Stargate
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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 29 de Abril del 2016.
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Capitulo 9
Autora: Gloria
El coronel O’Neill
estaba solo en su casa y aunque parezca mentira eso le hacía sentir incómodo.
Jack que siempre había sido un amante de las ventajas que ofrece el silencio,
en este preciso momento moría por escuchar un poco de acción en su pacífico y
solitario hogar.
Es
probable que nunca, ni siquiera bajo tortura, llegara a reconocer que le
gustaba el ruido y todo ese alboroto incesante que provocaba cierto jovencito
hiperactivo, así que acompañando su soledad con melancólicos suspiros, la
mente, el corazón y todos los sentidos de Jack, extrañaban a Dany
Miró
a su alrededor con detenimiento y sonrío satisfecho de comprobar que la casa
brillaba. Debía reconocer que Daniel había hecho un gran trabajo de limpieza.
Se paró y se fue a la cocina sin poder evitar dar una mirada de inspección a la
sala y comprobó que todo estaba en orden.
Al parecer la mañana iba a pasar
tranquila, o al menos eso era lo que Jack creía…pero no todo podía ser
perfecto.
Se
sentó a tomar café en su viejo sillón pensando en el milagro de que su retoño
adicto al desorden se hubiese convertido en un modelo impecable del aseo
hogareño. Tomó el periódico y comenzaba a hojear algunas páginas cuando una
insistente alarma sonó de la nada.
La
dichosa alarma lo dirigió directamente a la habitación de su hijo y solo al
entrar se dio cuenta que quizás no toda la casa brillaba, la pieza de Dany era
un chiquero y eso era quedarse corto. Todo el lugar parecía una de esas zona de
guerra en la que se libró una batalla milenaria…Jack abrió la boca para
preguntarse ¿Cómo es posible que exista
tal desorden?.
Lentamente,
paso a paso se hizo camino hacia lo que se suponía era el velador y en donde
encontró, no sin esfuerzo, el reloj que sonaba cada vez más fuerte. Bueno
después de todo la mañana no iba a ser tan tranquila tendría que hablar con su
hijo para solucionar cierto mal entendido.
Daniel
llego a casa al mediodía extremadamente feliz de su tan merecida mañana de
libertad.
- ¡Papá! – Daniel entró gritando desde la puerta
- En la cocina – gritó a la vez Jack
- ¡Hey!... ¿Estás preparando el almuerzo? – pregunto el muchacho contento olfateando el ambiente – ...mmm huele bien – comento – dejo la mochila y regreso a ayudarte
Jack
sonrió su hijo llenaba el espacio de lo que antes era una casa en silencio para
convertirla en un hogar bullicioso solo con su presencia. Terminar el almuerzo
fue un perfecto momento de camaradería entre padre e hijo, que lástima que
tendría que terminar con una discusión por culpa de una habitación convertida
en chiquero, pensaba Jack, pero bien podría esperar hasta después del almuerzo.
- Así que papá queda solo un semestre para que la escuela termine te das cuenta en menos de 6 meses voy a entrar a la universidad – Daniel hablaba extasiado – y tú me prometiste que hablaríamos al respecto – lo miró con ilusión
- Hijo creo que como bien lo dijiste todavía faltan meses para que eso suceda así que vamos a comer ¿te parece?
- Ok vamos a dejarlo para más adelante, yo solo quería, tu sabes –Daniel lanzó su mirada más inocente
- Sé perfectamente que traes entre manos Dany, así que desde ya te digo que no vas a ir por ahí por tu propia cuenta, por más estudiante universitario que pronto serás, siempre tendrás reglas que cumplir en esta casa así tengas 40 años y seas un arqueólogo famoso, porque eres mi hijo
- Ok papá, para ahí ya entendí y si tienes razón dejemos esa conversación para más adelante – Jack sonrió
- Si hijo vamos a comer en paz
Sugirió
su padre sin dar pie a otro reclamo y Dany no tuvo más opción que hacer caso, terminado
el almuerzo Daniel rápidamente se paró a levantar la mesa.
- Dany deja los platos ahí y sígueme – Daniel siguió a su padre intrigado y en silencio – necesito que me expliques algo – Jack se paró delante de la puerta de la habitación de su hijo. Daniel lo miró nervioso – por favor hijo ¿puedes abrir la puerta? – Jack hizo una seña al joven
- Papá porque – el niño fue interrumpido por una clara orden
- Hijo abre la puerta – Daniel de mala gana abrió lo que daría paso a una visión clara del caos. Jack lo miró buscando respuesta – Ahora Daniel quiero que me expliques, se supone que ésta es tu habitación y…
- Si, se supone que ésta es mi habitación y no tenías ningún derecho a entrar!! – Daniel reclamó con evidente enojo – tu dijiste que la habitación de cada uno era su lugar privado – reclamó lo más indignado posible
- Si no quieres que entre en tu habitación podrías dejar desconectada la alarma de tu despertador, pero eso no es lo que te pregunte Daniel
- Bueno eso es mi habitación y si está un poco desordenada pero……
- ¿UN POCO DESORDENADA? – pregunto incrédulo – Daniel abre los ojos y mira a tu alrededor, parece que una manada de elefantes pasó por aquí y se detuvo a tomar el té ¡¡sobre tu cama!! – Jack empezaba a enfadarse
- Bueno, bueno si lo acepto está muy desordenada pero recuerda que soy un adolescente y…
- Lo único que recuerdo es haberte dicho claramente que mantener el orden en esta casa, era parte de tu castigo – Jack miraba atentamente a su hijo
- ¡¡Y lo hice, la casa está limpia!! – Daniel dijo airado
- Ohhhh… ¿Y desde cuando tu habitación no forma parte de nuestra casa?, porque yo la veo dentro – el silencio se sintió en la casa de los O’Neill, mientras que Daniel miraba sus zapatos y pensaba lo injusto y sarcástico que podía llegar a ser su padre – Bueno creo que ya que aclaramos un punto – Jack dijo señalando la Dani la habitación – espero que esta parte de la casa este limpia hoy
- ¡Pero papá en la tarde me voy a juntar con Mike! – Daniel dijo en tono de suplica
- Daniel puedes ir a juntarte con Mike pero después de que hayas ordenado tu habitación
- Papá eso me va a llevar muchas horas y quede de estar en casa de Mike en 1 horas más – Dany miraba su reloj y a su padre con insistencia
- Entonces Dany yo que tú me apuraba en empezar – Jack sonrió – y para que veas que no soy tan injusto como estas pensando ya me encargo de limpiar la cocina
- ¡Es que limpiando este maldito desorden me voy a demorar toda la tarde! – chillo, porque su padre tenía que tener esa manía con el orden, se preguntaba, pero antes de pensar en algo más, sin siquiera verlo venir 3 sonoras palmadas cayeron en su trasero
- Swach swach swach
- ¡¡Ouch papá!! – Daniel llevó instintivamente la mano hacia su parte posterior
- Daniel dije que comenzaras ya a ordenar tu habitación y no quiero escuchar ni una queja más o vas a terminar ordenando tu habitación con un trasero muy adolorido!! – En los ojos de Daniel aún se reflejaba un poco de rebeldía pero se abstuvo de protestar, sabía que la amenaza de Jack iba en serio
- Si señor – dijo mientras caminaba con la cabeza baja hacia su desorden
Daniel
miró su habitación con desanimo…nunca terminaría de limpiar tal desorden en una
tarde ni aunque trabajara a la velocidad de un superhéroe!!...
Con
cara de fastidio, se sentó en la única esquina libre de su cama y como buen
adolescente pensó en una alternativa rápida para ahorrarse el trabajo. Podía
colocar toda la ropa, que en esos momentos tapizaba el suelo, en el closet… eso
le tomaría apenas quince minutos… pero… seguro su padre haría una inspección
antes de dejarlo salir y no estaría feliz cuando abriera el armario y toda la
ropa cayera en su cabeza…Daniel sonrío maliciosamente, esa sería una escena muy
divertida de observar, pero no valía la pena arriesgar su trasero así que de
inmediato desechó la idea.
Con
suspiros resignados, comenzó la ardua tarea lo más rápido que pudo, primero
recogiendo la ropa del suelo luego tendiendo la cama, abrió su closet para
darse cuenta que en el interior todavía estaba el bolso con el cual había ido a
la conferencia hace 2 semanas atrás, estaba sin deshacer lo abrió y saco una
chaqueta que había estado buscando hace dos días atrás sonrío al recordar lo
bien que lo había pasado, y cuando la fue a colgar sintió que algo caía, era un
pendrive, agachándose para recogerlo recordó que Blair se lo había dado, tenía
la información sobre “Stargate”.
Todo
se le hizo tan lejano, si hace casi un mes que esto de Stargate era una
prioridad para él y descubrir de que se trataba era casi un deber, sin embargo
ahora hasta se había olvidado, bueno la conversación que tuvo con su padre se
encargó en parte de tal olvido y ahora con el pendrive en la mano se debatía
entre leer la información que contenía o simplemente dejar todo como estaba.
Pero
como todo inquieto adolescente Daniel era muy curioso así que miró la hora y
dejo el pendrive al lado de su laptop ya tendría tiempo de ver que contenía,
por ahora su prioridad era ir a la casa de Mike. La habitación parecía
medianamente decente, así que Daniel pensó que podría tener alguna oportunidad
con su padre, se acercó a la sala donde su papá estaba mirando tv.
- Mmm…papá ¿puedo ir a casa de Mike? – Daniel se dirigió a su padre con su mejor cara de inocencia. Jack miró a su hijo con seriedad
- ¿Está tu habitación limpia?
- “Casi” – El jovencito respondió con sinceridad y el coronel arrugó la frente – digo no completamente limpia pero en serio se ve muy bien – Daniel sonrío
- “Verse bien” no significa que hayas hecho un buen trabajo Daniel
- No pero recuerda que soy un adolescente y para nosotros “vernos bien” es lo equivalente a perfección…
- Uhmm y supongo que metiste toda la ropa dentro del armario…
- ¿Qué? Me ofendes papá!!...Yo nunca haría algo así – Daniel respondió en tono ofendido poniendo su mano en el pecho ocultando en sus labios una sonrisa. Jack también hizo un gran esfuerzo por no reírse ante las payasadas de su hijo y optó por quedarse en silencio, sabía que el silencio era algo que Daniel no soportaba – Vamos papá, por favor… quede de estar allá hace una hora – Daniel hablaba en tono de suplica
- No fue mi culpa que tu habitación se convirtiera en un chiquero – Jack hablaba con toda su calma
- Lo sé, papá ya entendí el mensaje, soy un ¿genio recuerdas? ¿Ahora me dejas ir? – Daniel inmediatamente se arrepintió de sus palabras
- Yo que tu, pequeño genio cuidaría el tono a menos que quieras aumentar tu castigo en una semana – Jack dijo lo más serio que pudo
- Lo siento papá, peroooo…por favor, por favor – Jack miró a su hijo sin poder reprimir más su sonrisa y antes de que Daniel siguiera con su ruego respondió
- Está bien hijo puedes ir pero te quiero de vuelta a las 7pm – Daniel que ya iba camino a su habitación paró en seco al escuchar “de vuelta a las 7 pm”
- Papá vamos si ya son casi las 5 de la tarde y en llegar ya me voy a demorar – Jack nuevamente interrumpió a su hijo
- Hijo tu si que tientas al destino ¿verdad?
- No, claro que no pero papá puedo volver a las 8pm – Daniel miró a su padre con esperanza
- 7:30 es mi última oferta, mañana tienes clases – Daniel dio un suspiro de resignación
- Está bien regreso a las 7:30 – dijo Daniel mientras ya estaba en la puerta cargado de su mochila
- Hey no olvidas algo – Jack miraba a su hijo. Que acaso ahora su papá quería que le diera un beso de despedida, pensó Daniel. Al ver el desconcierto en la cara de su hijo Jack se paró de su cómodo sillón para buscar la chaqueta de su hijo – Se te olvido tu chaqueta, afuera está haciendo frío – dijo Jack mientras con una mano despeinaba el pelo de Daniel y le daba un beso en la frente
- Papá, no hagas eso – Dijo Daniel
- ¿Qué? No puedo darle un beso a mi hijo? – Jack sonrío divertido al mirar la cara de su hijo y empujándolo hacia la puerta de salida con una palmada en su trasero – vete pequeño antes de que me arrepienta de dejarte salir
Daniel
salió rápidamente de la casa para dirigirse a casa de Mike.
El
Lunes comenzó lleno de trabajo para el Coronel O’Neill no eran ni las 11am
cuando ya iba camina a la tercera reunión, aunque esta era una con la cual no
contaba en su apretada agenda, si era la que más esperaba desde el día en que
fue reincorporado al servicio activo, llevaba casi un mes de entrenamiento con
un grupo selecto de militares que él mismo había escogido y hasta ahora nadie
se había dignado a decir de que diablos se trataba el proyecto “Stargate”, Jack
era un militar por lo que seguía órdenes sin cuestionarse, pero tanto secreto
no le gustaba.
La
reunión como era previsto era a puertas cerradas y solo los altos mandos
estaban presentes lo que incluía a Jack y la teniente Carter su mano derecha en
esta nueva misión. Grande fue la sorpresa de Jack cuando por la puerta entró el
General Hammond, nunca que se recordara Jack, él había estado presente en una
reunión informativa de cualquier misión, esto cada vez se hacía más misterioso,
también se encontraba la Dra. Fraiser.
Mientras
más escuchaba Jack al respecto de “Stargate” menos creía todo lo que le decían
que era un proyecto ultra secreto que necesitaban extremo cuidado con no
mencionar nada al respecto, esa cuota de paranoia se la esperaba pero de ahí a
mencionar hallazgos arqueológicos que demostrarían la existencia de una puerta
intergaláctica que fue dejada en la tierra por seres de otro planeta, eso era
más de lo que Jack podía soportar acaso todos se volvieron locos, miró la cara
de Sam casi tan extrañada como la de él. Pero pasado el shock inicial se fue
mostrando material que avalaba el descubrimiento de un artefacto que había sido
armado en el curso de años como un rompecabezas en extremo complicado, tenía
inscripciones que a ojos de inexpertos parecían jeroglíficos pero explicados
por los expertos era un tipo de escritura dejado por los creadores de la
puerta.
Después
de dos horas de explicaciones e historias dignas de las mejores novelas de
ciencia ficción, la reunión tomo un receso de una hora tiempo que Jack tomo de
muy buena gana, se dio el tiempo de llamar a Daniel para dejarle el mensaje de
que posiblemente hoy llegaba tarde. Mientras en su oficina Jack y Sam se
miraban aún con extrañeza, preguntándose que rol jugaban ellos en todo esto, si
era una misión diferente a cualquier otra pero aún siendo algo que costaba
mucho de entender si habían armado un
grupo de elite eso significaba que iban a entrar en acción pero lo que nunca
imaginaron era que la acción iba a ser fuera de este mundo.
Por
la tarde todos fueron reunidos en un hangar, ni Jack ni Sam habían estado nunca
en ese lugar, no se extrañaron porque la base militar al estar dentro de una
montaña era casi un laberinto seguro que entre los dos no conocían ni la mitad
de la construcción. Fue en ese lugar en que ambos militares se dieron cuenta de
la magnitud de su misión, al ver con sus propios ojos la estructura majestuosa
que era como un arco pero redondo con 2 anillos que parecían moverse en
distintas direcciones todo era de piedra tallada a la usanza de la arquitectura
egipcia, sin embargo esa estructura no fue hecha por ninguna civilización
humana.
Pronto
Jack y Sam se fueron entusiasmando ante tal descubrimiento, intentando
comprender como funcionaba y lo más importante hacia donde conducía, sería a
otro mundos o a otras dimensiones, hasta ahora solo había teorías rescatadas de
las escrituras dejadas por los antiguos egipcios que en sus leyendas hablaban
de sus dioses y uno en especial era el más mencionado y el más temido “RA”.
A
pesar de que la estructura parecía terminada faltaba un gran detalle cómo
funcionaba o que era lo que la hacía funcionar hasta ahora habían probado
aleatoriamente moviendo los anillos en distintos sentidos pero nada parecía
funcionar hasta que uno de los arqueólogos se dio cuenta que en la parte
central faltaba una pequeña pieza en forma de pirámide quizás esa era la clave
para hacer funcionar la puerta. Y ahora se enfocaban en buscar la pieza
restante claro que era como buscar una aguja en un pajar.
Mientras
tanto, Daniel llego temprano a casa, dejo su mochila tirada y revisó los
mensajes escuchó la voz de Jack avisándole que llegaría tarde, sonrío ante la
idea de tener la casa para él solo, así que dejo todo tirado en la sala y fue a
pedir pizza con el dinero que su papá siempre previsor dejaba para las
emergencias. Después de comer viendo televisión tirado en el sillón, acto que
sabía que su padre detestaba, se dirigió a su cuarto cuando tomaba su laptop
miró el pendrive que estaba en el escritorio, ahora tenía tiempo para revisar que
era lo que Blair había descubierto sobre Stargate.
El
mundo de Daniel comenzó a caerse a medida que leía toda la información, cuando
llego a la parte en que mencionaba a sus padres no pudo seguir leyendo tuvo que
parar y calmarse, su primer pensamiento era que todo esto era una muy mala
broma de Blair pero luego se dio cuenta que su amigo no le haría algo tan
cruel, pero eso lo llevo a pensar que todo era verdad y que sus padre no
murieron en un accidente sino que fueron asesinados lo que llevaba a preguntarse
porque su papá le había mentido todo este tiempo, porque ahora él estaba
involucrado en el proyecto “Stargate” y lo que más le inquietaba a Daniel era
que papel jugaba su padre en todo esto.
Daniel
vio la película de su vida pasar por su cabeza, no podía haber sido engañado
todo este tiempo, el único padre que había conocido era Jack O’Neill y él
siempre estaba abierto a hablar de sus padres biológicos.
Recuerdos de Daniel…
- Feliz Cumpleaños querido Daniiiieeeel, ¡¡¡Feliz cumpleaños a ti!!! – repetía el coro de voces ante un emocionado Daniel que miraba a todos sonriente – antes de apagar las velas – escucho a Sam gritar – No te olvides de pedir 3 deseos – y luego Daniel soplo con todas sus fuerzas
Este
era lejos el mejor cumpleaños de su vida, todos sus amigos estaban ahí, no eran
muchos y en la mayoría eran adultos pero para Daniel eran lo más importante, su
familia, hasta su abuelo había llegado esa tarde ¡una verdadera sorpresa!.
Luego de partir la torta y comer tantos dulces como había podido, Daniel era un
niño muy feliz solo que faltaba una sorpresa más en la terraza y ante la mirada
de todos estaba instalado un telescopio no uno pequeño sino uno grande de esos
que no son un juguete sino uno profesional, Daniel no lo podía creer era su
sueño y al lado del telescopio su padre sonriendo.
- Feliz Cumpleaños hijo – Daniel corrió para darle un abrazo a su padre y no pudo evitar que lágrimas cayeran por sus mejillas, estaba en la gloria
El
tiempo pasó y como no todo lo bueno puede durar para siempre los invitados se
fueron retirando dejando a padre e hijo solos en ese día tan especial, aún en
la terraza Daniel seguía enfocando el cielo ahora con otros ojos, su cara de
concentración hizo que Jack sonriera… tan pequeño y tan inteligente, Jack
siempre había sabido que Daniel era inteligente solo que hasta esa semana lo
supo con certeza, lo habían llamado de la escuela para citarlo a una reunión en
donde le mostraron las pruebas que se les hacían a los niños de su edad y que
habían demostrado efectivamente que la inteligencia de Daniel estaba sobre la
media.
Para
Jack esto fue solo la confirmación de algo que siempre sospechó y que explicaba
porque Daniel prefería la compañía de adultos a las de niños de su misma edad,
los intereses de Daniel siempre fueron distintos. Pero por muy inteligente que
fuera su hijo, ya era la hora de acostarse.
- Dany ya es tarde es hora de dormir
- Papá, puedo quedarme un poco más…
- No hijo, pero te prometo que el fin de semana te podrás quedar hasta más tarde, ahora sube a tu cuarto y alístate para la cama
- Dany estaba realmente cansado así que no protestó mucho ante la imposición de su padre, y rápidamente estaba acostado en su cama esperando que su padre como todas las noches pasara por su habitación, era un ritual que se repetía sin excepciones desde que Daniel tenía uso de razón.
- Estas esperando a alguien pequeño – Jack sonrió desde el marco de la puerta. Daniel sonrió de vuelta
- A ti papá – y alargó sus brazos esperando un abrazo. Jack se dirigió a la cama en donde estaba acostado su hijo para abrazar a él que era la razón de su vida
- ¡hey! tengo un último regalo para ti – Los ojos de Daniel se iluminaron ante la sorpresa. Antes de entregar el esperado regalo a Daniel dijo en forma solemne – Esto es algo importante hijo, te lo doy ahora porque creo que ya es hora de que tengamos una conversación al respecto – Daniel tomó el misterioso paquete para abrirlo lo más rápido que pudo, era un marco con una foto de una pareja que llevaba en sus brazos un niño de meses, Daniel lo miró con detención intentando descubrir que significado tenía. Jack tomó el marco con la foto de la mano de su hijo – Estos son tus padres hijo, se llamaban Claire y Melburne Jackson y ese pequeño que está en sus brazos eres tu – Jack esperó a ver alguna reacción de parte del niño pero Daniel permaneció en silencio
- ¿Pero tú eres mi papá verdad? – pregunto finalmente Dany en un murmullo
- Mírame Dany – pidió papá con calma – tu eres mi hijo – le dijo con una sonrisa – eso no va a cambiar nunca ni cuando tengas 40 años – Jack remarcó sus palabras dándole un beso en la frente al niño que ahora parecía asustado. Más tranquilo el niño volvió a ver la fotografía – Ellos murieron, Dany cuando tu eras muy pequeño, por eso no los recuerdas, pero ellos no te abandonaron – le dijo con voz suave mientras le acariciaba la cabeza atento a las reacciones del niño que miraba curioso aquel retrato – ellos te amaban tanto como yo lo hago ahora pero sufrieron un accidente y no pudieron seguir cuidándote por eso es que te dejaron conmigo porque ellos sabían que yo te amaría – Dany ya sabía que él no era hijo biológico de Jack, él nunca mintió sobre eso pero nunca habían tenido hasta ahora esa conversación tan franca
- ¿Es por eso que siempre dices que soy el hijo de tu corazón?, ¿no soy tu verdadero hijo? – Daniel parecía tan indefenso
- Daniel Jackson O’Neill tu eres mi hijo, hijo de corazón, hijo de mi alma en conclusión eres todo mío spacemonkey para siempre – Jack abrazó fuertemente a su hijo – solo quiero que sepas que cualquier pregunta que puedas tener puedes hacerla.
- ¿Qué hacían ellos? – Daniel preguntó tímidamente
- Eran arqueólogos – dijo Jack
Tiempo Presente
Daniel
se dirigió a la única parte donde sabía podía encontrar alguna respuesta a
todas las preguntas que tenía en su cabeza, la oficina en donde su padre
guardaba todos los documentos importantes. Miró la pequeña habitación que
constaba solo de un par de sillas, un escritorio y muchos estantes, todo
ordenado minuciosamente. Con el mayor cuidado Daniel se adentro buscando los
papeles de su adopción, más de alguna vez su padre le había hablado de ellos y
sobre los bienes que sus padre le habían dejado, él nunca se había interesado
en todo eso hasta ahora. Tardó por lo menos una hora en encontrar lo que
buscaba, comenzó a leer los papeles de la adopción y dio con la carpeta que
contenía los bienes materiales que le dejaron sus padre, y abandonados en el
fondo del cajón había un sobre café común al abrirlo solo encontró un cuaderno
al intentar leerlo se dio cuenta que eran notas escritas en símbolos que
parecían egipcios y ante él cayo una pequeña pieza en forma de pirámide.
Bueno mi querida Gloria, quien como tu para unir a estos grandes de la travesura, jejejej
ResponderEliminarMe he divertido con el curso de la historia, y has despertado tanto mi curiosidad como mis ansias, ya me escuecen las manos por los próximos capítulos, jejje
Un abrazo
Marambra
Ay Gloria, de verdad sabes como imponer suspenso.....tenaz, pero seguro no lo que se viene no es facil para el coronel...y segurito que tampoco para los chicos
ResponderEliminarActualiza lo mas pronto que puedas!!! hazlo pero ya!!!!
ResponderEliminarWaauu cuanto misterio!! Me voy a acabar mis uñas hasta la próxima actualización muy buenos capítulos
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