Postales Navideñas: Relato Nº 3; Varios Autores

Postales Navideñas

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 24 de Diciembre del 2016

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Regalo Nº 3
Navidades intergalácticas

Daniel Jackson se paseaba aburrido por las dependencias de la base militar, su padre preparaba un viaje urgente, de esos que no se podían aplazar ni siquiera para esas fechas tan especiales como lo era navidad… Quizás fuera esa situación la que hiciera que Daniel estuviera más cabreado que nunca, ¿pero acaso los militares no celebran la navidad?, ¿que no tienen familia? Y con esos cuestionamientos en la cabeza Daniel seguía sin rumbo su andar hasta que sus pasos lo llevaron a la cafetería un lugar que siempre estaba lleno de gente y de vida.

Como Daniel era una persona muy social saludo en su camino a varios militares que conocía desde pequeño, todos le tenían cariño, solo tuvo que estar un par de minutos para que se le unieran Tom y Ben dos chicos casi de su misma edad, ellos prácticamente habían crecido juntos, eran hijos de los militares que técnicamente vivían en la base, pero la popularidad de Daniel entre los chicos no era por ser hijo de alguien del alto mando, sino que era parte del equipo, esa era una de las razones por la que Ben se acercó a Daniel hablando despacito.

• Dany ¿es verdad lo de Stargate? – dijo el chico entusiasmado, Daniel no pudo esconder su asombro
• ¿Cómo sabes de Stargate? – dijo lo más bajito que pudo, los dos chicos abrieron más los ojos
• ¡Entonces es verdad! – afirmaron

Daniel les hizo un gesto para que los chicos lo siguieran, la cafetería no era un lugar adecuado para hablar de secretos de la base, ya en un lugar más alejado de oídos tan finos como los eran los de los militares, Daniel quiso tantear el terreno y tomo del brazo a Ben, quería los pormenores de aquel supuesto secreto que a el le costo varias nalgadas.

• ¿Cómo sabes lo de Stargate? – Ben lo miro curioso
• Es verdad ¿cierto?, ja lo sabía… lo sabía – dijo el chico riendo, Daniel intentaba mantener la calma
• Esto no es broma Ben, es un secreto militar – Los chicos rieron con ganas
• Vamos Danny que tú siempre te haces el que sabe todo, dinos ¿ese portal lleva a otros planetas? – dijeron en son de broma, Daniel dijo sentido
• Claro que sí, es más fui yo quien lo descifró – en ese momento se arrepintió de lo que acababa de decir, Ben miró a Tom
• Te lo dije y no me creías, me debes 100 dólares – Daniel miraba atónito
• ¿Ustedes apostaron?
• Cálmate Danny, solo fue una apuesta inocente – dijo Ben echándose los 100 dólares al bolsillo.
• Ustedes escúchenme bien Stargate es un secreto militar no pueden ir por ahí hablando de nada de esto – les dijo serio pensando en las implicaciones de aquello, porque si llega a oídos de su padre, no preguntara quien corrió el rumor, lo acusaría directamente a él
• Siempre tan dramático Danny, además esto ya es un secreto a voces, en la base es de lo único que los chicos hablan – dijo Tom.
• Y eso es lo que venimos a hablar contigo – dijo maliciosamente Ben – estábamos pensando en hacer una fiesta
• Que original – dijo Danny
• No cualquier fiesta, sino una Intergaláctica – dijo Ben y ambos chicos sonrieron
• Nuestros padres se van a una misión fuera de la base y nos dejan para navidad – dijo Ben y en sus palabras se notaba la molestia.

Daniel que siempre intentaba portarse más maduro especialmente frente a los otros chicos de la base, también tenía esa espina clavada en su corazón, nunca su padre lo había dejado para navidad y eso le molestaba más de lo que podía reconocer y fue así que se pasó la voz entre los chicos de la base de boca en boca, los preparativos se hacían en máximo secreto, el mismísimo Jack O’Neill estaría orgulloso de su hijo por el nivel que su profesionalismo alcanzo.

Jack O’Neill no estaba muy contento por dejar a su hijo solo en esas fechas pero no le quedaba alternativa la misión era importante, y todo el comando iba a ir, no podía como jefe al mando decir que se quedaría con su hijo cuando todos los otros miembros dejarían también a sus respectivas familias, pero confiaba en su hijo, en este último tiempo había madurado y le había demostrado ser un joven muy responsable, pensaba como un consuelo cuando le asaltaban  negros pensamientos respecto a la actitud de Daniel, vamos que aun a veces se mandaba alguna cosilla.

Y pensando en eso se fijo la hora, era ya de tarde cuando Jack tomó su bolso para irse, aunque no quisiera tenía que despedirse de su hijo y hacer las respectivas recomendaciones, tomo un largo trago de aire antes de salir a enfrentar a la fiera, mientras Daniel lo esperaba sentado tranquilamente frente al escritorio.

• Danny espero que te portes bien – fue lo primero que dijo y Daniel rodo los ojos no importaba cuántas veces su padre se fuera de viaje siempre era el mismo discurso – voy a estar de vuelta lo antes posible – Jack miro a los ojos a su niño y le lanzo una sonrisa triste, se acerco y le besa la cabeza para susurrar un “lo siento” que hizo que a Daniel se le oprima el corazón

Eso hizo que Daniel dude de sus planes ante la despedida de su padre pero ya todo estaba listo, no podía echarse para atrás Ben y Tom lo matarían seguro, además la fiesta ya tenía hora y lugar.

Además no solo él sino todos los hijos de los funcionarios estarían allí en la base, en realidad no tenía nada de malo solo compartir y pasar un buen rato con los amigos.

Después de que todos los militares se marcharan, los chicos fueron llegando, nada podía fallar a nadie en la guardia podía parecer extraño que los niños que siempre habían venido con sus padres ahora aparecieran por ahí, además no todos llegaron juntos sabían cómo buenos hijos de militares a qué hora cambiaban la guardia y eso despisto mucho. Ben, Tom y Danny eran los anfitriones había cosas para comer, gracias a la generosa billetera del padre de Ben que nunca recordaba bien cuánto dinero llevaba encima y Ben aprovechaba del despiste de su progenitor, Tom en cambio había ido un paso más allá de sus amigos y con la ayuda de su hermano mayor había logrado traer licor a la fiesta y no era poco, las cervezas estaban ahí bien heladas, cuando Danny las vio quiso reclamar pero todos lo miraron con cara de pocos amigos.

Los chicos se divertían como los chicos que era, en especial a la llegada de más de alguna chica muy bonita, a la fiesta no le faltaba la música y para eso se tomaron todas las precauciones, pero el único lugar donde podían hacer todo el escándalo sin ser molestados era el lugar más restringido de la base... el portal de Stargate

• Por ningún motivo – dijo Danny cuando vio que esto se le iba de las manos.
• Vamos O’Neill, aquí no podemos estar necesitamos un lugar lejos de los ojos de los guardias – dijo John mientras abrazaba a Amy un pareja que necesitaba con urgencia un lugar privado.Ben miró a Danny para presionarlo
• Danny que estamos quedando mal con los invitados, ya estamos aquí qué más da

Y así fueron muchas las voces que reclamaban por un lugar más “seguro “ para continuar con la reunión, simplemente no puedes ir contra el mundo, no cuando eres un adolescente y la chica más linda de la fiesta te lo pide al oído. Así fue que todos salieron hacia el único lugar de la base que les estaba vedado pero que no lo era para él único chico que tenía acceso, el lugar donde estaba el portal, que era a prueba de ruidos.

Zanjado el último obstáculo ya estaban todos en el gran galpón que encerraba el portal y la fiesta por fin se desató, la música a todo volumen y las cervezas corrieron como río, Danny estaba feliz esa felicidad que te lo da el alcohol sumado a tener a Angélica cerca, y por fin Danny se pudo relajar y divertirse.

En un base secreta el tiempo no se puede medir y mucho menos cuando ya todos tenían más de una cerveza encima, John detuvo la música.

• Chicos y chicas – anuncio dándole un guiño a su chica – tengo un regalo para todos – dijo y saco de un bolso juegos artificiales – Feliz Navidad – dijo mirando su reloj.
• Estás loco John, no podemos usar juegos artificiales dentro de la base – dijo Ben
• Claro que se puede – interrumpio Danny ante al asombre de todos – aquí no pero conozco un lugar donde si se puede y nadie se dará cuenta – dijo con toda la felicidad y valor que te da el alcohol en un chico que no estaba acostumbrado a beber
• ¿Estás diciendo que usemos el portal? – dijo Ben que era el más sobrio, Danny solo río
• Están hablando con el que logro descifrar la entrada a Stargate – dijo caminando hacia el enorme portal – Vamos acérquense sin miedo.

El Portal se abrió mostrando una abertura luminosa, era una luz que te invitaba a entrar, algunos chicos no quisieron entrar, el miedo a lo desconocido fue suficiente para secar de sus cuerpos todo el alcohol ingerido, pero no de todos y así un puñado de chicos camino hacia Abidos en una aventura única. Abidos los esperaba con su paisaje árido, los chicos se quedaron boquiabiertos por unos minutos pero luego su deseo de aventura pudo más, después de todo eran hijos de militares.

Danny y John preparaban los juegos artificiales, los primeros en Abidos, se sentían como astronautas, en su primer viaje a la luna, John estaba en la luna, y besaba a Amy apasionadamente.

• Te prometí juegos artificiales para navidad – le dijo muy romántico como quien cumplió lo prometido

Todo iba muy bien hasta que el portal volvió a abrirse muy cerca de donde estaban los chicos, nadie pudo negar que el miedo se apodero de todos y más al ver a militares equipados llegar a Abidos, los chicos no llevaban nada para defenderse de ataques así que hicieron lo único que podían hacer ante tal amenaza: correr.

Pero no estaban preparados para un asalto tan inesperado y todos los chicos fueron atrapados por el comando de militares, para desconcierto de los chicos estos militares llevaban las caras tapadas, sin decir palabra alguna cada militar tomo a un chico del brazo bien sujeto y así cruzaron nuevamente el portal, los muchachos se vieron de vuelta a su punto de origen, la vuelta fue más turbulenta que la ida e hizo que Daniel cayera de rodillas al verse devuelta a la base, tanto fue su desconcierto que boto todo lo que tenía en su estómago.

Una mano lo ayudó a pararse ni siquiera podía enfocar bien todo entre la bebida y el susto tenía el estomago un nudo, pero al sentir la mano cálida que lo sostenía pudo darse fuerza para ver la cara de su padre y solo tuvo un momento para darse cuenta de lo que pasaba, el comando que los había ido a buscar eran los que comandaba su padre, habían terminado su misión y sin siquiera cambiarse de ropa y dejar los pertrechos se fueron en busca de sus familias, la sorpresa que se llevaron fue mayúscula al darse cuenta que todos sus hijos estaban en la base… pensando en eso se quedo profundamente dormido.

Al dia siguiente, el dolor de cabeza que tenía era insoportable, sobre la mesita de noche había un vaso de agua, todo parecía en calma y el silencio se agradecía, Daniel Jackson salió de la cama para tomar su cabeza e intentar mantenerse en pie ante el mareo inicial, ¿cómo era posible que algunos chicos vivieran tomando?, se pregunto, Daniel se prometió no volver a tomar o pensárselo muy bien antes de volver a mriar una cerveza. Fue a la ducha y dejo correr el agua mientras pensaba en todo lo sucedido, pensó en sus amigos y como terminó todo.

¿Que podría salvarlo ahora?, se pregunto pensando en las implicaciones de su aventura, nada su trasero estaba perdido solo la misericordia que podría tener su padre para con su hijo casi adulto, se respondió, algo que dudaba, sin más que hacer ni tiempo que perder, decidió dar la cara, así que bajo las escaleras seguro que su padre estaba en la cocina, y fue así ahí estaba Jack O’Niell con una cara que nunca podría descifrar, no se sabía estaba enojado o feliz.

• Hola Danny, siéntate te sirvo desayuno – anuncio Daniel quería cualquier cosa menos comer algo, pero sabía también que su padre no iba a aceptar un no como respuesta asi que se sentó y su padre puso una taza de café humeante delante de él, Daniel lo miró asombrado – Tómala te despejara un poco – dijo calmadamente el hombre mayor

Daniel disfruto del café lentamente, comiendo de mala ganas una tostada, cuando Jack terminaba de desayunar se paró de la mesa para lavar los platos, no dijo nada y Danny se quedó ahí sin saber muy bien qué hacer ni que esperar. Con la cocina limpia Jack se fue a sentar a la sala, Daniel por instinto fue tras él aunque ya presentía lo que se le venía.

• Feliz Navidad – dijo Jack entregándole un regalo, por segunda vez esa día Jack lo sorprendía
• Gracias Papá feliz navidad también para ti – dijo parándose para ir a buscar el regalo que le tenía el a su padre.
• No lo vas a abrir – dijo Jack
• Iba a ir por el tuyo – dijo Daniel
• No te preocupes por ahora, abre el tuyo – dijo Jack expectante.

Daniel solo sonrió y comenzó a romper el papel que cubría una linda cajita, dentro de ella había un visor nocturno, Daniel los había visto cuando el equipo se iba a una misión, era un equipamiento militar no para civiles, pero Jack se las había ingeniado para hacerse de uno.

• Dios Papá es un ¡visor!, realmente es uno de esos que usan en las misiones – Daniel desde hacía un tiempo preparaba su equipamiento y le faltaba solamente esos visores que estaban muy lejos de su alcance monetario.
• ¿Te gusto hijo? – pregunto con curiosidad, esperando la respuesta con demasiada ansia
• ¿Que si me gusto Papá?, esto es… es… ES GUAUUU – respondió todo entusiasmado el inocente
• Qué bueno que te ha gustado Daniel, quería que disfrutaras de tu regalo aunque sea por solo unos instantes – Daniel no lo miraba, la vista la tenía clavada en el visor, pero con las últimas palabras que dijo su padre fue levantando la vista lentamente, como cuando eres niño y sabes que hay un fantasma al otro lado, prácticamente con terror – ¿sabes que estás castigado cierto? – y Daniel solo pudo decir
• Si señor.
• ¿Por qué lo hiciste Daniel? – pregunto – sabes que Stargate es un secreto militar importante y has llevado a un montón de chicos al portal y como si eso no fuera poco, usaste el portal para llevarlos a Abidos sabiendo lo peligroso que es – lo acuso, bueno Stargate no era un secreto, pero no podía decir aquello, puse padre seguía hablando – y eso sin contar que el alcohol que había, tu estado y juegos pirotécnicos Daniel, ¿en serio? Se me queda algo en el tintero! – a esas alturas Jack se había parado y se paseaba por la sala enumerando las faltas de su hijo y con cada una iba subiendo el tono y Daniel se hacía cada vez más pequeñito.
• Papá sé que cometí un error pero……
• ¿UN ERROR Daniel?, no eso no fue un error fue – y Jack no pudo más con la poca paciencia que le quedaba y tomo a su hijo para ponerlo en una posición que ambos conocían muy bien.
• Papá por favor vamos a hablar.
• Ya es tarde para hablar Daniel Jackson eso debías haberlo pensado antes – Jack ya tenía a Daniel en muy buena posición para ir comenzando a dar de nalgadas al pobre trasero de Daniel, que no tardo mucho en sentir los palmetazos de su padre – swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat – que caían sobre Daniel sin pausa alguna, era como si lo hubieran atado a una maquina programada para castigar, es que a pesar de los sollozos Jack no paró
• Buaaa, yaa papa auuu auu uyaaaa – se quejaba Daniel moviéndose en las rodillas de Jack – ya no, ya nooo, YA NOOO PAAA PAAAPI, PAPIIII
• swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat – pero su padre estaba muy enojado para perdonar esta vez a su querido hijo por lo que Jack no paro de dar nalgadas esta vez bajando el pantalón de buzo que llevaba Daniel que no era de mucha ayuda pero si dejaba a la vista el trasero, eso solo significaba que Jack solo pararía hasta que el trasero de su hijo tenga un tono rojo
• Papá yo no quería, en serio nig niif nifff auu auu  – sollozaba Daniel – pero No quería que te fueras – dijo Daniel entre espasmos y gemidos porque papa seguía castigándolo y encima se quedaría sin su regalo
• Yo tampoco quería irme en navidad Daniel – dijo por fin su padre sin pararlo de sus rodillas todavía – pero la misión no se podía aplazar… créeme hice todo lo posible pero tuve que tomar la decisión difícil, porque significaba dejar a varias familias sin navidad y confie en ti – agrego y Daniel se sintió muy mal por eso –  Pero eso no significa que tú puedas hacer lo que se te viene en gana – dijo Jack lanzando algunas palmadas particularmente fuertes que soltaros varios quejidos de parte del chico – swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat
• BUAAAA YAAA AYUUU AUU – lloro desconsolado y papa por fin se apiado, Jack paró y puso a su hijo de pie, le ayudo a subirse el pantalón mientras lo contenía
• Ya Tranquilo hijo, tranquilo mi Danny, papa está aquí – murmuro mientras lo mantenía abrazado y Daniel seguía sollozando – Mañana tenemos que ir a la Base el Comandante quiere hablar con todos ustedes – Daniel lo miró en shock, el comandante era quizás más intimidante que su padre – Tranquilo Space monkey yo voy a estar ahí, no te dejare, además recuerda que uno de sus nietos fue uno de tus colegas en esta fiesta…

UFFFF menos mal…

Mis más sinceros deseos de felicidad para ti Mousse, que todo lo que deseas se te cumpla…

Feliz Navidad

24 de Diciembre del 2016