Stargate
一一一一一一一一一一一一一一一
Los derechos de autor de este texto pertenecen única y exclusivamente a su autor. No pudiendo ser publicada en otra página sin el permiso expreso del mismo.
Publicado originalmente en Blog: Travesuras de Cristal amor incondicional en fecha 19 de Abril del 2016.
一一一一一一一一一一一一一一一
Capitulo 5
Autora: Gloria
Daniel seguía
en el suelo y un dolor punzante recorría toda su pierna derecha, la cabeza le
estaba comenzando a doler y sentía nauseas. Mike estaba a su lado tratando de
tranquilizarlo, intento mirar a su alrededor pero al intentar mover el cuello
se mareo. Lo único que pudo ver era que pronto caería la tarde, tenían que
salir de ahí rápido, ya era un milagro que el fuego no hubiera llegado a donde
se encontraban pero Daniel sabía que necesitaban encontrar un refugio si iban a
pasar la noche a la intemperie. Trato de incorporarse solo para darse cuenta
que el dolor de la pierna se hacía insufrible, él no podía moverse de ahí sin
ayuda. Intento poner sus pensamientos en orden, estaban muy cerca de la
carretera por lo menos eso es lo que había logrado ver antes de caer, no podía
moverse ni mucho menos salir de ese precipicio, su padre lo estaría buscando
seguro pero la posibilidad de que los encontraran era de una en 1 millón. Junto todo su valor para decir.
- Hey Mike – murmuro bajito
- Daniel tranquilo no te muevas – la mirada de Mike era de preocupación
- Lo sé, me duele de solo pensar en mover la pierna – dijo Daniel haciendo una mueca de dolor
- Tienes un esquince en el tobillo o… creo que te fracturaste, pero podría ser peor
- Si, no me imagino que puede ser peor – sonrío Daniel
- Bueno podría ser una fractura expuesta, o podrían haber sido las 2 piernas y…..
- Ok ya entendí Mike pudo haber sido peor
- Donde esta Blair – preguntó Dany tratando de levantar el cuello para mirar
- Oh él está buscando mi mochila y agua, sabes él no la está pasando muy bien, casi se tira detrás de ti, alcancé a sujetarlo sino tendrías compañía, creo que se siente culpable – concluyó Mike mirando fijamente a su amigo
- Pero esto no es culpa de nadie, es solo un accidente – comento Daniel intentando ponerse cómodo moviendo lo menos posible la pierna.
Mientras
Jack y Jim habían recorrido el camino de vuelta hacia donde habían dejado a sus
hijos en tiempo extraordinario, para encontrar solo un sitio vacío.
- Donde diablos se metieron estos chicos – gruño Jack, mientras Jim examinaba los alrededores buscando huellas
- Tranquilo Jack creo que se exactamente donde fueron
- Entonces te sigo Jim
Ambos
caminaron sin detenerse en silencio con solo un propósito en mente encontrar a
sus hijos y ponerlos a salvo. Blair bajo hacía donde estaban sus amigos con la
mochila y lo que Mike le había pedido.
- Hey Mike aquí esta lo que pediste – Mike abrió su mochila en donde tenía una venda – Dany lo siento, yo no pensé…quiero decir que no quise
- Tranquilo Blair, esto no es tu culpa fue un accidente estas cosas pasan – Blair solo sonrío aún sintiéndose culpable
- Ok Dany voy a tratar de inmovilizar tu pierna, no te voy a mentir te va a doler – Mike prefirió ser sincero
- Solo hazlo Mike no quiero saber detalles – Daniel tomó aire pero no pudo evitar gritar un par de veces – ya estamos terminando no voy a apretar mucho porque tu pierna se va a inflamar y mucho así que dejare un espacio para que se expanda – Blair miraba atento como Mike atendía a Daniel
- Guau Mike ¿dónde aprendiste todo esto? – dijo Blair
- Es el negocio de la familia, supongo… mi mamá es anestesista, mi papá cardiólogo, tengo 5 hermanos y mucha experiencia en fracturas.
- Está bien ahora tenemos que pensar en cómo sacarte de aquí – dijo Blair
- Va a ser un poco complicado pero entre los dos creo que podemos cargarte – agrego Mike
- No chicos escúchenme no me puedo mover lo mejor es que ustedes vayan a la carretera, no está muy lejos y…
- No te vamos a dejar – casi gritaron Mike y Blair, al mismo tiempo
- Nos vamos los tres o no se va ninguno y no hay más que hablar – Blair se puso muy serio al respecto. Daniel suspiro con frustración
- Blair, no puedo caminar ni siquiera puedo apoyar la pierna, ¿cómo voy a poder escalar hasta llegar arriba?
- Entre los dos te ayudaremos, nosotros seremos tus bastones y no importa cuánto nos demoremos en subir será un paso a la vez así que hazte la idea – Por un momento Daniel vio la determinación de Jim en el rostro de Blair, después de todo eran padre e hijo
- Está bien tu ganas pero esto nos va a tomar un tiempo – dijo Daniel
- No importa no tengo ninguna cita importante esta tarde – sonrío Blair
Con
mucha dificultad Daniel comenzó a subir, trato de no hacer tan evidente el
dolor que sentía para no hacer sentir mal a sus amigos que no paraban de darle
ánimo. Fue casi una tortura para Daniel salir de ese maldito precipicio pero
finalmente llego a la explanada, gotas de transpiración caían por su frente.
- Chicos por favor necesito descansar – Dany se veía como si hubiera corrido una maratón
Los
chicos lo acomodaron en una piedra tratando de no provocarle más dolor;
mientras Blair se subía a la misma piedra por donde había caído Daniel para ver
que la carretera estaba muy cerca, el camino se veía expedito y era en bajada
no debían demorarse mucho en llegar ni siquiera con Daniel en tan lamentable
estado. Estaban comenzando a caminar nuevamente, Daniel estaba en el medio
apoyado en cada lado por Mike y Blair su pierna no tocaba el suelo no
alcanzaron a dar 2 pasos cuando Blair paró.
- ¿Sintieron ese ruido?
- No, no oí nada – dijo Mike, luego se escuchó ruido de ramas
- Viene alguien o algo – miró Blair a sus amigos
- ¿Crees que es un animal? – dijo Mike
- No lo sé, pero se acerca rápido, necesitamos ponernos fuera de su camino – intentaron caminar hacía un lugar seguro, pero no había donde ir así que se quedaron mirando haber que o quien era lo que se acercaba a ellos.
Los
tres estaban casi al borde de un infarto pensando lo peor, pero ya no tenían
opción se quedaban y le harían frente. Jim podía sentir respirar a su hijo
estaban muy cerca solo unos pocos pasos más, hasta que por fin vio las figuras
de 3 chicos siguió sin parar hasta que pudo ver que su hijo estaba en frente
suyo asustado pero bien.
Jack
miró la escena con horror al ver que su hijo estaba malherido, inmediatamente y
sin darse el tiempo de decir una palabra tomo en brazos a un tambaleante Daniel
para sentarlo y comprobar los daños, Mike se fue detrás de él militar para
tratar de calmarlo.
- Señor creo que no es tan grave es solo un esguince y una fractura menor – inmediatamente se arrepintió de haber abierto la boca, la mirada de Jack era asesina
Sin
dirigir palabra a ninguno de los dos tomo la pierna y comenzó a hacer una
inspección, se estaba comenzando a inflamar pero había sido vendada de forma
adecuada, mirando de reojo vio la cara de sufrimiento de Daniel que con cada
toque a su pierna mordía más sus labios para evitar cualquier queja. Dando por
finalizada su inspección y dándose cuenta de que efectivamente la pierna no
corría serio peligro se detuvo y miro a su hijo buscando respuestas. Mientras
Jim que se había quedado parado como una pared enfrente de Blair lo miraba
haciendo una revisión de los daños que pudiera presentar para fijar su atención
en las manos de Blair que presentaban heridas.
- Dime jefe que paso aquí? – dijo Jim mirando directamente a los ojos de Blair. Blair estaba aliviado por ver a su padre y asustado por la reacción que tendría al contarle toda su aventura y las consecuencias de esta, sin saber muy bien por dónde empezar Blair solo dejo salir las palabras de su boca como siempre que estaba muy nervioso estas salieron a toda velocidad
- Yo tengo la culpa quería buscar ayuda y la carretera está cerca y Dany se cayó creo que se fracturo la pierna no puede caminar y… – Jim sintió la culpa, angustia y miedo en el tono de voz de su hijo y antes de que terminara de hablar le dio un abrazo fuerte que hizo que Blair finalmente se desahogara sin poder evitar que las lagrimas cayeran por sus mejillas realmente necesitaban a su padre. Cuando Jim estuvo seguro que Blair se había calmado lo dejo ir
- Tranquilo hijo ahora solo vamos a preocuparnos por salir de aquí
Blair
miró a su padre aliviado, ya no le importaba donde estuvieran sabía que estaba
a salvo su padre estaba con él, Jack hizo un gesto a Mike para que se sentara
al lado de Daniel.
- Bien chicos quiero respuestas – Dijo Jack mientras Jim junto con Blair se acercaban a la reunión improvisada; Mike hizo un resumen de lo que fue su pequeña aventura el rostro de ambos padres se fue desfigurando al oír las palabras caída e inconsciencia – está bien ahora quédense aquí por un minuto – y se alejo con Jim unos cuantos metros de los chicos – esto no me gusta Jim, Daniel quedo inconsciente aunque haya sido solo un par de minutos necesito llevarlo a un hospital y rápido
- Lo sé, estamos cerca de la carretera así que si lo cargamos por turnos podemos estar allá en menos de una hora
- Si y llegando a la carretera tendremos que esperar a que alguien nos auxilie – a Jack se le empezaba a notar la desesperación
- Si te quedas con los chicos yo podré buscar ayuda y además quizás los teléfonos funcionen y tengamos señal
- Está bien entonces vamos.
El
incendio se había extendido por varias hectáreas y todas las patrullas de
guardabosques se pusieron alerta junto con varias estaciones de bomberos por lo
que la carretera estaba bien transitada al llegar Jack, Jim y los chicos no
paso mucho tiempo para que fueran socorridos, Jack y Daniel fueron los primeros
en ser evacuados del lugar hacia una cabaña en donde ya se estaba llamando a un
ambulancia, mientras que Jim, Blair y Mike esperaban por ser transportados a la
ciudad.
A
Jack se le hizo eterno el tiempo que paso entre llegar a la cabaña y esperar a
la ambulancia, hasta que al fin estaba camino al Hospital más cercano, en esos
momentos de angustia solo podía pensar en una persona en la cual confiaba en
casos como este, en que la salud de Daniel estaba en juego.
Tiempo atrás…
Sollozos
de un niño, Jack estaba tan cansado que no sabía que sentía sollozar a un niño
en sueño o era aquí cerca de él, intento no hacer caso era un sueño, sin
embargo esta vez ya no eran sollozos sino un llanto con todas las de la ley,
Jack casi cae al suelo con un solo pensamiento en mente alguien estaba
intentando asesinar a Daniel. Corrió hacia la cunita para ver a Daniel sentado
llorando desconsoladamente. Suavemente lo tomo en brazos y lo acuno.
- ¿Qué pasa pequeño un mal sueño? – Mientras hablaba en susurros Jack revisó el pañal pero estaba seco – ¿tienes hambre? ¿quieres un poco de leche? – miró al niño que ya no lloraba pero seguía sollozando y con su cabecita hacía un gesto negativo – está bien entonces no tienes hambre y el pañal esta seco – nuevamente los sollozos se convirtieron en llanto y Jack ya estaba preocupado este no era un comportamiento normal algo le pasaba a su hijo; sin dejar de pasearlo toco su frente estaba caliente – Oh pequeño tienes fiebre es eso – Jack nunca se había enfrentado a una situación como esta y no sabía que diablos hacer, pensó en que ni siquiera tenía un termómetro en casa, miró el reloj casi eran las 4 de la madrugada y ahora tendría que llevar a Daniel a un Hospital miró por la ventana para ver que afuera llovía, no sacar a Daniel estaba fuera de discusión pero ¿qué iba a hacer?. Con el niño aún en brazos fue a su dormitorio intento dejar a Daniel en su cama solo para hacer que el niño llorara con más ganas, se calmo cuando estuvo en brazos nuevamente – esta bien Dany no te voy a dejar ok entendí el mensaje, solo no llores más por favor pequeño.
Con
Daniel en brazos fue al baño y mojo una toalla se la puso en la frente, pero
aún así Daniel siguió sollozando. Jack necesitaba urgentemente que alguien le
dijera que hacer, necesitaba un medico que hiciera visitas a domicilio los
sábados de madrugada en plena tormenta, genial no tenía muchas ideas en la
cabeza hasta que pensó en Janet, no era su amiga pero recordó que cuando la
noticia de que el Teniente Jack O’Neill había adoptado a un pequeño ella se
acercó a él para ofrecerle su ayuda incluso le había dado el número de su casa
para alguna emergencia, y ante los ojos de un padre inexperto esta era una
emergencia.
Sentado
junto al teléfono con la tarjeta en la mano con Daniel acunado en su pecho,
miro la hora y no pudo dejar de sentirse culpable solo de pensar en llamar a
Janet a la 4:30 de la madrugada un día sábado pero ante otro ataque de llanto
de parte de Daniel marcó el número y espero.
Al
tercer ring Jack quería cortar pero el pequeño bultito que tenía en sus brazos
estaba tan caliente y aunque no lloraba no paraba de quejarse, vamos Dra.
Fraiser por favor conteste, rogaba Jack. Janet medio dormida contesto el
teléfono que estaba al lado de su cama.
- Si – dijo Janet
- Dra. Fraiser habla Jack O’Neill
- Teniente – dijo una voz alarmada – ¿paso un accidente en la base?
- No Dra. No es nada que paso en la base es Daniel no para de llorar creo que tiene fiebre y yo no tengo ni siquiera un termómetro en casa iba a sacarlo para llevarlo al Hospital pero está lloviendo y yo no se si es recomendable sacar a un pequeño con fiebre a fuera, entonces pensé que quizás usted – Jack no pudo terminar la frase
- Tranquilo Teniente está bien no se preocupe soy médico estoy acostumbrada a estas llamadas y no, no saque a Daniel de la casa voy a estar por allá en menos de 30 minutos
- Oh Dra. No sabe cuánto se lo agradecería
- No se preocupe pero por favor dime Janet y déme la dirección de su casa
- Gracias y si vas a venir a mi casa a estas horas por favor dime Jack.
Janet
suspiro y se levantó de la cama agradeciendo que las casas de los militares
estuvieran todas cerca de la base. Media hora más tarde la Dra. Janet Fraiser
estaba en la puerta del Teniente Jack O’Neill ni siquiera tuvo que tocar la
puerta porque parecía que Jack la había estado esperando desde el momento que
colgó el teléfono. Al ver al teniente O’Neill con el pequeño en brazos que con
una manita se agarraba fuertemente de la camisa de su padre y no dejaba de
sollozar a Janet casi se le partió el corazón era una escena adorable era obvio
que no solo el pequeño estaba sufriendo sino que el padre compartía su dolor en
cada sollozo.
- Janet Fraiser le presento a Daniel Jackson O’Neill mi hijo – dijo Jack sin evitar sentir orgullo al decir la palabra hijo en voz alta, Janet miró al pequeño más de cerca, a pesar de lo mal que se sentía Daniel, la curiosidad pudo más y levantando su cabecita dio una mirada hacia la mujer que lo observaba con una sonrisa amable
- Hola Daniel, me llamo Janet y voy a hacer que te sientas mejor ¿qué te parece?
A
pesar que Janet no era pediatra, inmediatamente tuvo una afinidad con Daniel,
el niño estaba acostumbrado a no ser tratado como un bebé pequeño en su corta
vida siempre había estado rodeado de adultos. Así que para Janet que no tenía
mucha experiencia examinando niños tan pequeños esto jugo en su favor para
ganarse la confianza del pequeño.
A
pesar de estar enfermo, Daniel era un niño muy curioso por lo que quedo
fascinado con el termómetro digital que Janet puso en su oído, Janet
inteligentemente primero mostró todos los instrumentos que iba a utilizar en
Daniel para que no les tuviera miedo, dejando que el pequeño jugara con cada
uno hasta que logro terminar el examen exitosamente. El diagnostico un resfrío
que le había inflamado la garganta por lo que le ocasionaba dolor.
- Muy bien Daniel te comportaste como todo un valiente tu padre debe estar orgulloso de ti – dijo Janet mirando al niño
- Si valiente – dijo una vocecita un poco ronca proveniente de los brazos de un orgulloso padre
- Muy bien Jack aquí tienes paracetamol para la fiebre – le dijo entregándole un jarabe rosado – le acabo de dar una dosis seguro que le dará sueño y va necesitar este antibiótico – agrego escribiendo – te dejo la receta con las instrucciones, mucho liquido y mañana no lo obligues a comer quizás sería bueno un poco de sopa de pollo, siempre hace el milagro
- Janet no tengo como agradecerte todo, te debemos una grande – Jack estaba un poco avergonzado, el militar no estaba acostumbrado a pedir ni deber favores
- Tranquilo Jack créame que va a ver más de una oportunidad para que me devuelva la mano, puedo preguntarle a que pediatra lo está llevando?
- A ninguno – dijo Jack un poco confuso
- Eso es un problema Jack – contesto ella tras fruncir el ceño levemente – debes llevar a Daniel a un pediatra lo más pronto posible, un niño de esta edad debe llevar un control de niño sano donde se registra el peso, estatura y las vacunas, Jack dígame que tiene su carnet de vacunas al día – Jack quería que la tierra lo tragase de vergüenza pensándose juzgado
- Yo no lo sabía Janet, pensaba que se llevaba a los niños al pediatra cuando se enfermaban y sus vacunas claro que las tiene al día según el ministerio de salud de Egipto que es donde Daniel nació – Janet no pudo evitar sonreír al ver la cara de espanto del teniente O’Neill, nunca lo había visto tan vulnerable
- No se preocupe Jack yo le voy a indicar el nombre de un pediatra conocido para que tome una hora lo antes posible. Muy bien creo que es hora de volver a casa – dijo Janet, mirando a los dos integrantes de la familia O’Neill, no cabía duda que ambos se amaban, después de todo Janet tuvo que ingeniárselas para examinar al niño en los brazos de su padre ya que cualquier intento por ponerlo en la cama resulto catastrófico. Daniel todavía estaba muy interesado en el termómetro digital
- Dany devuelve el termómetro a la Doctora – Dany sonrío, para decir un claro
- no – con una vocecita bastante decidida para su corta edad
- ¿Cómo que no?, Dany eso no es tuyo
- Déjalo Jack de todas maneras te lo iba a dejar recuerda que debes chequear su temperatura – sonrió la mujer tocando la frente de Dany que se notaba bastante fría
- Gracias otra vez Janet
- gracias – balbuceo Dany.
- Muy bien nos vemos el Lunes
- Nos vemos Janet y otra vez muchas gracias
- Adios ianet – dijo Dany despidiéndose con su manitos regalándole a Janet su mejor sonrisa
- Bueno pequeño creo que acabas de hacerte de una tía – Daniel lo miro curioso
- Tía ianet?.
Tiempo
actual…
Jack
O’Neill odiaba los hospitales pero más que eso odiaba no poder hacer nada por
su hijo más que esperar, caminando de un lado a otro de la sala de estar el
militar se asemejaba a un animal enjaulado. Hasta que escuchó la voz que en
estos casos siempre lo tranquilizaba y que consideraba parte de la familia.
- Jack ¿qué pasó? ¿Dónde está Dany? – se apresuro a decir la Dra. Janet Fraiser que llegaba casi corriendo el Hospital
- Janet, se lo llevaron para examinarlo, ¿puedes entrar y decirme qué diablos pasa? – dijo Jack con voz esperanzadora, Janet se dirigió a la puerta de urgencia hablo con un enfermero para poder entrar y desapareció por el pasillo
Mientras
Jim, Blair y Mike llegaban al Hospital en una patrulla, inmediatamente buscaron
a Jack para saber cómo estaba Daniel, Jack les explicó que lo habían ingresado
pero que Janet estaba con él; Mike se estaba comunicando con sus padres para
que lo vinieran a buscar y Jim habló con una enfermera para que atendieran las
heridas en las manos de Blair.
- Papá no es necesario mis manos están bien – dijo Blair sin evitar gemir, Jim no respondió a la queja, lo tomo de un brazo y lo llevo a un box de atención. Blair no le había dado mayor importancia a las heridas en sus manos hasta que la enfermera comenzó a limpiarlas – Ouch – dijo más de una vez sin evitar hacer gestos de dolor, Jim se sentó en la camilla para quedar junto a su hijo puso un brazo alrededor de su hombro, la enfermera miró las heridas con detenimiento
- Vas a necesitar puntos – dijo y fue a preparar el instrumental
- No agujas por favor – dijo Blair al ver a la enfermera acercarse con una jeringa en la mano
- Es solo un anestésico local, si no quieres no lo uso pero va a doler – Jim miró a la enfermera
- El si quiere el anestésico – dijo Jim, Blair abrió la boca para discutir pero vio la mirada de su padre y solo suspiro quito la mirada de sus manos y apoyo su cabeza en su padre
- Muy bien está listo, ahora solo necesita que el médico le dé el visto bueno y seguro le deja la receta para algún medicamento
Tras
eso Janet salió de la sala de emergencia para encontrarse con Jack.
- ¿Cómo esta, puedo entrar a verlo? – pregunto Jack
- Está bien Jack y puedes entrar a verlo esta quedándose en observación por 24 horas
Jack
hizo una señal a Mike que estaba sentado junto a Jim y Blair esperando
noticias; Janet les resumió la situación y Jack dijo que se iba a quedar con
Daniel, Jim se comprometió a esperar a que vinieran a buscar a Mike y luego
quería que Blair descansara, Jack hizo un gesto afirmativo le entrego las
llaves de su casa, Jim se comprometió a volver la hospital para traerle una
muda de ropa para él y Daniel, Jack le dio las gracias y se fue detrás de Janet.
Daniel
no estaba de buen humor odiaba los hospitales, estaba solo y le habían dicho
que se tenía que quedar en observación por lo menos 24 horas esto se estaba
pareciendo más a una pesadilla que a un cumpleaños.
La
puerta se abrió de improviso dando paso a un padre preocupado, que en 3 pasos
llego al lado de su hijo, Jack pudo hablar con el médico, hasta ahora no había
nada de qué preocuparse, solo que Daniel iba a tener que usar muletas por un
tiempo.
En
casa de los O’Neill, Jim había cocinado una sopa para los dos y después le
había dicho a Balir que se fuera a dormir, antes de pararse de la mesa Blair no
pudo evitar intentar hablar de lo sucedido, él odiaba alargar más la situación
no iba a estar tranquilo hasta que tuvieran la “conversación”, ya única respuesta
de parte de Jim fue argumentar que ambos estaban muy cansados y que ya tendrían
tiempo mañana para hablar, ante la negativa Blair se fue derrotado a la cama
pensando en que no iba a poder conciliar el sueño, no alcanzaron a pasar 5
minutos desde que su cabeza toco la cama y ya estaba profundamente dormido.
Por
la mañana Blair despertó a las 11, al ver la hora casi salto de la cama, se dio
una ducha rápida y salio para darse cuenta que estaba solo en la casa, encontró
una nota de Jim en la mesa había ido al Hospital volvía al mediodía. Estaba
lavando los platos que había ocupado en le desayuno cuando sintió la puerta
abrirse era Jim.
- Hola jefe, así que despertaste – hablo Jim
- Hola papá ¿cómo esta Daniel?, ¿pudiste verlo?
- Si, está bien, tiene la pierna enyesada va a tener que usar muletas – le informo
- ¿Cuando vuelve a casa?
- Hoy en la tarde – agrego
- ¿Entonces vamos a poder verlo antes de tomar el vuelo?
- Creo que sí, si quieres podemos comprar una torta y esperarlo con algo, después de todo es su cumpleaños
- Sería genial – sonrío Blair. Padre e hijo se quedaron en silencio por unos minutos, hasta que Jim decidió no seguir torturando más a su hijo
- Hijo tenemos que hablar – Blair bajo la cabeza y se sentó en el sofá
- Lo sé, papá y antes que digas algo quiero que sepas que estoy muy arrepentido de lo que hice y te prometo que nunca voy a volver a desobedecer una orden tuya – ante tales palabras Jim no pudo dejar de sonreír este niño si que sabía que piezas jugar. Pero esto no te va a resultar tan fácil junior, quiero saber que pasa por tu cabecita exactamente, pensó Jim
- Más vale que así sea, jefe pero algo me dice que vamos a tener esta misma charla en más de una ocasión en el futuro. Ahora Blair – el niño trago saliva ante el tono de las palabras de su padre – me vas a decir qué diablos pasa contigo para hacer que te comportes de la manera en que lo has estado haciendo
- Yo no sé papá – Blair pensó en decirle todo a su padre pero inmediatamente después se arrepintió, seguro que no le iba a creer y él no quería parecer un idiota en frente de su papá, Jim suspiro con frustración
- Esta bien, jefe y que conste que te di una oportunidad – Blair casi no entendió lo último que había dicho Jim porque en ese preciso segundo Jim lo había tomado y lo había puesto en sus rodillas boca abajo en una posición que para la mala suerte de Blair ya se le hacía conocida – Muy bien, hijo, vamos a ver si en esta posición se te aclara un poco tus pensamientos – agrego a sus dichos una palmada – SWAT
- Ouch papá, la otra vez dijiste que íbamos a hablar antes de llegar a esto
- Y te di la oportunidad, junior y te vuelvo a preguntar que pasa contigo? – el silencio volvió a reinar en la sala – ves me obligas a tomar medidas extremas swat swat swat – sonaron las nalgadas hasta que un quejido se hizo sentir
- Papá para por favor esta bien te diré que pasa
- Entonces habla, jefe – Blair hizo el intento de pararse pero Jim lo mantenía firmemente fijo en tan vulnerable posición – papá dije que voy a hablar
- Y yo estoy ansioso por escuchar, jefe pero te quedas donde estas creo que estar en esta posición aclara tus pensamientos – Blair hizo una mueca que su padre no pudo ver
- Está bien, pero solo quiero que escuches lo que voy a decir con la mente abierta – dijo Blair, segundos después sintió un
- swat swat swat
- Ouch papá – se quejo de inmediato, eso no estaba bien
- ¿Te parece que mi mente está lo suficientemente abierta?
- Está bien, está bien – era mejor confesar pensó – fue hace más menos un mes… ¿recuerdas la conferencia que fui el mes pasado? – le pregunto y su padre elevo una ceja – escuche una teoría con respecto a que unas tribus en la amazona creían que existían humanos especiales que en ciertas circunstancias sus sentidos se sensibilizaban a un grado tal que podían hacer cosas extraordinarias y yo estuve observándote papá y no vas a poder negarme que algo pasa en ti cuando te enojas conmigo – vaya que era observador el muchacho pensó Jim, pero prefirió hacerse el loco
- ¿De qué estás hablando jefe?
- Creo Jim que eres un Centinela
- ¿Qué soy un qué?
- Un Centinela Jim – repitió con fastidio apenas disimulado – un hombre que en ciertas circunstancias agudiza sus sentidos de tal manera que puede oír ver oler cosas que nadie más podría
- Entonces tu tratabas de demostrar una teoría en mi y para eso me hiciste enojar, ¿estoy entendiendo bien?
- Bueno si lo pones así en palabras simples, si swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat swat – un solo sonido se escucho por largos y dolorosos minutos fueron las nalgadas que dio Jim a Blair
- Auuu eun ouc yaaaa paa yaa – y luego los sollozos que emitía Blair con cada swat que sentía en su dolorido trasero, cuando Blair pensó que esto no iba a acabar nunca y estaba seguro que no se iba a sentar cómodo por lo menos por una semana finalmente Jim paro
- Hijo escúchame bien no vuelvas a desobedecerme de esa manera y menos vuelvas a intentar probar nada poniéndote en peligro – agrego 5 swat más para dejar claro el mensaje – swat swat swat swat swat
- No lo haré papá lo prometo – luego de terminar la “conversación” Jim abrazo a su hijo para darle consuelo, estuvieron así hasta que Blair se calmo
- Está bien pequeño ya todo término – Después de un tiempo Jim dijo – muy bien pequeño que te parece que preparemos el almuerzo y compramos algo para esperar a Daniel y Jack
La
llegada de Jack, Daniel y Janet a su casa fue esperada por Jim, Blair, Mike y
Sam que llegaron a ayudar con la pequeña fiesta sorpresa, pasaron un buen rato
todos contando sus aventuras, lamentablemente todo lo bueno llega a su fin: Jim
y Blair tenían que tomar un avión y Jack tenía toda la intención de que Daniel
se acostará temprano.
- Vamos papá es mi cumpleaños, me puedo quedar un poco más tarde – Dany ya quería llorar, no podía creer que su cumpleaños lo pase en cama
- No Dany, recuerdas tienes que descansar
- Tía Janet por favor dile que puedo quedarme un poco más – gimió Daniel
- Lo siento Dany esta vez estoy de acuerdo con tu padre, es mejor que estés en cama – Daniel miro a su tía y a su padre ambos estaban muy decididos
- Está bien me voy a la cama – dijo un derrotado Dany. Antes de que fuera hora para irse Blair paso a la habitación de Daniel para despedirse
- Bueno creo que este cumpleaños va a ser difícil de superar – dijo Blair mirando a su amigo con remordimiento
- Si, pero para el próximo prometo esforzarme para que lo supere – ambos niños rieron
- Dany no me voy a ir antes de pedirte disculpas otra vez por haber arruinado el campamento con mis locas ideas tu sabes que a veces me dejo llevar y no mido las consecuencias muy bien y bueno pasan cosas como esta – se disculpo sinceramente Blair, sentía realmente haber arruinado el campamento
- Calma Blair no todo fue culpa tuya, yo tampoco lo hice mal fui imprudente y dejemos esto como un empate
- Vale gracias por invitarme y sobre todo ser mi amigo
- Oh y tengo un regalo de cumpleaños – Blair sacó de su bolsillo un sobre – un regalo! no debiste molestarte
- Pero ya está hecho, además creo que en nuestras actuales circunstancias no te va a servir de mucho – Daniel abrió el sobre en donde había una invitación a una conferencia, miro extrañado a Blair – Es la invitación a la conferencia que va a dar el Dr. Hodgins
- Pero Blair no me dejaron inscribir porque no soy universitario – respondió Dany decepcionado, a él le hubiera gustado asistir a esa conferencia
- Bueno yo moví unos hilos por aquí, hice un par de favores por allá y es un hecho… ahora como están las cosas creo que irás solo porque conociendo a Jim me va a castigar por los próximos 2 años – Daniel río
- Mmm será que pueda convencer a papá.
- Blair ya es hora de irnos – se escuchó una voz – nos vemos Daniel
Mientras
esperaban a que saliera el vuelo Blair no pudo más con su curiosidad y pensando
que era mejor salir de la duda le lanzo a Jim la pregunta.
- Papá entonces me vas a decir si tengo algo de razón en todo esto? Eres un centinela? – Jim no podía creer lo obstinado que podía ser su hijo sin duda una paliza no había sido suficiente para terminar con su espíritu científico, esperaba que si hubiera sido suficiente para acabar con la afición que tenía de ponerse en peligro
- Hay algo en lo que te equivocas, junior no es estar enojado lo que gatilla nada en mí, es saber que puedes estar en peligro – miro detenidamente a su hijo – es la reacción que tengo para protegerte
- ¡Guau eso es genial! – respondió Blair con la emoción desbordando por los poros, maquinando un monton de cosas en su cabecita loca – ¡papá! tenemos tanto que investigar – y sumo a su padre a su entusiasmo – yo podría ayudarte encontrar la forma de controlar lo que te pasa y podría ayudarte en tu trabajo, crees que Simón me dejaría…
- Alto, alto alto ahí, jefe – Jim tenía que fastidiarlo todo – para ahora con todas tus locas ideas hijo, prometo que vamos a hablar de todo esto más detenidamente en casa – prefirió decir a ultima hora que cortar de cuajo la alegría de su hijo, vamos que se lo veía tan feliz que no tuvo el corazón de hacerlo
Finalmente
Jack y Daniel estaban solos en casa, Jack estaba en su escritorio con un sobre
en la mano lo daba vueltas entre sus dedos, ya se había cumplido el plazo que
él mismo se había impuesto era hora de cumplir con Melburne y Claire en su
último deseo. Se dirigió a la habitación de su hijo estaba mirando un libro no
con muchas ganas, Dany despierto todavía.
- No tengo sueño papá es que mientras estaba en el hospital dormí la mayor parte del tiempo
- Mmmm si ya veo, ¿Dany puedo preguntarte algo? – Daniel se puso alerta, su padre nunca pedía permiso para preguntarle algo, solo lanzaba la pregunta
- Claro papá puedes
- Por qué no tienes ninguna foto de tus padres? Yo mismo te di las que tenía, sin embargo nunca más las volví a ver – Dany medito un momento, la pregunta de su padre lo confundió un poco
- Papá es que para mi tu eres mi padre y mi madre, tú me criaste
- Eso lo sé pequeño, pero tus padres existieron y te amaban – Daniel se quedó en silencio, sus ojos se llenaron de lagrimas a él no le gustaba hablar de ese tema, al ver la aflicción en el rostro de su hijo Jack se recostó en la cama junto a él y lo abrazo entregándole consuelo. Daniel se fundió en el abrazo del hombre más importante de su vida suspiro y finalmente se desahogo
- Para mi es difícil decir esto papá pero cuando miro las fotos de ellos yo veo a dos completos extraños, yo no me acuerdo de ellos papá no me acuerdo – Daniel dijo lo último entre sollozos era muy difícil para él admitir que se había olvidado de sus padres se sentía culpable por ello
- Calma pequeño eso es normal, en estas circunstancias, tenías solo 18 meses cuando sucedió el accidente – Daniel tomo a su peluche entre sus manos
- Es por eso que tengo esto conmigo, sabes esto es lo único que tengo de cuando vivía con mis padres y en él puedo ver que me querían y se preocupaban por mí, para mí es como tener un poco de ellos conmigo – murmuro y fue cuando Jack decidió hablar
- Tengo un regalo para ti hijo, es un regalo que guarde para ti por un tiempo pero creo que ya es hora de que te lo de – Jack saco de su bolsillo la carta y se la paso a Daniel – es una carta de Melburne y Claire la escribieron para ti y me pidieron que te la entregara cuando fueras mayor – Daniel tomo la carta en sus manos, sin abrirla; Jack se levantó para darle a su hijo algo de privacidad, Daniel inmediatamente reacciono
- ¿Papá a dónde vas? – pregunto
- Voy a dejarte solo un rato para que puedas leerla tranquilo – Daniel lo miró extrañado, estaba acostumbrado a tener a su padre al lado en los momentos importantes de su vida y este era uno de ellos
- Quédate conmigo – le pidió
Y
Jack sonrío y volvió al único lugar donde no se cansaba de estar… al lado de su
hijo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario