó a la pared del susto agarrando del brazo a Jacinto que ingresaba como siempre saltando, acababa de entrar con una nota del cole y vio el brazo del abuelo que blandía el cinto tomar impulso en el aire para estrellarse sobre las piernas desnudas de su hermano al que vio con el pantalón arrugado tironeado hacia abajo – Zas zzas zass
• AHHHHHH AUUUU….. AU AU AU FUIIIII A TRABAAAAJAR, FUI A TRABAJAAAR ABUEEELO, FUI A TRABAJAR A UN ESTAAABLO – y Arturo lo soltó ante aquello y Yhanku entre tropezones saco de sus bolsillos el primer sueldo incompleto que tuvo, y lo puso en la mesa en el mismo sobre que lo recibió, doblado en mil – me fui aaaa, NIFS NIFS a aa trabajar abuelo, se lo juuuuro
• ¿Por qué? – Arturo lo miro desconcertado viendo el sobre con 100 pesos que fue lo que el muchacho gano limpiando corrales
• PORQUE USTÉ NO PUEDE, PORQUE ESTÁ ENFERMO Y YO TENGO QUE AYUDAR, alguien tiene que hacerlo y soy el mayor – declaro con amargura mirando a su abuelo a los ojos cargado de llanto y de pronto soltó aquello que estuvo dándole vueltas en la cabeza desde hace días – ahora entiendo a mi madre… ella, ella solo quería que yo me porte como hombre y ayude cuando usté enfermo y yo fui un flojo cobarde – Arturo sintió un nudo en el pecho y dejo de lado el cinto y abrazo a su nieto conmovido por las palabras y los nobles actos del muchacho, pero decidiendo darle una lección, y en un acto reflejo lo puso boca abajo sobre sus rodillas delante de sus hermanos desnudándole el pobre trasero sin contemplaciones
• Plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf – Yhanku no entendía el porqué de aquella ráfaga de palmetazos que no le dio tiempo ni a darse cuenta en qué momento su abuelo lo despojo de sus prendas dejándolo con el trasero al aire, y ahí iba el primer gran NO de su vida, el NO con argumentos de fuego – NO ME VAS A FALTAR A CLASES… ¿ME ESTAS OYENDO?
• Taaaaataaaaa – grito desesperado queriendo subirse las ropas, no era justo creyó haber sido claro con su abuelo al explicarle que fue a trabajar, no estaba haciendo de vago – AAAAUUUU taaaata no me jui de vaaaago,
• USTÉ M´IJITO ME VA A LA ESCUELA, A NINGUNA PARTE MÁS…– y los palmetazos siguieron cayendo sobre sus nalgas picando demasiado ya la piel y el orgullo – plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf plaf – NO ME VA A VENIR A FALTARSE DE CLASES PERJUDICÁNDOSE… PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF PLAF – y aumento la intensidad de los azotes
• Perooooo buaaa yo fuiiii a a aa AUUUU a trabajaaar au au au, NO ME FUIII A JUGAAAAR, fui a trabajaaaar a trabajar
• PLAF, PLAF PLAF PLAF PLAF…. USTÉ NO ME SALE NI A DONDE SIN MI PERMISO, NO ME VA A IR NINGÚN LAO QUE YO NO SEPA…. PLAF PLAF LA ÚNICA OBLIGACIÓN QUE TIENE ES ESTUDIAR, NO  TRABAJAR
• BUAAAAAAAAAAAAAAAAA AUUUUU AUUUU AYYYYYY TAAAATA TAAATA – y Arturo lo sentó en su falda aun cuando dolía la pierna tullida y lo abrazo como queriendo comérselo en ese abrazo
• Escucháme Yuyo, y tú también Lorenzo – le dijo jalándolo a su lado limpiando las lágrimas de Yhanku – A MIIIII me toca trabajar – se apuntaba el pecho – porque yo soy el grande, ustedes solo deben aprender en la escuela, el único trabajo que quiero que tengan es el ir a la Universidad
• Peeeero NIF NIF NIF y ¿si te enfermas de nuevo? Si te algo te paaasa – trato de controlar su voz reflejando el miedo que sentía – yo tengo que trabajar, tener dinero para cuidarte
• NO Yhanku, si vos dejás la escuela toda la vida estarás pasando hambre, y yo también porque tú me cuidaras cuando seas grande y serás mi papá porque yo no podre cuidarme – le elevo el mentón para sostener la mirada…. – yo no tuve la oportunidá de estudiar, pero tú sí, tu aprenderás por mi… leerás para mí, escribirás para mí – le decía besándole la frente y los ojos – ya tendrás tiempo pa trabajar como Dios manda, con un título en la mano pá que naide me lo humille en la vida que le toque vivir, como humillan a tu madre por ser ignorante – dijo con cierto enojo como una declaración de guerra – yo no te estoy criando ni a tus hermanos pa limpiar bostas toda su vida, porque unas veces hay y otras no, eso es condenarse, no tener una profesión es ser esclavo toda la vida…. así que m´ijo – le beso las manos – estás manitos, son pá el trabajo fino de oficina, no pá rompérselas en el campo

Pero interesantemente ninguno hizo caso a papá en ese aspecto y decidieron trabajar, pero para que ellos los menores lo hagan, Yhanku limpio el camino y se llevó reteadas y nalgadas en el proceso, al final convenció a su abuelo a dejarlo trabajar y ayudar en casa, Arturo finalmente lo dejo y el primer trabajo oficial que tuvieron ambos fue con un sueldo simbólico en la granja con él, aprendiendo el oficio de su tata, lo que los hizo guapos para el trabajo a campo abierto pero nunca les permitió un aplazo o faltarse a clases porque si no llevaban una buena tunda; en eso meditaba Lorenzo, recordando aquellos tópicos de su vida junto a su par cabeceando ya a las 4 de la madrugada sin darse cuenta de la hora, creyendo sinceramente que era temprano todavía, Jacinto no había llegado a casa aún y se pegó un susto de muerte cuando sintió la mano de su hermano apretarle el hombro, aquella mano que vio sangrar por hacer trabajo de campo en la tarde misma contra todo pronóstico y anhelo del abuelo, pero no por un sueldo sino por responsabilidad y amor a su hogar.

• Ese cunumi no ha regresado aún ¿verdá?, sino no estarías como madre soltera sufriendo en el umbral – aseguro apenas cruzar el patio y verlo sentado en la mecedora de su abuela velando la llegada de Jacinto; Yhanku contra todo pronóstico fue el único que si fue a la dichosa fiesta esa, por eso sabía que Illien ni apareció en el Urutaú
• Ya vendrá – respondió Lorenzo queriendo quitarle importancia a las palabras de Yhanku, pero en el fondo preocupado por Jacinto –  estará bailando o pescando chicas, es temprano aun – no se fijó la hora que era porque entre pensar estuvo en duerme vela desde que Yhanku saliera de la casa a eso de las diez de la noche – vos mejor que nadie sabés como son los buris en la finca de tu querido suegro, perdón ex suegrito – agrego aquello no con el afán de distraer desviando la atención de Yhanku, sino por saber si se encontró con Yanina y arreglaron sus diferencias, Yanina era una linda persona y él quería que sea su cuñada legal
• Si, sé cómo son… por eso sé que el mocoso no apareció por la finca – declaro inexpresivo para sorpresa de Lorenzo, Yhanku fue a la fiesta?, se preguntó mientras veía a su hermano marcar el móvil, seguro llamaba a Jacinto que claro se fue de cabeza al buzón de llamadas – MIERDA BUZÓN DE NUEVO – dijo al quinto llamado – voy a salir a buscarlo – y saco las llaves de la vagoneta de un amigo que le dejo su movilidad para que se la cuide y la saque de vez en cuando para que la batería no se baje mientras iba de viaje al interior por una semana
• YHANKU ESPERA – Lorenzo se paró como un rayo al ver a Yhanku tan enojado y quiso seguirlo para evitarle a Jacinto las vergüenzas de una reteada en público que bien sabía que Yhanku podría armar un escándalo apoteósico si quería sobre todo si a Illien se las daba de gallito como últimamente estaba pasando  y que sería comidilla en meses en el pueblito aquel para pena de Jacinto que ahora mismo era el centro de atención de las chicas del pueblo – NO ES NECESARIO QUE SALGÁS A BUSCARLO HOOOOMBRE, LE DI PERMISO HASTA LAS TRES Y AUN SON LAAAAS – buscaba su reloj
• ¿Y QUE HORA PENSÁS QUE ÉS?... SON LAS CUATRO – le respondió mostrándole el reloj de su muñeca – y el carajo ese no contesta ni el teléfono… así que voy a salir a buscarlo y voy a darle una paliza por desobediente y mentiroso al malmandado… ASÍ QUE NO TE METÁS EN ESTO LORENZO, PORQUE SINO, A TI MÁS TE VOY A ROMPER POR ATINTILAO (tonto)

Y ahí iba el guardián particular que tenían Jacinto y Lorenzo, decidido como el solo en su cometido; solo que este ángel no iba a velar el dulce sueño de Jacinto con un arpa en la mano, sino que directamente saltaría a cuidar los pasos de aquella criatura con una varita de sauce que de seguro modificaría la oración esa que se imploraba como plegaria de niño bueno, a una súplica de niño malo para hacerse bueno y en vez de decir…

Ángel de mi guarda, dulce compañía vela junto a mí de noche y de día, no me desampares que me perdería… seguramente diría

Ángel de mi guardia, justa compañía azota mi trasero de noche y de día que si no lo haces yo me perdería

Sí señor, estaba escrito, Jacinto iba a tener otro encuentro astral mirando mil estrellas bailar delante de sus ojos cerquita más cerquita que las que veía ahora en los profundos ojos de la rubia pajona que besaba su pecho, mordía su boca y hacia que su sangre hierba como un volcán hasta hacerle perder la cabeza en esta insensata hora bajo el cielo raso de la aun noche en el monte aquel donde lo estaba pasando bomba… pero sin lugar a dudas esas estrellitas llegarían como cortesía de la mano amiga de su particular ángel guardián…

…..Y un gallo canto a lo lejos anunciando la pronta hora que despuntaría ya… la luz del día.