Los Th, una estirpe donde el amor es la medicina
¿Sinapsis neuronal o
sinfonía neurótica?
Autora: Marambra
- Auuuu, au au
au au – se quejaba dolorido con la cara llenándose de
mocos – yaaa, no lo vuelvo a hacer – prometió – nooooo AUUUU AUU, no lo vuelvooo a haaacer,
pero YA; YAAAAA ayyy, por favooor PAAAARA nunca máaas – el mozuelo no sabía dónde meterse, quería que
la tierra lo tragara, algunos metiches disimuladamente fueron acercándose y
alejándose de aquella vereda tras saciar su curiosidad inicial, mientras el
muchacho apenas podía enfocar de frente con los ojos anegados a aquel hombre
cuya fuerza se repartía en dos partes, en el brazo que lo sujetaba como una trampa,
y en el que blandía aquella gruesa correa que parecía tener vida propia, pues
el correazo que propulsaba ferozmente hacia que las piernas del jovencito
tiemblen, definitivamente, estaba llevándose una horrible paliza en plena vía
pública, a unos pasos de la casa aquella que saliera para comprar cerveza,
cuyas latas estaban desparramadas en el suelo
- ZAS, ZAS, ZAS,
ZAS, ZAS SUBA INMEDIATAMENTE A LA MOVILIDAD, IRRESPONSABLE, MENTIROSO…
SUBA DE UNA BUENA VEZ ¡¡¡CARAJO!!! ZZZASSS …LE ESTOY
HABLANDO – había hecho una breve pausa para dar una
oportunidad al muchacho que respiraba con dificultad y trataba de erguirse para
poder caminar, evitar la paliza aquella y hacer lo que le ordenaban; pero es
que el dolor de los muslos era tal que no podía evitar el amague de soltarse,
solo que para mala suerte este acto hacia que se agache y saque el culete
justamente para ser besado por la correa aquella que picaba como mil avispas y
se paraba de pronto hasta casi de puntillas
- YAA, YA
VOY ags, ags ahs nif nifs nifs – gemía
tratando de encaminarse a donde lo mandaban, la movilidad
- ¡APÚRESE! – pero
al parecer su domador no tenía tanta paciencia, estaba agotado, enojado y hambriento,
además – y ni SUEÑES que esto se acaba aquí JOVENCITO, ni lo
sueñes que llegando a casa TU Y YO, tendremos una SERIA CHARLA eso si te puedo
asegurar – había prometido su
padre jalándose las orejas
- YAAAA DUEELE
- Y más va a doler, suba de una vez ZZZAAAAS
- WWAAAAUUUUUU
ggggssssss – la respiración se cortó un ratito y una
juvenil mano voló al trasero frotando con ansias el ardido cachete, aquel
cintazo seguro había moreteado una de sus nalgas cuando estaba trepando a la
vagoneta para oírse tras el doloroso grito, el ruido de la movilidad al
cerrarse
- CRAPPP
Tras la neblina baja y ligeramente roja de esa hora sepulcral, rota por el bullicio
de unos cuantos mozalbetes pasaditos en copas y de una música extremadamente
ruidosa y de mal gusto que daba fe de que aquellos mozuelos solo trataban de divertirse, se había desarrollado
aquella particular escena que despertó a algunos vecinos cuya curiosidad hizo
que salgan en pijama para ver qué pasaba ante los azorados gritos de aquel
jovencito que cualquiera pensaría lo estaban desollando vivo, literalmente si,
estaban sacándole la piel del trasero a franjazo limpio, y cuando saciaban su
curiosidad simplemente se hacían a un lado moviendo la cabeza los unos y otros
comentando.
- Qué habrá
hecho el muchacho pue´, qué habrá hecho pa´que lo fajen – comento
una anciana a su interlocutor un hombre bastante mayor también
- Bueno, seguringo
se salió sin permiso, es que esta juventud esta sin freno, fiesta a un lao,
fiesta otro lao, ¿dónde pue´ se ha visto buri a media semana?, apenas es
miércoles y toda la esa sarta de holgazanes, cachafaces, metiendo semejante
bullanga, no hay derecho, ¿y los ha visto luego?, ya no de piltrafas de la
borrachera que llevan encima, yo aplaudo a este padre, más vale un culo verde
que sorpresas como una pelada preñada, o algo peor, ir a la cana por enredarte
en trifulcas, o que te vengan con que lo asaltaron en la calle, bien hecho, que
le parta el trasero, es más yo lo hubiera simbroneado con un cola e´peji
(simbado)… ja en mis tiempos, mi padre me habría reventado las patas por salir
sin permiso, y uno calladingo a aguantar, o no doña Ninfa – pregunto
comedida a la otra mujer que se abanicaba mirando de palco la paliza
- Así era pue´ j, que uno va a andar en los aires de ahora, los pelaos de hoy si no andan pimponeando (dícese a la insinuación malintencionada de tocarse los genitales a través de los forros del bolsillo, acto que solo condena a los varones) sus huevos, están con el pucho en la boca y la cerveza como grandes delincuentes, a todos esos mozalbetes de mierda yo los reviento a palos… no hacen otra cosa que mentir y hacer lo que les viene al huevo
Y
esa era justamente la espada de Damocles que pendía de la cabeza de Nathan,
pero aquel muchacho no era Nathan, era Ignacio, la paliza se la estaba llevando
su condenado compinche de manos de su padre, un hombre grande, alto, delgado
que acababa de salir del hospital; había concluido la cirugía reconstructiva de
Matías y el artífice de aquello era Ramiro, el amigo de Ethan; que había
recibido de su esposa una llamada para decirle que si sabía de Ignacio que no
aparecía desde la mañana…
- Vamos mujer, deja de fastidiarlo, la Universidad no es como el
colegio, tienen su propia burbuja de aire para respirar – colocaba las radiografías de
Matías en el negatoscopio para ver el tipo de lesión
- Vos todo lo llevas a broma de las cosas que hace, le tienes una confianza ciega, no hay caso de decirte nada
- Tengo que confiar pues, es mi hijo, está en la universidad me
siento orgulloso y feliz, es un chico sensato así que deja de molestarlo – le mostraba a su colega las
astillas de hueso roto
- ¿Ves?, ¿ves?, a eso me refiero, eres demasiado ciego con lo que te dice, ¿estás seguro que te dice la verdad?
- Si, en eso consiste la confianza, ahora deja de molestar estoy
trabajando – le
hizo un gesto de impaciencia a su colega que se le reía aguantando la carcajada
como diciendo, te esta reteando tu comandanta
- ¡Ándate a la porra grandísimo!, no se te puede decir nada – Alicia sonaba totalmente
enfadada revisando la agenda del chico para pillar algún número y llamar
- Dime pero pues, ¿qué me quieres decir? – finalmente Ramiro se puso
serio
- Que Ignacio no vino a casa en todo el día…
- Ya lo sé – la
verdad no lo sabía, pero sí recordaba sus años de estudiante y sabía
perfectamente que de un momento a otro se te va la hora o hay algo improvisado,
pero para salir del paso habría jurado hasta por la Madre Teresa de Calcuta – … tenía clases
hasta las 4, me ha llamado para ir a hacer unas tareas al hospital –
Ignacio no llamo, era mentira ni había pedido permiso, pero él prefirió decir
eso a su mujer para que deje de llamarlo cada dos por tres, él ya tendría
oportunidad de oír las explicaciones de su hijo y asunto arreglado; y es que
era así, el muchacho hacia algo que no venía al caso y papá dejaba que se
explique, a veces quedaba en eso solamente, otras pues lo amonestaba
verbalmente con: que no se repita hijo, o la próxima vez no te olvides de
llamar y muy ocasionalmente, no sales este fin de semana, pero ahora ante el
estrés de la cirugía ya cansado de las paranoias de su mujer le dijo una mentira
–
tienen examen mañana y antes de que grites, le di permiso para que se
quede hasta las 10 de la noche – se
fijó la hora eran las 7 quedaba un gran margen para poder localizarlo, la
cirugía de riñón estaba en pleno, él se vino directo de la consulta privada a
valorar al muchacho y decidió que se
quedaría porque armaría con los otros cirujanos el plan quirúrgico estudiando
las mejores posibilidades de reconstruir
el brazo del niño que tenía fractura múltiple y por tanto el bracito inestable
- ¿Qué cosa? – era
un reclamo alterado
- Que no te oigooooo – hizo
teatro auricular
- ¿Permiso para dormiiiir?
- NOOO TE OIGOOO – la
señal a veces era un problema en el quirófano pero ahora no, estaba en ese
espacio de breick mientras los vasculares y el urólogo extirpaban el riñón y la
llamada de su mujer estaba fastidiándole el buen ambiente quirúrgico, así que
decidió salir del paso entre medias mentiras – tienen que estudiar, mañana tiene examen oral de
anatomía estarán repasando
- Eres un confiado
- Déjalo en paz mujer, ya te dije, la U, no es el kínder, ahí caminan solos todos, no hay que llevaros de la mano ni hacerlos sentar en el bacín, ni limpiarle el poto
- No te pases de grosero conmigo – y Ramiro pensó por un
momento que se pasó un poquito de la raya, pero aun así no se disculpó – ¿por lo menos
tienes idea con quienes esta?
- Sera pues con sus compañeros de curso, deja de ser tan guagüera, no lo dejas respirar
- Está bien Ramiro, ¡está perfecto! – eso sonaba a cabreo total,
pero Ramiro tenía la mente en otra cosa – pero si te viene con viernes 13 no te quejes, sabrás tú
lo que haces, porque si él está metido en alguna tontería como me lo parece, le
voy a dar una paliza, me estás oyendo, le voy a dar una buena paliza y no te
atajes porque a ti más voy a romperte la cabeza por idiota – y
corto, ahí estaba, como siempre el brillante final de película de su mujer, es
que no era de extrañar, ella siempre terminaba las conversaciones ya no de
teatrales, estilo Oscar cuando de Ignacio se trataba, y ahora con una gran
amenaza a tomar en cuenta, pero la
paranoia esta vez brinco con justa razón…
Ramiro
empezó a hacer gesto de desesperación, pensó en decir a todo SI, por librarse
de la aguda voz de su mujer que tildaba ya no el desmayo de sobreprotectora con
Ignacio, menos mal corto ella, era dable pensó luego en la reacción de su
mujer, Nacho era el único varón después de 5 niñas, era un crio sano y normal…
la loca era su mujer, pero sin querer se había quedado picado, era mejor
cerciorarse que estaba haciendo su pichón; aunque él no lo agobiaba y siempre
le decía si a todo, decidió llamarlo, habían hablado y Nacho le dijo
panchamente que se olvidó de la hora y de paso le rogo que lo deje quedarse esa
noche, pero Ramiro, matador de 7 de un solo golpe como aquella fábula de los
gigantes, le dijo que NO a dormir por no tener líos con su mujer, sino pues le
hubiera dado permiso con bendiciones y todo, así que le indico que pida un radio taxi y se vuelva a casa que
él lo llamaría a las 9 para saber si llego, sino tendrían problemas porque no
le pidió permiso para ir a casa de nadie, y claro tras aquello ni pregunto con quién
estaba, pero Ignacio ni se inmuto porque conocía de sobra de que se trataban
los problemas; no me sales a la fiesta la próxima semana, o sin discoteca hasta
nuevo aviso, eran cosas muy sencillas y puntuales, y básicamente tontas a las
que Ignacio no daba mucha importancia, así que tras fijarse en la llamativa
Andrea sucumbió al pecado y casi, digamos fue el autor intelectual de la gran
mentira que lanzaron a Ethan, prefiriendo desde ya ignorar la recomendación de
su padre y cuando lo volvió a llamar a
las 9 no contesto el teléfono y tampoco estaba en casa, Ignacio había planeado
contarle la yuca de que se fueron a estudiar con un cadáver… pero por la bulla
de la fiesta, la adrenalina del momento las copitas encima, ni se percató de la tal llamada
Y
obviamente Ramiro empezó a indagar y supo que estaba con un muchacho llamado
Nathan, así a las 10 menos cuarto de la noche, estaba llamando al fijo de la
casa de Mikel porque el muchacho porra nunca se puso al móvil, estaba
preocupado y enojado también, no sabía quién era Nathan no cayó en cuenta que
era el hijo de Mikel uno de sus mentores y hermano de Ethan el colega que hace
una hora termino la cirugía renal y dejo indicaciones post quirúrgicas, de
haberlo sabido ni se hubiera preocupado, le hubiese preguntado a Ethan y este
claro le habría dicho que estaban estudiando con un cadáver; pero cuando Lothar
contesto simplemente dijo la verdad, que se fueron de pintas a la casa de una
vecinas que tenían un cumpleaños y que por eso salieron con Nathan hacía ya dos
horas y a Ramiro la presión se le subió a la estratosfera de la rabia y del
engaño, le pregunto que si sabía a qué hora regresaban y Lothar soltó todos los
planes, diciendo que no estaba seguro a qué hora pero lo más probable al día
siguiente, pues se dejaron la mochila, los libros y la ropa que se cambió antes
de salir de la casa para ir a la fiesta, Ramiro, de haber podido
teletransportarse lo hubiese hecho, y
frustrado y sorprendido como estaba, le dejo un peculiar recado: dile a
Ignacio, QUE SU PAPÁ LLAMO, que estoy muy enojado y se atenga a las
consecuencias, porque no tenía permiso para salir a ninguna parte y menos para
quedarse en casa de nadie, colgó y Ramiro se sentó frotando sus cansados ojos y
su nuca, pensando qué diablos le iba a decir a su mujer, pues tenía en la
bandeja de mensajes, como 50 llamadas perdidas de ella y mensajes preguntando
si sabía algo de su hijo, rascándose la cabeza porque quiera o no, no podía
hacer gran cosa, solo rezar de que el mocoso este bien y nada malo le pase.
Pero
coincidencias del destino, cuando Ethan fue a dejar a Anabela a casa, giro para
irse al hospital, estuvo dándole vueltas al asunto y había decidido que
arreglaría cuentas con su hermano al día siguiente y fue cuando los vio a ambos
comprando un montón de cerveza en lata de una tienda clandestina, empezó a
seguirlos sin que ellos se den cuenta y los vio ensartarse en un lio con otros
dos muchachos y así fue que decidió llamar a Ramiro sobre casi la una de la madrugada,
no vaya a ser que tal pelea derive en algo más o salga lastimado y piense que
la borrachera era en su hogar, a los pocos minutitos llegaba Ramiro, aun
vestido con pijama quirúrgico, freno en seco e Ignacio ni se percató, Ethan
estaba con la vagoneta a un lado sentado observando lo que su hermano y amigo
hacían, un amague de pelea con otros dos muchachos que no paso de una
bravuconada y una risotada genuina, se sentaron en la vereda ambos riendo y
habían decidido destapar un par de cervezas, las mismas que tenían que llevar a
la fiesta uniéndose a ellos dos muchachas despampanantes vestidas en mini
faldas con sandalias romanas cuyos lazos de cuero ascendían muy sexys hasta la
rodilla, y ambas colocando una pierna sobre las rodillas de los muchachos se agacharon
dejando ver el minúsculo calzón que llevaban
y mordían la boca de los anatomistas esos mientras estos empezaron a
desatar los nudos ciegos de aquellos calzados, Ramiro reconoció a Ethan y ambos
tras intercambiar impresiones y enterarse bien de cómo era el asunto y tras ver
y oír a los dos romeos haciendo alarde de estudiar medicina, que vamos daba su
toque a la hora de la conquista y como no, si las conquistadas eran colegialas
que estaban embobadas con los dos universitarios; Ramiro saco el cinturón de su
pantalón que había dejado doblado en el maletín, y se quitó el gorro quirúrgico, en el apuro no
se cambió de ropa, Ethan se sacó el suyo de la cintura y así ambos, blandiendo
cada cual su correa se acercaron a los dos muchachos de prepo y a los chicos
claro casi se les cae el poto del susto que se mandaron ambos cuando se vieron
interrumpidos en su plática
- No lo entenderías bonita – había dicho Nathan a
la castaña que tenía en su rodilla dándose sus aires de grandeza
- Es un poco complicado – agrego Ignacio
dándose su toque también, cogiendo la cerveza y abriendo la boca para
saborearla a gusto como el beso que aquella rubia le daba – a ver cómo te
explico, la neurona, o sea la célula de tu cabecita hermosa, tiene unos pelitos
lindos que se llaman dendritas, y éstas cuando se tocan con otros pelitos de
las neuronitas vecinas, hacen lo que nosotros llamamos sinapsis, y eso es un
choque eléctrico, un impulso, es la respuesta de algo
- ¿La respuesta?
- Si pues, digamos, yo soy una neurona con información, y debo
entregarla a otra entonces mis dendritas hacen choque contacto como si mi mano
tocara tu mano – con disimulo enredaron los dedos en los
de las chicas y besaron los dorsos
- ¿Y solo va a la mano? – pregunto la rubia
coqueteando descaradamente
- Noo, estos pelitos están en todo el cuerpo de la neurona – Ignacio
toco los pechos de la chica riendo fascinado – es como si… bueno si seguimos con el ejemplo de la mano
– bajo su mano del pecho a la
cintura – esta mano
lleva información que debe ser entregada a la base de datos, el cerebro, y debe
chocar con otra dendrita, que puede estar en la cara, en el pie o en cualquier
parte del cuerpo – y ella le
beso la boca apasionadamente mordiendo y diciendo
- ¿Así?
- Si, si, así, entonces choca y hay un corto circuito, la
información viaja al cerebro y procesa la información… y esta información viaja
a otra, ya te dije es complicado, es una SINAPSIS no chato, brindemos por ella
– agregaron ambos…
De
pronto una enorme mano cogió a Ignacio de su axila izquierda haciéndolo parar
de golpe, el movimiento fue tan violento que la chica se cayó de culo
sorprendida, estuvo a punto de increpar al supuesto idiota por aquella broma de
mal gusto cuando al desviar la mirada se fijó que se trataba de dos hombres,
armados cada cual con una correa en la mano, y éste que agarro a Ignacio,
parecía un pit bull con rabia así que simplemente se limitó a pararse y jalar a
su amiga para marcharse volando de aquel lugar murmurando de nervios, Ignacio
no entendía que paso con la chica, hasta que sintió el veneno sobre su piel….
- ZZZAAAAS – cayo
el primer correazo en el trasero de Ignacio, que al parecer no procesaba la
información porque se quedo de piedra al ver viajar a velocidad luz el cinturón
de su padre para llegar de nuevo a su virgen trasero – ZAS, ZAS
ZAS – alzo la vista y el estómago
se encogió pitufo, acababa de reconocer a su padre, quedándose con la boca
abierta que pronto empezó a balbucear
- Papáaa… Auuuchhh papaaaaa, que te paaaasaa
- Estoy haciendo
sinapsis hijo, entrego información a tu trasero para que tu cerebro procese que
te voy a DAR LA PALIZA DE TU VIDA POR MAÑOSO Y MENTIROSO CARAJO, AHORA CAMINE ZAS, ZAS, ZAS ZAS
– esa declaración se filtró en los
confines neuronales de su cabecita loca y un miedo irracional le mordió la
panza, papá, nunca lo había castigado, pero no tenía tiempo para filosofar el
por qué, solo para sentir y lo que sentía era horrible, gritar a todo pulmón
rompiendo sus cuerdas vocales de ser posible, ser rebelde… después de todo era
un universitario no? No un niño, querer huir porque era ya no de vergonzoso
darse cuenta que lo miraban además de que aquello que papi hacia dolía mucho,
arruinar las cosas porque no hacía caso a papá, empeorar su situación por
argumentar tontería y media y confesar
lo inconfesable y por ende aumentar la intensidad y el numero de azotes que
papito no tenía ningún problema en desplegar, era generoso en todo momento… y
como respuesta neuronal, llorar a moco tendido chorreando babas, mocos y
lágrimas como un chiquillo de 3 años que se cae y se hace chichiu… era toda una
sinapsis no había duda
- AUUU UU, au au ayyy ayyy, YAAA papaaaaaaaaaaa
- SI, YA PAPA, YA PAPA TE VOY A ENSEÑAR YO
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