Los Th, una estirpe donde el amor es la medicina
Génesis, la lección
olvidada
o el eslabón perdido?
Autora: Marambra
¿Y, DONDE
MIERDA HAS ESTADO? ZAAAS
AUCHHH, puta
mierda – murmuraba Uther con los ojos como plato – PARAAAA…
Uther no
lo podía creer, sin saber de dónde, como y/o porqué, sintió de pronto en el
muslo derecho, un horrible correazo que lo saco de sus ensoñaciones, pero no
podía tocarse porque una mano estaba apresada desde la axila por su padre, y la
otra entrelazada a los delgados y finos dedos de su chica que ingreso
prácticamente arrastrada a él por la fuerza de la gravedad ejercida por el
jalón que Ethan diera a su hijo sin darse cuenta que el muchacho venía
acompañado de una niña no más de 15 años, con el pelo sujeto ahora en una
hermosa trenza rojo cobriza que terminaba en un rozón hippy como su vestido
floreado; la muchacha quedo impactada y toda atolondrada porque empezó a darse
cuenta que si no hacía algo, de pronto se vería envuelta en una escena casera
difícil de olvidar y que definitivamente no quisiera ser testigo; pero mientras
eso pensaba ella sin soltar los dedos de Uther la puerta se había cerrado
violentamente por Ethan que sin querer activo la chapa de seguridad y no había
forma de abrirla sino era con llave, por lo que Anabela aun cuando quisiera
abandonar sigilosamente aquel lugar que lo imagino ya no más estallaría en
gritos, gemidos, correazos y ajos y pimientas del dueño de casa y padre de
familia no podía, estaba condenada al parecer de ser testigo mudo de la peor
humillación sufrida por su flamante amante; mientras tanto Uther no salía de su
asombro, preocupación, estupor e infinita vergüenza, papá estaba a punto de
darle una paliza delante del ser más sublime de su pequeño mundo adolescente…
su corteja, con lo que le había costado declararse, justo esa tarde misma BUAAA
lloraba su corazón
ZASSS, ZZASS,
ZAASSS – los primeros correazos le llegaron
ardidos al trasero – TE HICE UNA
PREGUNTA – grito Ethan energúmeno
Mieeeerda…
PARAAAAA auuuchhh, QUE HACES EN CASAA, se suponia que te quedarias en el
hospitaaal, auchhh acuhhhh MIERDAAA – esquivaba como podía
entre el agarre de su padre, y de su chica, pues como que no había a donde huir
o sobarse el chicotazo, Ethan jalo al muchacho y colocándose detrás de él le
regalo 3 palmetazos escocidos mientras decía
PLAF; PLAF; PLAF a mí, no me
mierdeas jovencito, si sabes lo que es bueno, ni se te ocurra faltarme al
respeto con palabras malsonantes, cuidadito – le advirtió apuntando
con un dedo
Es que no tenías
que estar en casa, ¿qué haces aquiii? – se soltó de su padre
Ethan
estaba alucinado de aquellas palabras, Uther entre quejas, todavía se atrevía a
reclamar a su padre ¿qué era lo que hacía en casa?, eso era el colmo, así que
enfadándose mucho más por aquel indignante reclamo de su hijo, enojado ante la
sinvergüenzura del muchacho estuvo a punto de soltarle una buena paliza y lo
iba a hacer de no ser que al darse la
vuelta para cogerlo de nuevo en el amague que hizo Uther para huir soltando los dedos de su novia,
papá se percató de la muchachita aquella toda risos rojos y se contuvo de
arrearlo a correazos al revoltoso adolescente que tenía delante, así que
haciendo acopio de valor, controlando y modulando el tono de su voz enojada
tratando de colocarse la correa en el pantalón sin lograrlo de lo nervioso que
estaba, al final lo dejo colgado en el perchero; miro a su hijo enfadado por
ponerle en aquella horrible situación, porque sí, él también se sentía
avergonzado como un crio pillado en una mala acción, los ojos agudos de aquella
pecosa lo estaban incomodando eran más filos que agujas y definitivamente mucho
más mordaces que mil palabras de reproche, así que trato de disculparse.
Discúlpame, tú
debes ser Anabela – había hablado tratando de acomodarse la
ropa y el pelo estaba enfadado y avergonzado – Lothar me dijo que tenían que ir a comer
pizzas por tu cumpleaños, pero, es demasiado tarde ya, entenderás y Uther….
NO ES
TAAAARDE; ES APENAS – grito Uther enrabietado, según él su
padre lo estaba avergonzado intencionalmente – es
apenas, apenas – se puso a mirar
su reloj
Es más de la
media noche Uther, así que despídete de tu amiga y SUBE a tu habitación, tomas
tu medicamento y te acuestas… ya el sábado tendrás todo el día para festejarlo
con ella si quieren; voy a llevarlos y dejarlos donde quieran pero hoy no,
tienes examen hijo, así que despídete, voy a llevar a tu amiga a su casa – papá
le estaba dando la opción de hacer una retirada diplomática, pero Uther estaba
enfadado de los 3 o 4 correazos que su padre le dio delante de la chica, por lo
que no solo no hizo caso sino que se cruzó de brazos y asesino a su padre con
la mirada torciendo los ojos y murmurando barbaridades en voz baja, que Ethan y
Anabela oyeron claramente… desgraciado
puto, cabrón malnacido, huevón que le den por el culo
Voy a pasar
por alto lo que acabas de murmurar si en este preciso instante te disculpas de
Anabela y subes a descansar, ya mañana conversarán – Uther
empezó a bufar como un toro calado – y deja de hacer
gestos si sabes lo que te conviene, porque óyeme bien jovencito, si mal no
recuerdo no tenías permiso para salir ni a la esquina, así que si no quieres
que “conversemos al respecto a mi manera” en este instante te disculpas, que ya
mañana arreglaremos cuentas tu y yo Uther …ahora ¡discúlpate! – elevo la voz enojado de la actitud amarga de
su hijo que solo mordía las mandíbulas y apretaba los puños aun teniendo los
brazos cruzados y bufando, pero la catástrofe se vino cuando Ethan tras
suspirar quiso acercarse a él y abrazarlo, entendía que estaba frustrado, y que
además su cita se arruino
NO me toooques
NO voy a darte NINGUNA EXPLICACIÓN POR QUE NO ME DA LA GANA Y PUNTO – los
puños tensaron sus hombros, aquel gesto no pasó desapercibido para su padre – TE ODIO voy a largarme de esta MALDITA CÁRCEL, VOY A
IRME – señalaba la puerta con la
palma abierta, pateando el adorno de su abuela que estaba a su alcance, acusando a Ethan de todo – estoy
CANSADO DE TI, de esta PUTA VIDA, de estar ENFERMO como vos Y DE VOS – gritaba
sin sentido
– OJALA ESTUVIERAS MUERTO Y NO MI MADRE…
quiero irme lejos, NO TE QUIERO NO SOY
FELIZ CONTIGO NO TE QUIERO COMO MI PADRE – todos
los pensamientos dañinos que alguna vez albergo se abrieron paso por su boca,
estaba en un franco arrebato, y empezó a temblarle el labio inferior – NO ERES MÁS QUE UN PUTO CABROOOONN…. – Ethan tardo una fracción de segundos en
asimilar todo
¡Utheeer! – grito
Anabela asombrada
TU NO TE
METAS, CUATRO OJOS… METICHE, no debí hacerte caso, ni debí declararme, paso de
ti me voy a arreglar con – le hizo un gesto obsceno
PLAAAF – el
revés cayó en la cara como un petardo – aguárdame unos
minutos Anabela por favor, no te marches, esto no me tomara ni media hora – agrego Ethan volviendo a agarrar al muchacho
de la ropa pues estaba dispuesto a correr porque ya tenía el corazón a mil por
hora de nervios
Lo
atajo en las gradas y forcejeando subieron de dos en dos los escalones hasta
llegar a la habitación del muchacho, la puerta trono de golpe y fue aventado a
la cama mientras gritaba.
- NOO NOOO, NOOO
DEJA, DEJA – procuraba huir dándose cuenta recién de
su tosco proceder, pero su padre maniobro y lo inmovilizo en un enredo de
brazos, pies y piernas y lo desvistió tironeando la ropa hacia abajo dejándolo
con el pantalón enredado en los tobillos Uther respiraba como su padre,
agitadamente y sin saber cómo se paró como un rayo para ser atrapado de nuevo
por el tórax y esta vez Ethan sujetándolo entre su cadera y el brazo, empezó a
descargar sobre la desnudez de los muslos, aquella paliza por irrespetuoso
armado de su cinturón negro doblado en dos que cogió en el último momento, y
las horribles franjas rojas no se hicieron esperar desplegando sus tonos desde
el más tinto al más claro
- QUE TE HAS IMAGINADO TU… MAL HABLADO PARA VENIR A MANDARME A LA MIERDA A MI Y AMENAZARME CON ESCAPARTE, CARAJO zas zas ZAS zas ZAAAS
- MMMGGRRA GRRR
– gruñía enfadado jaloneando el cuerpo,
algunos chirlos le llegaron al poto y aquello dolía mucho sin calzón
- TODO EL DÍA me
has hecho renegar – se quejó – estoy cansado de tus desplantes, de tus
desobediencias, DE TUS CAPRICHOS ZAS zas zas
- Auuuchhh au au
pppaaapiii – empezó a quejarse suavecito comido por
la vergüenza, consciente de quien estaba en la sala
- ¿Ahora soy
papi ¿NO? – pregunto dolido – ahora
soy papa después de mandarme a la mierda y NEGARME como tu PADRE ¡NO? – agrego
sujetándolo fuerte antes de soltar aquellos cintazos – zas ZAS
zas… ¿ahora soy papi?... y ¿para qué? ¿para que deje de azotarte? PARA ESO SOY PAPI
¿cierto? – había hecho una pausa en sus acciones para reclamarle a
su hijo todo su mal proceder – CONTESTA, ¿PARA ESO
SOY PAPI?
- Te odio
¡cabrón de mierda! – volvió a repetir, definitivamente la
rebeldía bullía sin control
- Esto es EL
COMO, EL COLMO DE TODOS – grito Ethan hirviendo ya – pero esto se acaba AHORA ¿me has entendido? Zas zas ZZAS ZAS ZASS – los últimos rapidísimos
dolieron mucho en sus atormentadas flexuras, tiro el cinturón a un lado y lo
jalo a la cama le daría un buen escarmiento a palmada limpia, durante todo ese
periodo de correazos medio parado e inclinado; Uther, no hizo otra cosa se
brincar como podía y gemir aguantando de vergüenza de que su novia, si aún lo
era claro, lo oiga pero sin poder atajarse porque papá sin saber cómo sujetaba
su muñeca contra el cuerpo del muchacho doblado a nivel del pecho
- BUAAAAAA,
AUUUUUUUU AAAUUUUUU Yaaa BASTA, PAAAARA, NO MAS, DUEELE, DUELE – Uther
lloraba recién a boca jarro y sin saber cómo de pronto se vio mirando el piso
sobre el regazo de su progenitor – ya no, ya nooo, por favor ya nooooo
- NO ¿QUE? – demando
papá – esto
recien empieza; ¿sabes?... estoy CANSADO de que me trates como LA MIERDA PEGADA
A TU ZAPATO, MOCOSO PLAF – cayo el
primer palmetazo sobre el ardido trasero
- TEE ODIO MAS ENTONCES BUAAAA, AUUUAUUU AGRRAASSS MMMGRRRR, AYYY AYYYY – aquella
declaración sonó tan infantil como un niño pequeño que no tiene más armas que
esa simple palabra en su boca para dañar
el corazón del grande usándola como si fuera el más abominable insulto sobre la
faz de la tierra, pero papá prosiguió
- TODOS los días
tengo que RENEGAR contigo, QUEJAS de todo lado, te importa UN PITO lo que te digo
o pido plaf, plaf, plaf, plaf, plaf y Dios es testigo que he estado todo este
mes procurando ENTENDER QUE MIERDA TE PASA, pero esto es EL COLMO plaf, plaf, plaf,
plaf, plaf venir a decirme QUE NO SOY TU PADRE plaf, plaf, plaf,
plaf, plaf PARA TU INFORMACIÓN los 10, 15 o 20 malditos minutos de placer
que haya tenido yo entre las piernas de tu madre plaf, plaf, plaf,
plaf, plaf son los 10, 15 O 20 BENDITOS MINUTOS que me llevo A MI CREARTE Y
LLEVO plaf, plaf, plaf,
plaf, plaf 16 AÑOS CUIDÁNDOTE, PLAF – a cada acción que el
puntualizaba Ethan regalaba un doloroso azote en la flexura de las nalgas que
Uther guardaría como un recuerdo inolvidable
- Auuuu, auuu
- MIMÁNDOTE, PLAF
- AUUU, AUUU
AUUA – balanceaba el cuerpo sobre las rodillas
de papá
- EDUCÁNDOTE, PLAF
- AUUU AYYY YAAA
– papá sentía las manos del crio forcejear
para cubrirse
- QUERIÉNDOTE PLAF
- YAAA YAAA YAAA
- AMÁNDOTE, PLAF, PLAF, PLAF
- BBBUUUUUUAAAAAAAAAAAAA
– un calzado salió disparado junto al
pantalón, quedando el otro botapie enredado en el otro calzado
- SOPORTANDO DE
TODO VIVIENDO UNA PESADILLA AL SABER QUE ESTAS ENFERMO Y QUE TODO LO QUE HAGO
NO ES SUFICIENTE PARA CURARTE – declaro antes de aplicarse en un lugar específico,
las flexuras de los glúteos del muchacho – plaf, plaf, PLAF plaf Y MENOS para que tu
tengas UN POCO DE RESPETO Y AMOR POR TI MISMO, NO POR MI, plaf, PLAF plaf, plaf, QUE ESO YA ME HA
QUEDADO MAS QUE CLARO plaf, plaf, PLAF plaf
- Yaaa, ayyy
auuu auu – la batalla por librarse de su padre era
agotadora, pero por mucho esfuerzo que hiciera no lograba soltarse, le dolía
todo, no solo el trasero, todo, pero a papá parecía no importarle porque solo
seguía recriminando su horrible proceder, Ethan hizo una pausa de unos 10
minutos mientras seguía jaripeando al muchacho que tenia sobre sus rodillas
para reanudar la paliza en un trasero un poco apaciguado reviviendo el dolor
- SI DE MI
dependiera y fuera necesario con gusto dejaría que me mutilen para sanar tu
cabeza POR NO VERTE FRUSTRADO, ENOJADO ENRABIETADO de las limitaciones que
tienes o de las que tendrás a futuro Y SEAS FELIZ – dijo
Ethan con dos cosas claras… el corazón en un puñete y los ojos aguados – si pudiera DAR
MI VIDA porque tu MADRE ESTE VIVA y vuelvas a sonreír LO HARÍA, PERO ELLA ESTA
MUERTA – declaro ahogando un sollozo – MUERTA Y YO NO y para desgracia tuyo, SOY LO ÚNICO QUE TIENES, ESTE CABRÓN COMO PADRE, CARAJO, ESTE CABRÓN COMO ACABAS
DE DECIRLO – Ethan reventó… se
hizo pedazos con aquella confesión, desahogo o como quieran llamarlo, pero
estaba harto
– no te habré PARIDO hijo, pero aunque suene
craso HAS SALIDO DE MIS PELOTAS, ERES MÍO, PLAF PLAF
- AUUUUA AU AU YAAA YAA YA PAPITO, YA
- MIO, plaf plaf
- AYYY AYYY AYY
- MÍO, Plaf plaf – Y
Ethan empezó a recalcar esa afirmación con un sonoro palmetazo
- YA, YAA PPAAAPI, PAPI, PAPI
- ESO ES, eso
es… PAPI, papi, papito PAPA, NO SOY NINGÚN CABRÓN – reclamo
enfadado – …no te cargado 9 meses en mi vientre ni he llorado al
pujar para que NAZCAS, PERO TE HE GUARDADO 3 MESES EN MIS TESTÍCULOS Y HE
FESTEJADO CUANDO HAS NACIDO – Ethan
a esas alturas empezaba a ser demasiado gráfico con todo, realmente estaba
rayando la locura –
así que te voy a hacer UNA SOLA PREGUNTAR Uther y quiero que me
RESPONDAS, porque si no lo haces TE JURO QUE TE REVIENTO EL POTO A PALMETAZOS – amenazo soltando un doloroso palmetazo – PLLAAAFF…. ¿QUIEN ES TU PADRE? UTHER QUIEN? PLAAAFF
- BUUUAAAAA,
tuuu tuuu a gsagjs agjss – musitaba
- ¿Sigues PENSANDO que soy un cabron? PLAF PLAF, PLAF
- AU AU auu nooo no
- NO QUEEE, NO
¿QUE? – lo incorporo de golpe
- AUUU AYYYYY – como
dolía pensaba al sentir a su padre incorporarlo, solo mover una pierna dolía
horrores, sentía sus flexuras hinchadas, había sido muy malcriado con su padre
y realmente se merecía cada una de esas nalgadas, volvió a gemir – AYYY au au au, buuuu mmggg nifsm nifs nifs – aquello
tardaría varios días en volver a la normalidad y estar lista para una nueva
batalla, Ethan estaba pasmado, tieso, agobiado…
- NO ¿QUE?? – exigía
mirándolo a los ojos
- NO paaaapiiitooo, noooo
- ¡EXACTO Uther!,
¡NO papi!, ¡SI papi!, ¡está bien PAPI! ¡BUENOS DÍAS PAPI! – empezó
a recalcar lo que esperaba como respuesta a futuro – PAPI,
papi papi, papá, papito, padre… NO CABRÓN, NI MIERDA NI PUTO ¿me has entendido?
– recalco Ethan – Se acabaron las tonterías
Uther, tus desplantes y tus malcriadeces, vas a obedecerme en todo lo que te
diga, sin rechistar ¿estamos?
- Siii paaa,
siii – respondió al final vencido, aquello lo supero
en todo sentido
- Ahora te me
pones el pijama, te lavas la cara, tomas la medicación y vas a disculparte y
despedirte de Anabela e invitarla para salir el sábado a almorzar, ir al cine y
cenar, ¿bueno? – bajo el tono de voz, pero no la firmeza
en su mirada o sus accione
Así
que ayudo a su hijo a vestirse, le hizo tomar la horrible tabletita, le lavo la
cara en un intento de minimizar los ojos hinchados y rojos y bajo con él a la
sala donde los esperaba una furiosa y nerviosa pelirroja.
- Anabela – dijo
Ethan – mi
hijo tiene unas palabras para ti, ¿Uther?
- Nifs, nifs, nifs, yooo, yoo looo, ags ags ags looo sieeentooo tanto
Y no
pudo más se desarmo llorando, su padre lo abrazo con todo su corazón cuando vio
la cara de su hijo como si acabara de pasarle un tractor, pero esta era una
prueba de ambos; Ethan sabía que no debía soltar las riendas, Uther paso todo
un mes tras el incidente de la fiesta portándose como un verdadero bellaco con
él, plantando malas caras, haciendo obscenos gestos, discutiendo,
desobedeciendo, haciendo comentarios hirientes, pasando sobre él en todo
momento, pero Ethan sabía que si bien había cometido el error de no dejarse
explicar, o consolarlo en un momento de rabia, de enojo, pues no podía todo el
tiempo vivir con miedo a su hijo y que este haga lo que le dé la gana y lo
pisotee y socave su autoridad, después de todo, era su hijo, y él era su padre,
ambos humanos, ambos con tendencia a equivocarse como cualquier otro, y que
debían aprender a ir a tropezones, a caerse y levantarse cuantas veces haga
falta para fortalecer su relación filial, después de todo, solo se tenían ellos
tres, Ethan, Uther y Lothar como núcleo familiar…
- Quisiera
invitarte a nombre de mi hijo a festejar el sábado tu cumpleaños, sea que
quieras pasarlo solo con él o con otros amigos Anabela – y
la voz se le quebró, y fue ella la que salvo la angustia de ambos… se acercó a
Uther y le planto un beso de película en la boca y luego le dijo
- TUTY, debiste
hacerme caso de llamar a tu papá, pero eres terco como la mula – Uther
bajo los ojos avergonzado – bueno no es para tanto, yo igual te quiero rudo o
llorando, nos vemos mañana y en el recreo comeremos la pizza fría con Lothar
mas, y el sábado como me debes mi regalo, me llevaras al cine, pero yo escogeré
la peli, una romántica con muchos besos… tontito – y le sonrió de oreja a oreja, y Uther
tímidamente se soltó de su padre para abrazar a su corteja diciendo
- Lo siento mucho tontita
Ethan
contemplo un rato más la escena antes de encaminar a su hijo a su habitación
donde empezó a acostarlo, pero no se esperó la reacción de Uther, una
extremadamente sobrecogedora del muchacho que empezaba a romper el dique de su
corazón y aquello fue apabullante, realmente apabullante para los dos, Uther
rompía sus rabias y rencores.
- Perdóname,
perdóname, perdóname papito, perdóname, es mentira que no te quiera, es
mentiraaaa ags, ags, gas, ags, ags, niffs, niffs, niffs, aaj aj – empezó
a gemir desesperado y se lanzó al abrazo de su padre, apenas manteniéndose en
pie, le dio un abrazo muy sentido, esperado y necesitado, Uther regresaba a su
corazón, pero el estrés generado fue tanto que empezó a pasar factura, empezó a
temblar su diestra en franca convulsión, Ethan dándose cuenta llamo a Lothar,
un Lothar que de tanta bulla se había despertado y estaba parado en la puerta
de la habitación de su hermano, frotándose los adormilados ojos
- ¡LOTHAAARRR! – grito
asustado
- Papi, estoy aquí,
estoy aquí – respondió con urgencia en la voz al ver
que papá solo sostenía a Uther para acomodarlo en la cama con los ojos cargados
de pánico
- Pásame el maletín hijo
Y
todo sucedió muy rápido, papá acostó a Uther que aún estaba consciente con el
temblor en el brazo, saco un pequeño microenema barbitúrico, Uther comprendió
que era pero no quería, en la consulta se habló de la posibilidad de hacer un
uso eventual de barbitúricos, el lio era que cuando había un franco ataque
convulso, era difícil inyectar al paciente y maravillas de la ciencia
farmacéutica lanzaron al mercado los microenemas de diazepan con dosificaciones
fáciles, y he ahí, que papá tenía uno por si acaso, solo que no era algo cuya
eficacia quisiera Uther comprobar.
- No paa, nooo,
por favor, noooo – suplicaba sintiéndose extraño, con la
lengua adormecida y sin poder controlar su cuerpo
- Te va a dar
una convulsión hijo, por favor, está temblando hasta tu mandíbula; hijito, por
favor, por favor – Uther se dio cuenta que le sonaban los
dientes, y se percató del pánico en la voz de su padre – o quieres que te pinche – sacando a su vez un vial para cargar
acariciando su rostro con la cara sufrida del miedo a que le dé una convulsión
- Nooo,
ningunooo, no quiero dormir – se quejaba y procuraba pararse, las
lágrimas volvieron a discurrir su rostro
- Calma no te estreses
- Por favooor
Era
tarde ya, papá lo había colocado en posición fetal ladeado sobre la cama
mirando la puerta y le aplico el pequeño enema, Uther sintió primero la
horrible incomodidad en el esfínter que picaba un poco ante la intromisión pese
a su lubricante incorporado, luego percibió al líquido apenas como una humedad
mínimamente invasiva, se quejó, pero porque dolían las nalgas de la paliza,
finalmente empezó a relajarse, a flotar en su propio cuerpo, luchando por abrir
los ojos cuyos párpados pesaban tras unos minutitos de lucidez y vio a su padre
suspirar y dejar caer por sus mejillas las muchas lágrimas que se había
aguantado desde hace tiempo, mientras sentía la caliente mano izquierda de su
padre acariciar su rostro y la derecha sobaba la espalda y su pelo revuelto; y
lo fue acomodando sobre la cama arreglando su almohada susurrando bonitas
palabras para él y besando su mojado rostro… se olvidó de todo en ese momento
hasta que Lothar lo hizo reaccionar.
- Papi, Anabela quiere irse
- Ay por Dios, me olvide de ella, ¿puedes quedarte con tu hermano Loty?
- Claro pa, voy
a dormir aquí – declaro contento saltando sobre la cama
y sobre su hermano
- Hey no saltes, lastimaras a tu hermano
Lo
acostó a él también y le beso la frente un millón de veces, él era fácil de
querer, no era como Uther que no se dejaba abrazar sin poner esa rigidez hasta
hoy habitual, o hacer comentarios, o malas caras, pero ahora volvía a ser su
niño nada más, lo arropo y lo dejo durmiendo, aún tenía tres cosas que
concluir, dejar a Anabela y disculparse con la familia de ella, llamar al
Hospital y…. encargarse del trasero de su pequeño hermano Nathan, hoy se sentía
especial, si, hoy había vencido el miedo y los temores de hacerse respetar, el
miedo a corregir, y su hermanito, estaba ya a punto de descubrir, que de Ethan,
nadie más se vuelve a reír…
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