Mis Gemelos
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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 05 de Mayo del 2016
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Capítulo # 200
En manos de la parca
Autora: Marambra
Logan abrió los ojos confundido y asustado al
sentir en su costado un golpe que le dolió las costillas, estuvo tentado a
devolver el golpe creyendo que lo atacaban, atajando el puñete que de haberlo
dado hubiese roto la nariz de quien estaba a su lado… y quien estaba a su lado
era nada menos que uno de sus hijos: Alexander… que para los efectos y asombro
de Logan dormía plácidamente ajeno de las negras intenciones de su padre al
recibir aquel codazo, y dormía en posición fetal abrazando la almohada que le
quitara en algún momento de la noche causándole un moderado dolor cervical,
recordando con cariño que a su hijo
desde siempre le gustaba dormir lleno de almohadas lo mismo que Iván
solo que Alexander las abrazaba e Iván las colocaba entre sus piernas y giraban
con ellas en toda la cama, al parecer no habían perdido el hábito… pero que
rico dormir con su cachorro a su lado, sintiendo su tibieza, su olor… mezcla de
niño y hombrecito a la vez, aun conservaba ese olorcillo lácteo en la cabeza
sutil como cuando era un bebé, aroma que quería perderse por momentos opacado
por el suave olor al sudorcillo que empezaba a comandar los recovecos de ambos
adolescentes y se quedo mirándolo en silencio, recorriendo con la mirada los
detalles de su rostro infanto juvenil a merced del sueño, su pequeña y
respingada naricita cubierta de algunas pecas, su pelo suave al tacto de tono
castaño claro, su piel ahora dorada de sol y de monte tenía el brillo cobrizo
de las mangas maduras que contrastaban con la suave felpa de vellitos rubios
que cubría sus antebrazos y sus desgarbadas piernas que mostraban unos pies
finos cuyo beso de sol quemo los exteriores de las franciscanas y parecía que
tuviera unas sandalias hechas de piel blanca, no pudo con la tentación y beso
su mejillas sonrosadas sintiendo el tibio aliento de la entreabierta boca de su
hijo, y acaricio su pelo con suavidad lo mismo que sus hombros, hasta incluso
beso el trozo de espalda flaca que quedo descubierta al girarse dejando a la
vista buen tramo de piel desnuda, admirado de que su hijo no se levante para
nada… bueno siempre tuvo el sueño pesado pensó dentro de sí… siempre fue más
dormilón que Iván
Un
enorme bostezo lo acudió de cansancio y fue entonces que se fijo en la hora,
eran las 5 de la madrugada, que poco había dormido, apenas tres horas y aun
cuando el cansancio lo debilitaba no pudo volver a dormir pensando en todo lo
que quería hacer y no podía y se quedo mirando la ventana, la pálida luz del
horizonte bañaba los campos de su padre de un tono amarillo suave como las
mechas doradas de la sien de sus hijos y cerró los ojos recordando su infancia,
concentrándose en todos los ruidos y aromas ambientales, un golpe de aire
fresco con olor a hierba segada le inundo la nariz y el trinar de aguateros en
las copas de los árboles le supo subliminal, era el canto de la paz, de la
serenidad y la reflexión lo que lo envolvían acorralando su corazón en un
galope de angustia en un momento dado; quería quedarse a vivir ahí con su padre
su madre y sus hijos, quería dejar la vida o más bien la imitación de vida que
venía arrastrando desde hace unos seis a siete meses atrás y dedicarse única y
exclusivamente a sus gemelos, a reconstruir su vida, lejos de la inmundicia del
mundo que le toco experimentar y olvidarse de todo lo malo que lo acechaba.
Exhalo
un suspiro, incorporándose del lecho, acomodando a su hijo para que no caiga,
esbozando una sonrisa ante aquello, era imposible que eso suceda, era un
adolescente que sabía bien medir los espacios del lecho y controlar sus giros,
no se caería de aquel lugar, y menos con semejante espacio, era una cama
matrimonial, la misma en la que muchas noches fuera confinado con su hermano a
manera de castigo por el mal asunto de la pedrada a Rubén; si tan solo supiera
Logan las de Caín que vivieron su padre y sus gemelos en esos largos seis meses
de adaptación y reconocimiento de terreno, ufff, quedaría sorprendido de todo
lo que sus hijos eran capaces de hacer, sobre todo Iván, salvaje cuando la
rabia lo cegaba, leal cuando el amor le era entregado en bandeja como lo hizo
su abuelo y su abuela, algodón de azúcar después de una palicita y casi siempre
taciturno y tranquilo que por lo general se deleitaba con pequeñas cosas como
su hermano Lex…
Alexander
arrebato casi siempre, volcán de emociones y de risa que reventaba a mitad de
la nada y por mínimas gracias, era el corazón de su abuelo, el motor de su
alegría, solo Dios sabía cómo Rubén había vuelto a vivir cuando ese par de
niños regreso a su lado, al hogar del que nunca debieron salir y más bien
disfrutar y sobre todo cuando vislumbro en él la rebeldía de su propio hijo;
solo Dios sabía cómo rejuveneció su alma vieja y melancólica, dejando caer poco
a poco las capas de amargura y tristeza que lo envolvían hasta hacerlo gris,
toda la casa se renovó con ellos, no había
rincón que no estallara en gritos de alegría y risas por doquier, no había
rincón donde no estuviera la huella de su paso como un pequeño huracán, ambos
eran la Vitalidad misma de aquel
hogar itspassuenucleatur(su razón de
ser)para ser exactos y eso era algo que Logan descubriría recién; mientras
tanto trato de dormir, se acomodo lo mejor que pudo, pero oír murmurar a su
hijo y verlo sonreír de dormido disipo su sueño y simplemente se quedo
meditando en todo lo que había pasado desde que fingiera su muerte, pensando en
sus hijos, en su padre y sobre en lo que paso la noche previa, en como termino
durmiendo con Alexander a su lado y empeorando las cosas con Iván……
……Contra
todo pronóstico Logan había ingresado de nuevo a la alcoba de Iván, insistiendo
en su encomienda de que tenía que hablar con él y se volvió a esconder, era su
desesperación lo que lo estaba orillando al límite de lo aceptable sin ponerse
a pensar que lo único que lograba sería empeorar las cosas con su hijo, pero
igual se arriesgo y lo espero en la alcoba contando las horas, los minutos para
hablar con él; hacia mucho que Rubén y los chicos dejaron de jugar en el agua y
subieron todos a la planta alta, entre risas y saltos, ambos muchachos se
topeteaban entre sí hombro con hombro y hacían lo mismo a papá; escondido tras
las sombras como un vulgar ladrón Logan contemplo la escena en una mezcla
angustiosa de amor y soledad, reviviendo en aquellos actos los suyos propios…
cuantas veces, tardes, mañanas o noches, corría dando saltos y grititos de
alegría al ver a su padre a su gran héroe llegar del trabajo todo sudoroso y
quemado, lleno de tierra o bosta en la cara y las manos y aun así papá lo
alzaba en sus brazos a lo alto haciéndole dar vueltas varias veces bajo un sol
de mediodía que quemaba todo a su paso incluso su piel y al bajarlo después de
muchas risas le regaba la frente de besos y dulzura, cuantas noches lo arrullo
en su regazo y lo insto a dormir en sus años de infancia y durante su ingreso a
la adolescencia antes de María y el nacimiento de los gemelos, aquel entonces
si bien ya no lo alzaba en brazos lo aplastaba en ellos como una enorme boa
constrictora y tras al asfixiante abrazo depositaba un solitario beso en su
frente mientras agarraba su cara entre sus manos grandes callosa y sucias
diciéndole… ay carajito, no sabes cuánto
te quiero; y de verdad no lo sabía, aun ahora no lo sabía y el recuerdo de
aquello trajo otro recuerdo a colación, la hora de dormir… antes de dormir su padre tenía un ritual con
él, se sentaba en su cama mientras él se acostaba y hablaban de lo que había
hecho bien o mal, reflexionándolo sin llegar nunca a darle un solo azote y
luego le hacía juntar sus manos en acto de oración y rezaban ambos un padre
nuestro a media voz, en realidad papá rezaba y él era el eco de aquellas
palabras dichas con solemnidad, quien lo pensaría o se imaginaria, pero Rubén
era muy católico, tras eso lo arropaba pero no abandonaba la alcoba, se quedaba
ahí en silencio viendo como el sueño empezaba a vencerlo y él veía velarse la imagen
de su padre tras sus párpados cansados, pero otras tantas ocasiones en las que
el sueño no lo quería todavía pillo a su padre mirándolo en silencio sin decir
absolutamente nada y solo le sonreía y esa sonrisa lo sabía ahora era su sol
privado, la sonrisa de papá enigmática y suave le daba a él la seguridad que
todo niño debe gozar, la seguridad de sentirse amado, querido, protegido,
adorado, cuidado con esmero, atesorado como la propiedad privada más valiosa
que haya en la vida de una persona; algo que él negó a sus hijos por seis
largos y tristes meses... algo que él les negó y sin embargo encontraron ambos
a raudos con su abuelo.
Y
por esa lógica, era que ahora quería encontrar un vínculo con sus gemelos ese
mismo vínculo que veía y sentía entre su padre y sus propios hijos, ver a sus
muchachos apretar a Rubén con sus hombros y éste pasar el brazo encima de sus
niños fue un bocado que se le antojo único y delicioso y lo aguijoneo de
desespero… ojala nunca se hubiera ido, ojala nunca hubiera tenido que abandonar
a sus hijos como lo hizo en un acto desesperado y fuera de control, pero que
remedio, ahí estaba ahora mendigando tras las cortinas acariciar con la mirada
la piel de sus niños, su pelo, sus ojos, sus formas, agudizando el oído para
escuchar su voz y su risa como la de Alexander o su enojo y su llanto como
ocurrió con Iván…
Iván…
Iván… Iván… su niño amado, su dolor de cabeza, su talón de Aquiles, tenía que
pillar el modo de engranar los ejes de su carreta con las ruedas de su hijo o
todo se iría a la deriva… es más él ya estaba a la deriva, pensó y sus hijos
eran su ancla.
- Mañana entonces hacemos la jaula gigante papi – oyó la voz de Iván dirigida a su padre al pie del umbral bamboleándose sobre sus talones, totalmente ajeno a Logan, se olvido por completo de su presencia estando en la piscina con su hermano y su abuelo; como le hubiera gustado a él unirse a ese plan y ser uno más en la familia – no me vayas a decir que tienes reunión, sino me enojo contigo – sentencio seriamente a su padre y Logan esbozo una sonrisa, reconociendo los signos de aquella seguridad, era la seguridad de saberse mimado y amado, el también solía dejar caer pequeñas ordenes déspotas a su padre confiado en el amor que este le tenía a la misma edad
- Está bien Iván, está bien… iremos a comprar los materiales en la mañana – respondió su abuelo besando su frente y Logan suspiro, quien lo diría, ahí estaba él oyendo la voz calmada de su padre responder al capricho de su hijo, un hijo al que la tarde previa ese mismo hombre le diera una paliza con el cinturón, si no era que lo veía por sus propios ojos, nunca lo hubiese creído de un tercero – pero nos levantaremos muy temprano y me acompañaras a la ciudad llamaremos a un soldador para que nos haga la estructura – agrego su padre pensando si debía o no decirle además que iban a ir a la policía y dejar el chip en sus manos, pero prefirió guardarse eso para sí, para que atormentarlo desde ahora?, total solo fue una llamada, no otra cosa
- ¿Y compraremos pajaritos? – preguntaron a coro Lex e Iván
- Si nos alcanza el tiempo claro, pero de ti depende – aseguro apuntando a Iván – ahora vamos a dormir es tardísimo
- Yo voy enseguida, voy a hacer dormir al pequeño – contesto Lex cargando al cachorro con delicadeza
- No te tardes Alexander, que mañana mamá tiene unas tareas para ti – agrego Rubén para disgusto de Lex, era el castigo por fastidiar con el profesor de nivelación
- ¡¡OJJJJ PAPAAA!! – se puso rígido, eso no era nada bueno, doña Clarita era muy imaginativa a la hora de castigar y Logan adivino que no le hizo gracia la noticia
- Es lo que hay Lex, no te quejes y no te tardes, tu madre no anda con muy buen humor ahora, así que no tientes al destino…
Y
Logan sintió el agudo dolor de la angustia picarle la boca del estómago, al
saber que la hora de la verdad se estaba acercando lo mismo que los pasos de su
hijo junto a los de su padre y se metió tras la puerta del dormitorio entre
ella y el gran ventanal y ese espacio de estantería llena de libros en Inglés,
Alemán y Castellano, al parecer su hijo se decantaba por los idiomas; los
ruidos se hacían más cercanos y el estrés empezó a devorarlo, relamió los
labios y se miro las manos sudorosas llenas de cicatrices en el dorso lo mismo
que sus muñecas ennegreciendo los ojos con el triste recuerdo, de pronto la
puerta se abrió y dio paso a su niño hermoso, ¡por Dios que grande que estaba!,
le llegaba al mentón de su padre que ingreso con él, con el brazo sobre los
hombros de su muchacho como un guardián y el alma se le helo cuando Rubén
empezó a recorrer la habitación mientras Iván se desnudaba para bañarse, lo vio
sentado en la cama apurando por sus caderas el delgado bañador quedándose semi
desnudo con solo los calzoncillo que seguro no se animo a quitar delante de su
padre.
- Estas húmedo hijo, no te sientes en la cama con la ropa mojada – oyó a su padre decir a tiempo que sacaba un pijama de algodón – toma esto Iván
- Me voy a bañar primero papá – dijo Iván dubitativo para finalmente quitarse la última prenda de encima quedándose parado en medio de la habitación como Dios lo trajo al mundo agarrando la toalla limpia que su abuelo le entrego, Logan lo miro en la distancia, su hijo empezó a desarrollar, en los pocos meses que se separo de ellos incluso le había desarrollado vello en las axilas
- Espera – hablo Rubén y se acerco a él girándolo para examinarlo – mmm – murmuro subiendo un poco el borde inferior de la toalla para ver sus muslos no el trasero cuidado del pudor de su niño, pasando los dedos por la roncha marcada en la mitad del mismo, sin duda la marca de la paliza ganada de la nada en horas de la tarde – voy a traerte una crema, mientras entra a la ducha, que yo no tardo nada – y miro su reloj, era casi media noche y con un último cariño despacho al muchacho al baño, mientras Alexander empezaba a meter el canasto del cachorro a su alcoba – epa epa epa… ¿a dónde crees que vas con eso Lex? – oyó a su padre formular la pregunta ya en el pasillo y se lo imagino incluso elevando una ceja en clara negativa, no iba a permitir aquello, los perros duermen afuera recordó Logan
- Pero paaaapi, ¡es un bebé! – expreso apretando al perro en su regazo dejando el canasto en el umbral de su alcoba
- No Lex, eso no, acomoda al carrocho afuera, sino tu madre pegara el grito al cielo y mañana tendrás la desagradable tarea de limpiar lo que ese perro destroce por no mencionar el resto de las cosas que haga
- Pero papá… va a llorar – respondió muy preocupado
- Alexander Hansen – dijo Clara en la puerta de su alcoba con un vaso de leche en la mano tanto para él como para Iván – ni se te ocurra meter a ese chucho a tu alcoba, el perro duerme afuera
- Pero es muy chiquitito mami no te da penita dejarlo afuera? – dijo agarrando al chuche cerca de su cara mientras el perro mimoso aullaba de puro mimo – la Quimera lo morderá
- Igual el perro duerme afuera y no se hable más, lleva su canasta debajo de las gradas y ponle periódicos para que haga pis ya mañana veremos cómo lo acomodamos – mamá apaciguó el enfado
- Pero la Quimera… – realmente temía que la perra de la casa lastime al cachorro, ya que era una perra malhumorada
- No le hará nada – fue Rubén quien quito sus miedos – nunca muerde a los cachorros
- Vamos hijo, es por el bien del perrito, debe acostumbrarse a dormir afuera – dijo su madre conciliadora – no quiero verlo dentro de la casa y menos en la cama, ya tenemos suficiente con sus pajarracos – dijo haciendo alusión a los pajarillos que trajeron de Chochi
- Oh, no los llames así, son pajaritos – defendió Lex agregando ya no más – ¿y si lo baño mamá? Y le lavo los dientes... estará limpiecito
- No, igual duerme afuera – sentencio Clara imaginando aquello, y le dio ganas de vomitar
- Papa di algo… por favor solo esta noche – rogo a su padre pero Rubén permaneció imperturbable, para él como para Clara era antihigiénico tener una mascota dentro de la vivienda recordó Logan… peor ponerlos en la cama, sillas o sillones, era repugnante
- No hijo, lo siento… tu madre ha hablado y yo le doy todo mi apoyo – respondió calmadamente el patriarca de la casa – los perros duermen fuera, pero mañana podremos ver donde le hacemos una casita que se pueda lavar por dentro, desinfectar y fumigar para evitar que tu cachorro se enferme – trato de contentar con eso al mayor de los gemelos – y le daremos su primer baño y en la tarde podemos llamar al Dr. Lopez para que te lo examine, desparasite y vacune, está bien? – y un beso se estampo en su frente – además está haciendo calor para que lo metas dentro
- ¡¡¡Oh!!! Qué remedio – contesto disconforme
- Vamos, yo te ayudo
Se
oyó decir a Clara dejando la leche en el velador de Lex y de Iván para luego
acompañar a su hijo a acomodar al nuevo miembro de la familia, Logan se
distrajo con aquella escena imaginada ya que no podía arriesgarse a que su
padre lo pille espiando, pero se deleito de la relación tan cálida que sus
padres mantenían con sus hijos… y que esperaba se pregunto, ¿que los
maltraten?, pero que idiota, si el mismo dejo estipulado la custodia de sus
hijos al 100 % a sus propios padres, prácticamente cedió derechos, de estar vivo y entablar un juicio seguro perdía
la custodia por el minio detalle de su
muerte, pensaba, pero de pronto la puerta se abrió rompiendo el hilo de sus
pensamientos cuando vio a su padre reingresar a la alcoba con algo en la mano
mientras todavía el agua corría en la ducha
- No te tardes Iván, es casi media noche y mañana hay que madrugar – le oyó decir golpeando con los nudillos la puerta
- Ya salgo papi, me sacas una polera para dormir? – se oyó a Iván mientras cerraba el grifo
Y
fue testigo de lo paso después, Iván salió del baño envuelto en una pequeña
toalla alrededor de sus caderas, como un tipo grande sujetando el trapo a la
altura del paquete, cubierto el resto de gotitas de agua; por detrás cualquiera
diría que tenía 18 o 19 años por su altura, pero aquel nimio detalle despareció
apenas Rubén se acerco a su hijo y empezó a secarle la cabeza y el cuerpo
vigorosamente con otra toalla mientras Iván se sentó en la cama para hacer lo
mismo con sus pies, lo ayudo a vestirse poniéndole la polera mientras Iván se
subía el pijama de dormir sin calzoncillos debajo
- Date vuelta y deja ver – ordeno Rubén
- No paa deja, no es necesario – respondió Iván queriendo huir debajo de las sábanas, pero Rubén fue más rápido atrapo una de las piernas del muchacho y lo giro boca abajo bajándole el pijama y la polera al mismo tiempo tras una mirada a vuelo de pájaro sobre el trasero de Iván en el que apreciaban pequeñas huellas del desalmado cinturón
- Yo decido lo que es necesario – respondió su padre y a Iván no le quedo otra que tumbarse boca abajo sobre el lecho mientras su padre examinaba la piel, abriendo ya no más el pote de crema y cubriendo con la toalla el trasero de su hijo bromeando al respecto – ala, a cubrir el poto, no vaya a ser que mi mano se sienta tentado de darte una repasada – y beso rápidamente la cabeza de Iván que se giro para salir de su escondite y mirar a su padre con los ojos agrandados – vamos hijo es una broma, se que te da vergüenza
Y
le acaricio el pelo y empezó a expandir el ungüento sobre el muslo izquierdo
que era el que más rojo estaba, sobre todo en aquella huella rectangular que
nítidamente se dibujada en doble relieve, se notaba que dos veces el cinto beso
casi con precisión el mismo lugar, e Iván se dejo hacer, se empezó a relajar y
entrecerrar los ojos al calor de las caricias de su padre sobre la zona
azotada, sin embargo su padre no hizo ni el intento de ponerle la crema sobre
los glúteos, el nunca tocaba las intimidades de sus niños por pudor y solo
cuando los castigaba o iba al médico era que los veía en paños menores o rozaba
la piel de aquel lugar o mejor dicho quemaba aquel lugar con una palmada
- Listo ahora toma tu leche y a lavarte los dientes hijo
Y
subió el pijama hasta cierta parte dejando que Iván haga el resto debajo de la
toalla, Logan creyó que ahora su padre abandonaría la estancia, pero no,
deambulo de un lado a otro colocando en su lugar las pequeñas cosas que
encontraba en el camino, básicamente la ropa sucia y húmeda de Iván que
haciendo caso a su padre se tomo su leche y se perdió en el baño nuevamente
reapareciendo a los pocos minutos para acostarse, y fue cuando el corazón de
Logan se oprimió en el pecho del puro amor, del puro recuerdo, de la pura pena,
su padre espero que Iván se acueste y antes de arroparlo se sentó a su lado
como tantas veces en el pasado
- ¿Algo que decir? – inquirió arreglando su pelo despeinado – alguna duda?
- No papá, todo bien – sonrió Iván apoyando la cabeza en la almohada cubierta por una toalla seca que coloco Rubén para no humedecer las plumas, los ojos se le velaban del sueño y estaban hinchados por el llanto de la tarde pero ya no estaban rojos
- Bien entonces, mañana tu y yo señorcito, iremos primero a comprar los materiales para que no nos pille el calor y luego iremos a la policía
- Paaaa – e Iván se incorporo como rebotado de su cama, eso no se lo esperaba
- Shuuuu – puso un dedo sobre su boca – solo entregaremos ese chip como prueba, nada más, no van a interrogarte, ni a hacerte ningún examen médico como la primera vez – y Logan frunció el ceño, ¿que era todo eso?, ¿examen médico?, ¿en la policía?, ¿qué estaba pasando?, el no tenía conocimiento de aquello
- ¿Me lo prometes? – Iván agarro con fuerza las manos de su abuelo y como siempre llevo la diestra a su cara como buscando una caricia que no se hizo esperar
- Vamos Iván, no te van a hacer nada por recibir una maliciosa llamada de teléfono – aseguro cogiendo su cara con ambas manos, besando su frente y su corona – ahora a dormir ¿si?, nos espera un largo día con la jaula gigante – sonrió y sello la noche y su amor por su nieto/hijo con aquella señal de la cruz que dibujo sobre su frente – en Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo – recito
- Amen – contesto Iván besando la palma de su abuelo y abrazándolo fuertemente, era ese abrazo de miedo a la incertidumbre, miedo al vacío, miedo a quedarse solo de nuevo, miedo a su padre biológico, pero más que a eso a las intenciones de Logan, el no quería hablar con su padre porque no quería oírle decir que regresarían a Londres, el no quería volver a ese país y menos separase de su abuelo…
Logan
observo todo aquello desde un rincón con el corazón sobrecogido y tuvo que
esconderse por casi una hora hasta que la casa quedo envuelta en una gran
oscuridad, a lo lejos se podía ver el relampagueo del cielo en los fondos lejos
de la hacienda, pero la negrura de las nubes oculto la luna y finalmente todo
estuvo en tinieblas y cuando tuvo la certeza de que toda la casa dormía cerró
la puerta por dentro como la tarde previa, él se hizo con la llave, la misma
que se quedo en el cerrojo y no iba a soltarla, era su pasaporte a la solución
de sus problemas, o por lo menos eso pensaba y sin más pérdida de tiempo se
acerco a su hijo y le tapo la boca como ocurrió en la tarde, Iván se sobresalto
en su lecho atragantándose y casi sintió morir del susto vivido, el corazón le
latía a mil por hora y los ojos se abrieron en un exabrupto horrendo
- Shuuu shuuu no te voy a hacer nada hijo, nada, solo quiero hablar contigo, quiero disculparme, pero por favor no grites – susurro al oído sin percatarse de que su hijo no podía respirar ni tragar saliva solo oía unos ruidos guturales amortiguados en su palma que cubría todo
- Guiiiiii ajjjjj ajjjjjjjjjjjjj – se estaba ahogando bajo las manos de su padre, Logan no solo le tapo la boca sino nariz sin querer, prácticamente la mitad de la cara estaba cubierta y en esa oscuridad no se dio cuenta de lo que estaba haciendo
- Calma Iván, por favor, solo quiero hablar contigo, explicarte porque me fui
Le
rogaba con la voz entrecortada en medio de aquella cama sintiendo batallar el
cuerpo de su muchacho por soltarse, creyendo que quería huir y para que no
grite apretó un poco más la fuerza de sus manos creyendo que solo le tapaba la
boca sin darse cuenta que le obstaculizaba el ingreso de aire, e Iván en un
intento desesperado por soltarse lo cogió de la muñecas tratando de liberarse,
llego a rascarlo incluso, intentó morderlo lastimándose la boca pero sin éxito
y ante la falta de aire tragaba con dificultad su propia saliva y empezó a
patalear desesperadamente, ignorando que con aquellos movimientos se iba
consumiendo el poco oxigeno que le quedaba circulando lo mismo que el azúcar se
le iba bajando… se estaba quedando sin opciones, se iba a morir, se sintió
morir y eso lo asusto peor, era una angustiante sensación de vacío en el
vientre que se expandía por todo el cuerpo, pequeños puntitos de luz se
prendieron ante sus ojos que poco a poco se fueron apagando, mientras su
corazón se exaltaba más y más golpeando su esternón por dentro como si quisiera
escapar al querer compensar la señal de alarma de su cerebro, luego le vino un
adormecimiento en la cara e iba generalizándose por todo el cuerpo que lo hizo
presa del pánico, un horrible hormigueo que empezó en la lengua, los ojos, las
manos, los piel, empezó a sudar frio y finalmente empezó a perder fuerza
quedándose quieto ya; fue ahí que Logan lo soltó creyendo que su hijo había entendido
que venía a hacer las paces y prendió la luz de la pequeña lámpara en una
decisión de último momento creyendo que si le veía a la cara podría convencerlo
mucho más rápido que un monologo en la oscuridad y fue cuando la pesadilla se
rebeló ante sus ojos, su hijo estaba cianótico con la pupilas empezando a
dilatar…
- ¡¡¡OOOhhh!!! por Dios, por Dios que hice – una enorme sacudida le recorrió el cuerpo como un garrotazo, su hijo había perdido el conocimiento, se estaba muriendo y eso lo supo por la cérea palidez de sus mejillas que contrastaban con las mucosas violáceas, no sabía qué hacer, sus manos le temblaban, el cuerpo le temblaba y saco valor de donde no tenía, no iba a permitir que su hijo se muera y menos en sus manos y por su propia mano y en un momento de estrés extremo cargo a su hijo y lo bajo al suelo y empezó a maniobrar sobre él subiéndole la ropa, pegando el oído sobre su corazón que empezó a patalear adentro por falta de oxigeno, si no hacia algo el corazón de su hijo sufriría un infarto masivo, recorrió el oído a los pulmones pero no los oía y fue cuando empezó a darle respiración boca a boca mientras rogaba a Dios que lo perdone y lo ayude, sobre todo esto último, que ya de antemano sabía que con esto iba a ser imposible hacer las paces con su niño, pero nada de eso importaba ya, nada… solo que su Iván no se muera – vamos, vamos Iván, mi vida, respira…. Respiraaaa – gemía sin dejar lo suyo hasta que por fin Iván ingreso una bocanada de aire por si solo que sonó horrendamente como si le cortaran la tráquea y los pulmones doliendo hasta el alma… el dolor fue tan agudo y tan feo como se oyó aquello, tras eso empezó a toser con desespero y dolor agarrándose el pecho queriendo frotarse por dentro
- COOOFF COFGF COFF AJJJ – y Logan empezó a llorar
- Perdón, perdón, perdón hijo, perdón – musito mientras aplasto la cabeza de Iván a su pecho tratando de apretar un abrazo a su hijo, quería tenerlo cerca, sentirlo cerca y fuera de peligro pero Iván al darse cuenta de lo que acababa de suceder lo empujo con fuerza y corrió a la puerta en medio de tropezones sin dejar de toser y a girar la perilla con desespero, quería salir de allá, quería ir donde su padre
- Coff COOOOFFF COOFF AGGG AGGG SUEEELTAAA, SUEEELLLATAAA PAPAAAA, PAAAPAAAA AUXIIILIO, AUUUXILIO – empezó a gritar y Logan se quedo ahí parado sin hacer nada, ya nada importaba, se asusto tremendamente de lo que acababa de hacer, casi mata a su propio hijo asfixiado por su estupidez, por su soberana estupidez – AGG AJJJ PAPAAA, PAAAPAAAA – Iván estaba fuera de sí, girando la perilla golpeando la puerta desde adentro quería derribar aquello
- IVÁAAAN, IVÁAAN – se oyó del otro lado a Rubén que salto de la cama al oír su llamado, maniobraba la perilla tratando de hacer lo contrario… entrar, maldiciendo porque alguien cerró la puerta; y sin saber cómo o que paso, que sucedió, si la puerta cedió de tanto maniobrar o si Iván se percato de la llave, nadie lo sabría la puerta por fin dio paso a su padre, Rubén logro ingresar y prender la luz de la alcoba iluminando todo
- AAAHHHHHH AJJJJ PAPAA – no necesitaba decir otra cosa y se aferro a su padre como una constrictora a su presa, apretando fuertemente y ese grito alarmo a Rubén que de inmediato empezó a tocar el cuerpo buscando señales de peligro
- ¿ESTAS BIEN? – preguntaba alerta a los gestos de su hijo, pensando que quizás le pico algún insecto que se coló en la casa, incluso una víbora – ¿ESTAS BIEN?... RESPONDE pues hijo, responde, ¿estás bien? – ordeno sujetándolo de los hombros
- No lo seee – musito asustado, todavía en shock sin saber si estaba soñando o era real lo que acababa de pasar – no sé lo que pasooo no lo seee agggg aahhhhahhh – y no dejo de llorar lo que claro desespero a Rubén quien aún con el susto en el cuerpo sintió transformar su miedo, su desespero y su incertidumbre en enfado; lo que mucha gente hace, reaccionar impredeciblemente y eso paso, lo agarro de los hombros y lo sacudió en un reclamo que le temblaba el vientre
- PERO QUE CARAJOS – reclamo – Y TODAVÍA CIERRAS LA PUERTA, CUANTAS VECES TE DIJE QUE NO LA CIERRES POR DENTRO PLAF PLAF PLAF – no había dudado en calcar aquellos tres azotes en medio del trasero con bastante fuerza sobre la ropa ardiendo la piel debajo de la fina tela – NO SABES HACER CASO, DESOBEDIENTE – e Iván solo atino a llorar sin decir una sola palabra parado ahí en medio de la nada con los brazos abiertos como si alguien lo hubiera dejado en penitencia o le negara un abrazo
- Aaaayyy ayyy agggjjjj – y ese llanto en voz baja hizo que Rubén aun sin calmarse lo apreté contra su cuerpo para confortarlo y tranquilizarlo, sintiendo que su hijo estaba temblando como una hoja de papel, blanco del susto vivido con el pelo sudoroso y apelmazado, la cara toda roja y la nariz con sangre
- Yaaa, ya Iván ya, ya paso hijo – musito besando su cabeza separándolo un poco de su abrazo para poder verlo bien y hablar con él viendo al guiñapo que era Iván ese momento, estaba como encogido entre sus hombros con la cara congestionada, algo hinchada y llena de mocos – me diste un susto chango y porra – y lo abrazo de nuevo sentándose en la cama para acostarlo, pero Iván no decía nada solo lloraba sentando en la cama
- Bambi te está sangrando la nariz – fue Lex quien se percato de ese detalle, dejando en el piso al cachorro que metiera clandestinamente a su alcoba, acercándose a su hermano, fijándose que no era su nariz sino su boca la que sangraba, se había mordido por querer morder a su padre y liberarse
- Vaya, no es tu nariz hijo, es tu boca – Rubén frunció el ceño fijándose recién en la leve equimosis de los labios, ¿sería que se golpeo estando dormido?, se preguntaba Rubén – ¿te mordiste la boca?, ¿te golpeaste?, ¿qué paso hijo? – Rubén le fue limpiando los ojos con un pañuelo que saco del velador y lo acerco a su lado tumbándolo en la cama para ver mejor sus heridas, tenía la nariz enrojecida, el labio hinchado y al levantarlo, la mucosa estaba totalmente magullada, mordida en realidad, casi se arranca un buen pedazo
- ¿Te ha vuelto a dar pesadillas? – inquirió Lex preocupado por su par muy confundido por su reacción, solía tener episodios de terror nocturno, pero nunca como aquel, además parecía que los había superado, prácticamente desde que hiciera las paces con su abuelo – mmm? ¿Qué te paso? – y fue cuando decidió hablar, contar su versión
- Aaaallll alll alguien quiiisooo ma… maa matarmeee, alguieeen mee aaataco – contesto con tal convicción que otro en su lugar le hubiera creído, pero vamos la habitación estaba vacía, estaban en un segundo piso, con el balcón con rejas coloniales, con alarmas por todo lado, nadie había entrado ante los ojos de sus padres y hermano – agggg agg aggg niiifff niifffs – y siguió llorando en medio del shock y fue cuando su padre lo sentó en su rodilla pese al peso y empezó acariciarlo para calmarlo, todos se habían asustado por los gritos de Iván, pero nadie sabía del terror que experimento en carne propia
- ¡¡¡OHH!!! MI HIJO… Shuuuuu no pasa nada, no pasa nada Iván, fue un mal sueño, un mal sueño nada más – le decía mientras lo apretaba sobre su pecho y le besaba la cabeza sintiendo en su propia piel el corazón de Iván acelerado a mil por hora, su hijo estaba realmente asustado y no podía negarlo – vamos a la cama, yo me quedo hasta que te duermas – agrego e Iván se puso como un alacrán
- NOOOOO, NOOO NO QUIERO QUEDAAAARME AQUÍ, NO AQUIII – y se abrazo a él con uñas y dientes es poco, le clavo las uñas a su padre en la espalda, se aferro a él a como un tigre
- Ya yaya cielo calma – dijo su madre abrazándolo también por detrás antes de que Rubén diga algo, adelantándose a todos, en realidad a que Rubén quiera ir hasta el fondo de aquel asunto y se desate una tormenta – ¿quieres ir a la cama con papá? – le pregunto mirando en su rostro una marca equimótica a nivel del labio superior
La
idea salió de ella y por una poderosa razón, intuía que Logan estaba ahí en
algún lugar y que tenía algo que ver con la reacción tan desproporcionada de
Iván, seguro lo asusto mientras dormía pensó mientras buscaba con la mirada al
autor de los hechos sin saber que Logan estaba escondido detrás de la
estantería de libros cubierto por la pesada cortina de noche, mirando cómo en
una pantalla todo lo que sucedía en esa alcoba; y es que él también estaba
conmocionado con lo que había sucedido, estuvo a punto de perder a su hijo y se
miro sus manos en medio de aquella penumbra y le dieron ganas de llorar, casi
mata a su hijo por una estupidez…
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