miércoles, 20 de abril de 2016

Mis Gemelos: Cap. 19; Autora Marambra

Mis Gemelos

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Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 20 de Abril de 2016.
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Capítulo 19

El plato fuerte de mamá

Autora: Marambra


Iván empezaba a acostumbrarse a los devaneos de Raquel, se cuidaba de que lo golpeara o evitaba estar a solas con ella, lo lograba la mayor parte de las veces porque estaba con su hermano, aún así hacia todo lo que ella lo mandaba, y siempre terminaba teniendo sexo bajo las condiciones y coacciones de ella….. a decir verdad no hubo una sola relación que hubiese sido decisión suya o de iniciativa propia, Alexander se dio cuenta que Iván andaba colgado de Raquel, porque siempre estaba mirándola, Iván la miraba, si, siempre,  observaba cada movimiento suyo, solo que Lex no supo diferenciar entre una mirada de amor platónico por una de obediencia total, el lenguaje corporal era un código de ambos, Iván a puro azote empezó a aprenderlo.
Lex, no entendía que fascinación le tenía Iván a Raquel, si, era una mujer bonita, bastante atractiva pensaba haciéndole justicia a su comentario pero a él no le movía el piso para nada, el estaba tras otra peladita mucho más interesante, la nieta de Miguel, Marcela…. en casa Iván procuraba ser una seda, evitar desobedecer a su padre y hacer todo, casi todo para evitar que le bajaran la ropa y lo ponga sobre sus rodillas, era el arma que tenia para evitar que su padre viera los moretones que tenía en ocasiones en los glúteos, Raquel solía pellizcarlo en ellos, pero no solo eran esas las marcas que tenia, había otras huellas dejadas con la boca en lugares realmente escondidos, equimosis por succión, vamos chupones en las axilas, chupones detrás de la oreja, cerca de la nuca, en las ingles, en la parte alta de los muslos, lugares que solo ellos sabían porque bueno no podían estar tampoco muy a la vista de la gente sobre todo si Iván practicaba natación.
Así entre tanto paso casi un mes desde que iniciara su vida sexual, procurando no tener ninguna falla en casa, lo que era agotador para el por qué estaba casi obligado a dejar de ser un niño, mientras su hermano se deshacía en tonterías y trastadas que terminaban sobre las rodillas de su padre, pero en esta oportunidad fue sobre las faldas de mamá…
 Eran las cerca de las siete de la tarde y Rubén estaba con el semblante cansado, tamborillaba con sus dedos el capo de la movilidad, Miguel se acerco y ambos subieron al auto, había venido solo por no tener que lidiar en casa con la tormenta que tenía sobre su cabeza

  • ¿Y tus guachas? – pregunto por los gemelos comparando inconscientemente a los chicos con becerros huérfanos
  • Están castigados, o estarán castigados dentro de… – miro su reloj – una hora exactamente JAJJAJ
  • ¡Elay! ¿Tan pronto? – expreso Miguel sorprendido – apenas ponés pie en tierra ¿y ya los quéres huasquear? – le pregunto – ¿qué hizo esta vez Alejandro Magno? – interpelo Miguel a Rubén que hacía poco llego del Paraguay, Rubén dio un suspiro hondo
  • NO fui yo, esta vez fue Clara, y no pude oponerme, pero tengo una “charla”  pendiente con Alejandro Magno – aseguro y tras uno minutos de pensado pregunto con cierta curiosidad – ¿de cómo sabes que es él?
  • Porque es igualingo a ti, como dirían los collitas “papa partida” – rio su interlocutor, refiriéndose a no solo al carácter sino cuestiones de sexo, temas que solían hablar entre hombres
  • YAaaa – expreso Rubén con un dejo despreocupado – pero no sé cómo hablar de tema, es algo muy áspero e incomodo para mi
  • MUJERES – exclamo Miguel, riendo ya no más ante la cara de Rubén, vamos si a leguas se notaba que el tema no le hacía gracia – jajajajajajja  vos sabés que tarde o temprano los mangos maduran – agrego – alégrate más bien hombre… ahora sabés con certeza que es “hombrecito” con todas las de la ley
  • Hombrecito o no, tengo que hablar con él – respondió resignado
  • Anda y quien es la peladinga
  • Hasta donde yo sé NO, no hay ninguna peladinga… sino “peladotas” “chutas”, “encueradas” de papel – exclamo entrecomillando la frase con los dedos y Miguel frunció el ceño desconcertado ya que no entendía de que iba el asunto – por lo menos eso es lo que sé – dijo con duda – e Iván creo que tontea con alguien del instituto, no lo sé muy bien – indico pensando en la actitud soñadora del muchacho – de un tiempo a la fecha está bien comportado, prácticamente desde el viaje a Brasil…
  • ¿Encueradas de papel? – pregunto repitiendo la frase de Rubén
  • Play boy – dijo resumiendo todo – y  cuando llegue, encontré a Clara enojadísima – le conto – tu sabes que esas cosas no le van a ella, y justa va y pilla la revistita en el ropero de Iván – ese era el supuesto pecado – y no sé que me hace, pero tengo la corazonada que es de Alexander y que la coloco ahí en un momento dado por alguna razón – y sus sospechas eran ciertas – y Clara, se puso furibunda e increpo a Iván, no sabes cómo fue la cosa – dijo moviendo la mano en el aire, dando a entender que fue un quilombo – y ahora tengo que esperar que mi precioso hijo regrese de las clases para aclarar todo, porque tuve que dejar a Clara e Iván enfadados entre sí…
  • AAAHHH!!! Arrofaldao el mozalbete – expreso Miguel su punto de vista – pero no creo que tengás que enojarte por ello – le recrimino – están en la edad de querer ver, y tocar – dijo sabiamente – vos sabés… es el cuerpo pica – manifestó con seriedad – quizás va siendo hora de que “conozcan una mujer”
  • Se a lo que te refieres viejo lobo – sonrió con pereza –  y no me enojo, es normal lo sé, es pura curiosidad, pero a decir verdad, prefiero que solo quieran ver y tocar  una mujer de papel – si, para él sus hijos eran aun muy niños
  • Si querés yo parlo con ellos – se ofreció – vos sabés lo que pienso al respecto – dijo cabal – y si te decidís…. yo sabré que hacer con los muchachos – no era necesario expresarlo en voz alta, Rubén sabía de que se trataba aquello
  • Te lo agradezco – dijo Rubén sinceramente – si fuera otra mi situación, lo haría yo mismo, pero si Clara se entera me saca los huevos JAJAJJAJAJ – carcajeo con ganas

Y si, Clara lo haría picadillo si se entera que sus preciosos hijos fueron llevados a un prostíbulo para aprender a ser “hombres” como tenia la loca idea Miguel y muchos de los aledaños del lugar, Rubén se había adaptado a esa forma de vida y de pensar lo veía un poco descabellado pero ya no tan antinatural como cuando llego de Alemania, pero estaban hablando de sus hijos, y ellos apenas tenían 15 años, aún era pronto para esas cosas, pero quiera o no tenia que conversar con ellos, y recordar todo lo había puesto de mal humor, mal  presagio, o mal para los chicos…
Después de un viaje tan agotador como aquel volver a casa era un bálsamo, quería llegar, darse una ducha, cenar con su familia, había extrañado mucho a su mujer y a sus ahora hijos, legalmente ahora eran sus hijos, no fue difícil el papeleo, tras el nacimiento de los gemelos, ambos llevaron solo el apellido del padre, puesto que la familia de la madre se negó en redondo en hacerse cargo de los críos, aquello no supuso ningún problema para Rubén y Clara, lo que si fue una batalla fue que Logan asuma la paternidad al 100 %, si, era un niño entonces, pero un niño que supo bajarse los pantalones antes de tiempo, y si supo hacerlo pues tuvo que tenerlos bien puestos después para criar a sus gemelos, claro con la ayuda moral, económica, física y emocional que tuvo de sus padres no fue tan difícil…… y ahora esos mismos padres, volvían a hacerlo legalmente con la adopción de los chicos, o mejor dicho la incorporación del apellido de Clara, ahora eran Hansen – Terrazas.
Si; Rubén estaba deseando ver a los chicos, habían pasado ya algunos meses tras su llegada a casa y de poner todo su mundo patas arriba, reajustar un montón de normas, pasar por duros momentos de adaptación sobre todo cuando los críos tenían que ser castigados, Rubén era muy duro con ellos en ocasiones, pero en ocasiones que se ameritaban; la más de las veces era bastante benévolo y complaciente, los llevaba siempre consigo a donde fuera y quisieran ir, les enseño a montar, a enlazar las reces, a marcarlas, les enseño a cazar, a ir de acampada al monte, y todo lo que les causara curiosidad, pero era muy exigente con ellos en sus deberes y bastante rígido en cuando a obediencia y los chicos se cuidaban de no romper las normas con su padre, …..aclarada la situación de celos entre hermanos, Alexander andaba sedita, pero era una sedita muy fina fácil de romper, en cambio Iván, más tranquilo casi siempre complaciente, era la cara opuesta de la medalla, y como era lógico a Rubén no le sorprendió ver que Iván casi nunca se metía en líos, no hacia travesuras, pero la verdadera razón estaba aún muy lejos de ser descubierta; por lo menos mal había que lidiar con uno solo, a veces pensaba Rubén y aquella tarde no  fue la excepción.
Apenas cruzar la puerta supo que algo andaba mal en casa, era martes así que le extraño los gritos desesperados y enojados de Clara y la desobediencia de Iván, le extraño mucho más precisamente por eso, porque era Iván, Alexander estaba en clases de automovilismo, ya les faltaba poco y su padre les prometió el permiso para los menores de edad; así que subió lentamente las gradas que conducían a la planta alta y allí vio a su mujer toda una fiera de furia, roja tratando de abrir la puerta del baño de Iván

  • ABRE LA PUERTA JOVENCITO – grito Clara tratando de abrir la puerta de Iván – AUN NO HEMOS TERMINADO – dijo
  • ¡¡NO!! – se negó rotundamente Iván y por si acaso quede duda agrego – NO VOY A ABRIR NADA, me has pegado sin motiiiivo – lloraba Iván sujetando el pomo del otro lado
  • ABRE, ES UNA ORDEN – era más que obvia que a Clara eso le tenía sin cuidado
  • NO LO HARE! – esta vez gruño enojado limpiándose las lágrimas, la rabia estaba sustituyendo a la razón – TU QUIERES SEGUIR CASTIGÁNDOME Y YO NO HICE NADA – acuso
  • ¿CÓMO QUE NO HICISTE NADA? – pregunto mamá fastidiada ya de la situación – ME HAS MENTIDO Y ME SIGUES  MINTIENDO

Y  se cerró en redondo, Rubén sujeto del brazo a Clara para que se calmara y se la llevo a su habitación preocupado, porque su esposa estaba al punto del colapso, ¿qué había sucedido para que ella reaccionara de tal manera?, si siempre es ella la que andaba atajándose de que Rubén descargue una nalgada sobre los desobedientes trastes de sus críos?

  • Calma mujer – expreso atrapándola entre sus brazos, nunca vio a Clara tan enfadada – ¿qué sucede, que demonios pasa?
  • ES, ES…ES grrrr – tartamudeaba de enfado – ESTOY ENOJADÍSIMA – contesto con el ceño fruncido – VOY A ROMPERLE EL TRASERO A IVÁN POR MENTIRME Y QUERERME TOMAR EL PELO – aseguro
  • Y se puede saber ¿qué hizo? – pregunto Rubén con una ceja suspendida

Y Clara cogió una revista entre sus manos y se la paso a Rubén, que al solo verla se le subieron los colores a la cara, y era fácilmente detectable, con lo rubio que era, el rubor se hizo más que evidente, era una revista para adultos y nada inocente

  • LA ENCONTRÉ ENTRE SU ROPA – aquello extraño a Rubén, ponerlas en el ropero? Donde era tan fácilmente detectable? Sobre todo por Clara que siempre andaba hurgando las cosas de los chicos? Ellos se habían acostumbrado a eso, y no había secretos, ellos tenían terminantemente prohibido cerrar las habitaciones con llave, excepto cuando viajaban o salían de paseo  toda la familia No voy a permitir que me falte al respeto – murmuraba Clara con un cinturón en la mano
  • Por Dios mujer es solo una revista…
  • De mujeres desnudas, es… es, ES COMO SI ME VIERAN A MI SIN ROPA – un poco mojigata, pero así era ella, pero su preocupación iba por otro rumbo que nada tenía que ver el pudor

Clara era bastante conservadora en ese  aspecto, apenas dejaba a su marido verla sin ropa cuando hacían el amor, incluso de más jóvenes, no le permitía compartir la ducha, pero Rubén fue ganando terreno de a poco, pero aun había situaciones en que la desnudes era un tabú para su mujer, y ahora tenía que lidiar con las hormonas de los chicos, porque para Clara, era casi, casi volver a vivir la historia con Logán, sabía de sobra que tenía un miedo feroz a que los críos se involucren de nuevo a un enredo amoroso que de paso traiga cunas, y Rubén no estaba exento de tal temor, pero ahora quiera o no tenía que hablar con los chicos de sexo y eso le ponía de un humor de perros, no le gustaba tener que hacer nada obligado y estaba siendo acorralado sin querer por su mujer y los mismos chicos, pero algo si tenía bien claro, no permitiría que los mocosos anden bajándose los calzones donde no deben…

  • ¿Qué ha sucedido? – volvió a preguntar esperando que Clara ahora si le explique el meollo de la cuestión
  • Estaba acomodando la ropa de ellos, termine con la habitación de Alexander y me puse en la de Iván y eso estaba ahí, entre los polos, y camisas, descaradamente doblada y manoseada – era evidente que la revista ya había sido hojeada y bien hojeada
  • ¿¿¿Y???
  • Y.. pues nada, que cuando Iván volvió de jugar en el patio se la mostré y le pedí una explicación  él se negó rotundamente a aceptar que es suya, y tuve que castigarlo

Si tuvo que castigarlo…. injustamente y fue toda una batalla. Apenas Iván entro a su habitación, Clara armada de un pequeño cinturón femenino que siempre tenía guardado en su ropero por nostalgia porque era el cinturón que su hijo le regalo la navidad previa al nacimiento de los niños y que interesantemente lo estreno en las piernas de Logán por irse de paseo y dejar a los bebes con la empleada cuando tenía que verlos él, (fue la única vez que lo castigo de verdad).. como sea, armada con ese pequeño cinturón, apenas Iván ingreso a su habitación sin percatarse de su madre y menos de lo que llevaba en las manos, estaba empezando a quitarse la ropa para entrar a bañarse cuando Clara lo jalo del brazo y haciendo una extraña maniobra enredo una de sus piernas entre las del chico, de tal manera que este quedo atrapado dando la espalda a su madre y recibió unos cuantos azotes lo suficientemente fuertes para que los sienta, Iván sorprendido empezó a forcejear sin saber de qué iba todo eso.

  • ¿POR QUE ME PEGAS? – pregunto a voz en cuello, aquello merecía todo su pulmón – ¿QUE HICE?... ¿QUÉ HIIICES? – repetía ante la terquedad de su madre
  • ¿Y ESTO?, ¿QUE ES ESTO… JA? – pregunto mamá tirando a la cama aquella impúdica revista, mientras aseguraba exorcizarlo de los malos pensamientos – NO VOY A PERMITIR QUE ME FALTES EL RESPETO TENIENDO ESAS COCHINADAS AQUÍ EN LA CASA – y sin más Iván fue a caer de bruces sobre sus faldas y armándose de valor, le bajo la ropa sin ningún miramiento y empezó a azotarlo con la mano lo más fuerte que pudo sin permitir que el crio se defienda o se libere de aquellas nalgadas tan concienzudas que le daba Clara – Plas, plas, plasplas, plas, plas, plas – caían las nalgadas de Clara en el centro de las nalgas de un primero sorprendido y luego asustado Iván
  • MAAAA auuu maaaa – Iván empezó a quejarse y tratada de girarse y explicar a su madre que aquello no era suyo –  PARA MAAAMI… PARA QUE ESO NO ES MÍO… NO ES DE MIIII
  • Y TODAVÍA ¿ME VAS A MENTIR? – pregunto indignada, apretando la palma – PLAS, PLAS, PLASPLAS, PLAS, PLAS 

Iván se revolvía en las rodillas de Clara, con el rostro congestionado, queriendo liberarse y explicar a su madre que esa revista no era suya, que él nunca la había visto, pero todo esfuerzo fue a dar en saco roto, Clara con la mano dolorida ya, volvió a coger el pequeño cinturoncito y sin más miramiento empezó a azotar sobre las desprotegidas y doloridas nalgas del muchacho, haciendo que este empiece a llorar de verdad y con todas sus ganas, primero porque la paliza era injusta y segundo porque el dolor empezaba a pasar factura.

  • ZAS ZAS ERES UN ZAS, MENTIROSO, zaaaz, TE VOY ZASS A ENSEÑAR zass zzass A MENTIR ZAS,ZAS, zass, zaas zzas ZAAS
  • ARRRRRRRR, NO ES MIA,AYYY, YAYYAYAYA BASTA MAMA, BASTA MMAA MMMIIII TTAAAA, ARRRR, YYAYYYY, ME DUELE, ME DUELE
  • Y LE DOLERA EL TRASERO A TU ALMA ZASS, ZAS, ZAS SI SIGUES MINTIENDO
  • AYYY, AYYYYYYYYYY, YA NO, YA NO MAS, POR FAVOR

Iván siguió llorando y suplicando moviéndose como un condenado en las piernas de su madre apoyando las manos en el suelo porque de tanto moverse casi va de cara al suelo y en un momento dado logro soltarse y corrió despavorido al baño donde se atrinchero, hasta que llego su padre del viaje a la capital.

  • NO VOY A PERMITIR ESTO AQUÍ RUBÉN – le dijo tirando la revista sobre la mesa – NO VOY A PERMITIR QUE ANDEN CON ESTUPIDECES – declaro enfadada – O HABLAS CON ELLOS O HABLAS – si una condición con una sola salida –  NO QUIERO LÍOS POR CUESTIONES HORMONALES – aseguro, recordando los descalabros de Logan a la misma edad
  • Y que quieres que haga? – pregunto enfadado por su reacción desproporcionada
  • NO LO SE – respondió mirándolo fijamente – PERO TU HABLAS CON ELLOS O YO LOS  MUELO A NALGADAS TU DECIDES – si, se lo puso fácil
  • Vamos Clara – la siguió al dormitorio a donde se fueron a discutir – esto se está saliendo de contexto – agrego cerrando su puerta  
  • NO QUIERO PROBLEMAS – ella seguía exaltada – mira lo que sucedió con Logan – ese era su Karma
  • No son Logan Clara, son los hijos de Logan, no es lo mismo
  • NO ME INTERESA – definitivo, Clara veía en blanco y negro este momento
  • ¿Y qué sugieres que haga? – Rubén aun cuando procuró mantener la calma por ambos, no pudo, había situaciones como esta que Clara tiraba la liga demasiado – qué les prohíba tener una erección matutina? – dijo ya enfadado – o una erección por mirar a una mujer – la terquedad de su mujer saco lo peor de él
  • PLAFFFFFFF – sonó el tremendo revés en la cara de Rubén – NO VOY A DISCULPARME, TE HAS PASADO DE LA RAYA CONMIGO
  • Y NO QUIERO QUE TE DISCULPES – contesto Rubén apenas abrió los ojos que automáticamente se habían cerrado por el cachetazo – porque TAMPOCO LO VOY A HACER YO – elevo un poco la voz, no estaba para protocolos – si no te has dado cuenta – le dijo fastidiado se suponía que acababa de llegar de su viaje y lo que menos quería era pelear – son adolescentes y SON VARONES – afirmo como si fuera necesario aclara aquello – NO PUEDO Y NO PUEDES TU IR TRAS DE ELLOS RESGUARDANDO SUS BRAGUETAS – grito mucho mas enfadado Rubén

Y se salió de la casa , tenía razón, no se podía controlar a los críos, pero si de él dependía muy en el fondo del alma controlaría las braguetas de los dos, de eso estaba más que seguro, pero sin querer admitir nada se fue al patio y dejo al pobre de Iván en las rodillas de su madre que por fin había podido abrir la puerta y no dándole opción a nada más le propino una buena tanda de azotes en el trasero que lo dejo exhausto de tanto llorar  al tratar de hacer entender a su madre que aquella revista no era suya.

  • A la cama – grito Clara cuando dio por terminada la paliza – y dame eso – le quito la ropa interior que Iván alzo del piso de tanto patalear y la tiro a la ropa sucia, abriendo la sábana de su lecho e instándolo a meterse en ella a esa hora
  • MAMAAAAAAAAAA, no es justo, devuélveme mi ropa, quiero vestirme – hipaba Iván, avergonzado todavía de tener que estar en cama a las 6 de la tarde y sin ropa interior como si fuera un crio de 4 años
  • HE DICHO A LA CAMA PLAF PLAF PLAF – y esa fue la respuesta de mamá
  • Auuu
  • Eso pasa por mirar mujeres sin ropa – sentencio Clara antes de abandonar la alcoba dejando a Iván con un turbio pensamiento“Hay mamá, si supieras que no solo he mirado sino tocado me matas”   pensó Iván cubriéndose rápidamente, tenía un moretón sobre el pubis que su madre no se fijo

En ese intervalo llego Rubén, no estaba enfadado con su mujer por la bofetada, se la gano con creces por ser grosero sabiendo que para ella el sexo es cuestión intimidad sagrada y no se hablaba más del tema, así era ella y así le gustaba, lo que lo descoco fue subir a la planta alta y encontrarse con un Iván acurrucado en la cama cubierto hasta la cabeza con la sabana y llorando semidesnudo, el jamás los acostaba sin ropa, le parecía vergonzoso.

  • Voy a hablar con él Clara, déjanos solos por favor – pidió Rubén y Clara se marcho a la cocina, necesitaba un vaso de agua para pasar el mal trago

Apenas Clara se marcho y cerró la puerta Iván se animo a destaparse la cara y mirar a su padre que estaba sentado en el borde de la cama, tenía la cara roja del calor y la vergüenza, de la rabia y del dolor, y se lanzo a los brazos de su padre en busca de consuelo, y Rubén lo atrajo hacia sí, abrazándolo… quería que se levantara de la cama.

  • Anda sal de la cama, hace calor – le fue secando las lagrimas de los ojos con los dedos
  • NO puedo, mama me ordeno acostarme – se volvió a tapar la cara
  • Ya, pero ahora te lo estoy pidiendo yo – le retiro la sabanas y le vio el rojo trasero
  • NO, estoy sin ropa interior – dijo dándose la vuelta y cubriéndose apurado el traste
  • Donde están colocados tus calzoncillos?
  • En el primer cajón de la derecha – Rubén se los paso y se salió mientras se vestía
  • ¿Qué sucedió?. Y dime la verdad Iván, sin mentir, ¿la revista es tuya?
  • NO; NO LO ES – levanto la voz indignado
  • NO grites, estamos conversando – pidió papá poniendo un dedo sobre sus labios
  • ES que nadie me cree? Yo nunca la vi, y si sería mía no sería tan tonto de ponerla en el ropero para que la pille mamá – y empezó a llorar de nuevo de rabia
  • SHUUUU, ya Iván yo te creo, ya no llores
  • Es que no es justo, mamá me pego feo
  • ¿Y cuándo una paliza es bonita? – le jalo la nariz
  • NO te rías, me duele y ni siquiera es mío el pecado – se tiro a la cama boca abajo ocultando la cara en las almohadas sollozando enojado

Rubén suspiro, tenía razón, lo más probable es que Iván no tenga nada que ver con la revista aquella dichosa que tan loca volvió a Clara, tan de mal humor que no se atajo ni un solo segundo en pensar en la posibilidad de que el crio este diciendo la verdad y le propino una buena paliza, por lo general Clara era calmada y controlada, y siempre estaba más bien protegiéndolos de que sea él quien los castigue con nalgadas, y ahora tenía que lidiar con Alexander, porque estaba más que claro que aquella trastada fuera suya, pero…. Sí… había un gran PERO, él, no sería quien castigue al muchacho, no podía hacerlo porque no le parecía necesaria una paliza por una cuestión de curiosidad natural, así que Alexander tendría que probar el bocado de mamá.

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