Mis Gemelos: Cap. 66; Autora Marambra

Mis Gemelos

一一一一一一一一一一一一一一

Los derechos de autor de este texto pertenecen única y exclusivamente a su autor. No pudiendo ser publicada en otra página sin el permiso expreso del mismo.

Las imagenes publicadas no nos pertenecen, son imagenes tomadas de sitios publicos de la Internet, si alguien tiene algun conflicto con eso, comuniquese con nosotros para retirarla de inmediato

Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 24 de Abril de 2016.

一一一一一一一一一一一一一 

Capítulo 66

Libertad condicional 

Autora: Marambra

• Caray Rubén tienes una cara que ni el diablo te aguanta – comento Miguel apenas vio a su amigo aparecer en la puerta con un montón de cosas en la mano y tras de él, un torbellino llamado Lex se abría paso al aire libre con la ropa desarreglada, el pelo desaliñado y mojado, los ojos rojos e hinchados pero con una enorme sonrisa en los labios y cajas en las manos
• Aj, estoy con un horrible dolor de cabeza
• Y seguro ese dolor de cabeza está ahora a punto de correr al corral – miraba de reojo a Lex
• Ay Miguel, a veces Lex es peor que un grano en el culo, JOOOOODEEEE, pero jode con todas sus letras, siempre quiere salirse con la suya… es que si no gana empata el carajo y me hace tronar – se apretaba los ojos, la luz le dolía la mirada, estaba con migraña
• Ya vuelvo pa – interrumpió Lex la charla después de terminar de poner las cosas que su padre le pidió en la vagoneta, se disponía a correr por el campo, parecía un cervatillo descubriendo los límites fuera de su cueva
• HEY, HEY, HEY, ven acá un rato Lex – su padre freno la partida moviendo su dedo en señal de que se acerque y él lo hizo de mala gana, estaban robándole tiempo a su libertad condicional  y luego de que Rubén le sujeto los hombros y le dio un beso en la frente le recomendó con voz pausada – sin loquearte, con mesura ¿si?... No te metas en líos, hagas lo que hagas no te metas en problemas si no, se rompe el trato y tu alargas tu castigo, te voy a esperar en el potrero al medio día, no esperes que te llame Lex y demás está decir que no quiero tus piecitos en el rio, ahora ve, haz lo que quieras – le despidió con un golpeteo en el trasero, si ganas le tenía Rubén de bajarle el pantalón y sonarlo hasta decir basta, pero en vez de eso accedió y Lex corrió camino al potrero, quería montar

El examen de Lex se había postergado 2 semanas más, el director del colegio se había ausentado de la ciudad viajando a Roma por asuntos relacionados con la Iglesia, y bueno, considerando la situación de Lex, que interesantemente había resuelto a la perfección los exámenes de química y matemáticas y no había respondido más que dos oraciones en lenguaje, había llamado a Clara para comunicarle que el examen de idioma se lo tomarían a su regreso, por lo cual tenía un tiempo más que suficiente para repasar pausadamente el castellano y que se alegraba que haya tomado como maestra de apoyo a la señorita Chavarría, excelente maestras del plantel, lo cual supuso para Lex extender el martirio de estudiar con sus padres y la maestra, así que estaba realmente molesto, frustrado, enojado, y parecía una bomba de tiempo a quien alguien había  activado el temporizador y haría en cualquier momento explosión.

Iván por su parte había analizado las palabras de su padre y se había disculpado con mamá sobre su manera de proceder y reaccionar ante la sugerencia de ir a un psicólogo, pero no dio su brazo a torcer en cuanto a eso de acudir a una cita, pero quienes lo hicieron fueron obviamente sus padres, si bien Rubén le había pedido a Iván que le enseñe a caminar en ese campo minado que era el tema tabú para el crío, ellos, habían acudido al psicólogo para recabar ayuda como padres, no era mucho lo que se podía hacer considerando que el principal interesado se negaba de lleno a ir a visitarlo, pero por lo menos tenían pautas de cómo moverse en arenas tan pantanosas como esa, y aquel hombre de ciencia, les había sugerido que cuando más pronto se trate a Iván dentro de lo normal mejor, porque no era bueno crear brechas entre el trato que recibía Lex y el trato de Iván, por lo tanto, habían cosas que no deberían cambiar, y entre esas cosas estaban las responsabilidades, la disciplina, el amor, el cariño, la libertad y las limitaciones que deberían ser las mismas entre hermanos; que Iván no estaba mutilado anímicamente y que no deberían jamás  hacerle creer que tenia preferencia o consideración diferente a Lex, que eso solo lo confundiría no solo a él sino a su par, por lo tanto, el manejo VIP por así decirlo, solo debería limitarse a lo que Iván sugiera en relación con su pasado con Raquel y las situaciones que haya experimentado con ella, que estén de oyentes cuando él quiera hablar, no ahondar si él no lo permitía, eso alivio mucho a los padres y empezaron a crear un ambiente de armonía y bueno, las cosas iban bastante distendidas y casi, casi tildando lo habitual y nada fuera de lo peculiar, porque quiérase o no Iván muy pocas veces mencionaba a Raquel, y se dedico a cultivar la amistad que insípidamente nació entre él y Marcela aprovechando que Lex estaba castigado y esclavo de sus cuadernos de lenguaje.

Rubén estaba ensimismado en su trabajo, la presentación se daría en su casa, los inversionistas eran unos alemanes que daba la coincidencia eran amigos muy allegados a la familia de Rubén, con esta información pues había decidido que la reunión sea informal, y más que una reunión de trabajo sea una social por lo que tendrían una presentación de las propuestas en el salón de conferencias que tenia Rubén en el potrero, hombre previsor y de mucha trayectoria en reuniones, había decidido hace algún tiempo armar una ambiente dedicado exclusivamente a reuniones de trabajo equipado con todo tipo de material audiovisual gigante a manera de cine, y esta reunión ameritaba todo lujo de  detalles; luego de ello podrían disfrutar de una cena velada en honor a los invitados, tertuliar un poco y enterarse de cómo andaba su familia a la que no veía hace mas de 17 años.

Alexander estaba extremadamente nervioso, todas las tardes iba con su padre a practicar castellano, y hacia las tareas con la maestra, dictados, frases, reconocimientos de verbos conjugaciones, juego de tiempos en pasado presente y futuro, sujeto y predicado, y todo lo demás que involucre al idioma y le dejaba unas horribles  y complicadas tareas que le rompían el coco al muchacho de lo frustrante que era no el no saber responder rápidamente, sino tener que responder en castellano escrita y oralmente, este ultimo sin líos pero escrita era un martirio, además Clara error ortográfico le hacía repetir cien veces la palabra y si se volvía a equivocar, ella se equivocaba feamente en el trasero del crio con el cepillo, palabra mal escrita, palmetazo recibido deletreando cada palabra en voz alta y boca abajo.

Rubén procuraba hacerle más fácil la vida, pero eso era imposible y no por voluntad de papá sino suya propia, puesto que Lex se empeñaba en complicarse y complicar la vida a todos;  le había dado una tarea facilísima de conjugar en futuro el verbo hacer y el hizo la tarea en el internet ( muy futurista el crio) y Rubén enfadado con él, le decomiso todo artículo de lujo, o sea, fuera televisor, fuera radio, fuera móvil, fuera play, fuera auriculares, fuera laptop y  fuera todo.

• No es justo, no es justo papa, es solo una palabra, ¿por qué me quitas todo? no se vaaaleee – se había sentado en la cama con los brazos cruzados, el ceño fruncido, y la boca en un puchero tonto, mientras veía a su padre que nada cansado desenchufaba todas las pertenencias modernas del crio y se las llevaba a su despacho, le dejaría a este paso con una litera en el suelo para dormir.
• Ya te lo advertí Lex, fraude en las tareas, decomiso de todo lo electrónico – le miro con los ojos enojados
• AGGGG Entonces llévate también la lámpara de noche, así no tengo que leer más esos estúpidos libros que me deja mamá en la cama como un castigo – grito,  se paro y señalo la dichosa lámpara de dormir y la pila de libros, revistas, recortes de periódicos, y todo lo que Clara consideraba podría ayudar en el idioma, vamos que  solo le faltaba la Biblia
• No me levantes la voz, no estás con tus amigotes; ya te lo dije, que si volvías a reincidir y me presentabas una nueva tarea fraudulenta yo te daría un castigo que no te iba a gustar, y bien aquí estamos – le respondió con los brazos en jarra sobre la cintura, molesto ya por el berrinche que se venía venir por parte de su hijo
• Pero es que no es justo, no es justo – levantaba las manos como cuando se festeja un gol en media cancha y empezó a saltar y patear los calzados que él mismo dejaba en el camino, los ojos se le hicieron vidriosos, quería llorar de lo enojado que estaba – son mis cosas no puedes llevártelas – se limpio los ojos con el dorso de las manos las incipientes lágrimas que querían formarse ya
• Si que puedo, yo las pago, así que teóricamente me pertenecen
• Aaaaaa entonces llévate también el foco – había empezado a sacar los focos de las lámparas de pared y del baño
• Suficiente – papá elevo un poco el tono voz a manera de advertencia quedándose quieto para que había Lex, quien increíblemente entendió el mensaje – estas ahogándote en un vaso de agua – comento papá y Lex hizo una mueca que papá logro mirar – no me tientes Lex, NO lo hagas – agrego – que no se que más me voy a sacar de tu cuarto, puede que me anime a sacarte los pantalones y dejarte en bombachas, a ver si te va a gustar – amenazo papá jaloneándole del brazo para que se entere que no estaba para tonterías
• Nif,nif, nif, es que no es justo, son mis cosas – gimió con toda la pena del mundo viendo como papá se las llevaba –  devuélvemelas papá, prometo que hare mi tarea sin traaaammm paaa, por favor  ag agaa gaa – había ya empezado a llorar y se animo a sujetar el brazo de su padre; la enorme presión de aprender el idioma por las buenas o por las malas, estaba empezando a pasar factura en el estado emocional del crio, tildando ya la irritabilidad al menor suspiro; él no podía estar esclavo de su habitación con solo libros, estaba enloqueciéndose ya le habían quitado la posibilidad de salir fuera de casa – es que no se con que voy a divertirme, tu no me dejas salir fuera de estos muros – señalaba las paredes – parezco un reo, me aburro mirando películas solo, Iván se sale todo el día y no tengo con quien jugar aquí adentro, el se mete a su cuarto y esta todo el día con la compu y no le dices nada de nada, en cambio a mi me castigas sin motivo…nif, nif nif mggg mgggg – según él no había motivos para reprenderlo, si era todo un ángel de Dios –  por favor, paaaaapiiiiiiiiiii, no te lleves esoooooooo buaaaaaa mfhmfi, niff niffmmiff buuuurrr – su padre acababa de sacar el cable del internet, ahora si estaba bloqueado totalmente – noooo, por favooooorrr eso noooo, eso nooo, llee vaa teee lo que quieeee ras pero eso nooo, es lo único que me distraaae, por lo menos charlo con mis amigoooos
• Habíamos hablado de esto Lex, o quieres repetir la tunda del otro día – se refería a la paliza que le dio por irse al río –  pero si decides eso voy a mojarte el trasero primero y luego te arranco cada una de las hojas que me has presentado y empiezas la tarea de cero – advirtió – lo que vale decir que mejor te doy un nuevo cuaderno y empezamos desde las vocales, que tengo ganas de oírte deletrearlas en castellano…
• Aaggrrrrrr esto es una porquería, estoy aburrido, ya no quiero ver un solo libro más, por favoorr, por favooorrr – se tiro sin ninguna gracia al piso como un mocoso de kínder abrazando la pierna de su padre que para colmo avanzaba hacia el pasillo cargando el compu en la mano – por favor papaaaaaaaaaa, por faaaa, dame esta última oportunidaaadd, ¿si? – empezó a obstruir el paso a su padre – Voy a rehacer la tareaaa, lo hare solo, pero no te lleves mi compuuuu, aajaja nif, niffff, niiff – al final opto por coerlo de la cintura y no dejarlo salir
• Suelta Alexander – pedía a su padre dando vueltas en círculo –  ¡SUELTA YA! – grito enojado ya y Lex solto a papa de mala gana – estas haciéndome perder el tiempo, tengo un montón de cosas pendientes – anuncio y agrego – te dije lo que tenias que hacer y lo que pasaría, así que limpia esa cara y mete el rabo entre las piernas y a repasar lo que te dio la maestra – sentencio –  porque ya te di tu nueva tarea Lex, y estas sumándote muchos puntos para que te de una paliza – lo amenazo una vez más – me estas llenando – dijo como última cosa

… Y es que Rubén al ver que Lex ni siquiera se tomo la molestia de fijarse que escribir, había copiado propagandas y todo del traductor del internet en su afán de poder atender a su amplio grupo de tertuliantes en la red, sospechosamente  su última y más interesante distracción, no podía colgarse al teléfono a charlar con Marcela porque mamá le había cortado la línea del pasillo en el segundo piso, además a esas horas la muchacha ayudaba a su madre con las cosas de la casa y la comida o en su defecto se daba una escapada y se encontraba furtivamente con Iván y charlaban en la verja de la hacienda, ella todavía no había saltado sobre Iván quería digamos estudiar a su presa, y esperar a la otra, pero como decíamos, Rubén le había dado una nueva tarea para compensar su fraude y era conjugar el verbo escribir en pasado, presente y futuro, pero esta vez sin internet, y Lex no estaba dispuesto a hacer eso y lejos de hacer caso se aferro más a su padre y se empotro en el piso sentado sin dejarlo pasar y sin soltar la pierna de Rubén, y él, ya cansado de lo mismo, coloco la laptop sobre la cómoda de ropa y le jalo la patilla a Lex haciéndolo parar de un solo tirón de lo fuerte que aquello fue y le cumplió lo prometido, como es costumbre en él, hombre de mucha palabra

• Suficiente, me has llenado el buche de piedritas
• AUCHHH, ACUHHC PAAA
• SUELTA PLAF, PLAF PLAF  ponte de pie Lex, ponte de pie, carajo me estás haciendo renegar más de la cuenta – TRES  manotazos en las manos y nada, Lex seguía ahí en lo suyo con los ojos aguados
• BIEN, NO TE QUEJES LUEGO – amenazo muy decidido en su tarea harto de complicarse con Lex, logro que le suelte la pierna pero no que se pare

Rubén lo alzo y a rastras lo llevo al baño, cerró la puerta  con llave y le prendió el grifo de la ducha, pretendía meter a empujones a Alexander que se había agarrado del borde del box de cristal, sabía que haría papa, meterlo al agua y darle unos azotes en el trasero mojado.

• Sueltaaaa – advirtió Rubén esperando que obedezca – hasta contar hasta tres – agrego mirando significativamente a su hijo sin todavía querer ejecutar –  sueeelta Lex… suelta, tengo que preparar una presentación para esta tarde, no estoy jugando – y fue cuando ya rebaso su paciencia – PLAF PLAF PLAF, PLAF
• YO TAMPOCO ESTOY JUGANDO – Lex respondió gritando para que papá lo oiga, pero en cambio fue él, el que oyó la hebilla de papá abrirse y rodar el cuero por los lazos del pantalón y luego vio la mano de su padre con el cinturón meterlo a la ducha – NOOOO, PAPA, POR FAVORRR, POR FAVOR, NOOOO NOOO

Lex tieso como estaba, con los codos rígidos para no permitir que papa lo empuje hacia adentro empezó a rogar del puro susto, en un momento dado no sabía qué hacer… si soltarse y entrar por propia voluntad a la ducha y rendirse a unas nalgadas, o rogar que su padre le dé una oportunidad que parecía no se iba a dar,  porque Rubén muy decidido, empezó a hacer algo fuera de lo habitual, se quito el cinturón del pantalón y para sorpresa del crio que había empezado su pataleta gritando, Rubén cabreado, metió el cinturón bajo el agua, tenía una negra intención, si no podía mojar el receptor trasero de su crio para recibir un escarmiento que arda, mojaría al verdugo y mejoraría la quemadura; si, le daría una paliza con el cinturón mojado a ver si así se moderaba, pero como de costumbre su demonio guardián le soplo al oído la interesante idea de la huida y Lex lo más rápido que pudo, se soltó del box y empujo a papá dentro de la ducha y se disponía a salir.

• Mocoso de mierda – murmuro Rubén enfadado hasta no más mojado de pies a cabeza ¿cómo era posible que fuera tan ulupica?, ja, pero, ya se enteraría, logro abrir el box y salió al encuentro de su querubín que para mal de males estaba jalando el pomo de la puerta, papá previsor había sacado la llave del cerrojo y la tenía en su bolsillo
• Noo, papito, papito por favor, por favor, por favor, por favor, voy  a hacer mi tarea, AUUUU voy a hacer mi tarea AYYYY AYYY AUUU AUUU UUUUU – gritaba aún agarrado del pomo como si por arte de magia aquella puerta se abriera como se abrió para Alicia en el país de las maravillas cuando de pronto sintió la culebra de cuero curtido morderle el trasero
• ZAS, ZAS ZAS, ZAS ZAS

Rubén le había regalado 3 o 4 azotes sobre la ropa, y empezaba a meter los dedos en la bragueta del crio para liberar los botones y el cierre y Lex frunciendo el poto lo mejor que podía y llevando las caderas adelante como si su pelvis tuviera vida, voluntad y pies propios se adelantaban al resto de su cuerpo para escapar, y el diablo, pues nada, el diablo había metido sus manos debajo de sus pantalones para sujetar el slip fuertemente, es más se auto infringía un calzón chino a sí mismo,  ya que papa había logrado volar el botón al suelo y era cuestión de segundos que su ropa pase a mejor vida.

• Nooo, no no no no noooo papaaa, noooo – rogaba como un disco rayado agarrando el calzón a nivel de su elástico como si la vida dependiera de ello
• No que Lex, no ¿qué? Zas, zas zas – Rubén le sujetaba un brazo con mucha fuerza queriendo que saque la mano de debajo del pantalón que estaba a medio camino de bajarse, se había trancado entre las manos del chico y sus caderas, los azotes le llegaron sobre los muslos
• Auuuu, au au au au – se dio la vuelta dando la espalda a la pared y se agacho un poco buscando la manera de esconder el trasero de la paliza

Y no pudo más, se rompió el cántaro llorando a borbotones, Lex no quería una paliza, Lex no quería hacer la estúpida tarea esa, Lex no quería estar encerrado, Lex no quería obedecer, Lex no quería ser un niño modelo ni modisto, Lex quería ser Lex, quería un momentito de libertad lejos de los libros, quería ser él, un pájaro de libre vuelo y aun sabiendo que si soltaba la ropa papá le bajaría el slip y le daría una paliza con aquel cinturón mojado, se dio la vuelta y con la cara roja del forcejeo, del llanto, del calor, se tiro a los brazos de papá, abrazándolo con todo su ser; no tenía a nadie más que lo libere de aquel estado de ansiedad, estrés, angustia, y desesperación, estaba colapsando en toda su integridad, se sentía oprimido, asfixiado incluso, y no podía recurrir a mamá porque la macabra idea de tenerlo sentado casi todo el día leyendo castellano para ser un distinguido miembro de la Real Academia de la Lengua Española, había sido suya.

• Por favooorr, papitooo, nifff, brrr, buuu por favorrr, no me pegues si? Yo no quiero que me pegues, ayyy, mmmmggg… de verdad, estoy haaar tooo de leer y hacer tareas, gggg no hago otra cosa que estar sentado todo el día, apenas salgo para ir de la casa a tu despacho en el potrerooo, nif, niff buu, buu aggg mmmm por favorrrr, por favoorrr

Y empezó a convulsionar del llanto, no era un llanto de berrinche, era real, era de estar agotado, rendido, papá le había robado la moral, y mamá le cargo los hombros con la biblioteca municipal, ya no podía más, ya no importaba la paliza, no importaba que lo metan bajo la ducha, no quería volver a ver un cuaderno por lo menos el resto de la mañana, y si la paliza era el único descanso a su trasero de estar sentado largo rato haciendo tareas, prefería la paliza aun cuando doliera mucho y la libertad durara poco; por su parte Rubén se quedo observando las reacciones del muchacho, su pecho menudo subía y bajaba al irregular compas de su derrota mojada de lágrimas, la resignación se le dibujaba en el rostro y sus ojos estaban inflamados y opacos de todo, y papá se percato que había perdido algo de color, estaba como la cera blanca, necesitaba un poco de sol, era como una pequeña plantita que se hacía raquítica de no poder concretar su fotosíntesis al aire libre, había logrado separar las manos de su hijo que se habían estrechado a su cuello en un abrazo asfixiante, y vio en él la resignación de una buena tunda, ya no forcejeaba, tampoco rogaba, se había quedado quieto parado, desaliñado, húmedo, triste llorando sentidamente todo, había perdido.

Rubén suspiro y dejo caer el cinturón a un lado, hasta ese momento su mano había permanecido en el aire con un cimbronazo en paréntesis, se percato que Lex tenía la derrota en el rostro, lo miro largo rato y Lex no hizo ningún movimiento más que los que su cuerpo dictaban al compas de sus lágrimas y su pena, papá por fin se apiado, ¿ Valía la pena hacer llorar a su chango, por una tonta tarea? Ya habían lidiado todo el tiempo por las malas, bajo condiciones no favorables para Lex, a un castigo se habían sumado una pila de condenas, a este paso nunca podría salir ni para su boda, así que Rubén decidió cambiar de táctica, abrazo a Lex y este por fin dio rienda suelta a su voz quebrada, lloro haciendo ruidos, necesitaba liberar su estrés y su frustración acumulada.

• Iggg iggg bbbbuuu nifff nifff – hacía todo tipo de ruidos por el llanto, y se animo a abrazar de nuevo a su papá
• Ya Lex, cálmate si? , ve a darte un baño, yo hare lo mismo, y cuando estés calmado conversamos

Le beso la frente sudorosa, y lo encamino a la ducha cuando Lex empezaba a quitarse la ropa él  había salido del baño, después de unos minutos ambos estaban de nuevo lado a lado en la cama de Rubén, estaba atándose los cordones de los calzados.

• Haremos una cosa Lex – anuncio a find e que se calle de tanta moquera – voy a hablar con la maestra y voy a informarme como esta tu avance en esto del idioma – le comunico su plan – y dependiendo de eso armaremos un nuevo horario, ¿si?, dejaremos parte de la tarde y de la mañana libre para que hagas lo que quieras – le paso las manos sobre los hombros – es más voy a suspenderte el castigo de estar aquí las 24 horas, puedes volver a salir e ir al potrero para montar – Lex que hasta ese momento tenía el gemido pegado a la boca, sonrío – pero ojo Lex, no puedes ir fuera de la propiedad y menos ir al rio, estamos claros? – Lex había dejado de llorar del todo pero tenía la nariz roja y los ojos hinchados, y se los frotaba con el dorso de las manos – ahora nos olvidaremos de la tarea hasta el medio si? Puedes ir hacer lo que quieras, al medio día en mi despacho haremos esto juntos antes de almorzar
• Y miiiss cosas? – pregunto por sus pertenencias decomisadas
• YA veremos si?, aun estamos en inventario y dependiendo de que me diga la maestra te devolveré tus cosas
• Está bien papá, pero me puedes devolver el flash? Tengo grabada una película ahí, le diré a Iván que la veamos juntos en su habitación te parece?

Y Rubén le devolvió el minúsculo flash, y si, vieron la película, pero no solo ellos sino todos los invitados, y Rubén tuvo que contar hasta un millón para no estrangularlos.