Mis Gemelos: Cap. 85; Autora Marambra

Mis Gemelos

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 25 de Abril de 2016.

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Capítulo 85

Porque sí, y punto 

Autora: Marambra

• ¿Pero por qué? ¿Por qué? – El crio manifestaba su descontento ante la bomba soltada por papá, aquello era el colmo, no era justo para nada, así que dejando a un lado su desayuno en muestra clara de rebeldía Iván se cruzo de brazos – no es justo…
• No me interesa, es lo que hay y con lo que hay, hay que pechar pa adelante – contesto papá sin levantar la vista del periódico, esperando el café humeante de la mañana, aquellas 4 horas de trabajo que tuvieron todos antes del desayuno ya habían destilado mal humor hasta por los poros
• Pero por qué, yo tengo derecho a saber – se animo a golpear la mesa con cierta fuerza con la mano
• PORQUE SI  Y  PUNTO – Rubén le clavo la vista y azoto la mesa con  más fuerza y las cucharillas   volaron por el piso manchando el precioso mantel de Clara, una Clara que estaba por estrangular a su marido, ese hombre que tenia ahí en frente en la opuesta cabecera del comedor, no tenía nada que ver con el hombre que tuvo en cama la noche pasada retozando entre sus piernas, ese que le lamia el cuerpo y le besaba el cuello o la hizo gritar como loca mordiendo la almohada para que los gemelos no se despierten por la bulla y no tengan ganas de venir a la alcoba de sus padres a averiguar qué pasaba – anoche fui muy claro Iván, les dije que harían todo juntos, así que tu calladito te sentaras en la otra punta de la mesa y llenaras el cuaderno con las muestras que te puse… ¿o volverás a mandarme a la mierda de forma escrita? – clavo la mirada sobre el muchacho levantando una ceja en interrogación irónica – si es así, prefiero que me lo digas de frente que para leer mierdas me sobra el periódico por ahora – aquella fue una estocada maestra, Iván se quedo mudo un momento y rojo al mismo tiempo, ese era el meollo de la cuestión, de toda esta estúpida disputa degenerada, se agacho avergonzado sintiendo la mirada de Illien sobre su rostro, Rubén agrego luego de una mínima pausa tras aquel comentario – ¿Estamos Iván? – no espero una respuesta para agregar – solo cuando la maestra de Lex concluya, tu podrás moverte de tu lugar y AMBOS SE IRÁN DIRECTITO A LA HABITACIÓN HASTA NUEVA ORDEN – volvió a azotar la mesa con el periódico con fuerza mientras intercalaba la mirada entre uno y otro muchacho, pero Iván tenía que exponer su descontento simplemente no podía quedarse así, debía reclamar
• Pero yo ya pase el examen, ino es justo! que tenga que estar sentado haciendo tareas aquí solo por acompañar al burro de Lex – grito enfadado tras apretar los dientes y pararse
• Estúpido, tu eres el BURROOOO yo nooo – Lex se incorporo queriendo increpar a Iván, había dejado de mirarse las ampollas de la mano y de lamerlas, tenía la costumbre de lamerse las heridas como los animales, no se lavaba si quiera, a veces hacia sangrar los raspetones o pinchazos y luego era directo a la boca, lo que muchas veces le valió un jalón en las patillas por parte de su padre o su madre
• PLAPPP – tronaron las manos de Rubén del aplauso que dio, le tentó las ganas de calcarles un revés a ambos pero estaba tratando de controlarse porque sabía que no sería un día fácil sobre todo cuando tus mostrencos están mal dormidos – SILENCIOOO NO QUIERO OIR UNA SOLA QUEJA MÁS, HARÁN LO QUE SE LES ORDENÓ Y YA ESTA – Rubén doblo el periódico y lo tiro a un lado enojado

Clara se venía con la cara amargada ya, a tan tempranas horas de la mañana con el desayuno de su marido y se dispuso a agarrar su café para desayunar, pero Lex no pudo con su lengua y aunque la manifestación de enojo no fue en voz alta porque en la mesa estaba también desayunando Illien tras el arduo trabajo de la madrugada, no pudo evitar que su padre lo oiga claramente ya que estaba sentado a su izquierda, Rubén simplemente se levanto de la mesa, agarro al chico del cuello parándolo de golpe y lo quería conducir así a su oficina, la que tenía en casa en la segunda planta para no tener testigos, aquello estaba ya rebasando su no tan tibetana paciencia….. se había preguntado en qué momento Lex reaccionaria ya que desde que despertó mal humorado tan temprano, no había abierto la boca para nada, pero Lex se puso obstinado y se volvió a sentar rígidamente, a sabiendas que su papá lo llevaría a los altos para soltarle una tanda de azotes en privado, lo que dijo fue totalmente innecesario y lo sabía, se arrepentía pero era tarde y no podía decir nada de nada, su lengua se puso en huelga ahora y como no quería ir con su padre a donde lo llevaba, solo atino a agarrar con sus manos de la cintura a Illien sujetándose a él como si fuera su única tabla de salvación en el naufragio de sus congojas sin soltarlo y sin pararse; Rubén enfadado, metió la mano a las ligas del pantalón de su crio jalándolas hacia arriba logrando que se incorpore aprovechando soltar un solo golpetazo en el culo con toda la mano llena y agarrándolo así del pantalón lo saco a rastras prácticamente de la cintura; y se dijo para sí mismo, adiós a la promesa de no amonestarlo físicamente en público…

• PLAFFF, CAMINA
• PAPAA POR FAVOOR, POR FAVOR – rogo en las gradas
• NO QUIERO OÍR UNA SOLA PALABRA MAS – Y Lex se calló, no tenía opción… debió permanecer callado como cuando despertó, pensaba agobiado, yo y mi bocota, si seré tonto, tonto, y más tonto se recriminaba…

Había estado toda la mañana callado antes de desayunar, demasiado callado incluso para el gusto de Rubén, sin que eso signifique claro garantía a un buen comportamiento pero era mejor eso que su boca como pipoca, siempre era callado cuando despertaba de mal humor y despertaba así cuando no dormía lo que necesitaba, y esa mañana fue una de esas; su padre había ingresado a las 5 cuando el claro empezó a despuntar el día típico tras una tormenta de verano como suele ocurrir, Rubén abrió los ojos apenas se oía el trino de las aves, un exquisito olor a hierba fresca y humedad ingresaba por las ventanas cuya brisa mediana movía levemente las delgadas cortinas, se levanto sin hacer el menor ruido, a su lado su mujer dormía desnuda, el se deleito con eso y con el recuerdo.

Pese a las tensiones del día anterior y el cansancio mental y emocional, su cuerpo quiso una fuga, la más simple, la más básica de todas, sexo, Clara lo había consentido, y le regalo el sexo más fabulo que pudiera tener desde que llegaron los gemelos, lo había mimado, lo había besado como en sus mejores años, el había ingresado agobiado por los problemas de conducta de los muchachos, enojado y apenas vio a su mujer la increpo sexualmente, prácticamente fue una violación a toda regla, Clara lo miro sorprendida de la briosa actitud de su marido, le había arrancado la ropa de un tirón rompiendo los minúsculos lazos de seda de su pijama transparente y la misma suerte corrió su ropa interior, aquello éxito a Clara y decidió disfrutar de todo el cuerpo de su marido y con todo su cuerpo, posando su delgadez sobre su espalda ancha y pasando la punta de la lengua sobre el tatuaje de su espalda, el tatuaje de una orca cuya historia nunca quiso contarle…… “me lo hice en Noruega hace mucho” fue lo único que le dijo…

Se paro y se quedo mirando por la ventana; el cielo estaba cubierto de un negro manto que duraría unos días por lo menos, sin que eso suponga caer gotas sobre la tierra, extendió la vista por lo alto viendo volar garzas y otras aves en bandadas, y bajo la vista a la propiedad y el desastre era menor de lo que imagino, habían caído dos grandes árboles menos mal lejos de las áreas de trabajo, ahora era cuestión de ver si se podía hacer algo al respecto o era no más sacrificarlos, decidió darse una duchada rápida, eliminar las huellas del amor compartido, ingreso a la ducha y un chorro de agua fría fueron suficientes para iniciar el día, se vistió y se encaminaba al patio y se encontró con Illien en el pasillo.

• Buenos días don Rubén
• Hola Illien, ¿tan temprano muchacho?
• Bueno, es que hay que aprovechar la sombra y el fresco y hay mucho en el patio que recoger; con una carretilla hay que alzar los menudos – agrego, y eso le dio a Rubén una idea de cómo sería el día de sus demonios
• ¿Puedo pedirte un favor hijo?
• Mande usté don
• Voy a despertar a los gemelos, y se irán contigo a limpiar la parte de lo potreros, nada de adentro, eso lo harán a la tarde ellos solos, sino afuera, astillas de árboles, todo lo que sirva como leña nunca viene mal para hacer un buen fuego y asar carne – sonrió – yo les daré las ordenes y tu solo las haces cumplir, no dejes que te tomen el pelo y me avisas si se portan mal a la primera, no segunda ni tercera Illien, con ellos es a la primera, cortar por lo sanito antes de degenerar ¿bueno? – coloco su enorme mano sobre el hombro del muchacho
• Está bien… ¿pero ellos querrán ir conmigo?, digo, después de anoche con Alexander, no estoy muy seguro
• Tú no te preocupes, el ira y obedecerá, así no más es conmigo

Y diciendo eso ingreso a la alcoba de los muchachos, allá estaban ellos durmiendo pegaditos trasero con trasero cada cual mirando al otro lado, su padre se quedo observando el panorama, sorteando la suerte de dejarlos dormir o seguir con la idea de que limpien la hacienda con Illien y el resto de la gente… en eso los chicos se dieron la vuelta sincronizadamente balbuceando y Lex coloco la mano estirada sobre el cuerpo de Iván e Iván dormido como estaba, como si reconociera a su fraterno hizo exactamente lo mismo y siguieron en su sueño plácido, pero, castigo era castigo, abrió toda la puerta y corrió las cortinas, los chicos estaban uno con la sabana en el piso y el otro envuelta en la pierna lo que dejaba el colchón desnudo, que manera de moverse los dos gusanos, pensaba Rubén, ni 3 plazas de cama podían con su inquietud

• Arriba, es hora de trabajar…. Vamoooos

Chasqueaba los dedos en el aire, mientras los muchachos abrieron los ojos parpadeando varias veces y estirándose al mismo tiempo, Rubén se deleitaba con esos detalles tan mínimos de verlos ahí jalar los brazos hacia arriba sobre la cabeza, arquear la columna hacia atrás, mover los hombros, abrir los brazos, las piernas y los dedos de los pies, los diez dedos, marcando los músculos largos y flacos, mostrando un tostado tono contrastado con otro más claro en algunos rincones, doblaron las piernas y las abrieron ampliamente dejando ver cada cual la matutina y automática erección que jalaba hacia arriba los delgados y anchos bóxer como un saludo obligatorio al sol, simultáneamente ambos jalaron la ropa y su padre pudo entre ver los testículos rosados contraerse y relajarse en sus bolsas apenas cubiertas de rubio vello, desvió la mirada y el mismo vello subía finamente hacia el desnudo ombligo de los dos… terminaron de estirarse como gatos y abriendo la boca en un enorme bostezo declararon su descontento.

• MUY TEMPRAANOOOO – llevaron los dorsos de las manos sobre los adormilados ojos – papaaa, dejame dormir un ratito más, por favooor – insto Iván y Lex abrió los ojos al oírlo, y ambos se percataron de lo que sucedió en la noche, paliza y a dormir juntos castigados, que asco
• NO, ARRIBA, iEs tarde ya!, vamos todos a trabajar, hay que limpiar la hacienda de la lluvia de ayer 

De mal humor ambos se incorporaron empujándose uno y otro y gruñendo por lo bajo malas palabras que papi oyó claramente pero no quiso decir nada, total, les estaba robando 4 horas de sueño a ambos y Rubén se quedo ahí no se movería hasta que estuvieran bien despiertos y bien vestidos, los chicos se miraron a la cara asqueados uno del otro, ambos estaban con los ojos hinchados y parpados rojos, pero sin decir una sola palabra tuvieron que encaminarse a la ducha y bañarse juntos, se estorbaban pero ni modo, aquello era feo, se daban la vuelta para poder lavarse íntimamente sin testigos, estaban cabreados con su padre y con ellos mismos, y ahora a levantarse tan pronto, que fastidio…  para ellos madrugar era todo menos agradable, los sorteó con la carretilla que le toco a Lex, de ahí las horribles ampollas en las palmas de las manos, la jeta hasta la bragueta y el mal humor cocinándose en el coco y humeando por las orejas… para Lex, el favorito de papá era Iván, definitivamente.

• ¿Por qué debo ir con la carretilla?, me lastima las manos – se quejo
• Porque así es la lotería unas veces toca y otras no, y la carretilla mi hijito, te está enseñando a trabajar – contesto irónico y se marcho dándose la vuelta sin opción a replicas, lo que supuso la media risa de Iván
• Ya Ruben 2, basta, pa´ ti tampoco es chalita, no te florecerán jazmines en las manos, el pecha la carretilla y a ti te toca acarrear leña – Illien lo miro enfadado e Iván se modero en lo que restaba la jornada ganada a pulso por maleducados….

La jornada continuó a lo largo del día, lleno de disgusto para el pobre de Illien debido a las contantes discusiones de los tojos, pero claro no se podía esperar un milagro a la primera puesta vela, eso hasta Rubén lo sabía, así que trato de estirar su paciencia cuando puerta de la oficina se abrió y papá enojado, empujo suavemente a Lex, cerrando la misma con llave y se paró un largo rato como meditando lo que haría con su hijo, Lex en su lugar miraba a su padre apretando las mandíbulas, no sabía que decir o hacer, Rubén no se movió de donde estaba, quedándose como cuarto de hora en la misma posición, eso solo sumo un incontrolable estado de estrés en Alexander que solo parpadeaba y respiraba haciendo ruido por la nariz, no se había dado cuenta de que empezó a llorar al ver a su padre ahí parado sin moverse con la cara totalmente decepcionada, ni siquiera era enojo, con eso era más fácil lidiar, era una total y enorme decepción y en un giro de los acontecimientos Lex descoloco a su padre totalmente con su actitud.

• Teeermi__neeemos ags, agsags de una vez paaapa pero nooo aiinifs, nifs, nifs me obligues a seguir con Iván por favor ags, ags, ags – gemía con los ojos aguados – por favor, iya no lo soporto!, ni siquiera puedo masturbarme y estoy empezando a desesperarme por no poder tener intimidad – y se paro delante de su padre y se bajo los pantalones en espera de que papá le de aquellos palmetazos ganados por el insolente comentario soltado entre dientes y acabar con aquello, y poder ir a la carceleta como llamaba al dormitorio  donde papá los castigo y obligo a dormir, solo quería subir y tumbarse y dormitar hasta que llegue la profesora, maldito examen de ingreso, malditas tareas, todo esto era por eso… pensaba

Rubén agarro a  Lex le dio la vuelta y le trono un solo palmetazo y le subió la ropa, para luego jalarlo hacia el sillón y sentarlo en sus rodillas y apoyar su cabeza sobre su pecho acurrucándolo y limpiándole la nariz chiquita, pecosa y llena de mocos y calmar el desespero que lo empezaba a descontrolar.

• No siempre se solucionan las cosas a palmetazos Lex, lo que dijiste en la mesa fue totalmente inapropiado y doloroso para mí, me decepcionas, y ahora sí, me decepcionas tu, no solo tus actos Lex – el crío lo miro sorprendido y dolido por lo que su padre le decía y empezó a llorar mucho más – Me he disculpado de tu hermano y recibí una pedrada, me he disculpado de ti y recibo un improperio de marca mayor, ya no se qué pensar de ustedes, pero si sé lo que tengo que hacer, y es que aprendan por una u otra forma a tener tolerancia entre ustedes, así que no voy a dar mi brazo a torcer Lex, ustedes harán todo juntos, no lo voy a repetir…
• Pero es injusto, de verdad… tu no me pasas ni una sola, pero a él sí, a él le pasaste lo de la pedrada porque no a mí, eso me da rabia, yo solo quiero que se disculpe con vos ya te lo dije – repitió frustrado por enésima vez
• Lex, Lex , mírame hijo – y le obligo a levantar la mirada –  ¿estoy volcándote boca abajo ahora y desnudando tu trasero?, ¿o estoy reventando golpetazos en tus nalgas con algo más que no sea mi mano?... me dices que no te paso ni una, ¿dime qué es esto entonces? – le obligo a alzar la vista, Lex se había hecho a un lado y quería desprenderse de su abrazo – ¿No vas a contestarme? Mmm? ¿No dirás nada? – y Lex respondió bajito en un susurro
• No papi, no estoy boca abajo
• Bien, ahora Lex, escúchame ¿si? pero escúchame con atención, pon atención a mis palabra –  Lex suspiro y dejo de forcejear y papá aprovecho de apoyarlo nuevamente sobre su pecho – algunas cosas amor, no son si se pasan o no, o preferencias o hacerse el ciego – movió una de sus manos a medida que explicaba – cuando tu lanzaste aquel puñetazo ¿recuerdas?, tuviste tiempo de reflexionar sobre lo que paso ¿verdad? – y Lex no tuvo más remedio que admitir que asi fue, papá no lo obligo – Y fue tu propio pie quien te trajo a mí y fue tu propia boca la que hablo para disculparse, fuiste tú, entero, integro, ¿me entiendes? INTEGRO, es la INTEGRIDAD EN TUS ACTOS, lo que al final te hace noble pese a la falta cometida  – Y Lex cerró la boca ante el reproche que iba a lanzar – es lo mismo que quiero para tu hermano, que recapacite y haga lo correcto por propia voluntad no obligado – ahora empezó a entender a su padre… su punto de vista – yo puedo aceptar una disculpa a la fuerza, es más pude agarrar a tu hermano y molerle el trasero a correazos hasta que se disculpe conmigo, pero no es lo correcto, una disculpa obligada no es disculpa, es temor, o fastidio – indico para terminar de explicar aquello, esperando que su hijo lo entienda
• Pero nifs, nifs, agss ¿por queeee no le dices eso a él?, ¿por queee? – había mucho agobio y presión sobre él, la idea de la preferencia seguía en su cabeza dándole vueltas y vueltas – tu looo prefieres a él, porque es mejor que yo
• Pajarito, ¡cálmate! ¿si? – al mal tiempo buena cara, mejor por la miel y endulzar un poco al malhumorado Lex que tenía bostezando en su regazo – shuuu, ¿de dónde sacas eso hijo? A ver dime? – exigió papa sin gritar y ante el silencio de Lex y su disconformidad, prefirió contarle un secreto – ... ¿tu sabes dónde estamos yendo tu madre y yo todas estas tardes desde el incidente de tu hermano en la carretera?
• Nooo, no lo sé – respondió sin entender a que venía eso
• Estamos yendo al psicólogo, para recabar ayuda para tu hermano, Raquel le hizo muchas cosas malas a Iván – hasta ahora para Lex, el caso Iván/Raquel, solo fue una trastada que de puro gusto sus padres denunciaron, ok, sabía que ella lo golpeo pero lo considero como un detalle irónico, pero pensó que era por tonto, en cambio ahora su padre le pintaba el panorama como era, crudo – lo ha obligado a mantener relaciones sexuales, ¿entiendes lo que eso significa hijo? – y Lex pensó a toda máquina sin querer decir en voz alta lo que papá diría ese momento –  ¡obligarlo!, es como si lo hubiese violado, para mí es eso, aún cuando el termino biológico no es ese, lo ha golpeado la mas de las veces a su regalado gusto antes, durante y después de tener sexo – y Lex quedo horrorizado ante esa declaración – lo ha manipulado mentalmente y chantajeado de varias maneras… todas esas cosas han afectado de una u otra forma su comportamiento y su personalidad y es recién que se manifiesta su agresividad, y solo por eso soy tolerante Lex, solo por eso – recalco papá poniendo énfasis a eso – porque él se niega a ir psicólogo, o se negaba, porque quiera o no, esta tarde lo voy a llevar con él, iremos todos Lex, incluido tu
• Peroooo – eso era peor todavía – ¿por qué me obligas a mi? Yo no quiero ir, yo no me metí con ninguna vieja
• Porque Iván es tu hermano – respondió papá –  y seguro hablaremos todos, hijo… uno por uno – indico – y de  verdad creo que nos beneficiara a todos aprender a manejar todo esto – agrego moviendo la mano como si le mostrara algo que esta ahí tirado sobre la mesa – porque es lo que debe hacer un padre y antes de que te llenes la cabeza de dudas, mi respuesta es SI, haría lo propio si fueras tu – y eso sorprendió a Lex pero al mismo tiempo lo lleno de paz – por eso iremos todos, para ayudar a tu hermano a Iván – agrego y tras el silencio de Lex preguntó esperanzado – ¿harás eso por mi?... ¿sabes lo que significaría eso para mí? – y Lex negó con la cabeza –  Mucho hijo, mucho, porque como abuelo haber fallado a tu padre en el cuidado de uno de sus hijos es terrible, yo sé que tu padre está muerto, que nunca me reclamara nada, pero es el hecho de que yo lo sepa lo que me atormenta, no voy a dejar esto al aire, voy a mover cielo y tierra para que pueda recobrar la confianza perdida en sí mismo, la calidez, el cariño y la paz, la alegría de vivir y experimentar de tu hermano y sea un poco como tú, aunque sé que nunca le devolveré la inocencia…
• ¿Inocencia? – joder su padre estaba hablando sandeces
• Si hijo inocencia, la inocencia de aprender cosas relacionadas con el sexo y el amor, paso a paso… la que tú tienes – el chico se le quedo mirando como si le hubieran quitado la cabeza – tu aun no has tenido relaciones ¿verdad hijo? – los colores de Lex pintaron un arco iris en su rostro y movió la cabeza negando aquello – tienes edad para experimentar cariño, lo que acabas de decirme hace rato – refiriéndose a lo de masturbarse –  tu hermano se salto todo eso y cayo de golpe al sexo sin consentimiento – y Lex recién se dio cuenta de lo que su padre quiso decir – él a diferencia tuya, nunca podrá experimentar mariposas en el estómago por ver o imaginar a una chica desnuda, la chica que le guste, porque ya sabe cómo es una mujer sin ropa – dijo crudamente, para que adornar – no podrá disfrutar de un beso apasionado porque en su relación con Raquel aquello sobraba – y Lex frunció el ceño preguntándose que como era posible que una relación de dos, sobre un beso, pero no pudo divagar más porque papá hablaba muy convincente reclamando su atención  –  esas cosas que tú piensas y sientes y deseas y vivirás en algún momento, la vida se lo ha negado a Iván cuando esa mujer se cruzo en su camino, para él no hubo, ni habrá nunca más una primera vez de luces de colores o fuegos artificiales, por que las cosas se den en muto entendimiento con alguien de su edad – siguió explicando con voz triste, con un pesar justificado porque la muerte de la inocencia de un niño es para llevar luto largo tiempo – tendrá otras relaciones sexuales a lo largo de su vida, pero no como debió ser, y no sé cómo esta experiencia afecte su desarrollo o afecte a quien se enamore de él, porque el rodo hijo, rodo y de mala manera, tú no tienes idea de las cosas que le hizo – cerro los ojos recordando el examen forense y las declaraciones – ella uso el cuerpo de tu hermano para propio placer – dijo casi con asco recomponiéndose ya no mas antes de agregar – ¿te acuerdas de aquella vez que Iván se salió por la ventana a media noche? ¿y que tuve que recogerlo de la estación policial?, ella lo llamo y lo hizo salir – eso sabia Lex, pero no sabía el resto – y fue ella la que lo denuncio y no solo eso hijo, se quedo a ver que hacía yo con él, para pena y desgracia de tu hermano y culpa para mí, yo le di una paliza allá delante de la policía y de la gente arrestada por lo furioso que estaba y lo mismo paso aquí cuando llegamos – Lex se enteraba ahora las retorcidas idas y venidas de su par con esa loca – y lo de la carretera es un escabroso detalle que me entero recientemente porque Iván está empezando a sacar cosas reprimidas por el miedo que sentía – los ojos se le nublaron al recordar que casi pierde a su hijo en aquel incidente – ella obligaba a tu hermano a bajarse la ropa interior y manejar su automóvil mientras ella primero lo golpeaba con una fusta hasta marcarle la piel, hasta reventarla, tiene un marca fina en la parte alta de su glúteo, eso se lo hizo ella con aquella cosa, y no solo eso, apretaba su pene y lo manipulaba como si fuera la palanca mecánica de la caja de cambios, eso solo es la punta del iceberg… ahora Alexander dime, ¿tú crees que las reacciones de tu hermano sean normales? – Lex se quedo mirando a su padre sufrir por todo eso que le relato y sintió un nudo horrible en el corazón, pero aun así el insistió
• NO, definitivamente no papi. Pero por todo esto que tú haces por él, yo quiero que se disculpe – murmuro medio convencido
• No lo presiones, dejaremos esto así ¿bueno? Y borra de esa cabecita loca tuya  lo de las preferencias – le dijo golpeteando su frente con cariño – mi reacción seria la misma de ser tu el que este en el otro lado de este problema, y ahora que sabes cómo es la situación con tu hermano, te voy a pedir que por favor no vuelvas a insinuar que lo quiero más a él o me enojare de veras contigo, así que tu deja que con la guía del psicólogo se resuelva este problema
• ¿Y si nunca se disculpa? ¿Si nunca lo hace? – pregunto Lex con una nueva preocupación dentro suyo
• Todos nos disculpamos tarde o temprano hijo – respondió con una firmeza férrea, lo sabía por experiencia propia – tu padre tardo 15 años para disculparse de mí, y tus abuelos maternos lo mismo 15, todos nos disculpamos en su debido momento ¿bueno?

Y le beso la frente, y lo abrazo con fuerza y con amor, y le hizo carantoñas en el pelo, y le jalo la nariz para esconderla entre los dedos, y lo arrullo en su pecho y lo hizo sentir niño, amado, amparado, frágil, dulce y feliz…

• Discúlpame papi, no debí decir lo que dije entre dientes – lo abrazo con fuerza y le beso la mejilla y bajo la vista avergonzado después de pararse de las faldas de su padre
• Disculpa aceptada, pero la próxima Lex, te volare los dientes de un guantazo y te dejare en el culo mi piel colada de los palmetazos que te voy a dar – contesto serio, para luego abrazar una vez más a su juvenil retoño, suspirando, ahora debía ir por el otro crio
• No habrá una próxima vez, palabra de honor – contesto Lex con la mano en el pecho muy afectado por la conversación sostenida con su padre
• ¿Ni para hacerme renegar ni un poquito siquiera? – sonrió su padre convencido de que aquella promesa, era eso, un promesa como otra cualquiera que te dice tengo intensión pero no tanta firmeza
• Ni para hacerte renegar – agrego convencido Lex
• Ya veremos

Intensión sana hubo, fuerza de voluntad también, pero la contraparte involucrada no estaba al tanto de eso, Iván… Iván simplemente se dejo llevar y al medio día los platos volaron de la mesa y algunos fideos quedaron en la cabeza, lo que empujo a Rubén a hacer su maleta e irse a la ciudad por unos días antes de tomar por el poto a ambos y sentarlos sobre el fogón de su mano, lo que dejo obviamente camino libre a Clara para ser quien ponga fin a los desmadres de ambos, o mejor dicho del trío; psicólogo o no de por medio…

Pero antes, en la hacienda florecerían algunos pimpollos de rubicundo color… bajo la paleta de un singular pintor.